Todo fue como un suspiro.

Cabello largo, tantos años pasados hacían que su cabello se viese tan mal como ahora se veía, hasta media espalda, puntas abiertas y aceitoso por culpa de no poder tener un baño por treinta largos años. ¿Esto es lo más sorprendente?

Para nada. Lo más sorprendente es que nadie lo ayudase, ni siquiera los phantom, fantasmas inútiles, uno sin pierna, otro sin brazo, otra muda, otro autista, uno increíblemente molesto e inútil y finalmente una que no era capaz de hacer nada cuando se lo decían, insegura y torpe, realmente esos fantasmas solo habían que su vida fuese todavía peor. Y no era porque no se lo pidiera, sino porque ellos mismos desaparecían en las paredes al verlo llegar al pasillo.

Sin zapatos y con heridas en sus pies era como debía moverse por ese edición y siendo silencioso aprovechando todo lo que estaba en su mano, pero su olor acababa delatando siempre su estancia. Lo cual no sabía que era lo más frustrante, si él no poder tener a nadie que lo acepte o no poder acercarse a nadie por el olor. Por mucho que intentase esa estúpida atracción lo tenía atrapado y no podía salir cuando la lluvia caía para aunque sea darse un lavado rápido. Ni siquiera lavarse en seco era una opción para él dado a lo viejo e inútil que era todo en el lugar, nadie le proporcionaba nada y mucho menos comida, pero eso no le preocupaba en absoluto, tan solo él no poder socializar por su pasado y su estancia actual en esa atracción del horror.

Consiguió una liga para atarse el cabello, pero lo mal, estropeado y aceitoso que lo tenía hacia que la coleta fuese en las puntas y casi deshecha, sinceramente algo molesto para él y para su estupidez de cabello.

(El diseño es totalmente mío, no le pertenece a nadie más que a mí y todo lo que ven en la imagen solo puede ser usado por mí).

(El diseño de coleta es el mismo de la protagonista de "Powers" mi historia de Owynn x lectora).

La cicatriz de su ojo se le hacía tan sumamente molesta que eso solo asustaba más a quien lo viera. ¿Que más le faltaba? Perder un brazo, perder parte de la pierna, ser como esos estúpidos fantasmas, ¿Convertirse en un autista solitario? No. Él realmente quería conocer a alguien que lo ayudará a salir y que lo estimara a pesar de todo lo malo que tenía. Pero por más que lo intentaba siempre obtenía el mismo resultado negativo y finalmente acabó obtando por quedarse en ese rincón siendo el mismo animatronico de siempre y mirar amenazadoramente a la cámara, así como acercarse y querer vengarse de todo lo que lo viese s través de la pantalla...

Hasta ese día en el...

Todo fue como un suspiro...

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Día: XX/12/ 20XX
Fecha exacta: XX de diciembre del 20XX
Hora: 01:30 a.m
Lugar: Fazbear Fright, The horror atraction. Oficina.

Te encontrabas abrumada por el calor, por el cansancio, la morriña y molesta por el sonido de la alarma así como el parpadeo rojo que te sonaba cada pocos minutos. Así como esos estúpidos fantasmas que aparecían y desaparecían en tu oficina para asustarte. Definitivamente ese olor nauseabundo te estaba jugando una muy mala pasada, gruñiste seriamente irritada por ello, te dolía la cabeza y la nariz, querías por lo que más quisieras, que ese robot roto no se moviera de la cámara 8, pero siempre se te escapaba por el sitio menos insospechado y eso te molestaba. Hasta que esa irritación y poca concentración llegaron a dejar verlo justo delante de ti por primera vez en aquel trabajo, literalmente llevabas ya casi unas dos semanas trabajando allí y esa era la primera vez que te veía, a través de la ventana de cristal en la que sin lugar a dudas pensaste que era tu fin, nunca te había pasado eso, nunca te había llegado a ver, pero solo te miró, no hizo nada más... No se movió. Solo te miró en silencio. Trataste de alejarlo, pero pasó hacia la izquierda. Así que tragaste saliva y te levantaste del asiento, ibas a morir de todas maneras, mejor no alargar tu sufrimiento. Miraste la hora, "4:50 a.m". Genial, te faltan amas de una hora, mejor no sufrir. Te acercaste a la entrada y te asomarse a izquierda y derecha sin ver a nadie, tan solo un horrible olor a muerto y a podrido entró en tus fosas nasales. Fue cuando en la oscuridad viste a un muchacho muy alto que te miraba desde la esquina sorprendido. Te acercaste teniendo miedo de que fuese agresivo, o algo. Su cabello era rubio oscuro y se notaba como mojado, aceitoso, sus ojos eran grises, amarillo y negro, con una cicatriz, tenía muchos colores y uno de los ojos tapado. El otro casi. Su ropa estaba sucia y rota, como en una guerra y podías ver parte de su abdomen y pecho, en el que había una chapa en la que podías leer: "VxS" no le diste importancia a ello, tan solo registraste su aspecto por completo, el chico deplorable nauseabundo era él, por alguna razón se te hacia parecido a Springtrap el robot roto. El balbuceó algo y después se fue corriendo por el pasillo.

