IV

─Jungkook─

Mire al cielo, era tan bello; su color, las nubes, las aves que pasaban por ahí, todo era bello. La luz del sol alumbraba mi rostro y decidí cerrar ambos ojos. Respiraba el aroma a mar, escuchaba aún con los ojos cerrados el ruido de las rocas que estaban siendo golpeadas por las olas, las risas de las personas...la tranquilidad y paz que me dio aquel paisaje fue tan maravilloso.

Hace tiempo que no venía a aquí, extrañaba estar solo, pensar y despejar mi mente de muchas cosas, una de ellas, quería ayudarme, quería estar tranquilo, quería que sepan que puedo estar sin el, que sepa ÉL que ya no es nada para mi ahora, que me lastimo tanto hasta llegar a un punto en la cual, quiero que vea en mi; si es que algún día lo vuelvo a ver, mi firmeza y seguridad, quiero transmitirle frialdad, no seré la misma persona que fui hace 2 años atrás, no seré la misma persona que una vez "amo" si es que se puede decir esa palabra, no seré su juguete otra vez, no seré débil, no seré inocente, no seré de nuevo...su niño.

He llegado a un punto en la cual, ya no puedo mas, aparte de que me lastimaron, me lastime yo mismo, varios meses tratando de insistir que por esa ventana de la casa pasaría él, rogando y diciéndome perdón, volver abrazarlo y sentirme protegido de nuevo bajo sus brazos, pero al contrario, me debilité lo demasiado y no solamente me lastime psicológicamente sino, físicamente, mis brazos y por algunas partes de las piernas estaban marcadas con cortes, rasguños y pequeñas cicatrices que creo que permanecerán ahí para toda la vida. Quedaran ahí como una mancha que no se podrá  volver a borrar.

Ahora estoy aquí, sentado cerca al acantilado, mirando las olas del mar que arrastran salvajemente las piedra y colchas que están en la arena. 

─Nose que hacer, ahora que hago...quiero ser fuerte pero, siento que no puedo─ dije nervioso

─Quiero hacerme notar, quiero a mis amigos de vuelta, quiero a mi yo del antes─ levante mi rostro, me puse de pie y volví a elevar mi voz

─Quiero ser el Yo de hace años, quiero de nuevo mi vida, quisiera nunca haberlo conocido, quisiera no haber huido de casa, quiero estar con mi familia, como desearía de que no se hubiesen ido de este mundo, los extraño...extraño a mis padres, extraño a mi hermana menor, extraño...─ sentí mis ojos cristalizados, quería quitar todo mi enojo y tristeza que tenia dentro y parece que pude lograrlo

─EXTRAÑO TU ÚNICO VERDADERO AMOR Y CARIÑO MADRE ─ las lagrimas no demoraron en salir y seguí gritando ─PORQUE TE FUISTE Y ME DEJASTE SOLO, NO MEREZCO ESTO, NO MEREZCO SER LASTIMADO, MAMÁ, YO...QUIERO SER FELIZ─ mis piernas no soportaron mas mi peso y cayeron, el piso era rocoso, me movía de un lugar a otro sin parar, quería golpearme, quería lastimarme con algo, así era la única manera en poder quitar mis mas ganas de llorar y, herirme, quería algo.

Pero durante un mal paso al levantarme caí...

Caí

Caí

Caí

Caí

y caí...

Hasta sentir el frío que trasmitía el agua, era como yo, por dentro, algo también se había congelado, al menos alguien me entendía, al menos alguien entendía como me sentía

.

.

.

Como estaba mi corazón.

.

.

.



Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top