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                                  [29.Fetiche]

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                                  Narradora

Odiaba tantas cosas de Stolas, que se la podría pasar toda la jodida mañana diciendo una por una cuales son, pero si algo odiaba más (aveces) era su extraño fetiche con el sexo. Su extraño fetiche con él y solo con él, no entendía porque desde un principio no se conseguido una puta para satisfacerse y dejo de joderle la puta existencia.

Pero una parte de él le gustaba pasar tiempo con Stolas, que le dediqué su tiempo y muestre su cariño y aprecio hacia el, a su extraña manera.

Ahora mismo se encontraba en la terraza tomando el té con él.

— Y dime, Blitzy ¿cómo fue tu día en el mundo humano?~

Preguntó con intención de armar una charla entre ambos. El Imp se encontraba degustando la taza de dulce té que se le había ofrecido, dándole un sorbo y dejándola en la mesa agarró un tenedor dándole un pinchazo a los bocadillos que también estaban para degustar.

— Pues tuvimos unas mierdas de  dificultades al realizar nuestra trabajo pero fuera de eso todo en orden, logramos cumplir con lo pedido.

— ¿Qué clase de dificultades?

Interrogó al oír la sola palabra de que habían surgidos dificultades en el mundo humano. No podían meterse en problemas.

— Aparecieron unos putos querubines tratando de salvar la vida de un viejo puto pero al final hicieron todo el trabajo, jaja, el solo recordarlo me seguía causando gracia.

Se carcageaba sin parar a lo que al contrario le pareció algo chistoso todo el asunto.

— ¿Cómo se llamaban?

— ¿Eh? ¿Para qué quieres saber eso? Además no recuerdo sus mierda de nombre, creo que uno se llamaba Corid pero no estoy seguro.

Se encogió de hombros, no le interesaba en lo más mínimo saber algo de esos enviados de Dios. Stolas, en cambio parecía interesado.

— Los conozco. No son exactamente ángeles y tampoco están a un nivel avanzado allá arriba, pero se podría decir que son útiles, nunca me callaron bien.

Admitió con simplesa dándole un sorbo a su té. Degustando el sabor.

— Como sea, cambiando de tema ¿te sientes bien?

Dejando el tema de aquellos querubines pregunto con intriga, degustando el sabor de la comida y llamando la atención de Stolas.

— Mejor que nunca ¿porqué la pregunta?

— Porque han pasado 4 putas horas y no haz hecho ningún comentario sexual.

Explico, un Stolas sin estar insistiendo en tener sexo cada tres puntos segundo es extraño para él.

— ¿Extrañas tanto mis insinuaciones, Blitzy?~

— Mejor no hubiera preguntado.

Dijo, entrecereando la mirada para luego tomar su taza de té y seguir bebiendola.

— Bueno, ya se hace tarde y hace ya una mierda de media hora termino la hora del té así que ya me voy.

Dijo, bajándose de su asiento a duras penas para luego dirigirse a la salida, pero antes de solo llegar a tocar la puerta una mano detuvo su andar, haciéndolo voltear.

— ¿Qué mierda haces?

Se quejó al ver como Stolas se lo quedaba mirando como si algo estuviese pensando o más bien dudando.

— Blitzy, porqué te retiras tan pronto?~

— Stolas, he estado casi toda la jodida tarde contigo, dejando todo lo demás a lado y me preguntas porqué me voy tan pronto? ¿Eres pendejo?

Insultar a alguien de la realeza no era lo más listo que uno podría hacer y menos alguien de un rango tan bajo. Pero Blitzø no Temia en decir lo que piensa a él, sabia que no le haría nada y que menos se molestaría, al menos no lo demostraría. 
Se la había pasado casi toda la tarde con el sin mencionar que estuvo llamándolo también desde el puto minuto en que abrió los ojos, dejó a todos de lado para poder pasar un poco de tiempo con el.

— Agradezco demasiado que dediques tu tiempo también en mi~ es un gesto tan tierno viniendo de ti~. Pero hay algo de lo he querido preguntarte desde hace tiempo.

Explicó, tomando al Imp por debajo de sus hombros y escuchar el objetar de Blitzø por cargarlo así.
Lo llevo a un lado de la cama sentandolo en el lugar.

— Blitzy, que es lo que sientes por mi?

Fue directo al punto, sin rodeos, después de todo Stolas era un tipo serio que le gustaba que le digan todo de frente y ya.
Blitzø, se tensó por la pregunta, nunca habían hablado de los sentimientos, menos de que eran exactamente.

— ¿A qué te refieres?

— A lo que en realidad sientes por mi.. si realmente sientes lo que yo siento hacia ti~

La mirada del Imp se encontraba en el punto fijo de una pared hasta escuchar lo último por parte del Goetia que lo hizo mirarlo. La sonrisa de él parecía cálida y sincera, a diferencia de la comúnmente estaba acostumbrado.

— Em, pues, no lose. ¿Qué es lo que exactamente sientes tú hacia mi?

Inquirio curioso de lo que tenía que decir. Le parecía extraño que alguien como él se interesase por sí, golpea su orgullo llamarse a si mismo "lo más bajo en la sociedad" pero una verdad que tenía que aceptar.
Sintió sus manos entrelasarse con las garras del Príncipe, observó como se arrodillada ante él. Como lo miraba fijamente, eso ya lo incomodaba.

— ¡Deja de putas mirarme así! ¿Qué mierda quieres?

Solto en un tono irritado de las miradas que el mayor le proporcionaba. Finalmente habló.

