Capítulo 23
Los niños llegaron y bueno, Atsushi primero saludo a los niños, los menores lloraron y se acurrucaron en él, cuando estuvieron calmados, Toru cuidaba de los gemelos en la recamará mientras Atsushi les explicaba todo a los niños de la mejor manera – Atsu, entonces ¿tuviste unos hermanos nuestros?
― Si, así es. Pero no podía quedarme en casa, los extrañe muchísimo
― Nosotros a ti
― Ahora... ¿podemos conocer a nuestros nuevos hermanos? – pregunto Atsuke
― Si – les sonrió – Toru, tráelos
Toru salió con ambos bebés en sus brazos, acababan de despertar, ambos rieron felices, Atsuke y Ryunushi quedaron encantados, Nyoko estaba fascinada, Momo, Hinata y Taiyou no entendían tanto, pero les gustaba. Se acercaron a verlos – son Levana y Akira – dijo Atsushi
― ¿Qué significa Levana? – pregunto Atsuke
Atsushi le sonrió – blanca como la nieve
Los niños estaban felices.
Hirotsu abrazo a Atsushi, lo había extrañado y después de un rato tuvo la oportunidad de sostener a Levana, Tanizaki ya no soltaba a Akira. Mori había vuelto, había ido a comprar algunas cosas para sus nuevos nietos, y en eso se encontró con Yukichi y Akiko quienes habían sido informados – Querida Akiko - le llamo Ougai
― No ahora Mori – dijo Akiko, después le sonrió – gracias por venir y por esto
― Si hubiera sucedido lo mismo con nosotros, hubiese deseado encontrarte también temprano, pero... aun no es tarde ¿no crees? No fue culpa de ninguno
Akiko sonrió – veremos que pasa.
Convivieron normalmente, Ryunosuke estaba en las nubes viendo a su familia reunida, feliz, a los bebés con él. Era todo perfecto.
Salieron de la casa todos, los bebés aun no podían con tanta multitud en un espacio tan pequeño. Atsushi salió a despedirlos mientras Chuuya los cuidaba y Toru calentaba agua para bañarlos – Atsushi, de-deberías volver...
― Ya te lo dije
― Si, arreglaré todo, lo prometo
― De acuerdo
― Atsu – le llamo Atsuke - ¿te veremos mañana?
― No sé si mañana, pero – miro al mayor – quizá pronto
― Eso haré – respondió Ryunosuke – vamos niños, tengo mucho que hacer para que Atsushi vuelva
― Te ayudaremos
― Si, entre más rápido mejor
― Corramos
Los niños entraron al auto, Tachihara, Hirotsu, Tanizaki y Ryunosuke también. Mori se fue con Sousuke y Dazai, mientras Fukuzawa y Akiko por otro lado. – Atsushi, el agua esta lista
― Ya voy
Los Akutagawa llegaron a casa, Hirotsu, Tanizaki y Sousuke siguieron a Ryunosuke que iba molesto directo a la habitación. Tosui lloraba a gran pulmón, Ryunosuke escucho a Higuchi gritarle también - ¡Cállate, te digo que te calles! ¡Cállate! – Sousuke había comenzado a grabar
― Higuchi ¿Por qué le gritas al niño? – entro Ryunosuke molesto
― ¡Ryunosuke! Este bebé del infierno no sé calla
― ¿Por qué le dices así a tu hijo? Maldición – se quejó cargando al infante. Tosui se calmó, pero se veía irritado – Hirotsu, por favor que lo revise un medico
― Si claro señor – dijo Hirotsu llevándose al bebé. y con ello a los mejores de edad que estaban detrás de ellos. Tanizaki lo siguió. Y Tachihara iba a ayudarlos
Se habían quedado solo Sousuke, Ryunosuke y Higuchi. – Ichiyo Higuchi quiero el divorcio
― No te puedes divorciar de mí, tenemos un hijo
― Ese no es mi hijo – dijo molesto
Higuchi estaba sorprendida. - ¿Qué dices cariño? Es nuestro bebé
― Ese bebé no es mío, y tengo los exámenes
Higuchi ya no podía mentir, se levantó - ¿y qué? Apelare a la corte que es dentro de nuestro matrimonio
― Atrévete, tengo los mejores abogados, y lo sabes
― Los cuales me aprecian a mí también
― No quieras hacer una guerra Higuchi
― Te advertí que no lo volverías a ver
― ¿y por qué creería ver y mantener a un bebé que no es mío cuando fue producto de un engaño para casarnos?
