POV Saúl.

—¿Qué hacemos con ella? —pregunté.

—¡Mátala! Tómalo como una pequeña venganza —Ariana se veía muy emocionada de acabar con Ana.

Me acerqué a Ana, ella aún seguía inconsciente, yo no quería hacerle daño, ella no es la culpable, solo hace lo que le dicen.

—No puedo hacerlo.

Negué con la cabeza inmediatamente.

—Claro que puedes, solo córtale el cuello —mencionó Ariana para luego agacharse por el cuchillo que Ana tenía. —Ten.

Tomé el cuchillo, la mire, ella está toda indefensa, no puedo hacerlo.

—No puedo.

—Maldita sea, entonces lo hago yo —Ariana me arrebató el cuchillo.

Ariana se acercó a Ana, estaba muy nervioso, en verdad Ana me cae muy bien, yo no quiero hacerle esto.

—¡Ahhhhhh! —gritó Ana abriendo sus ojos. —¡Déjame, ayudaaa!

Ana había despertado, ella comenzó a gritar.

—¡Saúl, ayúdame!

—¡Déjenme, por favor! —gritó Ana asustada, dando manotazos para intentar defenderse.

No sabía qué hacer, tomé valor, tengo que ayudar a Ana, ella no tiene la culpa de lo que le piden que haga.

Corrí hasta Ariana y la empujé hacia un lado.

—Lo siento, Ana.

—¡Idiota, tenemos que matarla! —Ariana se puso de pie inmediatamente, estaba enojada.

Le di la mano a Ana para que se pusiera de pie rápidamente.

—Esto lo sabrá Candice, y espero que te mate como lo hizo con Paola —Ana empujó a Ariana y comenzó a alejarse.

—¡Idiota, no podemos dejar que se vaya! —gritó Ariana. —Candice seguro me mata, ayúdame, yo te ayude.

Ariana corrió detrás de Ana y la tomó del cabello.

—¡Suéltame, estúpida! —gritó Ana tratando de zafarse de Ariana.

—No es culpa de ella, Ariana, pero en realidad deseo que Candice te maté, yo soy el culpable de mi muerte, yo moriré porque no realice un reto —dije cabizbajo.

—¡No, tienes que ayudarme!

—No, no te ayudare, déjala por favor, o yo te tendré que matar —tomé el cuchillo de Ana y me acerque de manera amenazante a Ariana.

Ella soltó el cabello a Ana y comenzó a correr.

—Te arrepentirás de esto, Saúl —dijo Ariana molesta.

***

POV Ana.

Corrí lo más rápido que podía, Ariana es una maldita perra, pero en cuanto Candice lo sepa, ella estará muerta.

Al llegar a mi casa, ahí estaba Jessica dormida en el sofá, creo que me estaba esperando, no quiero que les pase nada a mis padres, no quiero que nos quedemos solas.

***

Día 42.

Extraño tanto a mamá, y a papá, creo que no puedo hacer esto, aunque tengo que seguir, tengo que mantenerlos con vida.

Salí de mi cama, y caminé hasta la cocina, ahí estaba Jessica desayunando.

—Preparé el desayuno.

—Muchas gracias —sonreí.

—Hoy iré a hablar con Paola, espero ella pueda ayudarnos a rescatar a nuestros padres.

Con tantas cosas había olvidado decirle que Paola está muerta.

—Lo siento, Jess, no podrás hablar con Paola nunca más, ella está muerta.

—¿Que? ¿Qué fue lo que pasó? —preguntó sorprendida.

—La mataron, no sé cómo se enteraron de que ella nos ayudó en varias ocasiones, después de todo ella era buena, me siento muy mal, yo no hice nada para ayudarla.

Al terminar de desayunar, salí de la casa, quería estar segura de que Hanna está bien en su casa.

De camino a casa de Hanna, me encontré a Grace, ella estaba muy alterada.

—¡Ana!

—¿Qué pasa?

—Por favor tienes que ayudarme, mi reto es matar a una jugadora nueva, ella hablo con la policía del reto, Henry quiere que me deshaga de ella.

—¿Qué? Tienes que hacerlo Grace, pero por favor ten mucho cuidado —dije inmediatamente.

—No creo ser capaz de matar, en cuanto tú, ya mataste al profesor, aún tengo tu video, solo quiero que recuerdes eso.

—¿Es una amenaza para yo hacer tu trabajo?

—Tómalo como quieras, solo no quiero ser yo quien asesine a una pequeña niña, quiero que lo hagas tú.

—¡Eres una perra, Grace!

—Lo sé, Ana.

Me explico dónde nos juntaríamos, me dijo que si no llegaba el video iría a parar a la policía.

Al llegar a casa de Hanna, efectivamente estaba su madre ahí.

—Ana, qué bueno que viniste, Hanna y yo no mudaremos, pude conseguir dinero —la madre de Hanna estaba emocionada.

