Día 27: Un viento helado
Diclamer: Los personajes de Hetalia no me pertenecen su dueño es Hidekaz Himaruya
Nota: Disfruten *3*
Nota x2: Ruspru* Fantasmas así que °-°
Nota x3: Oxana es Ucrania 2p, Aleksandra es Bielorrusia 2p y Aleksei es nyo Bielorrusia *u*
***
La primera vez que la señora Oxana vio al general Braginsky supo inmediatamente que sería el padre de sus hijos.
Era noviembre del 69, una de las tantas veces que recolectaba madera para la chimenea sus ojos azules se encontraron aquellos ojos color gris sin rastro de alma. Su suave mano rozando aquellas manos tan callosas era tan reconfortante.
Solo tuvieron que pasar varios meses para que se casaran y esperaran a su primer hijo o hija. Cherníhiv siempre fue un lugar importante para Oxana, que su primer hijo naciera en Cherníhiv era algo que la hacía feliz.
—Hermano— susurro Katyusha débilmente postrada en cama —No hables Katyusha reten fuerzas— dijo Iván sentado en la orilla de la cama cepillándole su cabello —Te dije que no bajaras a las calderas pero aun así me desobedeciste— comento el ruso con una débil sonrisa.
—Я... мав... холодний— respondió la ucraniana con dificultad
La puerta fue abierta mostrando a Gilbert quien traía consigo una bandeja de plata donde traía un plato de borsch —Vamos Iván ella estará bien— decía el albino sobando la espalda de Iván —Lo sé pero es mi hermana no la puedo dejar así— respondió Iván triste.
La pareja se fue del edificio minutos después no sin antes dejarle una pequeña tarea a Alfred.
—Alfred quiero que cuides a Katyusha— ordenaba el ruso en la habitación del menor —Quiero que la cuides, ella se quemó la espalda en las calderas por lo que está muy débil— hablaba Iván mientras observaba la ventana —Si, yo soy el héroe puedo cuidarla— respondió Alfred con una sonrisa —Está bien pero Feliciano ni Bella y Elizabeta no estarán— dijo Iván mientras salía de la habitación —Que...— susurro Alfred con miedo.
Alfred se quedó en la sala mirando la televisión ¿y si había un fantasma? Se preguntaba el menor abrazando sus rodillas, tal vez Katyusha quiera algo pensaba Alfred yendo hacia la habitación de Katyusha.
Al entrar a la habitación noto inmediatamente que Katyusha parecía un muerto mirando a la nada —Katy...— llamo Alfred intentando entrarla en razón —Mmm mande Alfred— susurro la chica sentándose en la cama cuidadosamente —Déjame te ayudo— hablo Alfred ayudándola.
—¿Quieres ver tv?— pregunto Katyusha relajada —Si— respondió Alfred apenado sentándose en los pies de la cama tan pronto como la caricatura había empezado Alfred se quedó dormido.
**
Lo primero que noto el estadounidense al abrir los ojos fue que la habitación estaba más oscura que de costumbre al voltear a ver a la ventana se dio cuenta que apenas había oscurecido, se levantó y miro a Katyusha que estaba durmiendo.
Al salir del cuarto y notar que nadie estaba fue a recorrer cada habitación por "curiosidad" hasta que su "curiosidad" fue tan grande para abrir la puerta que conducían al cuarto de calderas.
***
La primera vez que la señorita Oxana descubrió la infidelidad de su esposo, lloro y se ahogó en un mar de alcohol.
Era invierno del 77 cuando supo que su esposo tenía otra mujer de la baja sociedad y además tenían un hijo bastardo.
Más fue su desgracia cuando se lo confirmo trayéndole a ese bastardo dos años después de su nacimiento.
De ahí en adelante su único amor fue una buena botella de vodka para aliviar sus penas.
***
—Que frio hace aquí— murmuraba Alfred mientras se abrazaba a sí mismo —Creo que debo volver— dijo Alfred para empezar a caminar por donde vino, dolor en sus piernas por las heridas le empezaron a doler haciendo que dejara de caminar.
El dolor en donde estaba la marca de la mano y solo al ver una silueta en la esquina corrió aunque le doliera las piernas.