Lo seguiste con la mirada, sorprendida y tan sólo entraste de nuevo en shock, sentándote en la silla con la mirada en el suelo y durante del tiempo que te quedaba te quedaste en shock mirando el suelo sin hacer nada, ni revisar nada...

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Día: XX/12/ 20XX
Fecha exacta: XX de diciembre del 20XX
Hora: 6:05 a.m
Lugar: Fazbear Fright, The horror atraction. Pasillo 1.

Suspiraste profundamente y tomaste el pomo de la puerta, seguidamente hiciste fuerza para abrir la puerta, pero escuchaste algo a tu espalda y soltaste la puerta para después girarte empuñando las manos para defenderte y viste al chico mirándote seco y serio delante de ti, en el final del pasillo.

- Soy... Soy Springtrap...- murmuró inseguro dando un paso atrás con miedo, quizás su altura de dos metros fuese demasiado imponente para ti, quizás hubiese más motivos.- mañana te mataré...- y se fue sin decir nada más. Ahora sí te quedaste en shock por lo visto.

- Espera!- llamaste, pero no regresó, te asomaste, pero tampoco lo viste, suspiraste y saliste sin decir nada más. No valía la pena.

"Mañana te mataré..."

Esa voz se repetía en tu cabeza de forma automática y repetitiva, sorprendida, entraste en tu casa y te tumbaste en el colchón de tu cama y descansar, pero no pegaste ojo, pensabas en Springtrap.

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Día: XX/12/ 20XX
Fecha exacta: XX de diciembre del 20XX
Hora: 11:55 a.m
Lugar: Fazbear Fright, The horror atraction. Oficina.

Te sentaste con un suspiro profundo, estaban acojonada por culpa de lo que había sucedido recientemente en la noche anterior, primero, Springtrap se podía transformar en humano, segundo, quería matarte, tercero... Si, solo eso, quería matarte y ya estaba dirigiéndose hacia aquí puesto que esos cinco minutos se habían pasado más rápidos que ¡¡La puta madre!! Ya viene había aquí.

Pulsaste el audio para detenerlo y alejarlo en la cámara 8 o en la 9, así evitar por todo que ese chico, o robot te matase, obviamente querías vivir. Reparaste los errores con la tableta complementaria y seguiste vigilando en la principal, dubitaste sobre el porque de querer matarte, pero no entendiste o no diste ningún motivo. Suspiraste.

- ¿Porque será que. . .? ¿Porque será que quiere matarme?- murmuraste con un suspiro profundo y sin entender porque hablabas en voz alta ahora.

Tras unos minutos de vigilancia, alarmas, errores y fantasmas, Springtrap apareció en la ventana viéndote clavarle una mirada seria y penetrante a través del cristal. Te levantaste de la silla y con el nudillos golpeaste el cristal.

- ¿Porque quieres matarme si se puede saber?- dijiste cruzada de brazos y con esa mirada llena de amargura y ferocidad en tus ojos y rostro.

No dijo nada, solo mirarte a través de sus ojos sin vida en los que no expresaba ningún sentimiento más que el de la expresión muerta que no quitaba por nada en el mundo. Quizás estaba pensando. Quizás estaba intimidándote, quizás ignorándote al no querer responderte.

- ¿Springtrap?- preguntaste dudosa.

