Recuento de la transmisión
––//Año: 2926//––
––>Redireccionamiento: coordenadas AD4528–6213; "Sistema: Vega"
Orden de salida de radiofrecuencia (en la Singularidad): 033321742655. Puntos de transmisión: 0
Orden de salida de radiofrecuencia (en la Singularidad): 422852852312. Puntos de transmisión: 0
––>Redireccionamiento: coordenadas AD4528–6213, "Sistema: Aldebarán"
Orden de salida de radiofrecuencia (en la Singularidad): 442233942251. Puntos de transmisión: 0
Orden de salida de radiofrecuencia (en la Singularidad): 458793212254. Puntos de transmisión: 0
––>Redireccionamiento: coordenadas AD4528–6213, "Sistema: Alpha Centauri"
Orden de salida de radiofrecuencia (en la Singularidad): 852698752012. Puntos de transmisión: 0
ATENCIÓN: Orden de salida de radiofrecuencia (en la Singularidad): 778122000255. Puntos de transmisión: 1
ATENCIÓN : Puntos de transmisión: 1...
ATENCIÓN : Puntos de transmisión: 1...
...
––>Orden de salida de radiofrecuencia: 778122000255 (en la Singularidad): Comprobar
Comprobando parámetros de comunicación 778122000255...
...
Parámetro de comunicación establecido. Estableciendo señal...
...
Estableciendo señal...
...
Señal localizada. Punto de transmisión 778122000255: arch. AUD 44585248–J–1558: Localizado
––>Cargar "arch. AUD 44585248–J–1558"
...
...
Arch. AUD 44585248–J–1558: Completado
––>Arch. AUD 44585248–J–1558: Reproducir
...
...
Error 4525–AGG encontrado: No reproducible
––> Arch. AUD 44585248–J–1558: Reparar
Reparando...
...
Reparando...
...
...
Arch. AUD 44585248–J–1558: No es posible mostrar reproducción; archivo cifrado de radiofrecuencia dañado. Trascripción de sonido en cambio conseguida; traducción universal completada. ¿Mostrar? ¿S/N?
––>S
»Al que pueda parar mientes a lo que tengo que decir y si esto no es una nueva artimaña de la Matriarca de la Oscuridad para confundirme. ¡Mal rayo la parta!
»¡Hola! Me hallo en un lugar desconocido, a todas luces. A fe mía que desperté en este páramo deshabitado hace semanas ya, y esto resulta un erial desierto y sin fin, sin nada más que reseñar que brezal seco aquí y allá y océanos de tierra árida.
»He vagabundeado por esta llanura desde entonces expuesto a las inclemencias de un viento cruel que estira y reseca mi pellejo. No llueve, pero unas extrañas nubes encarnadas se arremolinan en este extraño firmamento pardusco. Todo parece viejo y cansado. Temo que me alcance esa tormenta naciente y descargue su furia sobre mí: nada bueno parecen prometer los malsanos colores de esas nubes...
»Apenas hace unas horas descubrí algo que rompía la desoladora monotonía del paisaje, y es esta abandonada ciudadela desde la que os hablo; o esta desgastada fortaleza, si preferís llamarla así. A ella me dirigí poniendo en ella todas mis esperanzas, y gracias a Dios me ofrece buen cobijo de los elementos. ¡Pero está desierta, voto a Dios! Uno de sus torreones sigue en pie, sí, pero el resto de la plaza se halla casi por completo en ruinas. ¡Y está poblada de calaveras! ¡De todas las razas posibles, incluso de algunas de las que jamás haya tenido noticia! Las hay en sus almenas, en sus salones y en sus sótanos, amontonadas bajo una pátina de polvo, y alineadas con cuidado! Ahora puedo decir que esto es en verdad un osario. Otra macabra broma de la Matriarca, sin duda.
»Ignoro si alguien escuchará alguna vez estas palabras, pero quiero dejar constancia de que en uno de estos cenicientos salones acabo de descubrir una calavera colocada sobre un soporte en la pared; resultaba distinta de las demás. Llamó mi atención por la corona que ceñía, y por el punto de luz rojizo que titilaba en su sien. No estaba el cráneo pelado, no: la luz la despedía al cabo una especie de chapa de metal adherida al hueso. Se semeja a una de esas que se hallan por todas partes, oxidadas, en aquel mundo acabado en que volví a ver a Briseida. "Chips", creo recordar que los llamaba Miri.
