Al día siguiente, estaban todos en la proa, Atsushi comía algo de pan junto con Sigma. La comida ya escaseaba y sabían que debian llegar pronto a México.

 Dazai fue quien llego y los vio, se alegró de ver a Atsushi vestido aunque esas ropas beige no eran mucho de su estilo, podía pasar desapercibido con un pirata. Akutagawa comía una manzana lejos de ambos chicos, parecía darles su espacio. Chuuya estaba montado en la barra del timón y Dazai fue con él – oye, siento lo que paso entre nosotros

― Dazai, no tenemos el tiempo de ellos

― Lo sé, lo resolveremos

― ¿vas a contarme?

― Atsushi-kun... es uno de los guardianes

― Eso... Es un cuento infantil

― Lo sería si ellos tres no estuvieran aquí. Los hijos prohibidos que cuidan a los dioses

― Dazai... Ellos tres no pueden estar juntos

― Exacto, planeo... tirarlos en el camino

― Atsushi no querrá ir con nosotros a China

― Aún tengo el as de Akutagawa

― Después de que lo vio acostarse con una loca, lo dudo

― De eso me encargaré

Dazai se levantó y Chuuya tomo su mano – Dazai... Ya no quiero estar enojado, háblame

El castaño suspiro, tomo la barbilla de Chuuya y con ello se besaron, cerraron sus ojos disfrutando de aquel beso, se separaron ligeramente – aunque me beses tan bien, no dejaré de preguntarte, bastardo – menciono alegre

― Solo quería bajar un poco tu mal humor

― Vamos, habla

― Atsushi-kun es uno de los tres guardianes de los dioses, si lo llevamos cerca de su templo en china podremos recuperar nuestras vidas

― Creí que si los guardianes que regresaban renacen

― Así es, Atsushi-kun no morirá pero perderá todos sus recuerdos

― Significa que

― Todas mis promesas a él quedarían canceladas

― Y sobre Akutagawa

― Podrá olvidarlo, mira que se fue con las chicas.

― Dazai eso es cruel para él

― Es el o nosotros Chuuya

― Pero... ¿Qué pasará?

― Pues, podemos ser buenos y regresar a tomar su cuerpo como lo hizo el rey Ango. Así Akutagawa lo tendría – menciono sonriente – aunque no sería el mismo Atsushi

― Creí que los dioses recordaban sus misiones

― No, no lo hacen – dijo divertido Dazai – si fuese así Atsushi-kun ahorita nos estaría controlando

― ¿en verdad?

― Te lo juro

Ambos chicos reían. Mientras en la proa, Atsushi y Sigma se miraron entre ellos. Siguieron comiendo.

Gin se acercó a su hermano, ambos miraron a Atsushi y después entre ellos – hermano, ¿ese chico te gusta?

― No solo me gusta, me encanta

― ¿Por qué? Es un príncipe

― Lo sé pero... Sé que me ama

― No lo parece

― Está enojado porque me acosté con una mujer, y esa rudeza que mostro me gusta todavía más

― ¿Por qué te gusta pelear?

― Es un buen chico Gin, confía en mi

― No lo sé... presiento que ese chico te traerá infelicidad

― Yo sé eso, es un príncipe... No sé quedará a mi lado

― Entonces ¿Por qué?

Akutagawa miro al mar – solo viviré una vez, moriré en el mar – miro a su hermana – quiero amar a alguien además del mar

― Hermano... - la chica suspiro – bien... Te ayudaré a cuidar de él

― Gracias

Dazai llevo a Gogol con Sigma y Atsushi, ambos chicos sonrieron al ver a Gogol. El chico se sentó con ellos. – Bien – dijo Dazai sonriente. – Gogol será vigilado por mí, Sigma estará bajo cargo de Hirotsu y Atsushi-kun serás vigilado por Akutagawa

― No tenemos donde ir ¿Por qué vigilarnos? – cuestiono Gogol

― Todavía preguntas – dijo Chuuya en burla

― Les recuerdo que escaparon cada uno de una tripulación pirata y juntos escaparon de 2 tripulaciones de piratas. Además de manejar un barco entre los tres. Creo que necesitan más que vigilancia – expreso Dazai serio

― Pase dos días desnudo, no he podido soltarme y además anoche me dejaron atrapado en una cama – menciono Atsushi y miro a Dazai – Dazai-san ¿en serio cree que sigo con ideas?

