Jisoo sintió como le temblaba el cuerpo una vez que subió al auto de Jin y este la comenzó a llevar a la escuela.

Era una mezcla de terror y de emoción lo que Jisoo sentía por sus venas. Sus dedos no paraban de jugar entre ellos mientas veia por el rabillo del ojo como Jin con rostro serio tenía concentrada su mirada en el camino. No sospechaba nada, o eso parecía.

Apenas estacionó en la escuela Jisoo se bajó con pasos torpes evitando a toda costa la mirada de Jin. Sus manos sudaban y su corazón latía tan fuerte que temia que saliera por su garganta. Era una situación horrible, pero si no fuera porque sabía que pasaria el día con Taehyung, Jisoo estaba segura de que hubiera vomitado en ese mismo instante.

Y apenas caminó dos pasos, cuando sintió la voz gruesa de Jin detrás de ella.

--¿Podemos hablar?

Jisoo intentó buscar a Taehyung con la mirada, sin embargo no lo encontró.

--Claro.--dijo Jisoo, intentando controlar sus ansias.

--¿Sabes que lo que hice fue para protegerte cierto?

Jisoo quiso reir, estaba cansada de su actitud

--¿Protegerme de qué? Muero por oírlo.

Jin la observó con seriedad, sin atisbos de que se tratara de otra broma de mal gusto.

--Taehyung no es quien dice ser. Es una basura repugnante, igual que su padre.

Jisoo frunció los labios con cólera.

--No hables de ellos como si los conocieras.

--¿Y tú los conoces?

Jin sonrió apoyando su codo en la ventana del auto. Parecia hasta darle gracia lo segura que su amiga estaba de sus palabras.

Jisoo hizo silencio.

--¿Que es lo que sabes de él?

--El y su asqueroso padre robaron joyas costosas de mi propiedad el verano pasado.

Jisoo sintió como su estómago se revolvía al oír la noticia, más no dijo nada, porque se habia quedado sin palabras.

Jin al ver que no había reaccion alguna, suspiró cansado.

--Espero que sepas elegir bien tus decisiones.

Dicho eso, Jin encendió el motor y con algo de impotencia, salió rapidamente de su vista.

Jisoo se dió media vuelta y decidió esperar en una esquina de la entrada a que su amigo volviera. Comenzó a mirarse las manos nerviosa, pensando en las palabras de Jin.

¿Podria ser cierto? ¿El dulce chico al que conocí era nada mas un cazafortunas? ¿Un ladrón vil y cruel? Pensaba con angustia.

Pero algo en su mente no podía creer eso.

No queria creerlo.

De pronto, sintió unas manos grandes y frías tomar sus hombros por detrás y Jisoo se sobresaltó. Rapidamente sus ojos captaron la mirada intensa y juguetona de Taehyung, mientras su corazón se encogió por los sentimientos encontrados.

--¿Estas lista?

Jisoo intentó sonreír.

--Lo estoy.

Taehyung la tomó de la mano y ambos desaparecieron de la escuela.

Jisoo miró ese punto de unión mas de la cuenta y se ruborizó sin poder evitarlo. Se negaba a creer que Taehyung le gustaba, pero a esas alturas no le quedaba mas opción que aceptarlo.

Pero sus sentimientos se volvían mas complicados cada vez que recordaba las palabras de Jin. ¿Como podria ser posible que el Taehyung que ella conocia pudiera ser aquel que Jin describía como alguien horrible? Era una ecuación que no podia resolver, que simplemente no entraba en su cabeza.

Taehyung guió a Jisoo en todo momento, y para cuando se quiso dar cuenta que habian llegado a destino, abrio la boca en O sin poder creerlo. Tal fue la sorpresa que la mencionada se quedó sin palabras cuando al entrar a una casa de dos pisos se dió cuenta que era un refugio para animales.

Los perros estaban sueltos y jugueteando por toda la casa. Otros mas grandes, dormían o descansaban en el suelo. Y en cajas pequeñas esparcidas en ciertos sectores de la casa, se veían muchísimos cachorritos que apenas tenian meses de vida. Lo mismo con los gatos. También habia pájaros, conejos, loros y tortugas que chillaban desde sus pequeñas casas de jaula. Parecía un mini zoologico para animales, solo que a diferencia de uno, todos parecian ser libres y tener en claro que ese era su hogar.