Te sentaste de nuevo en la silla y te cruzaste de piernas sin quitarle la mirada de encima, tomaste tus tobillos de forma infantil e inocente y tan sólo miraste y reparaste el error de cámaras sin quitarle la mirada, pero al parecer solo necesitaba un parpadeo para moverse a la esquina. Cuando se reparó gruñiste y te levantaste de la silla acercándote al pasillo, evidentemente la suerte del otro día no ibas a tener.

Igual que la última vez, el olor nauseabundo te indicaba que era él, su versión humana y que ahora se acercaba imponente hacia ti, sus dos metros se hacían notar sin esfuerzo alguno.

- ¿Antes de morir podría pedir una última cosa y unas últimas palabras?

Te miró sin expresión, tomaste eso como un si.

- ¿Porque quieres matarme?- cuestionaste ya por lo que te parecía la enésima vez que preguntabas, pero su mirada inexpresiva cambio a una nostálgica, miró la chapa que colgaba de su cuello y suspiró.

- Venganza, quien dice que no eres familia de esos niños...- eso te dejó rayada, "familia de que niños?"- ¿Últimas palabras?- su putrefacto aliento chocó contra tu rostro, pero no se te hizo desagradable, comprendías que no podía salir para lavarse, pero... Podrías ayudarlo...

- Puedo ayudarte a salir de aquí y vivir una mejor vida...- murmuraste tu eligiendo equivocadamente tus últimas palabras, pero con la esperanza de que estás te ayudarán a seguir viviendo, que suerte que si, no?

- ¿A qué te refieres?- su mirada se mostró levemente sorprendida por lo que acababa de decir.- ¿Vivir una mejor vida?

Este chico entendía más rápido de lo que pensabas, ahora ya podrías llegar a plantearte que podía leer la mente o algo, porque en ningún momento dijiste nada de eso, pero igual, si, te referías a eso, a ayudarlo, ayudarlo en todo lo posible y todo lo que tuvieses en tu mano.

- puedo ayudarte- asentiste.

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Día: XX/12/ 20XX
Fecha exacta: XX de diciembre del 20XX
Hora: 6:30 a.m
Lugar: Tu casita <3

Habías llegado a tu casa acompañada del chico en su versión aparentemente humana, ahora debías vivir con él, solo por darle una mejor vida, no te gustaba verlo sufrir en ese lugar totalmente solo, ya que se notaba que eso afectaba a su forma de hablar con la gente y ver el mundo, como eso de querer matarte, puedo que lo acabe haciendo, pero, tenías la esperanza de que no. Si te dijera lo mucho que te costó hacer que entre en el coche y que se ponga el cinturón... Exagerado, vamos. Pero ahora estabais bien, él estaba como si pisara huevos, nervioso y meticuloso, todo lo contrario que en la atracción del horror, se notaba que no era un sitio en el que solía estar, un sitio nuevo, moderno, raro...

Para empezar, llenaste la bañera para que tomara un baño largo hasta que acabase como una pasa o al menos hasta que el olor a muerte se fuese, segundo paso, conseguir ropa de hombre, si, seguro encontrabas algo entre la ropa deportiva, te gusta la ropa masculina porque era más grande y eso a pesar de que no el gustaba a tu familia, ahora vivías sola y lo había nadie que pudiese decirte que estaba bien y que no. Pero.... Quizá sino tuvieras para un chico de dos metros... O quizás si, quién sabe...

Dejaste la ropa en la pica — una vez la encontraste — y le añadiste los calzones que tenías porque también te gustaban, no se, sentías más comodidad, como sea, y todo lo necesario, después le dijiste que entrara y tomara el baño que no tomó en todo el tiempo que estuvo ahí metido. Como si fuese un pobre al cual le das algo de comer, tomó tus manos con gran agradecimiento y te dijo tantas gracias que no sabias como no se trabó la lengua. Sonreiste y le señalaste la puerta. Toda la ropa que se quitó supusiste que no podrías hacer nada con ella, además, estaba pasada de moda, por mucho que tú no estabas en ese tema, pero hasta tú eras capaz de identificar esa ropa como antigua, reiste un poco por esa tontería. Negaste y tomaste tu teléfono para después mirarla los mensajes. Finalmente te tumbaste en la cama y el sueño te venció. Luego de un rato sentiste la calor y la suavidad de un cuerpo ajeno abrazándose a ti desde la espalda, en la cual no resististe en acurrucarte y sonreír levemente.