— ¿Qué siento hacia ti? Blitzy, lo que yo siento no podría explicártelo ya que mi corazón sabe más de lo que mente llega a entender, solo puedo decir que pasar una eternidad a tu lado es lo mejor que podría pasarme, así que.. ¿te casaría conmigo?

Preguntó, el Imp permanecía en shock, sin poder creer lo que había escuchado salir del pico de aquel Búho.

— Tu gabardina.

— ¿Q-qué?

Tartamudeo, alfin defiendo alguna palabra.

— El bolsillo izquierdo de tu gabardina, revisalo~

Tardo en obedecer "la orden" que se le indicó pero al momento de hacerlo le sorprendió encontrar un anillo dorado en él, parecía valioso y caro, si lo vendiera ganaría mucho dinero.

— S-stolas, yo- nose q- qué decir.

— Con solo decir que aceptas me harás feliz~

Sus garras acarician el Colorado rostro de Blitzø en su parte manchada de blanco se notaba más el rubor.
No dijo nada, se quedó callado unos segundos.

Sintió la oscura mano de Stolas estenderse para pisarla en su pecho, cada filosa garra fue desabotonando cada botón de su gabardina, arrojando la en el suelo, la misma mano descaradamente se fue metiendo adentro de su camisa desabotonandola también.

No hizo nada, se dejó dominar por el príncipe vio como arrojaba su corona sin importarle donde cayese, los botones dorados de su camisa también fueron desabotonando. Ambos cuerpos al estar completamente desnudos hicieron que las caricias empezaran y el calor llegase, Blitzø sintió como su cuerpo era recostado lentamente hacia la suave camaz teniendo sus labios unidos al pico de Stolas, en un beso húmedo y apasionado.

Las manos de este acariciaban todo su cuerpo, haciéndolo jadear.

— Ah~

Suspiraba al sentir los besos húmedos de Stolas alrededor de todo su pequeño cuerpo hasta bajar a su entrepierna y empezar a chuparsela.

— Ahh~ mierda~~

La mamada empezó velozmente como si estuviese desesperado por chuparsela.
Sintia su miembro mojarse, demasiado.

— Ahh~ Stolas~~

Al momento de chuparsela al Goetia, no sabia porque pero intentaba hacer la felación con toda la pasión y excitación del mundo. Stolas, parecía exagerar en los gemidos.

— ahh!~ Blitzy~~ me la chupas tan bien con esa boquita tuya~~

Sus garras se dirigieron a su rostro, específicamente a su boca, acariciandola. Miraba lujurioso como el vaivén se le era otorgado por el pequeño Imp. Este por otro lado se sentía avergonzado, no quería que lo mirase.

Finalmente se corrió en su boca, teniéndo el pene del Búho introducida en su garganta, arcadas sintió al tragarse cada gota del semen de este.
Saboreaba el sabor.

Fue puesto de cuatro, sintió la polla de su amante ser posicionada en su ano para de una sola estocada se hundiera en su culo, sacándole un profundo gemido llenos e placer.

— Ahh!~ Stolas~~ ahh~~ ah~

Las embestidas empezaron veloces, está vez el sexo había empezado por una veloz y salvaje, su cuerpo se movía con rapidez y la cama rechina un poco contra la pared.
Sentía como quebraba su interior, como su entrada era estimulada por el miembro del contrario.

— ahh~ sigue~~

Jadeaba de placer, teniendo los ojos desorbitados y la lengua saliendo de su boca babeando un poco. Tiro de su cabeza para atrás.
Odiaba pero a la vez amaba esta posición, el estar así llegaba más adentro, tocaba ese punto que lo enloquecia.

— Ah, Blitzy~ me aprietas tan bien y rico~. No me saldré hasta dejar cada gota de mi semen en ti~~

— Ahh~ no abuses, ahh~

Las estocadas siguieron aumentando de velocidad, cambiando de posiciones toda la tarde.
Disfrutando su momento.

— Ahh!~~

Gimoteo al sentir el espesa esencia de Stolas llenar su interior, mojandolo.

— Ahh~~

La noche había caído, Blitzø aún seguia en el castillo de Stolas, recostado en su plumoso y suave pecho. Ambos estaban recién despiertos, descansando pacíficamente.
El Imp disfrutaba escuchar lo ululeos que el Búho soltaba feliz y satisfecho.

— Stolas..

— ¿Si, Blitzy?

Preguntó, Stolas acariciando con sus dedos en el medio de los cuernos de este.
Parecía pensar en lo que tenía que decirle al mayor.

— Acepto.

— Mm? ¿Qué cosa?

Una sonrisa juguetona adorno su rostro. Las mejillas del imp se encontraba acariciando, admirando su belleza natural.

— Acepto.. lo que me habías dicho antes... mierda ¡acepto casarme contigo!

— Aww, Blitzy!

Un abrazo tierno y cálido junto el cuerpo de Blitzø con el de Stolas, varios poquitos tiernos y hermosos dejaba en su rojizo y bello rostro.
Se acercó a su cuello, gritando su pico en él.

— Stolas- espera no- jajja.

— Te amo tanto, Blitzy~~

— Yo también~

Susurro en voz baja pero no lo suficiente como para no ser escuchado por el Príncipe. Luego se encargaría de los papeles de divorcio con Stella, no se preocupaba, después de todo su matrimonio ya estaba hecho una mierda desde mucho antes.

— Hay que celebrar esto!~ ¿Qué te parece otra ronda mi pequeño Imp?~

— ¡¿Cómo que otra puta ronda?!

Palabras : 1730