»Digo pues que lo cogí, y he pasado toda la noche examinando este extraño cráneo en los sótanos de la fortaleza, al abrigo de los vientos. Con buen tino juzgué que podría tratarse de algún tipo de comunicador y traté de manipularlo o activarlo con mi voz, tal y como vi hacer a alguno de aquellos habitantes de aquel mundo destrozado. ¡Y creo que ha resultado la argucia, pues creo que está dejando registro de mi voz como si de un escribiente huesudo y descarnado se tratara! Y es que ya he dicho que cosas parecidas en verdad vi en aquel paraje devastado por el Fuego Primigenio. Artilugios como este, quiero decir, y en verdad que me parecían como cosa de brujos y quimeras, aunque ahora veo que de algo me sirvió la experiencia: ¡esta luz roja, como una centella, deja de parpadear mientras hablo, y se halla fija! Si alguien está escuchando este mensaje es que llevo razón. ¡Ja! ¡Y sea en buena hora!
»Valga pues, y si alguien escucha estas palabras sepa que soy yo el que habla, soy el Navegante, y que estoy aquí. No espero nada de nadie y acepto mi sino; ¡al fin y al cabo fue el de mi elección cuando cerré el Pacto de las Sirenas con Halia, y baste! Al menos mientras refiero este mensaje distraigo la razón de esas nubes malsanas que me persiguen, allá arriba: subí hace unas horas a las almenas de la fortaleza y comprobé que se están arremolinando: en torno a mí y en torno a esta misma ciudadela. ¡Estoy justo en el ojo del huracán, y esas nubes hinchadas parecen haberse parado y esperar a Dios sabe qué, como lobo que acecha a su presa! ¡Ja! Pero, ¿cuánto durará eso?
»Pero mientras espero el fin sirva esta transmisión para noticia de quien quiera escucharla: os hablo desde el Fin de los Tiempos y al margen del Tiempo: os saludo en suma desde las Tierras Vacías de la Matriarca de la Oscuridad.
Arch. AUD 44585248–J–1558: Trascripción de sonido finalizada.
––> Enviar mensaje a coordenadas AD4528–6213, "Sistema: Alpha Centauri". Orden de salida de radiofrecuencia: 778122000255 (en la Singularidad)
Traductor universal preparado. Registrando mensaje.
A la espera...
»Mensaje al emisor de radiofrecuencia a través de la singularidad de Alpha Centauri:
»Saludos. Trasmito desde coordenadas galácticas JD8563–4221, en el "Sistema Sol". ¿Alguien sigue a la escucha? Su mensaje original se transmitió en ondas de radiofrecuencia Hawking que nos llegan a través de la singularidad de Alpha Centauri. Describa por favor con más detalle el sistema estelar desde el que transmite. Informen por favor de cuántos soles ve y durante cuánto tiempo lucen juntos en el cielo para tratar de establecer su planeta de emisión.
»Confirme asimismo cuál sigue siendo su situación actual.
––>Enviar.
Enviando mensaje cifrado para traducción en punto de destino...
...
Enviando mensaje cifrado para traducción en punto de destino...
––//Año 3146//––
Mensaje recibido en punto de destino, coordenadas AD4528–6213, "Sistema: Alpha Centauri". Orden de salida de radiofrecuencia: 778122000255 (en la Singularidad)
Contestación recibida, transcripta. ¿Mostrar? ¿S/N?
––>S
»¡Hola ahí!
»¡Me alegro por cierto de tener noticia de alguien! Llevo lo que creo han sido siglos sin saber de otra persona, y la desesperanza comenzaba a incomodarme. ¡Ja! Por este lado apenas ha habido cambios en estos años transcurridos sin cuento: las nubes continúan dando vueltas sobre mi cabeza y no me quitan ojo, y no ha ocurrido nada reseñable.
»Solo hay un Sol sobre mí, aunque me parece apagado y ceniciento. No tratéis de intentar averiguar desde qué mundo os hablo, y ahorrad por ventura esfuerzos: esto que piso no creo que sea uno de los mundos del Primer Plano, pues no da vueltas alrededor de ese desgastado astro.
»¿Queréis saber de mi situación? Bien, he encontrado tinas repletas de lo que parece un fuerte aguardiente. Sabe a rayos, pero no hay nada más que sea aprovechable en este lugar. Deben llevar esas tinas siglos aquí, y con ellas he andado algo más distraído.
