‘¡Maldito, loco bastardo…!’
Por supuesto, suponía que Jeon Jungkook podría mandar a un equipo de búsqueda para encontrarlo. Sin embargo, no esperaba que mandara a construir una valla alrededor de la montaña.

Jimin volvió a coger los binoculares para comprobar lo que veía. Había bastante equipo. A juzgar por el hecho de que el logotipo de la compañía estaba impreso en el camión, estaba más que claro que eran trabajadores de Jeon Jungkook. Y lo que estaban instalando era una valla por mucho que la mirara. Era mucho más alta que la red de protección contra caída de rocas que se encuentran comúnmente en las carreteras, y también había una línea negra que se creía que era un cable eléctrico.

‘No puede ser, ¿es una valla eléctrica?’

¿Qué demonios le pasó por la cabeza? ¿Y si la hubiera tocado sin saberlo? A Jimin se le puso la piel de gallina.

Primero, desató la cuerda atada al tronco del árbol. Después de examinar varias veces los alrededores para ver si el jabalí volvía o si había algún otro animal salvaje peligroso, bajo cuidadosamente. Y se dirigió hacia el sendero que ya había establecido.

‘Parece que está tratando de atraparme en la montaña con el cerco, pero es realmente un ignorante.’

Están bloqueando las salidas para comenzar a buscar. De todos modos, no sería posible cercar todos los lados de la montaña al mismo tiempo, por lo que había una alta probabilidad de que un equipo de búsqueda viniera por el otro lado. Planeaban arrinconarlo en el medio, pero Jimin no tenía intención de ser atrapado fácilmente.

— Te has dejado en ridículo, Jeon Jungkook.

Habló consigo mismo y siguió adelante. Otra vez comenzó a dolerle el estómago, pero podía soportarlo.

Avanzó valientemente a través de la montaña. No descansó durante horas. No tenía tiempo para eso.  
Hacía bastante calor. Sudaba mucho cada vez que caminaba. Sería difícil incluso para una persona sana caminar toda esa distancia, pero la eficacia era inevitable porque caminaba con un cuerpo poco saludable y con un pesado equipaje.

Se quedó sin aliento varias veces, pero no se detuvo. Si se detiene aquí, estará rodeado antes de que caiga la noche.
Caminó y caminó mientras jugueteaba con el espejo que había guardado en su bolsillo. Era el espejo que pertenecía a su madre y el recuerdo del comienzo de su relación con Jeon Jungkook.

¿Qué diría mi madre si me estuviera mirando ahora mismo? Me pregunto si me regañaría por haber conocido a semejante alfa.

No, la madre que Jimin recordaba no era tan dura. Probablemente le daría un gran abrazo. Le preguntaría el por qué no se lo había contado, y diría que lo resolverían juntos. Cuando pensó en su madre, sintió las lágrimas a punto de caer.

Cuando conocí a Jeon Jungkook para recibir este espejo de vuelta, ni siquiera podía imaginar esta situación. Jimin se regañó a sí mismo.
No estaba regañando a su yo del pasado por no reconocer su maldad. Sino que todavía se regañaba a sí mismo por querer ver a Jeon Jungkook.

Él fue la primera persona a la que le entregó su corazón. Fue como un primer amor para Jimin. Jimin vivía solo todo el tiempo. Por eso no podía dejarlo ir ni siquiera en este terrible momento.
‘Despierta, Jimin. Ese tipo ni parpadearía si murieras delante de él.’ Sin embargo, Jimin no podía dejar de pensar.

Si doy a luz a un hijo suyo en primer lugar. Si eso sucede, existe la posibilidad de que esta relación cambie… ¿Es así? En otras palabras, ¿volvería a darme su corazón?

‘No sería grosero con el omega que tiene a su hijo.’

Dijo que su propósito era dar a luz a un niño. Pero solo sucedió una vez. Jeon Jungkook lo encarceló, le obligó a tomar una medicina que tenía muchos efectos secundarios, y le quitó a su único amigo, su trabajo y su casa.

No podía estar seguro de si eso garantizaría su seguridad después de dar a luz al bebé. Si le diera su corazón. Sería algo bueno ya que no lo mataría para guardar el secreto.

Al llegar a la mitad de su objetivo. Jimin finalmente decidió descansar liberando todo el aliento atrapado en su garganta. Miró a los alrededores. Afortunadamente, no parecía haber personas cerca ni animales.

Jimin suspiró y se sentó en una roca. Volvió a dolerle el estómago. Tal vez estaba terriblemente enfermo. Apenas movió su débil mano para intentar sacar analgésicos de su mochila, pero lo dejó. Los analgésicos sólo embotan el movimiento y los sentidos. Tenía que aguantar sin medicinas al menos hasta que saliera de esta montaña.

Quería cambiarse la camiseta sudada, pero abandonó la idea ya que la volvería a mojar en cuanto empezará a caminar nuevamente, y se puso de pie. No, más bien, intentó ponerse de pie. Volvió a sentarse, frunciendo el ceño ante el punzante dolor en el bajo vientre. Incluso sintió una sensación de humedad en el trasero. Parecía que había comenzado a sangrar de nuevo.

‘No tengo fuerza en todo mi cuerpo…’

Fue cuando. Mientras tomaba un breve descanso, sintió una presencia cercana. Había varias posibilidades.

‘¿Qué es?’