Entre corriendo hacia el cuarto de Katyusha saltándole encima sacando un quejido de parte de la mujer —¿Qué paso... Alfred?— cuestiono débil la chica —¡Vi una silueta! ¡Era grande y fea! — gritaba el menor asustado —Ve-vente aquí— Katyusha palmeo el lado izquierdo de la cama débilmente, Alfred se acostó a su lado sintiendo como Katyusha lo abraza y lo atraía a su costado.
***
La primera vez que Katyusha vio a su nueva madre fue cuando descubrió que tenía una tercera hermana en un pequeño pueblo cerca de Minsk donde su padre vivía.
Acompañado de su pequeño hermano Iván de apenas tenía diez años y ella diez y siete, con la última bendición de su madre antes de morir por una sobredosis de alcohol pidiendo que encontraran un buen lugar para vivir. Claramente se había convertido en madre a los diez años en el momento en el que su madre los había descuido por una botella de vodka.
Con una buena suerte llegaron a aquel pueblo y a la casa sabiendo que no serían recibidos con los brazos abiertos.
**
—¿Estás seguro de esto Iván?— pregunto Gilbert comiendo su sopa de champiñones junto a Iván en lujoso restaurante de Moscú —Claro solo tú y yo en una casa en el bosque donde nadie oiga tus asombrosos gemidos— contesto Iván con picardía haciendo sonrojar más al alemán.
—Calla que nos podrían oír y nos pasarían cosas peores— hablo el alemán sonrojado como un tomate —Iván yo quería preguntarte algo— empezó Gilbert volteando hacia otro lado —Mande conejito— dijo el ruso con un obvio desinterés notorio Gilbert respiro profundamente y pregunto —¿Qué soy para ti?— Iván lo miro perplejo, tomo su mano y con una suave voz contesto.
—Nada.
Los ojos del albino se abrieron lentamente volteándolo a ver con aquel rostro que tanto le encantaba terror. —Yo...— Gilbert retiro su mano y agarro su mochila yéndose de ahí —Realmente se la creyó— murmuro Iván tomando un trago de vodka.
Gilbert llego tan rápido como pudo al edificio solo para recoger sus cosas e irse tan pronto como pudiera a Alemania. Al tener su maleta lista camino por los pasillos pero un ruido en el cuarto de las calderas lo alarmo.
Bajo cuidadosamente por las escaleras aunque no tuviera luz, hace tanto frio pensó el albino, camino por todo el cuarto con cuidado de acercarse tanto a la caldera, tal vez sean ratas analizo Gilbert. Camino de vuelta para las escaleras una botella de vodka tirada haciendo resbalarse y para no caer de espaldas a la caldera hirviendo se sostuvo accidentalmente de su lado derecho a la caldera quemándole parte del costado derecho, su cadera y parte de su brazo junto a su mano.
Un grito de dolor se oyó por todo el edificio despertando a las únicas dos personas que se encontraban ahí.
—Alfred— llamo la ucraniana débilmente —Mande Katy— dijo Alfred con temor —Qui-quiero que va-vayas a las... cal-deras— pidió la ucraniana con dificultad —¿Por qué?— pregunto Alfred intrigado —Gilbert...— susurro la chica apuntando a la puerta.
***
La señorita Aleksandra era una hermosa mujer de cabellos rubios tan rubios que opacaban al mismo sol de su pueblo, ella implantaba clases de ballet en su pequeño pueblo cerca de Minsk junto a su marido de nombre Aleksei.
Un día en especial se enamoró de aquel general en un bar a las afueras de su ciudad. Tanto así que se terminaron convirtiendo en amantes.
Su esposo al enterarse de que su esposa estaba embarazada lo lleno de tanta alegría pero al saber que ese hijo o hija no era suyo se llenó de tanto odio y se marchó sin dejar rastro a Aleksandra no le importó solo quería estar con su querido general invierno.
***
Alfred arrastraba a duras penas el cuerpo inconsciente del albino hacia el cuarto de Katyusha, no le importaba donde estaba quemado debía llevarlo con Katyusha lo más pronto posible.
Lo dejo en la alfombra que se encontraba enfrente de la cama —Katyusha ya lo traje ¿ahora? — pregunto nerviosos el menor —Moja... la herida— dicto Katyusha con los ojos cerrados Alfred rápidamente lleno un vaso con agua fría y vertió el agua por las herida haciendo despertar a Gilbert de golpe —¡SUÉLTAME!— grito el alemán con enojo y miedo.
