6. EL INICIO DE LA GUERRA
-pero ¡Eso es imposible! ¿¡Acaso ha perdido la cabeza, Stark!?-exclamó Lestrade, habiéndose levantado de su asiento de un salto-Holmes, su primo no está diciendo más que locuras-
-pues se equivoca, lo que dice es verdad-
-inspector sé que suena imposible, pero debe creernos, esa es la verdad-intento convencerlo Watson, suplicando mentalmente por que aquellos gritos no despertaran a los niños, el ambiente estaba demasiado cargado y el llanto de dos bebés podría volver aún más insoportable aquella situación.
-entonces todo lo que dijo en un principio...-
-era verdad-
-válgame Dios-susurro nerviosa la señora Hudson-lo que vi, lo que yo vi ese día, eso que se movía por la casa...-
-era mi armadura, Mycroft se encargó de recuperarla, él también está enterado-explico Tony, observando como Lestrade aún dudaba, negando con la cabeza, mientras que la casera parecía completamente convencida.
-arriba están el Sherlock Holmes y el John Watson de su tiempo, del futuro, si aún no nos cree, podemos llamarlos, estoy seguro de que unas palabras con ellos lo convencerán-sugirió Holmes, queriendo arreglar aquel lío lo antes posible.
-Si no ofrecen pruebas contundentes, me veré en la obligación de detenerlos señores, lo que dicen es una completa locura-les dijo el inspector.
-¿Qué? No vine hasta aquí para terminar en un manicomio-se quejó Tony, tratando de sacar algo de su bolsillo con rapidez-aquí esta-
-¿Qué es esto?-
-un teléfono celular, mi teléfono, y no se emocione, la tecnología ha mejorado mucho pero solo yo tengo uno de esos, Viernes, necesito algo de información sobre nuestra época-
-no hay ninguna red a la cual pueda conectarme, jefe ¿desea que muestre los datos incrustado en el teléfono?- Lestrade casi suelta el aparato al escuchar aquella voz, con la señora Hudson cubriendo su boca ante la sorpresa que eso significaba.
-sí, todo lo que encuentres-
-creo que debió iniciar con eso-lo regaño Watson.
-disculpa ¿te pregunte?-le contesto Tony, sin siquiera mirarlo.
-¿Qué paso con Jarvis?-pregunto Holmes con curiosidad ante la nueva voz de la inteligencia artificial.
-Jarvis... bueno, él... ya no está-contesto simplemente el millonario-pasaron muchas cosas desde la última vez, y... tenías razón abuelo, debí tratarme lo del estrés postraumático-
-Es... imposible ¿Cómo es que...-trato de preguntar Lestrade, cuestionándose si había visto bien, si su mente no le engañaba.
-hablaremos de ello después, Anthony, necesitare ponerme al corriente-le dijo Holmes en un tono suave, sabiendo que el tiempo había tenido estragos en la vida del millonario, lo que se preguntaba era ¿Qué tipo de estragos?-Explicarle el cómo tomaría mucho tiempo que ahora no tenemos-le contestó al inspector.
-¿y hay otros como ustedes arriba? ¿Pero del futuro?-
-Sherlock y John, así los diferenciamos-hablo Tony, con un tono más grave, tratando de recuperar la compostura.
-ahora que ya está involucrado, podríamos valernos de eso para trazar un plan-opinó Watson.
-el plan ya fue trazado-lo contradijo Holmes, evitando verlo-pero podría sernos de ayuda, en caso de que Burrell logre escapar de nosotros nuevamente y desee refugiarse en esta época-
-¿Qué es lo que debo hacer?-pregunto Lestrade, entregándole el teléfono a Tony, agradándole de cierta manera que se le involucrara.
Ahora que no cabía duda de que lo que decían era verdad, le emocionaba formar parte de una operación de ese tipo.
-eso lo hablaremos arriba, algo me dice que Sherlock y John deben de traer noticias-dijo Tony, haciendo un ademan con su mano para que le acompañaran, comenzando a subir las escaleras de forma rápida. La señora Hudson se apresuró a alcanzar al detective antes de que se marchara, tomándolo por sorpresa.
-señor Holmes.... Me alegra de que ya se encuentre libre-dijo la mujer de forma sincera, con Holmes obligándose a sonreír un poco.
