•3• Durmiendo

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Apto para todo público; situación cariñosa y amorosa.

«Pareja: Sonjet»

Y mi lado amoroso está creciendo otra vez al parecer (?) que tener pareja realmente sirve para algo XDDD

Bueno ya, votad y comentad que tal van estos shots y si creen o no se acoplan al reto y las palabras, son libres de hacer crítica constructiva (nada de ofensas que me los reviento (?))

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Durante el cuidado de su vecina, el chico azulado se dio cuenta de la presencia de alguien más en esa casa. Si existe algún familiar, ¿Por qué él no hace las labores correspondientes? Pues tal parece se trata de una típica falta de empatía y ofrecimiento.

Sonic todos los días busca la manera de ganarse algo de dinero adicional para sus compras y gustos coleccionistas con aquella Ave mayor. En un par de ocasiones le ha contado sobre uno que otro hijo que sigue vivo y claro, de los nietos. Además de su esposo que perdió la vida de manera natural por ser ya muy viejo, 12 años mayor que ella.

Total que tampoco le parece tan aburrido; suele tener beneficios de quedarse ahí a merendar o comer con la anciana; en los desalojos de cachivaches un par de artículos que le gustan le son otorgados; y así, un sin fin de varias aventuras que vive por ese trabajo que tiene a partir de medio día.

Cuando su labor estudiantil culmina ese jueves, va a la casa de su vecina a permanecer por lo menos hasta la hora de la comida. Sin embargo, al tocar y entrar en la pequeña antesala, nota la presencia de ese zoomorfo que siempre está oculto en el sitio, y por primera vez lo analiza y distingue: se trata de otra ave, un halcón de su misma edad aunque tenga una postura madura por el gran plumaje que se le impone.

-Sonic, qué bueno que llegaste, querido. -Le recibe la mayor con pasos hacia él, invitando a que pase como siempre y se sienta en casa-. No había podido presentarte a uno de mis nietos.

Una incomodidad les arriba hasta los hombros, al punto de quedarse viendo con mayor curiosidad. Eran unos completos contrarios pero a la vez sienten la cercanía por la unión de la abuela.

-Jet, un placer... -Extiende la mano con cordialidad. Realmente Sonic esperó un saludo a otra manera.

-Sonic, qué tal. -Al estrecharse las manos, la ovipera de tonos oscuros ríe y marcha a la cocina para traer alimento.

-Bueno, siéntense, vamos a merendar algo.

-Gracias. -responden los chicos al unisono, provocando un par de gestos a los tres.

-Nunca había querido salir de su cueva hasta apenas, por eso me has estado ayudando en este mes. -acusa; el ave deposita cubiertos y destapa lo que parece ser un guiso de vegetales.

-Basta, abue... -gruñe por lo bajo el joven verde, algo indignado.

-¿Qué? ¿me lo negarás? ¡Humph!

-Supongo cada quien tiene sus ocupaciones. -Sonic intenta entrar en la charla con el fin de que nadie se sienta incómodo y, parece tiene resultado.

Toman sus cubiertos y uno a uno, se sirven con paciencia en espera de su turno. Jet vuelve a conversar:

-Algo así, ocurre que...

-Cuando tenía tu edad también mudé plumaje -interrumpe la abuela-, y nunca me escondí porque parecía un pobre pollo mojado y guango...

-¡Abuela, basta! -Suprime la risa la hembra, aunque ya era tarde por estar avergonzado a su nieto. Voltea la cabeza con bastante molestia este.

Sonic sonríe disimuladamente notando los rubores del halcón. Es curioso, porque teniendo una mirada inquisitora y un rostro duro, sus facciones le parecen elegantes y hasta cierto punto, bonitas. Ni avergonzado pierde calidad.

-Entonces...¿Mudan plumas? -Curioso, expulsa el pelo azul mirándole, pero Jet no responde-. Supongo que es para que las siguientes salgan mucho más geniales...te ves muy bien.

El halago le devuelve la mirada a la mesa. El erizo mira su plato tomando una a una las verduras con el tenedor; la abuela ríe y aprueba lo que Sonic dice pero parece que ninguno de los dos machos se interesa en la palabras de la mayor, sino que se interesan uno del otro muy discretos.

