El autobús escolar se desplazaba por las carreteras llenas de caos.

En todo Japón.

No, en todo el mundo.

La gente se escabullía por las calles, gritando, suplicándole a Dios que les concediera misericordia.

Esto no les sirvió para nada.

Nadie se atrevía a luchar contra las abrumadoras probabilidades.

Entre ellos, sólo unos pocos se molestaron en proteger a su familia; por lo demás, a ninguno le importaba que sus seres queridos fueran masticados vivos por ellos.

Los muertos vivientes.

Las feroces criaturas destinadas a causar masacres en todas partes, sin embargo, llegaron a la existencia por el bien de fortalecerme.

Mi alimento, XP.

Esta carnicería estaba dentro de mi estimación, pero ver el caos desarrollarse desde el asiento delantero me dejó un sabor amargo.

Apartando la vacilación, me giré hacia Shizuka que conducía con bastante agitación. La visión de sus pechos sacudiéndose con cada giro de dirección me hizo sonreír.

"Aa-kun, ¿Por qué sonríes como un tonto?" Me miró y preguntó.

"Si admirar a mi hermosa nee-san me convierte en un tonto, entonces yo podría ser el mayor tonto del mundo"

*¡Ding!*

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[-Shizuka Mirakawa: Afecto +4]

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Eso fue fácil.

"Mou, no le hables con dulzura a tu hermana mayor" Lo regañó ligeramente, pero las comisuras de sus labios se arqueaban.

"Pero sólo he dicho la verdad. Nee-san es la mujer más bonita del mundo"

*¡Ding!*

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[-Shizuka Mirakawa: Afecto +3]

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*Screech*

Detuvo el autobús.

Agarré el volante antes de que el autobús se estrellara.

"Aa-kun, para. Déjame conducir en paz"

Volvió a arrancar el autobús.

"Muy bien. Nee-san, dime si encuentras algún muerto viviente fuerte bloqueando el camino" Me bajé del asiento y le rocé las mejillas. "Sé que estás nerviosa por sus padres y Rika. Así que primero conduce a su casa"

"Pero Rika está de guardia en el aeropuerto"

"Podemos comprobarlo para estar completamente seguros"

Sus ojos aún parecían no estar convencidos.

"¿Y los padres de los demás?"

"Para mí, los deseos de nee-san siempre serán lo primero. ¿Entendido?"

"Aa-kun..."

*¡Ding!*

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[-Shizuka Mirakawa: Afecto +2]

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Le di un pellizco en sus suaves mejillas y me giré. Todos tenían expresiones de sorpresa excepto el grupo de las hermanas Kazu Ishii, Komuro, Kohta, Saya y las Busujimas mientras estaban sentados en la parte delantera. Rei, por su parte, miraba a Aimi con estrellas en sus ojos como si estuviera mirando a su ídolo.

No era extraño teniendo en cuenta lo que le hizo al profesor de mierda. La retuvo un año por el trato que hizo con su padre, ya que quería humillar al padre de Rei.

Dejando eso de lado, estaba la chica más sexy de la Academia Fujimi, Miku Yuuki, mirándome fijamente con ojos parecidos a los de una bestia. La misma chica que se entregó a la orgía dentro de este mismo autobús.

Es del tipo de chica de la que prefiero distanciarme. Las mujeres como ella estaban sobre mí cuando era un joven maestro. Sólo buscaban mi favor, mi riqueza, o mi apariencia.

Eran las tipas que más odiaba.

"¿Alguien aquí tiene preguntas?"

"¡Yo, tengo una pregunta!" Miku levantó la mano. "Marikawa-san, ¿Estás soltero?"

"Para alguien como tú, nunca estaré soltero. ¿Siguiente?"

La cara de Miku se contrajo por mi involuntario rechazo. Las chicas como ella eran las que hacían de mi vida un infierno. Incluso mi familia no hacía nada cuando los que preguntaban por mí eran los herederos de otras familias.

"Quería preguntar a dónde vamos" Preguntó Kazu Ishii mientras se ajustaba sus gafas.

