-Jajaj te dije que lo pasaríamos bien-

-Tenías razón lo debo reconocer- ambas naciones entraban al hogar totalmente empapados, por correr bajo la lluvia pero eso no quitaba la sonrisa de sus rostros- padre hemos llegado- pero dentro solo era silencio, recorrió el lugar sin dar con la presencia del mayor.

-¡Second ven!- grito el chileno desde el salón, apenas apareció le entrego un sobre que tenia su nombre escrito en el -gracias- lo tomo entre sus manos, lo quito del sobre y comenzó a leer la carta, Chile curioso se gano a su lado, reconoció la letra, era de su maestro Prusia.

-¿Paso algo?-

-Tuvo que ir a una junta con unas representaciones, se disculpa por no poder seguir con tu entrenamiento... y que si te lastimo deberé rogar por mi alma- soltó un suspiro mientras Chile sonreía de lado -si que te tiene aprecio-

-Jsjsj yo igual lo quiero aunque se ponga pesao- Second dejo caer aquella carta y rodeo al chileno en un abrazo apegándolo a el -¿solo a él lo quieres?-

-A ti te amo mein Kaiser- se dieron un beso, ambos felices, llevaban unos meses de novios a espaldas del prusiano, no se sentían listos para contarlos y menos cuando Chile estaba en territorio germano por entrenamiento -ve a tomar un baño o se enfriara tu cuerpo-

-¿Me prestas algo para dormir?-

-Claro, lo dejare en tu habitación- como agradecimiento le dio un beso corto en los labios del contrario y luego se retiro por el pasillo dejando al alemán suspirando por aquel chileno.

Chile se había dado un baño rápido, no podía dejar de pensar en que Imperio seguramente seguiría con la ropa empapada. Al entrar al dormitorio se sorprendió al ver al dueño de sus pensamientos de espalda a la puerta -¿Second?-

-Oh Chile ¿ya terminaste?, te traje algo de ropa, pero no sé si... te... quede- al girarse su mente no daba crédito a lo que veía, frente el Chile estaba semi desnudo apenas cubierto por una toalla que se sujetaba por la cintura. Inconsciente se acerco quedando a solo centímetros del chileno -¿Kaiser?-

-Creo que buscas provocarme- lo tomo de la cintura y sin pedir permiso planto un beso en los labios de un chileno confundido, no estaba provocando, pero le gustaba ese beso, era mas caliente, mas decidido, le sujeto por las mejillas dejándose llevar, sus lenguas se daban pequeños roses.

Se apartaron dejando una imperceptible línea de saliva que los unía, ambos avergonzados se miraron por unos segundos hasta recobrar la conciencia- ¡lo siento! No debí... ¡Mejor iré a bañarme permiso! - paso por el lado del chileno cerrando la puerta tras de el -mierda ahora no podre quitarme esa imagen de la cabeza-

Chile seguía de pie, con la yema de los dedos acariciaba sus labios recordando aquel beso y el sabor del contrario -¿qué cresta fue eso?- una corriente de frio recorrió su cuerpo estremeciéndose, un recordatorio que aun se encontraba solo con la toalla -chucha- se apresuro a ir hacia la cama y colocarse el pijama que le dejo el alemán.

Imperio alemán no sabia cuanto tiempo llevaba en la tina, de apoco el agua comenzaba a enfriarse, sus brazos descansaban en los bodes de la bañera y su cabeza estaba hacia atrás con la vista fija en el techo pero sus pensamientos estaban en Chile, a su mente venían una y otra vez la imagen de el semidesnudo, su imaginación se abrió paso, distorsionando la escena e imaginarse en otras situaciones provocando que el alemán comenzara a sentir calor -Chile~- su voz salió mas ronca y casi que en un jadeo, bajo un momento su vista notando como se le estaba formando una erección -mierda-

Había tardado mas de lo esperado, rogaba que el chileno hubiera permanecido todo ese tiempo en su habitación de lo contrario no podría verlo a la cara y mas cuando tuvo que usar su imagen para ocuparse de su problema

-¿Recién saliste Kaiser?-

-¿Uh? ¡Chile! - frente a él estaba el latino quien parecía nervioso- p-pensé que estabas durmiendo-

-L-Lo estaba pero desperté con sed y fui por agua- no lo estaba mirando, evitaba a toda costa hacer contacto visual con el alemán- ¿Chile?-

