-Chile ¿podrías quedarte quieto? - pero Chile ni siquiera lo escuchaba, seguía moviéndose con nervios por la habitación mientras Corea del Sur lo seguía con la mirada, se paró de su asiento y fue hasta el latino, lo tomo por los hombros haciendo que lo viera -debes calmarte, todo saldrá bien-

-¿Como estas seguro? A lo me mejor no quieren...-

-Chile, cariño todo saldrá bien, aceptaran el tratado y en menos de lo que imaginemos estaremos planeando nuestra boda-

El latino bajo por un momento la mirada antes de volver a concentrarse en el coreano y en aquella expresión tranquila en su rostro -... ¿me das un besito? -

-No debes preguntarlo- inicio un beso un poco tímido para luego convertirlo en algo tierno, Chile lo abrazaba por el cuello, soltaban algunas risas sin dejar de perder el contacto de sus labios.

-¿Ya te sientes mejor?

-Ño, quielo oto-

-Jeje creo que te estoy consintiendo mucho- volvió a besarlo pero Chile se le ocurrió otra cosa, lo empujo hasta el escritorio sin apartar los labios, solo cuando pareció chocar con este se separó -¿qué haces Chile?-

-¿Podemos una rapidita?-

-No es buena idea, lo notarían-

-Porfa tú me relajas y disimulo bien... amor~-

Evitaba la mirada de súplica del latino, siempre terminaba cayendo en sus encantos o era muy débil como para negarle algo a su pareja-Chile no es bu-...-

-Disculpen- rápidamente se separaron haciendo parecer que Chile le estaba leyendo unos documentos mientras Corea escuchaba apoyado en el escritorio.

-Señor Corea ¿interrumpo? -

-No, descuida ¿sucede algo? -

-Si, la reunión comenzara en 5 minutos-

-Ok ya vamos, gracias- esperaron a que se fuera para ambos ponerse a reír, no tenían claro si alcanzaron a verlos en aquella pose comprometedora, Corea aclaro su garganta para ver al chileno un tanto serio -debes controlarte Chile, aun no podemos hacer publico lo nuestro, no hasta tener la aprobación- para el era importante, era parte de su cultura, así como antes había pedido la aprobación de su hermano como también de la familia del chileno.

-Oh vamos también querías, por cierto, te vei' entero rico así serio- lo jalo de la corbata robándole un beso -entonces vamos~- lo soltó para adelantarse donde se llevaría a cabo la junta dejando a un Corea completamente rojo y apenado porque el latino tenía razón. Rápidamente se acomodo la corbata para ir tras el chileno.

-Camina rápido, tu mismo me dijiste que debemos ser puntuales- acelero el paso para poder alcanzarlo, al llegar a su lado noto como leía nuevamente sus apuntes, le impresionaba como podía pasar de un estado de animo a otro en tan solo segundos.

Antes de entrar al salón de juntas Corea del Sur lo detuvo, lo acorralo contra el muro, dio un vistazo rápido, no había nadie, volvió a mirar al chileno -sur hay que entrar-

-Lo se pero quiero un popo-

-...pfff ¿un qué? - intentaba aguantar la risa, pero la palabra no ayudaba a la situación -un popo tuyo- le tomo la barbilla acercándose a los labios del chileno quien lo abrazo por el cuello estoy seguro de que lo dijiste a propósito no~-

-Tu si me conoces- sonrió levemente seguido de besar a Chile, le tomo de la cintura apegándolo mas a él, de apoco iban profundizando aquel beso dejando en claro segundas intenciones. Al separarse juntaron sus frentes sonriendo.

-Después de la reunión ¿vamos a mi casa?-

-Ya... nos tomamos unos traguitos-

-Perfecto~- se dieron un corto beso, se arreglaron sus vestimentas que se habían desaliniado un poco -no se si eres bipolar o te ando llevando por el mal camino-

-¿Por qué lo dices?-

-En tu oficina me regañaste y ahora tu eres el que anda exhibiendo lo nuestro-

-Creo que corrompiste a esta pobre alma inocente~ jajaja- Chile rodo los ojos para luego reír junto con el coreano, pero no podían seguir eternamente así, ya debían entrar a la reunión. Sur abrió la puerta dejando entrar primero al chileno seguido de él, los demás ya se encontraban en sus respectivos asientos.

