Es un día oscuro y nublado, el cielo descargara su ira en forma de tormenta en cualquier momento, las nubes grises son pesadas y muchos rayos recorren velózmente el firmamento. Todas las personas se encuentran en sus hogares cálidos y secos, pero alguien misterioso merodea por las calles como una sombra al acecho, se trata de ese muchacho, Leandro a quien todos llaman Lean, él llava puesto un chaleco de jeans con una remera negra debajo y unos pantalones grises. Parece una caminata normal pero se dirige al cementerio, a estas altas horas de la noche las rejas se encuentras cerradas, pero esto no lo detiene, Lean toma una navaja y con ella forja la cerradura y consigue abrirla.

Camina entre las tumbas y los mausoleos abandonados por el tiempo, muchos están destruídos y maleza crece a su alrededor, es normal pues este es un cementerio abandonado, el muchacho sigue su camino hasta que escucha una voz diciendo -¿Qué haces aquí?

Lean voltea y se encuentra frente a frente con Daniel -Sabía que te encontraría aquí, quiero información. -contesta serio.

-¿Ah sí, estabas buscándome? Yo creí que nadie quiere encontrarse con la muerte antes de tiempo. -comenta caminando hacia una tumba un poco descuidada pero todas están así.

-Quiero respuestas. -habla Lean con una voz firme, en eso, Dan acerca una pequeña flor a esa tumba y dice teniendo la vista fija en la nada -Todos quieren respuestas "¿Por qué ellos y no yo?" esa es una de las más comunes... pero tú tienes una pregunta mucho más interesante ¿O me equivoco?

-Supones bien, quiero saber todo sobre alquien ¿Conoces a Kearrents? -pregunta Lean yendo directamente al asunto.

-¿Por qué quieres saber de ese sujeto?

-Debo sulocionar un problema con él. -habla serio apretando fuertemente los puños.

-Estás furioso, yo le debo mucho a Kearrents y si planeas hacerle daño te aconsejo que lo olvidas porque te meterás en serios problemas. -le advierte Dan poniéndose de pie.

-¿Tú le debes? ¡¿Quién es ese sujeto?! -Lean pierde la paciencia y comienza a hablar agresivamente.

-Solo te diré una cosa... aléjate de Amelia ahora que puedes. -murmura Daniel con calma.

-Pero ya perdí mucho y ella es lo único que tengo. -habla entre dolido y molesto.

-Recuerda que una chica te lanzó al pozo en donde estás, esta vez... puede que te asesinen. -Dan sabe muy bien de lo que habla porque estuvo presente cuando Lean perdió todo.
Flashback...

Leandro y su novia caminan por las calles de la ciudad, es una noche bella y la luna ilumina con su hermosa luz el lugar. La pareja se ve alegre después de una noche de cine, pizzas y helado.

-Está rico. -dice ella lamiendo el helado de vainilla que tiene un su cono.

-Sí. -murmura Lean mirándola con ternura.

-¿Qué? -pregunta ella un poco incomodada.

-Nada, es que tienes algo en tu cara. -responde serio.

-¿Dónde? -ella mira su reflejo en la vidriera de un café -No es cierto. -lo regaña dándole un empujoncito.

-Sí, aquí. -él acerca su helado al rostro de su novia dejando un poco en su nariz.

-¡No! -se aleja limpiándose con la mano sobrante y nota que Lean se ríe -¿Ah sí? -ella se molesta un poco y lo ensucia también.

-Empieza a correr. -la amenaza, entonces ella suela su helado y comienza a correr, él la persigue hasta alcanzarla y la levanta de la cintura -¡Te tengo preciosa!

-Bájame ahora. -le ordena ella firme. Lean niega lantamente con la cabeza mientras la mira a los ojos.

-Eres muy hermosa. -murmura embobado mientras que su chica sonríe.

-Te amo. -susurra besándolo mientras él la baja lentamente.

-Yo te amo aun más. -Corrige Lean. Unos minutos después de caminar abrazados, cuatro sujetos los emboscan, golpean a Leandro en el rostro haciéndolo caer mientras sostienen a su novia de los brazos.

-¡Suéltenme! -ella lucha para liberarse pero son más fuertes.

-¡Déjenla! -dice Lean adolorido entando en el suelo.

-No, es a ella a quien queremos. -responde uno de los hombres.

-No... ¡No! -grita Lean al ver que es hombre sacó una navaja y lastimó a la joven.

-Pronto seguirás tú. -le dice tomandolo del cabello y colocando el filo del cuchillo en su cuello.

-No... -habla él apretando los puños -¡Ustedes siguen! -Lean toma la hoja de la navaja con palma de su mano, pero no resulta herido, y con ella apuñala salvajemente a sus agresores, primero hiere a uno en el pecho, a otro en el estómago, al tercero le corta el cuello y al último le clava la navaja en el corazón. Después de terminar, Lean intenta controlar su respiración agitada teniendo sus manos cubiertas de sangre.

-¿Q-Qué... qué es lo que hice? -murmura agachando la mirada, en eso ve a su novia quien se encuentra tendida en el suelo inconciente, él se acerca rápidamente y nota que tiene una herida muy profunda la cual no para de sangrar.

-Lean, no sabes en el lío en el que te metiste. -habla Dan estando a sus espaldas mientras ve a los hombres agonizantes a su alrededor.

-No te acerques a ella. -murmura él conteniendo el llanto.

-Tambien debe morir. -contesta serio el morocho.

-Ella no puede morir, la amo. -susurra Lean con la voz quebrada.

-Yo en tu lugar estaría más preocupado por lo que puede llegar a pasarme después de asesinar a estos sujetos, 4 almas que arrebataste. -Dan camina hacia ambos y extrae el alma de la muchacha de igual manera que lo hizo con los hombres.

-Ya no me importa nada. -hable Lean negando con la cabeza, él se pone de pie y se aleja caminando mientras las lágrimas inundan sus ojos.
Fin flashback...

-Ya olvidé lo que pasó... gracias a Sky. -habla Lean.

-Ah... pero yo lo recuerdo como si hubiera sido ayer, tú envuelto por la ira y el enojo, tus manos manchadas de sangre, tu amada fallece frente a tus ojos sin poder hacer nada para salvarle la vida... ¿Ahora sí recuerdas? -dice Dan mientras se aleja, pero se detiene bruscamente al escuchar -¡Espera! No me dijiste lo que quiero saber. -cuestiona Lean.

-Kea y tú son parecidos. -responde el otro.

-¿Parecidos? -piensa agachando la mirada -¿Qué quieres decir con eso? -pregunta pero Dan ya no está.

-"Son parecidos..." -esas palabras quedaron grabadas en la cabeza de Leandro, no puede sacar eso de su mente y debe estar muy alerta, Kearrents no es una persona común. Hay algo más sobre él, algo importante.