»Sí, me he asentado definitivamente en este baluarte —¿cómo no?— y desde él he iniciado numerosas expediciones con las que recorrer los alrededores en busca de otra gente o recursos. Algunas de ellas duraron meses, pero nada vivo he encontrado salvo unos milanos que no cesan de chillar sobre mi cabeza y me han seguido de regreso al baluarte. Pero falto a la verdad, al menos en parte: encontré, es verdad, también unas extrañas endrinas moradas en algunos de los brezales que abundan en el páramo, y he llenado varias veces el zurrón con ellas, aunque mayormente por distraerme. Y es que no son comestibles, no, pero si por ventura pudiera hacerme con algo de agua fresca con la que rebajar ese aguardiente de las tinas voto a Dios que podría tratar de macerarlas y darle a ese mejunje algo más de sabor y color. Pero, ¡ay!, los pozos de los sótanos parecen secos, o son demasiado hondos. Fabrico cuerdas con los tallos de las pocas plantas que crecen en el yermo, pero aún no he conseguido llegar atando el asa de un cubo que he encontrado al fondo de ellos. ¡Pero no desisto! Y no, no me quejo, pues al menos ni el hambre ni la sed azotan mis carnes: no padezco de limitaciones que vengan a complicar aún más mi solitaria condición, y no siento hambre ni sed y no conozco el porqué, aunque lo intuyo...
»Esto es una especie de limbo, de eso estoy seguro, y lo acepto. Pero aunque este pedazo de tierra no dé vueltas alrededor de un Sol, y aunque esta piel se esté tensando sobre mis huesos como un pergamino apolillado yo, el Navegante, no estoy muerto; no penséis eso, pues aún sangro, y lo he comprobado. Tan solo, creo, me hallo en una parcela o en un islote entre las brumas que separan a los mundos.
»Dejadlo, os lo ruego, y antes bien contadme vos sobre el mundo desde el que me habláis, viejo amigo. Permitid que así os llame, pues si sois la misma persona que me remitió aquel lejano primer mensaje a buen seguro habéis soportado también muchos inviernos, aunque no lo creo posible.
»¿Y decidme, ¿qué es eso que nombráis como "sistema Alpha Centauri", y qué es en suma una singularidad?
»Quiera Astarté que sigáis gozando de largos días, viejo amigo, y permitidme dedicaros un saludo desde estos mundos fuera del tiempo.
Trascripción de sonido finalizada.
––> Enviar mensaje a coordenadas AD4528–6213, "Sistema: Alpha Centauri". Orden de salida de radiofrecuencia: 778122000255 (en la Singularidad)
Traductor universal preparado. Registrando mensaje
A la espera...
»Saludos otra vez.
»La descripción sobre el mundo como el que habita no corresponde con ninguno de mis registros. De hecho no es compatible con ningún tipo de mundo que pueda hallarse en el universo, ni siendo aún teórico. Con dichas indicaciones no es posible por tanto determinar su posición.
»Sumado a esto, tampoco es posible el mantenimiento de vida sin agua o sin obtención de energía a través de la oxidación de nutrientes o de otra mecánica distinta. ¿Puede describir su modo de sustentación? ¿Obtiene la energía de la luz del Sol y de la humedad de las capas más profundas de esa tierra, tal vez?
»El sistema Alpha Centauri es un sistema binario a cuatro años luz de nosotros, en cuyas proximidades hace varios siglos se descubrió una pequeña singularidad, o como se las conoció en tiempos pasados, un "agujero negro". Hace siglos también se demostró que estas singularidades, puntos del espacio-tiempo de una densidad y gravedad infinitas de las que ni siquiera la luz escapa, pueden sin embargo emitir pares de partículas formadas cerca de su horizonte de sucesos: estas partículas se propagan después por el espacio como una onda de acuerdo a las leyes de la mecánica cuántica, de lo que resulta que cuanto más pequeña es una singularidad más pares de ondas emite.
»La onda captada desde Alpha Centuari que usted emite reproduce el mensaje que me está haciendo llegar, siendo este el primero de este tipo desde que hay registros.
»Por favor, continúe transmitiendo sin cesar: su testimonio es de una importancia trascendental para el mundo científico.
»Por último y en efecto, soy el mismo emisor del primer mensaje.
––>Enviar.
Enviando mensaje cifrado para traducción en punto de destino...
...
Enviando mensaje cifrado para traducción en punto de destino...
––//Año 3366// ––
Mensaje recibido en punto de destino coordenadas AD4528–6213, "Sistema: Alpha Centauri". Orden de salida de radiofrecuencia: 778122000255 (en la Singularidad)
Contestación recibida, transcripta. ¿Mostrar? ¿S/N?
