Capítulo 19


Amanecimos juntos, Zee estaba entre mis brazos. No estaba seguro de la hora, pero tenía mucha hambre.

Le di un beso en sus labios que aún se ven un poco inflamados, pensé que lo despertaría, pero, creo que estaba demasiado cansado.

Me levanté de la cama muy suavemente para no incomodar su sueño y me puse algo de ropa para poder salir de la habitación.

Al instante de dar mis primeros pasos, me di cuenta de que me dolía casi todo de la cintura para abajo, pero podía caminar, así que pensé que era solo cuestión de tiempo para que el dolor disminuyera.

¿Estoy perdido otra vez? ¿Por qué esta casa es tan grande? Pasé por un corredor que pensé que me llevaría al comedor y cuando logré llegar al final, vi que el jardín de esa Villa es un campo de Golf. Es increíble y enorme...

Me sorprendió un poco que me abrazara por detrás, pero amo cuando lo hace.

- ¿Qué haces?

- ¡Tengo hambre! Buscaba el comedor.

- ¿Por qué no me despertaste?

- ¡Lo intenté, pero estabas muy cansado!

- Estarías igual que yo, si hubieras sido el activo anoche.

- ¡Zee!

- No me grites, pensé que no podrías con una ronda... Pero, me hiciste trabajar seis.

- ¡Ya basta!

- Jajajajajaja. ¡Lo siento! Ven conmigo, te llevaré al comedor... Yo también tengo hambre.

Lo acepto, lo hice trabajar mucho anoche, pero es culpa de él, porque me encendió y me llevó a arder en placer, obviamente, no iba a dejar que lo hiciera solo una vez...

Caminamos abrazados así por la casa mientras yo lo molestaba, diciendo que necesitaba que me hiciera un mapa, para no perderme en su inmenso palacio. Íbamos de regreso por el corredor y Ming salió del estudio de Zee.

- ¡¿Joven Pruk, Joven Sup?!...

- ¿Por qué nos miras así? - Preguntó Zee.

- Es que pensé, que no estaban en la Villa... Esta mañana, no pude entrar a la habitación del Joven Sup, porque estaba con seguro y en su habitación no había nadie Joven Pruk, por eso creí que habían salido y almorzado afuera.

- ¿Almorzar? ¿Pues, qué hora es?

- Son casi las 2 de la tarde Joven Sup.

- ¿No hay comida hecha aquí? - Preguntó Zee.

- No, Joven Pruk. Le pido una sincera disculpa, fui yo quien dio la orden de que solo cocinaran para los empleados, porque pensé que no estaban.

- ¡Oye, Ming, no te preocupes, estamos bien! ¿Pero, no hay algún lugar cerca para almorzar?

- Solamente el restaurante cerca del lago.

- Saint, está casi a 45 minutos en auto. Así que daremos un paseo en helicóptero.

- ¿Nos iremos en helicóptero?

- Así es. Ming llama al helipuerto y pide que estén preparados para recibirnos y dile al piloto que partiremos en 10 minutos. También llama al restaurante y diles que el Director Pruk va en camino, que quiero una mesa para dos y que preparen sus mejores platillos.

- Sí Joven Pruk, de inmediato... Oh, Joven Sup...

- ¿Necesitas algo?

- No, yo no. Solo quería decirle que mandé al chofer muy temprano esta mañana, a comprar algo para usted. - Extendió su mano, mostrándome un pequeño paquete.

- ¿Qué es esto?

- Solo agárrelo Joven, y me retiro. Se hará como dijo Joven Pruk, con permiso.

Cuando abrí el paquete que me entregó Ming, no pude evitar sonreír e incluso, le agradecí en mi corazón.

El chofer había ido a la farmacia y compró medicamentos para el dolor y la inflamación. Con eso, me queda más que claro, que Ming sabía lo que pasó la noche anterior en mi habitación.

Subimos a las habitaciones, nos bañamos y nos pusimos ropa cómoda. Cuando ya estaba listo, Zee apareció detrás de mí, pude verlo desde el espejo, se veía malditamente guapo y me di la vuelta para verlo mejor, en ese momento él me sonrió.

- ¿Estás listo? ¡Vamos a comer!

Lo abracé por los hombros y le dije:

- ¿Y de qué tienes hambre?

- ¡Viéndote así... Tengo hambre de ti!

- Entonces, dame un beso...

Puso sus manos en mi cintura y me besó, muy tiernamente, cada vez que sus labios pasaban por los míos podía sentir su hambre...

- ¿Quieres comerme, Zee?

- Siempre quiero comerte... Pero, primero comamos mariscos.

- ¿Mariscos?

- Es la especialidad de ese restaurante.

- Está bien... ¿Nos vamos?

- Sí, ya nos están esperando.

Salimos y el helicóptero estaba ahí, estando en el aire, no sé por qué, pero el lago se veía más hermoso y grande desde arriba.

Llegamos al restaurante y fue espectacular, ya habían preparado la mesa y estaba servida. Todo estaba delicioso y comí mucho...

Zee estaba molestándome por mi manera de comer, pero, por ahora solo pienso en la posibilidad de hacerlo trabajar esta noche otra vez. Sobre todo, porque dijo que tiene hambre de mí...

Me preocupé cuando el piloto se acercó a Zee para decirle algo, y él puso una expresión seria.

- ¿Qué sucede? ¿Algo está mal?

- Saint, hay una tormenta que se dirige hacia nosotros, debemos regresar ahora, si aún queremos volver en helicóptero.

- Está bien. Vámonos.

Regresamos a la Villa y cuando íbamos de camino, pude ver como las nubes habían cambiado de color, pero estuvimos volando menos de 15 minutos, ya que el piloto se apresuró en llevarnos, para que estuviéramos a salvo...

- Buenas noches, Joven Pruk... Joven Sup.

- ¿Qué pasó Ming?

- Joven, anunciaron que la tormenta bajó de intensidad, pero aún puede golpear fuerte. Estaremos bien, mientras estemos resguardados adentro, así que no hay nada de qué preocuparse.

Zee, se fue a la habitación que él pidió que le prepararan y me dejó solo en la otra. Esa noche se fue la luz por la tormenta, la oscuridad nunca me gustó.

La tormenta se escuchaba muy fuerte, se podían ver los rayos y se escuchaban los truenos, así que tomé mi celular y con la linterna que tiene, me dirigí a la habitación de Zee...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top