La noche había sido increible para Carina, Daniel y Johnny por fin hacían las pases, y LaRusso por fin se había atrevido a besarla. Parecía un sueño, pero era la realidad. Había sucedido hace solo tres horas, y Carina ahora se había despertado para alistar sus cosas. ¿A donde iba? Bobby y Jimmy la habían invitado a una nueva reunión para revivir los viejos tiempos, y ella no dudó en aceptar. A Johnny también lo habían invitado, pero él iría más tarde. Carina decidió ir temprano ya que el viaje era muy largo, así que iría en su nueva moto Rauser que había podido comprar. Siempre le pareció más práctico.

     Carina se puso su mochila en la espalda y salió del departamento. Ya eran las cinco de la mañana, seguramente llegaría bien a la casa de Jimmy. La mujer se subió a su moto y arrancó a toda velocidad, yéndose del departamento.

    Todo parecía ir bien para Carina. Ahora estaba pensando seriamente en quedarse a vivir en el Valle de San Fernando. Era su hogar, en donde estaban las personas que más quería. Conseguiría un trabajo, sería complicado, pero lo haría. Se adaptaría. No volvería a huir nunca más en su vida.

      Todo eso pasaba por la mente de Carina antes de sentir un gran impacto contra ella. Lo único que recordaba era su impacto contra el suelo y haber rodado en todo el pavimento.

     Carina estaba inconsciente. Ni siquiera se movía. En ese momento, aquel quien la había atropellado bajó de su auto, y con tranquilidad caminó hasta la inconsciente Carina. El hombre la pateó despacio en la pierna para comprobar si estaba consciente, pero no lo estaba. El hombre se acuclilló a su lado y sonrió con malicia, fumando de su gran habano.

— Esto es lo que obtienes cuando te metes con Cobra Kai — le dice el hombre, aunque sabe que ella no lo escuchará —. Siempre supe que eras una débil, Lawrence. Eres una completa decepción.

      John Kreese se levantó de su lugar y, sin mirar atrás, ingresó a su auto y huyó de la escena, dejando a la pobre Carina en el suelo, ensangrentada y con una gran herida en la cabeza.

       Y pensar que ella creía que todo iba de maravilla.

      Daniel y Johnny se peleaban por quien llegaba primero a la habitación de hospital.

     Luego de la pelea de la escuela, los dos se habían enterado sobre el accidente de Carina, así que no dudaron ni un segundo en ir al Hospital. Estaba fuera del Valle, ya que no había sucedido dentro de él. Los dos se quedaron parados frente a la habitación en donde ella está. Tocaron la puerta y la enfermera los dejó pasar. Johnny se colocó a un lado de la cama de Carina y Daniel se colocó del otro lado.

— Carina, gracias a Dios, estás bien — dice Daniel a punto de llorar, agarrando la mano de la mujer.

— Me diste un gran susto, ¿como te sientes? — le pregunta Johnny, también agarrando su mano. Le preocupaba mucho lo que pudiera pasarle a su prima. Ya tenía a Miguel en mal estado, no quería perder a Carina también.

    La mujer, con la cabeza vendada y con algunos rasguños en la cara, mira a los dos hombres con extrañeza.

— ¿Quienes son ustedes?

           FIN DE LA TEMPORADA UNO