¿Cuándo fue la última vez que lloraste delante de alguien? ¿Y a solas?

—Pregunta fuerte —dice el actor haciendo una mueca.

—¿Seguro de responder?

—Sí, por que sé que tú también lo harás —afirma Evans —. Hace menos de un año, había terminado mi última relación y fue un poco tormentoso el proceso, no suele ser así, pero en esta ocasión tuvo un mal desenlace y empecé a cuestionar si de verdad estaba hecho para compartir mi vida con alguien; mi hermano Scott estuvo para mí al igual que mi madre.

—Suenas demasiado unido a ellos -murmura la joven acariciando el dorso de la mano de Chris.

—Lo soy, preciosa —dice él —. Y la última vez que lloré solo fue hace como un mes, estaba sobrecargado de trabajo, algunas cosas me salieron mal y simplemente colapsé, aunque más bien, saqué toda esa presión en forma de llanto -comunica el actor con una mueca rara.

—Bien, la última vez que lloré frente a alguien fue hace como un año, estaba de visita en casa de una amiga cuando desgraciadamente nos notificaron que había fallecido uno de sus primos, este chico era una de las personas más dulces que podrías conocer —le dice ella recordando a aquel joven —, tenía una vida por delante y simplemente un día se apagó, le dio un infarto fulminante y murió en su casa.

—Lo lamento —dice Chris con sinceridad, toma la mano de Rose y besa el dorso de esta con delicadeza.

—Gracias —le responde —. Y la última vez que lloré sola fue hace semana y media, fue por el resultado de uno de mis pacientes frecuentes, pensaban que el cáncer había sido erradicado, sin embargo, hizo metástasis y el pronóstico empeora —murmura la chica recordando aquel momento —. Su familia quedó destrozada y tuve que mantenerme fuerte ante ellos, les brindé palabras de aliento y me retiré del cubículo. Apenas si tuve tiempo de encerrarme en un baño a llorar por lo injusto que se me hizo que una persona joven tuviera tantas dificultades.

Rose mantiene un semblante triste, probablemente recordando lo que sucedió aquel día. De nuevo los brazos de Chris la rodean en un intento de reconfortarla, lo cual consigue casi de manera instantánea, pues la chica percibe aquella calidez y protección al sentirse en los cálidos brazos del actor.

—Eres un ser humano precioso, Rose —dice él con sinceridad.

—Puedo decir lo mismo de ti —responde la chica alzando su mirada hacia los ojos de Chris.