-...y por eso, tenemos que ir mirando las plumas. Pero a mi querido Jet le molesta todo ello...

-No me molestaría si tan solo dejaras de hablar de ello para dejarme en ridículo.

-Oh no, no lo hago por eso, ¿Acaso negarás que no te molestó y por eso no saliste? -Asiente gruñendo. El erizo admira tan linda relación que tienen.

Los adultos suelen ser así de simples y abiertos.

Una merienda pronta, llena de regaños, reproches y una que otra broma. Cuando terminan Sonic recoge y lava los cubiertos, dejando que el ave vaya a recostarse a su sillón. El halcón le brinda un masaje en sus pies cuando el azulado lo suele hacer como parte de su trabajo.

Ya fuera de la cocina y con la manos secas, la luz de la sala es encendida por el atardecer que disminuye la luz natural; él ve a la anciana dormida y al nieto quieto en el sofá, recostado por completo. No sabe bien qué hacer o si debe de conversar... quizá y deba de hacer otra labor adicional.

-Eh, disculpa, ¿Tu abuela no ha dicho si debería de hacer algo en el jardín?

-Por la mañana regué las plantas así que, no creo -Hace una pausa, acomodándose un poco mejor en el brazo del sofá. Deja un espacio lo suficiente para que Sonic pueda sentarse-. Tampoco ha dicho algo de ello antes de dormir.

-Vale, entonces...

-¿Quieres...ver televisión? -sugiere rodando los ojos el plumífero-; no me agrada pero...

-Oh no, eh...sino voy a... -Termina bloqueado, dejando ir su trasero en el sofá y sin despegar su mirada de él. Ambos se quedan quietos por unos segundos-. Supongo que me quedaré hasta que tú abuela despierte y...

-No creo que debas seguir con esto, de hoy en adelante puedo cuidarla.

-¿Seguro? Quiero decir... -Agita su cabeza, reformulando-. Quisiera que, ya sabes, ella me lo confirmara. No es que no te haga caso es solo...ya te lo imaginas, con ella tuve el trato y todo eso...

-¿Cuánto te paga? -Esa pregunta puede desencadenar una serie de momentos incómodos para el azulado.

Y sin dudarlo, responde con sinceridad y tranquilidad:

-Solo el salario mínimo. No es para mí esto un negocio o empleo sino una distracción.

-Ella siempre me hablaba de ti en las noches -Su atención de enfoca tanto en Sonic como en Jet. El ave decide abandonar su posición recostada para enderezar su espalda sobre el respaldo-. Dijo que eras un chico agradable y generoso.

-Pues...jeje no quiero sonar egocéntrico o vanidoso pero eso me suelen decir cuando me conocen.

-Sí, eso parece. -No dice palabra más. Jet se levanta y va rumbo a la cocina. Sonic ve desde su asiento que toma agua y remueve la despensa como si quisiera algo.

Su inspección es atrofiada por el timbre de su celular. Tranquilo responde y mantiene una charla con la que es su madre. El pluma verde mira de soslayo y atiende con curiosidad su voz y lo que dice, a pesar de no encontrarle mucho sentido.

Una vez cuelga, Sonic suspira golpeando su celular contra su palma rápidamente, pensativo.

-¿Ocurre algo? -El ave regresa preguntando. Sostiene su vaso del que bebe lentamente.

-No, mi madre me avisó que irá a ver a mi abuelo en la noche. Parece que está enfermo así que...me quedaré solo seguramente.

-Vaya...

Otro silencio ciertamente incómodo. Parece que ambos disfrutan quedarse estáticos mirándose a los ojos con los ronquidos de la anciana de fondo.

-¿Quieres dormir conmigo? -El azulado abre los ojos, ciertamente estupefacto y balbucea con algo de miedo-. No lo malinterpretes tanto. Me refiero a en mi cuarto...es que solo tenemos dos recamaras así que...

-N-no hace falta, agradezco el-el gesto pero dudo que tú abuela...

-Mi abuela te estima demasiado, por ella no hay problema -Da otro sorbo a su vaso-. Y si le cuestas porque te quedarás solo en tu casa con más razón aprueba la acción.