-a mí también, Stark me dijo que fue usted quien le dio el aviso-
-suele ser insoportable en ocasiones, pero eso no significa que no le tenga cierto cariño, señor Holmes-
-es una... agradable sorpresa para mi escuchar eso, señora Hudson-murmuro el detective, sintiéndose incomodo, tratando de que su boca dijera también algo de lo que estaba pensando, tratando por primera vez, de ser agradable-a pesar de todo, también la tengo en muy alta estima-
Se sintió algo torpe ante sus palabras, pero el gesto de la señora Hudson pronto le confirmo que para ella, aquella muestra de cariño, era suficiente.
Se apresuró a seguir sus compañeros apenas su casera se fue, logrando alcanzarlos para cuando terminaban de subir las escaleras.
Cuando entraron a la habitación, se encontraron con John sentado en el sillón, mientras que Sherlock parecía estar observando todo lo que se encontraba, pasando uno de sus dedos por sobre la superficie de algunos de los muebles, observando el polvo que se quedaba en ello.
Parecía que no habían compartido ni media palabra desde que subieron, por lo que algo fastidiado, fue Holmes quien rompió el silencio impuesto.
-¡Esto no es posible! ¿Ahora son ustedes?-
-¿Qué cosa?-pregunto Tony, observando a ambos detectives pero ninguno respondió a su pregunta.
-No es importante-dijo John, levantándose en seguida, cortando cualquier otra pregunta que pudiera darse-¿Qué es lo que ocurre?-
-Se nos salió un poco de las manos, pero logramos convencer a Lestrade y ahora nos ayudara-resumió el castaño-por lo que escuche, estoy seguro de que Holmes ya los puso al tanto de mi presencia aquí-
-sí, algo escuche-acepto John con incomodidad, pues Sherlock solo observaba a Watson sin decir nada.
-aclarado eso ¿ustedes que hacen aquí?-
-también tuvimos una situación que involucraba a ¿Cómo dijeron que era su verdadero nombre? Iván Burrell-dijo Sherlock después pensarlo un poco.
-Isaac Burrell, esto comienza a preocuparme Sherlock, a todos le cambias el nombre-se quejó Tony, aunque aguantando la risa, imaginándose la cara que Isaac pondría si le dijeran Iván.
-no a todos-lo contradijo Holmes-¿Cuál fue esa situación?-
-es un asunto delicado y del que no hablaremos...-
-Mary Morstan-dijo John casi de inmediato, haciendo que a todos los presentes casi se les parara el corazón, interrumpiendo lo que Sherlock intentaba decir-mi prometida, yo...-
-no lo hiciste, John-exclamo el detective más alto-estaba probándonos, fue una jugarreta, y ella no sobrevivió-
-usted lo hizo-murmuro Holmes, sintiendo un nudo en la garganta, podía verlo, en la mirada culpable del doctor, que había bajado la mirada, haciendo que la de él se dirigiera hacia Watson, quien también lo miraba.
Tuvo que romper el contacto visual, aún le dolía y más al ver que tampoco ellos se habían salvado de aquello.
-fue mi culpa-
-yo accione la palanca, Sherlock-
-pero el error que nos llevó ahí fue mío-
-no es cierto-dijo John con voz queda-no mientas, tu no tuviste que ver-
-dejemos el tema-se interpuso Tony, con menos convicción de la que le hubiera gustado aparentar-Holmes me conto que ustedes dos tenían ya elaborado un plan de contingencia, en caso de que algo así pasara-quiso cambiar el tema.
-llegó un sobre, Anthony-le dijo Sherlock, siendo consciente de que era mejor que todos los golpes cayeran ahí mismo y en ese mismo instante-de los vengadores-
-nadie de mi equipo envía cartas-dijo el millonario con cierta diversión, pero su sonrisa se borró ante lo que dijo después el detective.
-no hablo de ellos-dijo Sherlock, midiendo su reacción-sino de los prófugos de la balsa-
-Ah-fue lo único que Tony pudo pronunciar, pasando saliva un par de veces, ante la sequedad que comenzó a sentir en su boca-¿Qué querían?-
-no leí su contenido-admitió Sherlock-pero supe reconocer en el sobre las características de su remitente-
-enviaste el sobre a tú hermano ¿Por qué?-le pregunto John, aún sin demasiadas fuerzas.
