Mirándose a los ojos:

Theo y Liam habían pasado por mucho y no podían creer que ahora trabajaban y tenían una casa propia. Nunca pensaron terminar así.

Esa noche Theo no trabajaba así que dedico todo su día a preparar la más maravillosa cena para cuando Liam llegara.

Se vistió con un traje, prendió las velas y sirvió la comida, justo a tiempo para cuando su novio llego.

-¿Qué pasa? Que yo recuerde no es nuestro aniversario-Liam pareció preocuparse por haberse olvidado alguna fecha, pero se relajo un poco cuando Theo rio.

-No es nada de eso, solo es una sorpresa que quise hacerte.

-Bueno... esto es muy hermoso ¿qué hice para merecerte?-pregunto para luego darle un beso.

Cenaron mientras hablaban y reían. Ambos estaban pasándola de maravilla. Pero Theo estaba nervioso y Liam lo noto aunque prefirió no decir nada.

Theo agarro la mano de Liam sobre la mesa y se le quedo mirando a los ojos. Muchas veces ambos con solo mirarse podían decir todo lo que querían. Transmitían lo mucho que se amaban, sin palabras.

Pero Theo tenia las palabras.

-Cuando pienso como seria mi vida sin ti, no puedo imaginarlo. No veo como podría ser feliz sin ti. Me ayudaste cuando no me lo merecía, me defendiste de todos diciendo que yo cambie, y la única razón por la que lo hice fue por ti. Me daba miedo decepcionarte porque no quería ser causante de tu dolor. Me esforcé por ser la persona que creías. Porque te amo. Te amo como nunca ame a nadie. Jamás en mi vida creí que le diría eso a alguien, ni en mis mejores sueños. Pero aquí estoy, tratando de decir todo lo que siento en simples palabras, lo cual es imposible. No existen palabras que expresen mi amor por ti.

En ese momento se paro para luego arrodillarse frente al beta, él cual ya estaba llorando.

-Liam Dunbar ¿quisieras casarte conmigo?

-¡Claro que si!-se tiro sobre Theo y lo empezó a besar-Te amo.

-También te amo.