-Bueno no...no lo sé...

-Será esta noche nada más, pero si no te parece dejemosle así...-Limpia sus comisuras depositando el vaso en el lavamanos.

-E-es que cr-creo que es...

-¿Quieres dormir ésta noche aquí, Sonic? -La abuela recobra la conciencia y tallando sus ojos, mira al erizo-. Vamos, me parece lindo que quieras tener una pijama con mi nieto...

-No es una pijamada, Abue... -reprime con voz grave, casi exponiendo un gruñido.

-Jaja lo que ocurre es que mi madre irá con mi abuelo y me quedaré solo en casa, entonces...

-Oh no, no, hijo, no me gustaría que te quedarás solo en tu casa, en ese caso quedarte aquí con nosotros. -Interrumpe y sentencia la ave con seguridad. Sonic asiente resignado y ciertamente tranquilo.

Porque la noche llega como el agua al río, pegando frío por estar cerca las temporadas invernales. El joven azulado toma prestado un cobertor que la abuela le concede con tal de que su estancia nocturna sea cómoda.

El cuarto de Jet es formal, con pocas pertenencias suyas en el ropero y tocador que tiene. Él explicó que estando de visita por un tiempo no pretende realizar cambios o algo así. A Sonic le sorprende ver un par de plumas por debajo de la colcha y en la entrada del baño pero disimula...hasta que el halcón avergonzado las quita y tira.

-Sí, no he recogido bien eso, la cama está limpia así que...

-No te preocupes... -Su voz se desvanece tras ver una foto en el mueble, cerca de la cabecera.

Lo que parece ser él y un albatros muy pegados en abrazo le hacen pensar varias cosas a Sonic.

-¿Es tú...hermano? -pregunta tranquilo. Mira a Jet queriendo notar su reacción pero es nula.

-No, mi antigua pareja, lo estimo demasiado a pesar de que haya terminado. -Su naturalidad le emocionan al erizo, es tan sorprendente oírle.

-Yo, no creí...lo siento, no quería que...

-Ey, no pasa nada. -Abre un cajón tendiendole lo que parece ser una funda de almohada-. Dejarme rellenar eso con un poco de esta.

Preparan juntos el cuarto para su estancia. Posteriormente, el pelo azul siendo tan servicial deja listo parte de la cama y hasta recoge un poco el suelo por más plumas que te topas. Jet agradece.

-Puedo preguntar por...

-¿Por mi antigua pareja? -complementa el verdoso. El erizo asiente apenado por su curiosidad-. Supongo que era lo mejor. Él era transigente.

El silencio otorga. Sonic no quiere tocar fibras sensibles más aunque por dentro tuviera ganas de vomitar palabras acumuladas...lo que termina por hacer es, recostarse y mirar el techo, viendo de soslayo como el ave quita sus prendas y se mete entre las sabanas, dándole la espalda.

La luz del pasillo es lo único que les brinda una leve visibilidad. Una que no necesitan al no observar más que, la nada.

No llega todavía la medianoche cuando Sonic ronca por lo bajo, sin sonar a tractor. Jet sufre porque es sensible al ruido cuando se trata de dormir, así que gira con mucha molestia para verle y mover por su hombro; en respuesta, recibe unos quejidos, pero todo es en vano. Cubriéndose completamente, trata de adoptar una posición fetal concentrado en su respiración pero no resulta para nada bueno.

-Tus plumas...son muy hermosas... -exhala el cobalto por lo bajo. Jet se gira, levantándose un poco para verle. Sigue dormido-...eres un ave muy linda...

No evita sonreír, dándose cuenta de lo que está pasando...y le encanta alucinar e imaginar.

-Oye -Intenta una vez más en despertarlo, zangoloteando-. Estás haciendo mucho ruido.

-Ahhh, perdón, ave bonita, ¡Buah! -Bosteza reacomodándose en la cama, girando hacia él. No abre los ojos-. Ñam, ñam~

Acaricia su cabeza y no se contiene para acarician cerca de su mejilla...cautivado, se recuesta y cubre con las sabanas para intentar dormir, admirando su rostro.

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