10° En cuatro
second venia de regreso a la casa del chileno ya que el habia ido de visitar a su hijo y nieto, llego a la casa a las doces de la noche, entro en silencio para no despertar al latino y paso lento iba a la habitación que compartía con el chileno durante el camino a la habitación pudo escuchar jadeos y gemidos proveniente de su amado, frunció el ceño con solo pensar de que lo estuviera engañando, de su bolsillo saco una pistola sin recargar aun, ¿de donde la saco? bueno ni el sabe, ya estaba al frente de la habitación y abrió lentamente la puerta para no hacer ningún ruido pero al dejarla abierta dejo caer la pistola con un sonrojo sin llamar la atención del quien estaba en la habitación.
estaba inmóvil al ver aquella escena, ¿se preguntara que fue lo que vio?, bueno les diré lo que vio fue al chileno en cuatro embistiéndose con un dildo, veía como ese dildo salia y entraba una y otra vez de aquella pequeña entrada con sigilo se acerco a la parte trasera del chileno que ni cuenta se daba de la presencia de aquel alemán, el mayor tomo el dildo asustando al contrario pero al ver que era su pareja se sintió avergonzado tratando de apartarse, pero no tuvo éxito ya que el mayor tomo sus caderas con una mano mientra que con la otra seguía embistiendo con aquel dildo.
—S-Second amor... agh~...p-pensé que i-ibas a-aquedar... AH~ en la casa de Alemania...—
trataba de hablar pero con la velocidad que usaba su amado con aquel dildo se le era imposible, el mayor ya estaba excitado se bajo el pantalón junto con su calzoncillo dejando a la vista su gran miembro, saco aquel juguete del latino quien dio un gemido agudo se acerco un poco a la parte trasera del chileno y empezó a rozar su miembro en la entrada del menor quien suspiraba y jadeaba con solo sentir el pene de su pareja.
—te estabas divirtiéndote sin mi... te mereces un castigo kuchen~—
empezó a dar embestida sin entrar aun en el menor quien estaba desesperado al sentir el miembro de su pareja en su interior empezó a mover sus caderas tratando de incitar al mayor, quien no aguanto mas y entro de una estacada asiendo que el latino soltara un sonoro gemido, el mayor empezó a dar brutas y violentas embestidas mientra que el gruñía y jadeaba de placer sintiendo las cálidas y estrechas paredes de su amor el chileno por su parte abrazaba a su almohada con fuerza mientras que lagrimas salían de su ojos por aquella sensaciones exquisita que le daba.
—K-Kaiser AAH~ mas fuerte~ aaahg~—
—oh, mi kuchen como me encanta esta posición deberías de hacerlo mas seguido aah~—
embestida aun mas con fuerza que hacia que el chileno no pueda mantenerse en aquella posición provocando que temblara un poco, provocando mas placer al contrario.
—No... sabia que podías hacer esto kuchen... pero me encanta~—
el chileno temblaba aun mas, las lagrimas del chileno y la saliva caían en la almohada por el tanto placer que recibía, second ya cansado de la posición salio del chileno y lo dio vuelta quedando frente a frente y entro nuevamente en el de una, recibiendo un gemido por aquella acción, puso sus brazos al rededor del cuello de su amado apegándose aun mas a el, mientra que el contrario empezó a morder y dejar chupones en el cuello de menor.
—Aaah~ weon por que tan brusco aaahg~—
—por que mein liebe agh~ me cambio por un estúpido juguete de plástico~—
embistió aun mas fuerte escuchando un gemido mas agudo indicándole que encontró su punto dulce siguió embistiendo en aquel lugar sin casarse ya que le encantaba escuchar aquello sonidos obscenos que salían de la boca del chileno, estuvieron de aquella manera hasta que el chileno se corrió marchando los dos torsos, el mayor se corrió sintiendo las paredes húmedas de su amado apretándolo siguió embistiendo hasta acabar por completo saliendo de su pareja lentamente escuchando un pequeño gemido por parte de este.
—n-nunca mas me doy placer solo c-cuando no estas tu... pa' la otra se más cariñoso—
—jajaja... ni que lo digas amor... aunque me divertí mucho esta noche jajajaja—
beso al menor con amor quien soltó un pequeña risa cansada después de tanta acción, se acurruco en el pecho del mayor ignorando por completo la sensación pegajosa entre ellos y de la que salia de entrada que caía de apoco en sus piernas, sin duda el pobre chileno no pudo caminar bien durante unos días.
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