-¿Si?-

-¿Sucede algo?- negaba con la cabeza aun sin verlo de manera directa- bueno descansa- Pasaba por su lado con la cabeza agacha por lo que le agarro de la muñeca impidiendo se escapara, jalo de el llevándolo a la pared acorralándolo -¿qué sucede Chile?-

-Nada Kaiser-

-Liebe me estas evitando- Un tono de pena se dejo escuchar en esas palabras, palabras que provocaron que el chileno finalmente lo viera -cariño no es eso-

-¿Entonces?- Chile se sonrojo aún más aunque no era perceptible por la escasa luz del pasillo -am es que ahora tu andas desnudo- imperio bajo la vista, estaba solo en toalla, por eso el chileno no lo miraba directamente pero eso noto algo más, Chile estaba descalzo y podía observar sus piernas- ¿y tus pantalones?-

-... Me quedaban muy sueltos- subió lentamente su vista, recorría las piernas del chileno hasta sus muslos que apena eran cubiertos por la camiseta. Siguió subiendo como aquella ropa ocultaba sutilmente su figura, al llegar a los hombros podía observar parte del cuello y clavícula quedaban a la vista, evidencia de que aquella prenda no le pertenecía -Chile~- gruño, su voz era mas ronca, se acerco a su cuello dejando que su aliento acariciara su piel desnuda y los labios daban leves toques sobre este, estaba provocándolo y vaya que funcionaba

Chile se resistía a moverse, mantenía las manos apoyadas contra la pared -Kaiser que haces~- soltó un gemido ante una marca que le acababa de hacer, este solo lo miro con más deseo.

-Algo que ambos deseamos- alejo las manos del muro las cuales bajaron hacia las caderas del latino y como una bajaba de manera lenta hacia el muslo -amor~- su rostro subió hasta toparse con la del chileno quien se mordía el labio inferior para no soltar algún ruido obsceno.

Imperio se acerco a darle un beso apasionado, dejo de acariciarlo y a ciegas busco los brazos por los cuales de descendió hasta encontrar las manos del chileno guiándolas a el haciendo que lo abrazara por el cuello.

Volvió a sus muslos sosteniéndolo de aquel lugar y elevándolo por el aire asustando al chileno quien se aparto del beso y acortaba la distancia entre ambos cuerpos, rodeando sus piernas de la cintura de su pareja -¡me asustaste!-

-jaja lo lamento liebe- se dieron un par de besos entre risas y leves toques -Chile~-

-¿Si amor?- la mirad penetrante del contrario provoco que se estremeciera, podía sentir como no solo lo desnudaba con la mirada si no que su alma también, pero también como esos ojos grises podían verlo con ternura y amor -se que es incorrecto... aun no estamos casado... pero no quiero esperar más, quiero poseerte... ser el único hombre en tu vida... quiero que seas mío-

Lo apoyo contra la pared para poder continuar con sus caricias, apretaba los muslos y subió hasta sus glúteos -Kaiser ah~, no es incorrecto si nos amamos... y al igual que tu deseo estar contigo- una sonrisa se formo en sus labios los cuales no dejaban de acariciar contra la piel del chileno.

Como lo tenia contra la pared no fue difícil poder desabotonar aquella camisa dejando a la vista el cuerpo del chileno. Los ojos de imperio parecían brillar ante aquel escena

-Amor bájame-

-... esta bien- lo bajo con cuidado hasta que sus pies volvieron a tocar el piso. Chile posaba sus manos por el torso desnudo del contrario hasta llegar a su abdomen. Con sus dedos daba ciertos toque a la toalla que lo envolvían. Subió su vista para ver a Imperio que estaba con el mismo deseo que él.

-Imperio... yo no he hecho esto antes y deseo que seas el primero y quizás el único-

El alemán se agacho un poco hasta dar con el rostro del latino- lo beso con tanto amor, algunos mechones azabache caían por su rostro -Yo feliz de tal honor, mi único amor-

-Mein Kaiser~- Chile ataco primero, eran besos lujuriosos, con sus mano le arrebato la toalla al contrario dejando a la vista la erección

Bajo su vista observando aquel falo, se asusto un poco, de seguro le iba a doler y bastante, trago saliva y sin pensarlo mas se giro a darle la espalda, apoyo las palmas de las manos y parte de su pecho al frio muro. Miraba por sobre el hombro al alemán y como la camisa de dormir cubría apenas su trasero.