Luego de los saludos cordiales, ambas representaciones tomaron asiento uno al lado del otro, la reunión la llevaría a cabo principalmente las personas que representaban a los gobernantes de cada nación, pero ellos deberían intervenir si era necesario o responder las dudas que surgieran.

Chile no podía dejar de mover su pierna con insistencia, los nervios lo estaban dominando, rogaba que no dijeran algo estúpido que arruinara la posibilidad de hacer oficial la unión entre Corea y el, Sur al ver la situación en la que se encontraba su pareja tomo su mano por debajo de la mesa. Chile miro de manera discreta agradeciendo aquel gesto, pero Sur con su mano libre hacia algunas señas para comunicarse, si, Sur era sordo, una consecuencia de la guerra ocupaba dispositivos que lo ayudaban a escuchar los cuales usaba principalmente cuando estaba en público, pero para Chile no era suficiente, cuando noto que se comunicaba más con señas por lo que se esforzó en aprender y así comunicarse con Corea cuando ellos quisieran.

Para ambas naciones la reunión avanzaba muy lenta, discutían punto a punto hasta llegar a un acuerdo. Sur se estaba aburriendo, no comprendía de la demora si el mismo había leído el tratado y discutido antes con su gente, llegaba a tararear alguna de las canciones de su gente en su cabeza como entretención. Chile por otro lado volvía a mover la pierna y con sus dedos golpeaba su rodilla

-Chile, todo está bien-

-No, Sur... no lo está... quizás nos apuramos en esto- termino de mover sus manos. Aparto la mirada, no quería terminar discutiendo con el coreano.

Frustrado por la situación, Sur poso su mano en la pierna del chileno, daba leves caricias intentando volver a tener la atención de su pareja pero nada por lo que de apoco fue subiendo esas caricias hasta llegar a su entrepierna sorprendiendo al latino, dio un pequeño salto en su asiento llamando la atención de los demás presentes -¿sucede algo señor?-

-Eh no, l-lo lamento... no podía mover la silla jejeje- lo miraron por unos segundo para volver a retomar la conversación -saca la mano de ahí- soltó entre dientes, miraba por el rabillo de su ojo la expresión calmada de contrario, aunque su mente no dejaba de frotar contra el miembro del chileno que poco a poco comenzó a despertar.

-Solo intento ayudarte, quédate quieto- desabotono el pantalón, bajo el cierre y sin pedir permiso introdujo la mano tomando el miembro del latino quien ahogo un gemido y tosió para cubrirlo, intentaba quitar la mano intrusa, pero este solo estimulaba mas para conseguir una erección.

Chile entrecerró los ojos, se mordía el labio inferior, movía sus pies intranquilo. Sur se acerco hasta quedar apegado a el -relájate ~-

-C-como me voy a relajar... pervertido- luchaba por no soltar algún ruido obsceno, sus manos descansaban sobre sus rodillas enterrando las uñas sobre la tela del pantalón.

Sur seguía moviendo la mano de manera lenta, un movimiento simplemente tortuoso para el chileno. Corea del sur sentía como caía algo húmedo en la palma de su mano, era el líquido preseminal que comenzaba a salir

-Chile ¿qué opinas del cambio que proponen?-

-E-eh...- daba pesadas respiraciones, por su bandera no era posible observarlo bien, pero sentía que su cara ardía.

-¿Se encuentra bien? -

-S-si a s-solo tengo calor- rogaba internamente para que sur se detuviera pero parecía disfrutarlo -disculpen pero quizás podemos hacer lo siguiente...- continuo hablando el coreano, no movía su brazo pero si los dedos que recorrían el falo del latino provocando escalofrios recorrer por su columna ante aquellos suaves toques que hacia con las yemas de los dedos contra su pene- así ambos ganamos ¿no lo crees Chile?- apenas pudo asentir ya que nuevamente su pene era rodeado por la mano de Sur quien presionaba de manera leve -bien, así será-

Chile estaba llegando al límite, pero no dejaría que su pareja se saliera con la suya por lo que acerco la cola a la cintura del contrario introduciéndola por debajo de la ropa notando que también tenia una erección. Sur solo abrió los ojos mientras Chile intentaba evitar poner lo en blanco por el placer.