––>S
»¡Hola de nuevo!
»Ignoro todo acerca de lo que estáis hablando. ¡Y no, no recibo sustento directamente de la luz del Sol! ¡No soy un helecho! ¿Y queréis decir que me dirijo a vos desde uno de esos inconcebibles "agujeros negros" que me habéis nombrado? No puedo concebir que algo así pueda ser posible, habréis de perdonarme, y eso que el que os dirige estas palabras ha recorrido ya mil mundos sirviendo al Blanco.
»Pues he visto mundos enteros alzarse en armas, he visitado las torturadas pesadillas de poderosos reyes de antaño, he presenciado mares tragarse colosales navíos de metal en voraces torbellinos, y hasta he cabalgado los aires transmutado en una bestia, viejo amigo.
»¿Y cómo en nombre del Cielo podéis ser la misma persona la que estáis hablando conmigo? ¡Vuestra contestación ha tardado siglos en llegarme! Yo viviré aquí durante milenios, al menos mientras esas nubes no se decidan a descargar contra mí todo su odio, pero no creo que el vuestro sea el mismo caso... ¿Pertenecéis acaso a una raza de seres bendecidos con largas vidas? Algunas de ellas he conocido, sin duda, y no hay para mí otra explicación posible aunque no he conocido jamás alguna que pudiera tenerse por inmortal.
»Contadme pues más cosas sobre vuestro mundo de origen y distraed así mis horas, y si os place.
Trascripción de sonido finalizada.
––> Enviar mensaje a coordenadas AD4528–6213, "Sistema: Alpha Centauri". Orden de salida de radiofrecuencia: 778122000255 (en la Singularidad)
Traductor universal preparado. Registrando mensaje
A la espera...
»Al emisor de la radiofrecuencia 778122000255:
»Su posición no se encuentra en el sistema Alpha Centauri, pues en tal caso vería dos soles, y no uno solo. Tampoco proviene desde dentro de la singularidad referida, pues entonces no vería usted nada en absoluto.
»Su mensaje proviene según creo a través de la singularidad, debido según opino a que su mensaje se ha deslizado por la rasgadura del continuo espacio-tiempo ocasionada por la misma singularidad: por el lapso constante de espaciado entre los diferentes mensajes le puedo posicionar a ciento y seis años luz exactamente de dicha singularidad de Alpha Centauri, quien emite la señal tras cruzar la rasgadura. Su posición exacta respecto a la mía por tanto es imposible de determinar.
»Sí, sigue hablando con el mismo emisor original, a este lado: han transcurrido cuatrocientos cuarenta años desde mi primera emisión, y en efecto mi existencia podría ser considerada como inmortal al margen incluso de la entropía del Universo.
»Mi mundo orbita en el tercer lugar desde nuestra estrella. La nombramos "Sol", a la estrella, y mi mundo fue antes llamado "Tierra". Contiene mares y cinco continentes, y ha soportado en algunas ocasiones "Fuegos Primigenios", como usted los llama, a lo largo de tres grandes guerras habidas en el pasado.
»No me importa que me pregunte todo lo que necesite saber mientras siga emitiendo y reportando y pueda seguir estudiando su señal, por favor.
»Por favor, continúe con la transmisión.
––>Enviar.
Enviando mensaje cifrado para traducción en punto de destino...
...
Enviando mensaje cifrado para traducción en punto de destino...
––//Año 3586//––
Mensaje recibido en punto de destino, coordenadas AD4528–6213, "Sistema: Alpha Centauri". Orden de salida de radiofrecuencia: 778122000255 (en la Singularidad)
Contestación recibida, transcripta. ¿Mostrar? ¿S/N?
––>S
»Hola...
»¿Tierra, decís? Así llamábamos también a mi mundo, voto a Dios, y en él lucía también un solo astro. ¡Y también lo llamábamos "Sol"! ¡Cinco continentes también poseía!
»A riesgo de parecer descortés, viejo amigo, permitidme que esta vez mi mensaje sea más corto de lo acostumbrado, pues deseo confirmar con vos una cosa, y tras ello y si lo deseáis comenzaré mi cuento. Es largo, y no dudo que se prolongará durante tanto tiempo que vuesa merced se verá con ello cumplido para llevar a cabo vuestros estudios. Hablaré a este huesudo cráneo hasta que mi lengua caiga rendida, si es lo que deseáis. ¡Ja!