Impero poso sus manos en la cintura del latino, las fue bajando lentamente hasta el trasero, buscaba provocarlo aunque el estaba maravillado de aquella escena -¿seguro? creo que seria mejor ir a la habitación ya que tu pr-...-

-Hazlo de una vez... antes que me arrepienta-

Comenzó a moverse provocando un rose entre su entrada y el miembro del contrario haciendo que soltara algunos gruñidos.

Masajeaba los glúteos del chileno a la vez que frotaba su miembro contra él. Dirigió una mano hacia la entrada del chileno y la otra la deslizo por la cadera hasta dar con el miembro de este -¡q-que haces!- miraba avergonzado como la mano de su pareja comenzaba a masturbarlo, se recargo sobre su espalda, apoyando su mentón en el compro del contrario- quiero que disfrutes liebe-

Comenzó a masturbarlo como distracción para poder introducir un dedo -ah~ Kaiser~- se tensaron sus piernas por aquel la intromisión, presionaba sus dedos contra la pared al punto que palidecía su piel -relájate-

Se encargaba de prepararlo, se aseguraría de no dañar a su amada estrella, los gemidos que escuchaba de su parte le parecían un sueño hecho realidad y quizás muy por dentro había soñado con una situación así desde que comenzó a salir con el latino -s-second ah~ no aguanto... te quiero a ti ~-

-S-si ~ tampoco aguanto- se separo de él, lo tomo de la cintura -voy a empezar- Chile solo asintió con los ojos entrecerrados, no apartaba la vista de imperio, lo deseaba con desesperación.

Fue introduciendo de manera lenta el miembro, chile elevo el mentón, sus músculos se tensaron, arañaba de manera leve el muro e incluso sus dedos de los pies se hundían sobre el piso -p-para porfa b-basta- soltaba entre sollozos, aunque lo estuviera preparando aun le era doloroso. Impero al darse cuenta se detuvo, lo abrazo y comenzó a besar la cabeza -lo lamento amor, si gustas lo intentamos otro día-

Chile alzo su vista para encontrarse con la de él, pequeñas lagrimas caían por sus mejillas- no, quiero seguir es mi culpa... lo lamento-

-No digas eso, no es tu culpa... esperemos un poco y cuando te sientas cómodo seguimos- apenas asintió, se acerco por su costado para poder besarlo. Chile aparto su mano del muro para acariciar el cabello del contrario -s-sigue... solo sigue besándome porfi- solo aun con los labios unidos. Imperio le obedeció, siguió entrando en el y ame medida que intensificaba el beso sabía que le dolía los leves tirones de cabello eran prueba de aquella.

Al introducir por completo no pudo evitar soltar un suspiro de placer, finalmente sentía a su amado, como su interior presionaba su miembro.

Chile por su parte tenia una mezcla de dolor y placer, arañaba aquel muro y unas traicioneras lagrimas rodaban por sus mejillas.

Second se recargo sobre el chileno, le daba besos en la mejilla y labios, con sus manos acariciaba desde las caderas hasta los muslos

Continuaba en esa posición intentando calmar al latino, le decía algunos halagos o lo hacía reír consiguiendo pequeñas risas de parte del chileno

El dolor iba disminuyendo, dando paso a pequeños indicio de placer cuando alguno intentaba moverse. Chile quería intentar por lo que se movió, no había dolor, por lo que volvió a mover sus caderas- ¿seguro que no quieres esperar unos minutos más? -

-No ah~- antes de separarse le dio una mordida en la oreja como provocación. Agarro su cintura y comenzó a embestir al chileno.

Entraba y salía de manera lenta, algo tortuoso para ambos, sus cuerpos calientes pedían más de aquel contacto.

Las uñas del latino se iban clavando mas contra el muro, su pecho desnudo se frotaba con este con cada estocada que le daba su pareja, el frio rose contra sus pezones hacia que permanecieran erectos  -Quiero ah~ más ah~-

-Encantado- tomo con mas firmeza el cuerpo del chileno, comenzó a moverse de manera rápida y profunda haciendo que el chileno soltara mas gemidos, pero hubo uno que resonó en la casa, no entendía, pero quería que volviera hacer lo mismo.

-Ahí amor~ te ruego ah~ ahí~- Se acerco para besarlo con desesperación a la vez que volvía a golpear aquella zona que le causaba tanto placer al chileno.

Chile bajo una mano y se la llevo hasta su miembro masturbándose, provocando más al alemán quien marcaba la espalda del contrario.