Dazai se acercó a Atsushi, se miraron frente a frente y Dazai sonrió – Atsushi-kun, no solo me tenías a mí, también al rey Ango experto en estrategia y a Odasaku. Sé que tienes mucho más que dar – miro a Akutagawa – vigílalo bien

― Si

― Y otra cosa

― ¡Dazai!

Aquel grito puso la piel de gallina en Dazai, Atsushi sonrió. Dazai dio media vuelta lentamente y lo miro aunque incrédulo de creer verlo – por fin nos encuentras – dijo Atsushi

― O-Odasaku...

― La tripulación está cerca – dijo el pelirrojo apuntando con un arma a Dazai

― Pero Atsushi-kun

― Atsushi regresará conmigo, su padre lo quiere devuelta, así sea contigo muerto

Atsushi miro a Oda - ¿padre? – Atsushi se levantó – Sakunosuke jamás se dirigia al rey como "padre" no lo hace ni en la intimidad del consultorio real – expreso mirando al pelirrojo. El pelirrojo lo miro serio Atsushi de inmediato se fue con Akutagawa para ocultarse

― ¿Qué haces? – cuestiono Akutagawa

― E-ese no es Sakunosuke

― ¿Qué?

― ¡DAZAI-SAN REACCIONE! – grito Atsushi

Chuuya desenvaino su espada, ataco al pelirrojo y esté rápido se defendió - ¿en qué aguas estamos? – pregunto Atsushi a Akutagawa

― Cerca de las bermudas – contesto Akutagawa

― Atsushi – le llamo Sigma

― Son... Sirenas – expreso Atsushi

― ¿sirenas? – cuestiono Chuuya con su espada evitando a Oda moverse

― ¡Despierten a Dazai-san o la sirena nos matara! – grito Atsushi

― Gin, cuida a Atsushi – pidió Akutagawa

― Si hermano

― Capitán – le llamo el azabache a Chuuya desenvainando su espada

― Bien – Chuuya soltó a Oda

En ese momento Akutagawa atravesó al pelirrojo pero esté solo se giró para atacarlo. La tripulación se aseguraba. Hirotsu había tomado a Sigma y a Gogol, Gin llevaba a Atsushi. Akutagawa protegía a su capitán y compañero, se reusaba a ver a Dazai como capitán. Chuuya sacudía a Dazai – oye, ¡oye despierta!

― Odasaku me encontró Chuuya

― ¡DESPIERTA HIJO DE PUTA! – Chuuya pateo la cara de Dazai

El castaño se quejó y miro al mayor - ¿Qué haces Chuuya?

― Una maldita sirena de engaño pendejo

Ambos chicos miraron. La sirena había perdido forma de Oda y ahora era un hombre mitad humano y mitad pez. - ¡AKUTAGAWA ALEJATE! – grito Atsushi

La sirena miro a su alrededor, tomo una barra del barco y se asomó desde la proa – volveremos – advirtió mientras caía por babor

― Que fue...

Dazai fue directamente tras Atsushi y lo tomo de los hombros - ¿Cómo supiste que era una sirena?

― Yo

― ¡¿ATSUSHI-KUN COMO?! – Dazai sintió un punto filoso en su cuello

― Lo estas lastimando – dijo Akutagawa serio mientras tenía el filo de su espada en el cuello de Dazai – suéltalo

― Esto es ridículo – Dazai soltó a Atsushi y le miro serio – Sera mejor que hables Atsushi-kun

― Usted... me enseño de cuentos marítimos... no había ningún barco alrededor y

― No es verdad – dijo Chuuya – no viste alrededor – te diste cuenta en su forma de hablar

― Si y de-después mire alrededor – miro al azabache - ¿ve-verdad Akutagawa?

Akutagawa miro al albino, comprendió que estaba mintiendo pero esté guardo su espada – es cierto, Jinko miro

Dazai se alejó, Chuuya tomo a Gogol y siguió a Dazai.

Akutagawa miro al albino, este aunque tímido fue con el azabache – gracias – susurro Atsushi

― Tendrás que contarme la verdad – respondió en un susurro el azabache

― S-si...

― Está noche, en nuestra habitación

Atsushi se sonrojo. Miro a Sigma, esté le miro serio... Estaban cerca de las Bermudas. 

...

Bueno, los secretos estan saliendo poco a poco, el de Chuuya se aproxima así como una treta del destino ¿podrá Akutagawa permanecer con Atsushi? ¿se cogera otra rubia? ¿pronto escribiré más canciones? ¿escribiré alguna escena de sexo? ¿dejaré de preguntarles de manera narrativa?

Pues quien sabe 

¡Gracias por leer!