-esperen ¿también hay un Mycroft Holmes en el futuro?-dijo Lestrade con sorpresa.
-creo que puede notar que hay algunos descendientes directos, inspector, ellos también cuentan con un Greg Lestrade y una señora Hudson-le respondió Holmes.
-envié el sobre a mi hermano para que tomara medidas, no los queremos merodeando cerca del caso ¿no es cierto?-
-bien-murmuro Tony con cierto alivio, conocía Mycroft, estaba seguro que él podría manejarlo.
-¿y qué fue lo que escribiste en el sobre? Decía...-
-Marne-le facilitó Sherlock, al ver que John no lo recordaba-es el nombre de la operación, en Septiembre de 1914 tuvo lugar una de las primeras batallas en suelo europeo, una batalla estratégica que marcaría el comienzo de la guerra de posiciones, que es en lo que nos encontramos, enfrentaremos a Burrell directamente y él hará lo mismo, por lo que envié esa palabra como clave para que mi hermano comenzara a mover las piezas y pudiéramos mantener cierta ventaja en el juego-
-¿y cómo entro yo en todo esto?-pregunto Lestrade, claramente confundido.
-de ninguna manera-respondió Holmes-usted solo debe encargarse de asegurar nuestro tiempo ¿recuerda lo que hablamos en los telegramas?-
-perfectamente-
-hay que desarmar lo poco que Burrell pueda tener aún aquí, si vuelve, no tendrá escapatoria-
-bien, ha llegado la hora de detenerlo de forma definitiva-susurro Tony, frotando sus manos entre sí.
Le preocupaba, sí, pero no podía echarse ahora hacía atrás. Respiro lentamente, recordándose que Isaac solo era un buen jugador y que él era Iron man, podía vencerlo y lo haría.
-es momento de volver, Anthony, aquí no encontraremos nada más que pueda servirnos de algo-lo apresuro Sherlock, solo esperando poder ponerle las manos en sima a Isaac, lo que habría hecho, no se quedaría sin pagar.
-y ¿Cómo es que... viajan en el tiempo?-pregunto Lestrade.
-eso.... Será historia para otro día-contesto Tony, solo ofreciéndole la mano, misma que el apretó-gracias por su ayuda inspector-
-movilizare a mis hombres, Burrell no escapara-
-esperemos que no-intervino Holmes, con Lestrade saliendo de la habitación con un asentimiento de cabeza.
-muy bien, doctor-le dijo el millonario a Watson-tal vez sería bueno que traiga a sus hijos, estarán más seguros en el complejo-
-yo... lo acompañare-dijo John antes de también salir, dejando a aquellos tres hombres solo mirándose entre sí.
-¿en serio lo traerás?-le preguntó Sherlock después de unos segundos.
-creo que todos sabemos que si lo dejamos aquí, sus hijos seguirán en el mismo peligro que él y Watson no nos dejaría llevarlos solo a ellos ¿cierto Holmes?-
-¿Qué fue lo que pasó con su torre?-dijo Holmes, desviándose del tema.
-justo a eso me refería-
-vamos, Sherlock, que tu estas igual con John y no trates de negármelo-le advirtió el millonario.
-ella murió por que John decidió salvarme a mi ¿Cómo se supone que debo tomar eso?-
-al menos a usted no lo culpo por su muerte-murmuro Holmes ante las quejas de su igual.
-vamos, no podemos dejar que Isaac gane, no dejen que sus acciones les afecten-trato de animarlos Tony.
-le temes Anthony, temes que haga lo mismo contigo-le dijo Sherlock con cierto pesar, viendo como el castaño negaba, con una sonrisa nerviosa apareciendo en su rostro, comenzando a hablar con una voz más aguda de lo normal.
-¿Qué más podría quitarme? La persona que fue la más importante para mi término encajándome su escudo en el pecho, a quien creí mi familia termino por abandonarme, mi relación con Pepper la arruine, mi imagen termino por volverse la de un traidor que ahora hace todo lo que el gobierno quiere ¡termine poniendo a un niño en peligro por ir tras Steve!-
-alto, espera-le pidió Sherlock, compartiendouna mirada con Holmes, donde se veía que ambos concluían en lo mismo-Él ya lohizo-
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