"Ahora que estamos hablando. Iremos al apartamento de una amiga de mi nee-san. Es agradable y acogedor y los muertos vivientes no podrán molestarnos allí"

"¿Qué pasa con nuestras familias?"

"¿Qué haremos ahora?"

La voz vino del lado derecho del autobús. Una chica con pelo azul oscuro, gafas, y una cara bonita. Sentada a su lado había una pelirroja con ojos marrón avellana.

Debería conocerlas de la serie...

¡Espera! Son el dúo bisexual de la serie.

"Mira las calles. Lo que podemos hacer ahora es centrarnos en sobrevivir. Hasta que consigamos algunas armas adecuadas, no saldremos de nuestro camino para ayudar a nadie"

"¿Por qué mató a Shido-sensei?" Cuestionó Miku en tono cortante.

"Pregúntaselo tú misma" Me encogí de hombros y me senté junto a Saya.

"¿Cómo están tus heridas ahora?"

Mi pregunta se ganó un "¡hmph!" de la tsundere. Suspiré antes de sacudir la cabeza.

"Nunca pensé que la hija de la casa de Takagi fuera tan descortés"

"¿Q-Quién está siendo descortés, bastardo?" Ella se giro hacia la ventana. "Gracias..."

Un pequeño corazón voló sobre su cabeza.

*¡Ding!*

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[-Saya Takagi: Afecto +3]

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Sonreí donde ella no podía ver. Era realmente divertido meterse con una tsundere, aunque sus maldiciones me ponían de los nervios a veces.

"Ahora, ¿Fue tan difícil agradecerle a alguien que te salvó la vida?"

Girando su cabeza, me miro, con sus afilados ojos anaranjados clavados en los míos.

"¿Qué quieres? Mi poder o la influencia de mi familia..."

"Estas equivocada. No quiero a la chica de la casa Takagi, tampoco a la chica que ejerce un poder absurdo" Extendí la mano y le di una palmadita en la cabeza. "Lo que quiero eres tú, la chica conocida como Saya"

"¡Qué!-"

La confusa voz de Saya resonó en el autobús. Seguí frotando su cabeza cuando ella se perdió en la confusión. Su cara se puso roja, el rubor incluso llegó a sus orejas, volviéndolas de color rojo remolacha.

Un lindo corazón flotó sobre su cabeza.

*¡Ding!

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[-Saya Takagi: Afecto +13]

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"¡E-Estúpido idiota, la gente se está muriendo ahí fuera y tú intentas... conseguir a una mujer aquí?!"

Dejando de dar palmaditas en la cabeza, me apoyé en el cómodo asiento y me crucé de brazos.

"Entonces me da más razones para confesarme con la chica que me gusta, ¿No? Nunca sabes lo que va a pasar mañana, así que, ¿Me equivoco en conseguir un poco de felicidad antes de que algo malo ocurra en este mundo post-apocalíptico?"

Sólo el ruido del autobús y los gemidos de los muertos vivientes en la distancia me respondieron.

Lo más probable era que Saya me rechazara, pero aun así, seguí adelante y lo hice. Después de todo, ella estaba enamorada de Komuro en la serie.

"Puedes tomarte tu tiempo si quieres... Pero sólo tengo dos o tres días antes de que nos separemos"

"... ¿Qué se supone que significa eso?"

"Voy a recorrer el mundo para eliminar a los muertos vivientes. Eso es lo que la Diosa me dijo" Me giré hacia ella y sonreí. "Por favor, contéstame antes, si puedes"

Parecía que la obligaba a aceptar mi confesión. Pero era la única manera de interactuar con una tsundere como ella.

Tenía que ser más directo o ella tardaría una eternidad en enfrentarse a sus sentimientos.

"¡¡¡A-KUN!!! Algunas personas están bloqueando el camino adelante!"

"¡Ya voy!"

Me apresuré hacia el asiento del conductor y a través del parabrisas delantero, la verdadera cara de la humanidad llegó a mi vista...