—¿Qué? ¡No pueden hacer eso!

—Si podemos, Ana —dijo Hanna. —No me gusta estar aquí.

—Esta casa me recuerda tanto a Danny y me hace llorar, ella tenía mucha vida por delante, quiero superarlo, y de alguna manera esta casa no me dejará hacerlo.

La madre de Hanna se fue arriba, yo camine hasta Hanna, ella se miraba muy feliz.

—¿Qué pasa?

—Los 50 días están a punto de terminar, me podré ir Ana —dijo ella.

—Pero ¿Qué hay de tu reto final?

—Lo haré sin problemas, tú no te preocupes por eso.

—¿Cuándo se van?

—Mamá quiere irse hoy mismo, pero le dije que tenía cosas que hacer, tengo que quedarme un poco más de tiempo por mis retos —Hanna estaba emocionada, me alegro por ella.

Hanna se irá, aunque hay algo que no me cuadra, Candice no tiene a su madre secuestrada, como a la mía.

Tal vez está a punto de hacerlo, espero todo salga bien para todos nosotros.

Mi celular comenzó a sonar, rápido lo saqué y si, era Candice.

Mensajes:

Candice: Tus papis te mandan saludos, Ana.

Ana: ¿Ya te dijo Ariana?

Candice: Si, no pudiste matar al estúpido de Saúl, ahora creo que está escondido, tal como lo hizo Pablo, menos mal que ahora está de la parte ganadora.

Candice: Tu reto es, tienes que ayudarle a Grace a matar a una chica estúpida, fue con la policía a contarles todo, quiero que esté muerta, no quiero estupideces, Ana, hazlo bien.

Ana: Ariana me impidió hacerlo, ella merece morir como Paola.

Candice: Si claro, te creeré.

Menos mal también es mi reto, así no me sentiré tan obligada por lo que Grace me dijo.

Grace me envió donde nos íbamos a juntar, en el parque, como siempre.

Al llegar al parque ahí estaba ella.

—Hola, Grace, ya estoy aquí.

—Menos mal, aunque aún falta lo más difícil, más vale que lo hagas bien.

Caminamos hasta la casa donde vivía la niña, la verdad no creo que esto vaya a hacer nada fácil.

Cuando estábamos enfrente de la casa, había una patrulla afuera nos fuimos acercando de poco a poco a la casa.

Nos acercamos a la patrulla y para mi sorpresa era el oficial Gómez.

—Hola, oficial.

—Ana, ¿Ya te decidiste a hablar sobre el reto?

—Ya le he dicho todo lo que se.

—Ana, vámonos se nos hace tarde —Grace me jaló del brazo.

Miré al otro lado de la calle y venia Diego y Emily hacia la patrulla, eso es genial, así Emily puede distraer al oficial, aunque no entiendo que hace con ese estúpido, él trato de violarla.

Corrí hacia Emily, estaba muy nerviosa, no sé cómo se lo vaya a tomar cuando le diga que necesito su ayuda para matar a alguien.

—Em, necesitamos tu ayuda.

—¿Qué pasa?

—Es un estúpido reto de Candice, tenemos que deshacernos de la chica que habló del reto.

—Te refieres a Selena, ella es sobrina del oficial Gomez, te será muy difícil —Emily me miró preocupada.

—Si, lo sé, para eso necesito tu ayuda, quiero que distraigas al oficial.

—¿Distraer a quién? ¿Qué quieren hacer? —preguntó Diego.

—Quieren hablar con Selena, ayúdalos.

—Solo porque tú me lo pides —Diego sonrió, luego caminó hasta con su padre y comenzó a platicar con él.

—Yo iré con ustedes —dijo Emily.

Entramos a la casa, parece que no había nadie, luego subimos las escaleras y miramos en una puerta entre abierta, parece ser la habitación de Selena.

—¿Quién anda ahí? —preguntaron desde dentro.

—Soy yo, Emily —respondió Emily para luego pasar a la habitación.

Grace y yo caminamos hacia la habitación, Selena es una chica de nuestra edad, no quiero terminar con su vida, tengo mucho miedo.

—¿Quiénes son ellas? —preguntó Selena.

—Soy Grace y ella Ana.

—Ahora —susurró Emily.

Me fui acercando poco a poco a Selena, la tomé las manos y la lancé hacia atrás.

—Lo siento.

—Esto te pasa por soplona —dijo Grace.

Tomé una almohada que estaba aún lado de ella, traté de ponerla, pero era muy difícil, ella se resistía.

—¡Ayudaaa! —gritó muy fuerte.

La almohada quedo en su cara, solo teníamos que presionar por un rato y todo estaría listo.

—¿Por qué no se muere? —preguntó Grace.

—¡Sigue presionando! —exclamé, estaba muy nerviosa, no podía creer lo que estaba haciendo.

—¿Qué están haciendo, Emily? —preguntó Diego desde la puerta.

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Espero y les haya gustado.

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