»Así pues y antes de que comience, decidme esto antes y si os place: ¿cuál fue el nombre del descubridor del último de vuestros continentes? Y decidme también a qué extraña raza pertenecéis.
»Quedo, pues, a la espera de vuestra respuesta.
Trascripción de sonido finalizada.
––> Enviar mensaje a coordenadas AD4528–6213, "Sistema: Alpha Centauri". Orden de salida de radiofrecuencia: 778122000255 (en la Singularidad)
Traductor universal preparado. Registrando mensaje
A la espera...
»Al emisor de la radiofrecuencia 778122000255:
»Como le indiqué no tengo inconveniente en contestarle a todo cuanto me pregunte, mientras siga transmitiendo.
»A pesar de que ha habido una gran controversia al respecto durante diversos periodos de la Historia de mi mundo, en general se tiene por descubridor oficial del último de los continentes de mi planeta a Cristóbal Colón, dándole a esta última tierra el nombre de "Las Indias", y posteriormente siendo conocida como "América".
»En cuanto a la raza a la que pertenezco, le diré que a ninguna: soy una inteligencia computerizada y soy el último ente pensante que ha quedado en mi mundo tras la última y más terrible de las guerras libradas con el "Fuego Primigenio", en palabras de usted, cuando en realidad se refiere sin duda al poder de destrucción provocado con la liberación de la energía del átomo.
»Por tanto, ni usted ni yo parece que tengamos problema con los años que tardan en viajar los mensajes de un lado al otro de la rasgadura, y por eso le solicito que me cuente usted su historia, se lo ruego.
––>Enviar.
Enviando mensaje cifrado para traducción en punto de destino...
...
Enviando mensaje cifrado para traducción en punto de destino...
––//Año 3810//––
Mensaje recibido en punto de destino, coordenadas AD4528–6213, "Sistema: Alpha Centauri". Orden de salida de radiofrecuencia: 778122000255 (en la Singularidad)
Contestación recibida, transcripta. ¿Mostrar? ¿S/N?
––>S
»Hola entonces, viejo amigo:
»No tengo palabras para referiros el mortal desconsuelo en que me dejaron vuestras últimas palabras. Anduve años meditándolas hasta que me he decido de nuevo a contestaros, y os pido perdón.
»Lamento en grado sumo las noticias de las que me dio parte vuesa merced, y es que no le es grato a nadie enterarse del cruel sino que le esperaba a su propio mundo antes de su partida. ¡Mi mundo, devastado, y ningún hombre que camine ya sobre él! Me apena, sin duda, pero no puedo decir que me extrañe: esto ya fue predicho, en aquella galería subterránea. ¡Cruel Matriarca de la Oscuridad, sin duda tú has propiciado todo esto!
»Y es que en efecto Cristóbal Colón fue el descubridor de las Américas, pero sabed que ese no fue el último continente de la Tierra en ser descubierto: aún hubo uno más, y se llamó Thule, y su historia y la mía se unen por ventura de la Divina Providencia. Y ya que insistís, y por distraer estos últimos años que me quedan —pues sabed que las nubes han comenzado a agitarse por fin ahí arriba—, os lo contaré todo y sin omitir detalle, y todo ello sin esperar a vuestras contestaciones, pues como os dije el tiempo por fin se ha hecho finito para mí, y eso me place.
»Vaya aquí pues la historia. Sentaos donde quiera que estéis y si contáis con posaderas para hacerlo, viejo amigo, pues me alegro de poder referírsela a alguien aunque no seáis hombre natural sino artificial. Pero da lo mismo; pensáis, y por tanto estáis vivo, como yo.
»Colocaré este humilde cráneo pelado con el chip incorporado a mi lado, mientras hablo, y me haré la ilusión de que ella sois vos, si no os importa. Y disculpad si de vez en cuando abandono por unas horas o días el relato —no más, y eso lo prometo—, pues de vez en cuando me da por estirar las piernas y doy algún paseo por el Yermo, o me pongo a trenzar tallos para tratar de seguir confeccionando una cuerda lo suficientemente larga como para ver si en el fondo de esos pozos del sótano queda algo de agua. Y perdonad también y por último si divago o me doy a algún loco desvarío de tanto en tanto. ¡Ja! Llevo aquí siglos, solo, y en eso debéis disculparme...
»¡Pero vayamos pues con el relato, y que sea en buena hora!
»Cuento aquí la historia del principio de mis aventuras, a este lado.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top