Higuchi trago saliva – te arrepentirás
― No hay algo que puedas decirme que vaya en contra de esto – afirmo – empaca tus cosas, en cuanto Tosui este bien, váyanse. Mis abogados hablaran con los tuyos, no quiero volver a verte en mi vida
― ¿es por él verdad? Por Atsushi
― Estás loca, tú me engañaste
― ¿Sabes qué? Atsushi te abandono, jamás volverás a verlo, jamás estarán juntos, siempre me pusiste primero a mi y a mi bebé antes de que ese nano estúpido
― No te permito que le hables así
― Te arrepentirás, no será tu hijo – subió sus hombros – tampoco es mío, rente un vientre
― Eres... ¿a-alguna vez estuviste embarazada?
― Si, lo perdí, ¿y sabes que fue peor? Que fue con un hombre bueno – suspiro – no con uno que busca cualquier nano para satisfacerse, seguramente lo vez hermoso por que se parece a tu exesposa, supérala
Akutagawa alzo su mano, más no la golpeo, se contuvo. Apretó la mano y miro a otro lado – lárgate
En ese precisamente momento Sousuke se escondió, tenían todo en grabación, haría más fácil el divorcio.
Ese día, Higuchi salió de la casa Akutagawa con sus maletas, pero abandono a Tosui.
Realmente pasaron dos semanas donde Higuchi no volvió, solo los abogados se comunicaban, Akutagawa prefería no ir ni a la oficina, quería vigilar a sus hijos por cualquier cosa y Tosui tenía fiebre. Tampoco había podido hablar con Atsushi, pero le hizo una promesa, estaba que la carta de divorcio llegará pronto.
Atsushi y Toru estaban en el super mercado con Levana y Akira, cada uno llevaba a cada bebe en su pecho con una andadera de maternidad. Compraban algo de verduras y platicaban con los vendedores, era divertido. – Atsushi ¿puedo comprar este pepinote?
― ¿te lo comerás?
― Oh si
― Por la boca
― Oh... - Toru lo dejo
Atsushi comenzó a reír, tomaban algunas espinacas y algas para la alimentación de ellos, al final del día lo que comiera Atsushi los bebés lo comerían.
Iban caminando cuando Hirotsu le envió mensaje - ¿Qué pasa? – pregunto Toru
― Al parecer el bebé de Higuchi no es de Ryu
― Mira que hija de puta, ni yo me atrevo a tanto, o... ¿sí?
― No Toru
― Ok, no
Atsushi suspiro – Ella siempre se mostró como alguien tan honorable y estudiada ¿Cómo termino así?
― Aay baby, el mundo está loco
― Supongo que si...
Regresaron a su hogar, donde extrañamente vieron a los Akutagawa, estaban realmente extrañados pues Ryunosuke no había salido de su casa desde que empezó el trámite del divorcio – Ryu, Sousuke ¿Qué hacen aquí?
― Me estoy volviendo loco
― Está muy estresado – menciono Sousuke tomando sus bolsas - ¿podemos pasar?
― Oh si, claro
Ryunosuke alzo sus manos – déjame cargar a mis bebés – pidió angustiado
― No Ryu, primero entremos y lávate las manos
― Sii... - respondió sin ánimo.
Ryunosuke entro algo desesperado a lavarse sus manos, Atsushi y Toru les dejaron a los gemelos, esto lo calmo bastante. Sousuke ayudaba a los dos hermanos menores - ¿te sientes tan mal? – pregunto Atsushi
― Me estoy volviendo loco Atsushi, esa mujer me engaño
― Pues si
― Sousuke, vamos por unos tacos – dijo Toru
― Pe-pero
― No, escúchame, vámonos – pidió Toru
Atsushi estaba frente al azabache, - dame a los bebés están dormidos.
― ¿me vas a pegar? Te vez enojado
― Ryunosuke...
― Pe-pero tengo miedo de ti
― Solo quiero pasar tiempo contigo, llevemos a los bebés a la cuna
― Si...
El azabache fue con el menor, dejaron a los bebés en la cuna, los taparon y el azabache se lanzó sobre el menor – Ry-Ryu... - el azabache lo abrazo, Atsushi lo miro confundido. Ryunosuke se había quedado dormido.
Atsushi sonrió, se acomodó en la cama abrazando a Ryunosuke, los bebés dormían tranquilos también.
...
¡Gracias por leer!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top