《;;Capítulo 27🌹》
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[27.Acurrucandose]
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Narradora
Las noches de luna llena eran de aquellos días más importantes para Stolas.
Esperaba ancioso la hermosa llegada de su lindo Blitzy.
Era sorprendente para muchos como un plebeyo, un Imp, haya conseguido llamar la atención de un Goetia tan importante y poderoso, hasta para el lo era, de haberse negado en un principio termino aceptando y no se arrepintió.
Todo había empezado por una gala nocturna que había organizado para la clase alta, su esposa había conseguido artarlo ; cortésmente se había despedido por breve momento de sus invitados, quedando en tomar un poco de aire fresco salió en los jardines reales, pensando, ¿si Lucifer pudo conseguir amar a alguien en este lugar, porqué el no? Pensaba que siempre lindo era amar, que equivocado estaba al creer eso con Stella. No llevaba muy mala comunicación con su esposa, es solo que ella y el no eran el uno para el otro.
Aclarando todos sus pensamientos optó por volver al lugar, en el camino sus ojos pudieron notar una escurridiza y rojiza cola por breves segundos Desaparecer tras una puerta. Arqueando una ceja se acercó con lentitud y firmeza, tomando la perilla de la puerta la fue abriendo.
El Imp que se había atrevido a entrar a los aposentos del Príncipe parecía buscar algo, no noto la puerta abrirse menos la presencia de alguien más con él.
Frustrado, volteó para marcharse y toparse con unos penetrantes ojos rojos brillando con intensidad.
— ¿Quién eres y qué quieres, escoria?
Preguntó, sin despegar la mira del demonio rojizo. Este solo parecía quedar impactado por lo sucedido.
— Oh, solo venía a buscar a su gran alteza real. Su majestad~
— ¿Qué buscabas? ¿Qué intentaba conseguir? No soy estupido, sus intenciones eran muy obvias.
— Oh, jajaj. Mi rey, déjeme decirle que talvez si busque algo o mejor dicho, a alguien~ ¿porqué cree que entre específicamente a su alcoba?~
Las manos del Imp empezaron a tomar ligeramente el rostro del Goetia. Este, indignado se alejó.
— ¡¿Qué osadía es ésta?!
— Oh, vamos, príncipe. Se perfectamente que la relación con usted y su esposa no es la mejor, y que ya no la complace en el ámbito sexual como es debido.
Comentaba Blitzø, con seguridad en sus palabras. Una de sus manos señaló a la mujer de aquel Búho, volteando, vio a la letanía como Stella se encontraba charlando con algunos amigos.
— Si usted lo desea puedo serle útil, puedo complacerlo -insinuó haciendo que Stolas tuviera su atención otra vez- por una noche~
— Para eso puedo contratar a alguna puta, ¿porqué querría acostarme con un plebeyo como tú? No te elimino porque extrañamente tus incoherencias me parecen "entretenidas".
— Hoo~ majestad, créame cuando le digo que soy mucho mejor que cualquier perra del barrio. ¿Prefiere dos agujeros a uno solo? Pitos solo tiene uno.
Stolas debía admitir que le causaba cierta gracia su últimas palabras. Tenía razón, su esposa ya no lo complacía como se era debido hace siglos y ¿porqué desperdiciar una oportunidad? Tenía a alguien que aunque fuese un Imp estaba a su total disposición. ¿Pero arriesgar su matrimonio solo por él?
Todos sus pensamientos "negativos" los había mandado a la mierda al sentir la estrechez de aquel agujero.
Como aquel demonio gemía debajo suyo lo excitaba, lo llenaba de más placer de que alguna vez pudo haber sentido ; su entrada era tan apretada, caliente, húmeda, tal y como le gustaba. Había olvidado tal placer y sensación que se le podía otorgar al cuerpo. Quizás ahora que su acompañante no se trataba de una mujer podría intentar saber que se sentía tener un pene enterrado en su culo.
— Ahh~~ Digame~ lo decepcione, su alteza?~ Ahh~
— Ni un poco, pequeño~~
Jadeo aún moviéndose, cada estocada más profunda que la anterior.
Disfruto de llenarlo con su semen, todo su interior y que aquello no fuese impedimento para seguir embistiendolo hasta que calles rendido en la cama.
La puerta fue tocada.
— ¿Stolas? ¿Estás ahí? Te están esperando, ya llevo una mierda de hora ahí distrayendolos. ¡Apurate!
Pensó que se había alejado ya que no se escuchó nada más. Ahora mismo se encontraba con aquel diablillo, acurrucado tiernamente en sus brazos.
Acaricio con una de sus garras su mejilla.
— Volveré pronto, querido~
Esa no fue la única vez que lo hicieron.
Creyó que no lo volvería a ver jamás cuando a ese cuarto volvió y no lo encontró, pero ahí estaba, nuevamente había regresado pero aparentemente no con la misma intención ; en la mañana siguiente después de haber tenido una apasionada noche con aquel demonio, descubrió que había sido robado por aquel escurridizo Imp.
Más que enojado, estaba encantado, ya tenía una forma de que Blitzø, volviese solito a sus brazos.
Ahora mismo lo apreciaba dormir entre sus suaves sabanas de seda, lo que solo había empezado por un simple robo terminó en más, convirtiéndose en amantes o en algo más.
Aprecio los hermosos ojos de su Blitzy abrir en par y un lindo bostezo soltar.
— Buenos días, querido~
— Buenos días.
Stolas con sus brazos rodeó el cuerpo de Blitzø, ululeando tiernamente.
— Despertar contigo será un encanto siempre, Blitzy~~
— No me hagas cambiar de aceptar la puta desicion de casarme contigo, Stolas.
— ¿Como podría cambiar de opinión si aceptaste porqué me amas, no?~
Palabras : 859
Nota : No estuve tan inspirada para este día ni cambiándolo. Pero bueno. Me estaba por volver loca que no me cargaba la historia, conectaba y desconectada el internet.
Cada día estamos más cerca del final, uwu.
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