Jisoo se tapó la boca con emoción. Siempre había adorado a los animales, pero en casa no le dejaban tener ninguno.

La simple imagen de verlos todos juntos allí adentro le resultaba maravillosa. Porque no parecian tristes, parecian muy animados.

--Puedes llevarte uno si quieres.--comentó Taehyung viendo como Jisoo se acercaba a un perro bulldog y le acariciaba detrás de las orejas.

Habia perros de raza como también no. Jisoo se sentía feliz con todos por igual.

--¿No prefieren venderlos? Digo, si son de raza...

Taehyung negó.

--La mayoría de estos animales poseen problemas de salud. Por eso la gente pasa de ellos.--a Jisoo la invadió un sentimiento de tristeza. No se imaginaba cuan cruel podía ser la gente--mientras tanto, yo ayudo a la señora Park a cuidarlos. Cuando puedo dono comida, ropa o dinero. Afortunadamente todos en este vecindario lo hacen.

--¿Vienes a aquí seguido?--Jisoo se sintió sorprendida por ello.

Tae asintió. Y Jisoo sintió genuina admiración por el.

--Son tan lindos... no entiendo quien no podría adoptarlos.

De pronto, un perro pequeño conocido como bichón maltes se acerco a Jisoo y la olisqueó un rato. Luego de reconocer su olor, se acostó a un lado de sus pies.

Taehyung miró al perro sorprendido.

--Parece que le agradas...

Jisoo sonrió comenzando a acariciar las orejas de aquel animal.

--La señora Park esta ocupada con las adopciones, son muchos animales y no tiene tiempo de fijarse en todos. ¿Querrías ayudarme?

Jisoo la miró confundida. No entendia que papel podia tener ahí.

--¿Como ayudaría?

Taehyung sonrió mientras se agachaba hasta estar a su lado de cuclillas, de pronto le agarró la mano y la comenzó a guiar hasta un pasillo. Taehyung se acercó a una de las puertas que tenia aquel pasillo y tomó el picaporte abriendo lentamente.

--Ella es Diana. --presentó, era una perrita de una raza cruzada, se encontraba en el suelo junto a sus cachorros que eran al rededor de ocho. Parecía débil y cansada.

Jisoo sintió pena de ella.

--Como verás esta muy cansada. Tiene muchos cachorros y no puede darle leche a todos, no le queda mucho en este momento--explicó Taehyung-- Debemos darle leche a los cachorros y evitar que se despeguen de su madre, ya que podría no reconocerlos luego por su olor.

Jisoo asintió.

--Claro, no hay problema.

--Yo te ayudaré.--Taehyung agregó--luego haremos lo mismo con los demas animales. ¿que te parece?

--Todo esto es increible.--se asinceró Jisoo--y... gracias por enseñarme está pequeña parte de ti, Tae. No sabes lo importante que es para mi, lo aprecio mucho.

Taehyung sonrió ruborizandose ligeramente, Jisoo lo imitó.

Ambos se quedaron unos segundos eternos en completo silencio y mirandose fijamente, hasta que de pronto, Jisoo rompió la conexión de miradas al ver que un recién nacido lloraba buscando la leche de su madre.

Jisoo acarició al pequeño y lo acerco al pecho de su progenitora, mientras Taehyung se alejaba para buscar los alimentos correspondientes.

La tarde para ambos pasó así. Taehyung ayudaba a que este todo en orden y Jisoo alimentaba a todo animal que veía. Se divirtió mucho viendo como un loro le decia "hola preciosa" y Taehyung fingía enojo mientras le gritaba "loro pervertido" y tapaba su jaula. También se divirtieron cuando los perros querían jugar con ellos y saltaban a la altura de sus cabezas o se agarraban de sus piernas pidiendo mimos.

Mientras tanto, el bichón maltes que habian visto antes no paró de seguir a todos lados a Jisoo, como si hubiera sido su dueña desde siempre.

Taehyung y Jisoo jamas se habian reído tanto como ese día. Y algo en Jisoo se rompió un poco al recordar lo que había dicho Jin.

Sin embargo, cuando volvió a mirar a Taehyung y lo vió acariciando dos gatos, con ese amor que solo el podia dar y era genuino, se creyó incapaz de creer en sus palabras.

Se creyó incapaz de poner los ojos en alguien mas que no fuera Kim Taehyung.