Así como había veces que podían estar juntos. Había otras que, lastimosamente, debían de estar separados.
Obviamente que al ser representaciones y más al ser de continentes diferentes tendrían tiempos en los que no podrían verse cara a cara.
Aunque eso normalmente no les molestaba ya que siempre se podría solucionar con una llamada o mensajes.

Pero, solo unas pocas veces eso les jodía.
Y ahí es cuando tenían ganas de mandar a la mierda varias cosas y solo estar entre los brazos del contrario.
Como ejemplo actual tenemos a nuestro querido España que estaba en una reunión de la UE.
Vayamos a ver que hace…

Salón de reuniones de la UE, Bélgica..

Normalmente Antonio era alguien que estaba tranquilo en las reuniones.
Pero en esta en especial, tenía ganas de sacar su hacha ahí mismo y mandarlos a todos al carajo.
Aunque estuviera sonriendo por su mirada se notaba que si dabas un paso en falso terminas muerto.
Tanto era que inclusive Ludwing trataba de no hablarle.

-"¿¡Por que cojones no viene alguien y calla a estos subnormales!?"- piensa mirando como los hermanos alemanes trataban de despertar a Grecia para hablar de su deuda y este no les hacía caso.
Sí, sin duda estaba de malas.
Todo el embrollo con la salida del cejón, la deuda de Grecia y sus propios problemas en su casa ya lo tenían con la paciencia al límite.

-¿Está bem? Parece que você vai explodir (¿Estás bien? Parece que vas a explotar)- le dijo su hermano con una pequeña sonrisa de costado.

-No estoy de humor..-gruñe. El Portugués solo negó con su cabeza.

-Está bem (esta bien)- dice - Já agora, fato novo? (Por cierto, ¿Traje nuevo?) - antes de que Antonio pudiera responderle a su hermano, este mismo comenzó a hablar con Luxemburgo.

Al ver esto, Antonio miró su traje o mejor dicho una parte. Ya que el saco se lo había quitado.
En efecto la camisa no era de él, sino de Martín.
Normalmente él dejaba unas mudas de ropa en lo de su pareja y este hacía lo mismo.
A veces se sentían cercanos al usar la ropa del otro, por lo que esa misma mañana se puso el traje que Martín había dejado.
Una hermosa camisa de vestir color celeste y unos pantalones de vestir negros junto con el saco.
De esa manera sentía al rubio con él.

Mientras al mismo tiempo, en una reunión de la OEA.

-¡Pedazo de idiotas se pueden callar de una reverenda vez!- gritó el rubio al ver a Alfred discutiendo con Maria y Carlos, quienes al escuchar al Argentino se detuvieron.

-Ei Martín, você experimenta um novo visual?
(Oye Martín, ¿pruebas un nuevo look?)- pregunta Luciano, ante lo escuchado el rubio mira su vestimenta.
Así como Antonio estaba usando la de él.
El usaba un traje del español.

-Si, pensaba que tal vez el color vino me podría ir- dice mirando su camisa del color mencionado. Y luego sonríe ligeramente para volver a prestar atención a los demás.

Tal vez muchos pensaran que solo era ropa. Pero para ellos, al estar separados por la distancia. Usar esa simple ropa era algo que los conectaba.

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Antes de que alguien diga algo. Para el Portugués use traductor por lo que me disculpo si hay algo mal dicho.
Y con el Acento de Antonio hago lo posible para no cagarla.