Así en plena reunión ambas naciones se estaban entregando a la lujuria. Sur se había soltado el pantalón, le encantaba la sensación que le provocaba sentir la cola de Chile rodeando su miembro mientras lo masturbaba.

-Creo que debemos tomar un receso ¿qué opinan señores?- ambas naciones se les notaba extraño, Sur sobre todo que de la nada comenzó a sonrojarse -s-si a-adelántense por favor, debo hablar un tema con Chile- los debas intercambiaron miradas, asintieron marchándose dejando solos ambas naciones.

-Ah~ por la cresta~ ambos se dejaron caer sobre el respaldo de las sillas- has aguantado bien cariño~-

-¡Callate! Ah~ vo te haci el bueno nomas, pero eres un cochino-

Había hecho una mueca de dolor para volver a sonreír de manera coqueta -primero no grites, los audífonos son sensibles y segundo no veo que te desagrade- Chile soltaba aquellos gemidos que llevaba reprimiendo pero ahora quería más, quito la cola de la erección del coreano- ¿Por qué te detienes?-

-Pon el seguro- apretaba las manos sobre la silla, apenas lo miraba, Sur hizo caso, camino a la entrada cerrando con seguro sin importar que se veía su erección salir de su pantalón, volvió donde el chileno quien se había quitado tanto sus pantalones como su ropa interior.

-Chile~-

-Siéntate~- se bajo el pantalón antes de obedecer aquella orden. Chile se posiciono sobre su regazo y en un movimiento se autopenetro quedando sentado sobre el regazo del asiático

-Ah Chile~ t-ten cuidado o te vas a lastimar-

-N-no hay ti-tiempo será una rapidita- Se sostuvo de los hombros comenzando a saltar sobre el regazo de Corea.

Sur no se quedaba atrás, tomo de nuevo el miembro del chileno masturbándolo con rapidez, de vez en cuando presionaba el falo haciendo que soltara mas gemidos. Se besaban con intensidad, sus ropas desalineadas, Chile saltaba más rápido mientras Corea lo masturbaba -Amor~ voy a- a...-

-Yo igual, pero tú no-

-¿Cómo?- Sur tapaba la punta del pene con su pulgar sin soltar su miembro impidiendo correrse al latino mientras él se corrió en su interior, apretaba sus manos sobre los hombros del contrario arrugando la tela de la camisa -Sur~ porfa d-duele-

Sur se puso de pie por lo que Chile se abrazo de piernas y brazos apegando sus cuerpos, sus músculos daban algunos espasmos, fue dejado sobre el mesón con Sur sobre el -q-que haci-

-No pienso permitir que arruines tu ropa- le dio un corto beso, salió de golpe del interior del chileno causándole un escalofrió. Bajo a su pene, aparto su mano, lo introdujo en su boca, basto unas cuantas chupadas para que Chile se corriera, su espalda se arqueo contra la mesa, presionaba al coreano entre sus pierna quien se apegaba mas a el tragando el semen del latino.

Espero hasta que terminara para retirar el miembro de su boca -debemos arreglarnos volverán pronto-

-D-si ah eri un ctm pero te amo- Corea solo rio por ello. Ayudo al chileno a poder levantarse, se arreglaron la ropa y se aseguró de no dejar rastros de lo sucedido.

-Si, estaban extraños- los políticos entraron con algo de duda, no habían visto salir a las representaciones pero se sorprendieron al ver ambas naciones en sus puestos aparentemente jugando -¿señores todo bien?-

-¿Mm? si solo le enseño un jueguito a Corea- sonreía con evidente inocencia, quien lo acompañaba se acerco a ver de que juego se trataba, preocupándolo un poco al ver las muñecas rojas en Corea del Sur -se-señor Chile ¿no creo que es un juego un poco doloroso?-

-Na este aguanta bien ¿no es así? -

-S-si- jugaban al cachipun chirlito e iba perdiendo por lo que en cada ronda Chile parecía golpear con mayor fuerza contra la piel del coreano, era un castigo que le daba por lo de hace un rato.

-Bien... sigamos con la reunión- ambos asintieron, se sentaron correctamente, Chile toco el brazo de Corea con su cola y bajo la mesa comenzó a mover las manos. Corea sonrió apenas asustado mientras Chile le hacia de una manera tétrica "vuelve hacerlo, te corto el pico y te lo hare comértelo como la sopa, mi amorcito" fue su amenaza.