No era un jabalí. Con una presencia tan cautelosa debería ser un carnívoro que sabe cazar adecuadamente como un tigre, pero no es uno…

Mientras miraba con cuidado a su alrededor, Jimin vio a alguien pasar entre los árboles. Tal parece que el equipo de búsqueda ya lo ha encontrado.

‘¿Crees que me atraparán aquí?’

Movió a la fuerza sus piernas rígidas y empezó a correr como si saltara. Hasta ahora ni siquiera podía ponerse en pie por el dolor, pero la idea de que tenía que escapar le hizo moverse con una velocidad casi sobrehumana. Y casi al mismo tiempo, la gente salió corriendo de todos lados.

—¡Atrápenlo!

Jimin, buscando huecos entre la gente, sacó algo del bolsillo exterior de su bolso y lo arrojó por diferentes lados.
En cuanto los objetos tocaron el suelo, estallaron con un gran sonido explotando en humo negro y rojo. El humo se extendió rápidamente por todas partes, y las personas que lo inhalaron sufrieron una dolorosa agonía y estornudaron y tosieron violentamente. Eran bombas hechas por el propio Jimin mezclando ají cayena y polvo de pimienta roja.

Jimin, con una máscara antigás que se había puesto en el momento, empezó a correr entre los caídos. Algunos de los que se revolcaban llorando y moqueando por la nariz, en cuanto reaccionaron intentaron atrapar a Jimin, pero ya era demasiado tarde. Jimin corrió con su pequeño cuerpo con una fuerza casi sobrehumana.

—Foto, haz una foto. ¡Rápido!

Gritó uno de los caídos, y Jimin miró hacia atrás por reflejo.

‘¿Foto?’

El flash irrumpió entre el humo negro con un clic y un sonido. Jimin, distraído por la luz, volvió a mirar hacia delante y corrió.

Jimin corrió como loco, pensando en su cabeza. El lugar al que se dirigía era exactamente la misma dirección en la que había huido el jabalí antes. Por supuesto, con tanta multitud, era posible poder escapar, pero era una especie de apuesta.

—¡Cerdo, tu hyung está aquí!

Gritó fuerte a propósito. Esperaba que se acercara a él con emoción.

Por suerte o por desgracia, el jabalí que había visto antes apareció a lo lejos. Jimin miró a su alrededor. Y lanzó algo hacia el árbol más alto. Era un gancho.

Había una larga cuerda colgando del gancho. El equipo de escalada fue hecho por el propio Jimin. Le costó mucho hacerlo. Falló innumerables veces, e incluso pensó que sus hombros se dislocarían debido a todas las veces que tuvo que esconderse en el ducto de ventilación.

¿Adivinaría Jeon Jungkook que estaba comprando cosas como esta con su tarjeta negra mientras estaba encerrado en el hotel? Probablemente no. Por eso me dejó allí como un estúpido hasta que hui. Era un poco emocionante pensar en eso.

Mientras agarraba la cuerda con gran fuerza y tiraba de algo parecido a un mango unido al equipo, la longitud de la cuerda disminuyó rápidamente y el cuerpo de Jimin se elevó en el aire. Mientras subía al árbol, los miembros restantes del equipo que estaban en el suelo se confundieron al ver al jabalí.

—¡Amigo, qué es eso! ¿Es un jabalí de verdad?

—¡Salgamos de aquí, vamos! ¡Sube a un árbol!

El jabalí se abalanzó sobre ellos con un espíritu aterrador. Los buscadores se retiraron o se apresuraron a subir a la copa de algún árbol, llevando algo parecido a un escudo que usaría la policía. Jimin se colgó del árbol y se movió de nuevo cuando los vio evacuar.

‘Eso no va a detener a un jabalí’.

Si hubiera visto a las personas, de las que ni siquiera conocía el rostro, atravesar los costados del jabalí por su culpa, habría sufrido de un gran remordimiento, pero al ver cómo el equipo lidiaba con la situación, parecían ser expertos.

—Por favor cerdito, tómate tu tiempo. Cuida de ti mismo.

Sacó algo del bolsillo exterior de su bolsa y lo esparció por el suelo.

Varias canicas, de un cuarto del tamaño de una pelota de ping-pong, llenaron el terreno circundante. No parecía la gran cosa, pero era un factor peligroso en estos caminos tan accidentados. Cuando pisas y te caes, incluso una rama de árbol o roca cercana es una amenaza. Se pueden pisar si no se presta atención a lo que hay bajo las hojas.
Los gritos salvajes del jabalí y los gritos de la gente se desvanecieron gradualmente. Jimin, por supuesto, quería que esas personas se lo transmitieran a Jungkook. Que le dijeran que tan seriamente estaba huyendo.
La carrera continuó pero Jimin nunca se detuvo. Le dolía el estómago hasta las lágrimas, estaba sudoroso y agotado por el calor, pero no se detuvo a descansar. Simplemente paró unos segundos para colocarse otro par de pantalones encima. La sangre en la parte inferior empapaba sus muslos y no quería que dejara algún tipo de rastro.

Llevar dos capas de pantalones hacía que tuviera cinco veces más calor.

Mientras volvía a caminar con los cordones de los zapatos bien atados, Jimin pensó de repente. Me preguntó si que haría Jeon Jungkook si lo sabe. Que estoy en tan mal estado.

‘¿Vendría en persona si supiera que estoy tan enfermo?’.
Sin embargo, negó con la cabeza al darse cuenta de que era una idea inútil.