—Señor Gilbert manténgase quieto o sino le dolerá más la herida— pedía Alfred angustiado —Loslassen— ordenaba el alemán —Ahora desinfecta la herida— dijo Katyusha Alfred desinfecto cuidadosamente sacando varias quejas de parte del albino.
Al final de curar a Gilbert termino cediendo al sueño y durmió tal vez de tanto gritar y patalear —¿Le pusiste la compresa?— cuestiono Katyusha ya un poco mejor —Si— respondió Alfred asintiendo a la vez —¿Le dejaste una almohada?— volvió a preguntar Katyusha —No— respondió Alfred avergonzado agarrando la almohada de al lado de Katyusha y poniéndosela a Gilbert.
En un rato de paz y tranquilidad donde Alfred y Katyusha oían música de los 80s y contando grandes historias donde involucraban a Katyusha en una disco.
La puerta fue abierta revelando a un medio ebrio Iván, sus ojos se enfocaron en el cuerpo de Gilbert tirado en la alfombra con una almohada apoyando su cabeza—Que diablos...— susurro Iván impactado —Gilbert se cayó y se quemó... en las calderas— respondió Alfred nervioso. Iván entro y cargo a Gilbert al estilo nupcial y se lo llevo a su habitación sin decir otra palabra.
—Ni pregunto por usted— comento Alfred hacia Katyusha —Solo... ha querido a una persona en esta vida y no creo que sea yo— hablo Katyusha calmada —¿Y esa persona es...?— pregunto Alfred intrigado –No lo sé- respondió la ucraniana suspirando.
En la habitación del ruso Iván acostó suavemente a Gilbert —Oh mi preciado conejito— dijo Iván pasando su mano por la mejilla del albino.
—Iván...— susurro débilmente Gilbert —Oh Gilbert ¿por qué entraste a las calderas?— pregunto el ruso curioso —Un ruido...— respondió suavemente el albino —¿Y por un ruido te quemaste?
—¿Por una amerikanische schlampe me dejaste?— cuestiono Gilbert con enojo —Conejito ya te lo he dicho Emily solo era alguien no tan importante como tú— contesto Iván con una sonrisa —Claro y yo soy el rey de Prusia— dijo Gilbert sarcástico —¿Enserio me reclamas por eso?— pregunto entre risas el ruso acostándose en su pecho
—Sí, te reclamo por eso y por decirme que no era nada para ti— reclamo Gilbert avergonzado —Que lindo— dijo Iván con una sonrisa.
***
La primera vez que Natalia vio el terror fue el día en el que su madre fue asesinada a manos de aquel hombre llamado padre, escondida entre los sillones de la oficina de su madre.
Al ver aquel cuerpo del que le dio la vida siendo apuñalado una y otra vez hacia que cerrara sus ojos fuertemente y se tapara sus oídos con las manos.
Cuando se lo conto a Iván el simplemente le sonrió y la escondió debajo de su cama para que no viera como le daba un fuerte golpe con una tubería vieja y oxidada a su querido padre.
***
—No hay ningún fantasma ahí enano deja de chillar— decía Natalia desde el teléfono de Feliciano —¡CLARO QUE SÍ ADEMÁS ES GRANDE Y TIENE UN TRAJE COMO EL DE LOS MILITARES!— grito Alfred asustado la llamada corto de pronto alarmando aún más a Alfred.
—Alfred no existen los fantasmas— decía Feliciano sentado en su cama cepillando el cabello de Alfred con su mano buena —Yo lo vi Feli era grande y tenía un bigote— hablaba Alfred intentando convencer al italiano.
—Si existen yo mismo lo vi.
Aquellas palabras hicieron que ambas personas voltearan a ver a Gilbert que se apoyaba en el marco de la puerta. —Ya vez Gilbert si me creé— reprocho Alfred —Gilbert deja de asustar a Alfred luego vendrá corriendo porque se echó pipi en los pantalones— comento Iván pasando a su lado.
—¡Ya no hago eso!— grito Alfred avergonzado
—Claro campeón— dijo Iván casi llegando a la puerta.
**
2/4
Cherníhiv : es una ciudad en Ucrania :D
Traducciones:
Я... мав... холодний: Yo... tengo... frió en ucraniano
Loslassen: Suéltenme en alemán
amerikanische schlampe: Perra americana en alemán
Bueno bye***
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top