Sentiste un suspiro contra tu hombro y cuello y finalmente el abrazo.

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A la mañana siguiente, abriste los ojos lentamente y miraste alrededor fijándote en que él estaba detrás de ti, abrazándose por la cintura y sin moverse, además del firme agarre en tu cintura. Miraste su brazo y sonreiste un poco con vergüenza, realmente era cómodo que alguien te abrace así, soltaste un suspiro y trataste de liberarte de su agarre para después dirigirte a la cocina, pero que dos metros, realmente no eran fáciles de huir.

Llegaste a la cocina y preparaste la comida, eran... Las diez de la mañana, cuatro horas de sueño solamente... Después dormirás un poco más, ahora acabarías el desayuno y después despertarías a Springtrap.

Así lo hiciste, él despertó con cara de pocos amigos, se ve que hacía tiempo que no dormía tan cómodo como ese día durmió, lo sentiste por él, pero debía comer algo. Evidentemente.

- ¿Que significa lo de "Matarme por venganza"?- su mirada se volvió sin vida y soltó un suspiro profundo a pesar de tener delante de él un plato entero de Waffles o como se escriba. Te miró de arriba a abajo.

- me mataron unos fantasmas... Yo antes era humano...- murmuró con voz pesada y quebrada- es por eso que ahora odio a todos, porque por su culpa soy así- se auto señaló- o al menos era, gracias a ti ya no tengo este putrefacto olor- bajó la mirada a su regazo con pesadumbrez.- podría decirse...

- entiendo tu rabia... Pero no tengo nada que ver con ellos, ni siquiera se quienes son... Dudo que sea descendiente de ellos...

- te parecías a uno de ellos, en la sombra de ese lugar...- habló con nostalgia maldita del recuerdo. No dijiste nada más sobre ese tema, decidiste que no era lo mejor, se notaba que odiaba a esos... Niños...- ¿Como te llamas?

- yo... Bueno, soy ______- dijiste tú con algo de nerviosismo al caer en cuenta de que tenías a un robot asesino en tu casa del cual no sabía tu nombre, se le un aplauso sarcástico a esta rayis, por favor. ¡Y habías compartido cama con él!

- puedo hacerte una pregunta más aparte de esta?- dijo con seriedad, pero en cualquier momento podrías intentar romper el hielo con una broma, o algo. Asentiste con la cabeza.- ¿Conocías a un tal Vincent Johnson o Jeremy Fitzgerald?

Meditaste, el primer nombre no te sonaba, pero el segundo si, quizás en algún periódico antiguo de tu padre, si, le gusta coleccionarlos, un extraño vicio, pero en uno de ellos, el cual te dio por leer, se habla de Jeremy Fitzgerald, un muchacho que recibió una mordida en el lóbulo frontal.

- Jeremy... Fue el que recibió la mordida en el lóbulo frontal en 1987...- murmuraste tu haciendo que él asintieron con la cabeza- Vincent Johnson no me suena de nada- negaste con la cabeza.

- son hermanos...- confirmó él- ¿Te suena Michael Schmidt?- negaste con la cabeza- es el asesino que causó que yo acabará aquí- se auto señaló, pero intuiste que se refería al robot- suerte que aprendí a transformarme en humano...- suspiró.

- sorprendente....- musitaste tu con sorpresa en tu voz.- ¿Tu los conocías?- asintió con la cabeza.

- Vincent Johnson, era yo...- murmuró él con la cabeza en la mesa- Jeremy mi hermano, y Michael mi hijo...- tus ojos se abrieron en shock. Tomó bocado sin decir nada.

- ¿Tu hijo hizo que...?

- ¿Muriera indirectamente? Si...- rodó los ojos...- trataba de arreglar su desastre...

- ya veo...- él sonrió de lado.

- gracias...

- ¿Porqué deberías agradecerme?

- por escucharme...

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Hola :-)

Lo prometido es deuda, aquí tienen un Springtrap x lectora ;-)

Si, puede que lo del final haya sido un poco spoiler de la historia de FNAF, pero tranquilos, no he contado nada grave xdxd

También es porque sino se quedaba muy corto xdxd

Bueno, mi meta es que os guste en realidad xdxd

En fin, espero que os haya gustado y nos vemos en un próximo one-short o capitulo de historia

Bye~

By Ecchisforlife

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