Chile gimió con fuerza, había conseguido un orgasmo al igual que correrse, se sostuvo del muro levantando las piernas quedando en puntas no tubo que esperar por Second quien ya estaba llenando su interior, sentía que su abdomen se abultaba, un calor en su interior, aunque algo incomodo.

Imperio apenas termino, saco su miembro, dio vuelta al chileno lo alzo volviendo a tenerlo entre sus brazos, chile se agarro del cuello y cintura del contrario y antes de poder decir algo estaba siendo nuevamente embestido, su frente apoyada en el hombro del alemán, las manos se pasaban abiertas por la espalda donde dejaba marcas de sus uñas, estaba totalmente entregado a su amado, como soltaba su nombre entre jadeos mientras el gemía rogando por mas dejando su cuerpo caer sobre el miembro del contrario.

Se separo un poco para ver el rostro del alemán apenas con un dejo de cordura, lo acaricio, no lograba emitir palabras coherentes, el placer no se lo permitía y solo se acerco a besarlo haciendo un choque de lenguas y dientes.

Ambos estaban pronto a llegar al orgasmo. Imperio empujo contra el muro al chileno quien soltó un quejido mezclado con gemidos, los cuadros cercanos se movian ante los constantes choques de la espalda del chileno contra el muro debido a las embestidas que el contrario le propinaba pero no sentía dolor, era solo placer lo que inundaba su cuerpo.

Finalmente se estaban corriendo por segunda vez, el cuerpo de aquel latino temblaba, estaba agotado -Ich liebe dich, Chile- le daba algunos besos cortos, chile lo abrazo y dejo su cabeza apoyada en su hombro -también te amo

Sin salir del interior del chileno se fue caminando a su dormitorio. Al llegar acostó al chileno con delicadeza, salió de el y se acostó a su lado, lo abrazo de la cintura y lo apego a su pecho, acariciaba su cabello mientras veía como se iba durmiendo entre sus brazos.

La mañana había llegado, no se dio cuenta cuando se durmió, miro a su lado y seguía durmiendo Chile -No fue un sueño...- lo abrazo haciendo que el contrario se quejara -ya déjenme...- abrió con pereza y lo primero que vio fua al alemán sonriendo de lado -buenos días estrella-

-Buenos días, amor- rodeo el cuello del contrario, con lentitud se acerco a darle un beso en los labios -¡agh! Me dolió tonto- lo había movido para atraerlo a el pero el cuerpo del chileno estaba demasiado adolorido -disculpa cariño-

-Descui-...-

-Miren nada más- ambos se asustaron al escuchar esa voz grave, se sentaron en la cama, aunque chile soltó un chillido de dolor- ¡padre! /¡maestro!-

-Me voy apenas un día y cuando vuelvo a mi hogar encuentro a mi hijo en la cama con mi pupilo... y un desastre en el pasillo- Chile estaba avergonzado, daba por seguro que perdería todo respeto de su maestro o que se negara a seguir entrenándolo.

-Padre puedo explicarlo-

-Silencio Imperio... Chile-

-¡S-Si señor!-

-¿Tu lo consentiste?-

-...Si señor-

-Imperio ¿Por qué te acostaste con mi alumno? -

-Porque lo amo padre, estamos hace un tiempo y sé que es incorrecto, pero quiero estar con Chile-

Prusia permaneció en silencio por algunos segundo viendo como el chileno desviaba su mirada y su hijo decido ante sus palabras, su expresión seria cambio a una sonrisa -Bien ya me estaba hartando de sus mentiras... son realmente malos en eso, deberé entrenarlos, ahora... Imperio ve a limpiar el desastre y tráele desayuno... espero que a la próxima utilices el dormitorio-

-Y Chile...- el latino alzo la mirada y como su rostro mostraba una expresión suave, una que le hacía a él hace un tiempo -bienvenido a la familia... hijo- Imperio suspiro aliviado apenas se fue su padre -creo que salió bastante bien- pero al girar a ver al chileno recibió el impacto de una almohada en todo el rostro -¡¿y eso porque?!- lo tomo entre sus manos apartándolo del rostro para poder ver a Chile quien estaba completamente rojo y apretaba los labios para evitar sonreír -Por hacerme pasar vergüenza frente a mi maestro- luego se acerco con cuidado besando los labios del alemán - y eso por ser tan lindo conmigo-