Exfoliante de Fresa
Apartamento de Yunji- 8:00 am -Lunes
Era una mañana luminosa, con pajaritos cantando y todo. El despertador me sacó de un sueño esplendido y me rajo a la realidad, una en donde estaba rodeada de los brazos de Jeon JungKook.
—¿Qué hora es?—Jk se había despertado con mi alarma.
— 8 am— respondí dejando mi teléfono en el mueble junto a la cama.
—Fue muy cómodo dormir contigo— acarició mi cabello con dulzura.
Caí en cuenta que había roto una de mis reglas esenciales, el no quedarse a dormir era importante porque es algo mucho mas intimo, sobretodo si dormimos abrazados dándonos besos de vez en cuando.
—Me iré a duchar— me libré de su abrazo y cogí la bata que estaba en el suelo tendida junto a mi maleta y ropa de Jk, mi cuarto era un desastre y yo también.
—¿Quieres compañía?— propuso recostado en la cama con el torso descubierto.
¿Debería dejarme llevar por mis impulsos?
Verlo en mi cama semidesnudo con el cabello desordenado con sus ojos somnolientos me provocaba sensaciones que no había tenido con nadie jamás, una mezcla de ternura y excitación pero ¿Acaso no es eso lo que debería provocarte un hombre en el mejor de los casos?
Solo lo miré y saqué el dinero de mi maleta para colocarlo en el sobre del arriendo, puse la cafetera y nos bollos al horno calculando que estarían listos para cuando saliera del baño. Me dirigí el baño sin decir nada esperando que haya entendido mis silencios.
El agua estaba tibia, perfecta para mi y para él también quien ingreso momentos después.
—En casa ajena hay que cuidar los gastos o eso suele decir mi mamá— cerró la mampara dejando poco espacio entre nosotros ya que no contaba con una ducha de lujo como tenia él en casa.— ¡Esto si es pequeño!— se acomodó.
—Al menos el agua sale caliente— sonreí quitando el exceso de agua en mi rostro y cabello.
—Si queremos que esto funcione creo que deberíamos turnarnos con el chorro de agua—se quitó el agua que caía en su rostro.—Tu ya estas mojada así que me toca a mi— me tomó de los hombros y me corrio para mojarse completamente.
¿Hay algo mas sexy que un hombre duchándose? admito que su cabello mojado siempre era algo que disfrutaba pero verlo en un momento tan vulnerable y privado como ducharse me hizo mirarlo con otros ojos.
Comencé a lavarme el cabello y una vez que tuve espuma cambiamos de lugar.
— Déjame ayudarte— con sus manos comenzó a masajear mi cabello para quitar la espuma —podrías ayudarme a enjabonarme como mínimo— propuso con una sonrisa.
—Está bien— dije animada — ¿Te parece este?— le acerqué el envase de exfoliante corporal de fresa que tenia en la canasta de baño, Jk olía todo lo que ocupaba y comía.
—Con que esto es lo que te hace oler tan rico— me besó tomándome por sorpresa —tu solo aplícalo— se dio media vuelta dejando su espalda a mi disposición.
Con mucha paciencia comencé a esparcir el producto por su espalda, brazos y me detuve a mirar sus tatuajes los cuales me parecen fascinantes.
—¿Te gustan?—preguntó descubriéndome — Mi madre los odiaba, pero ya los esta aceptando—sonrió.
—Creo que son interesantes—toqué su piel entintada — Me gusta el lilium—lo repasé con mis dedos—.
—Estamos gastando mucha agua— apagó el grifo — Date la vuelta te ayudaré— corrió mi pelo húmedo hacia uno de mis hombros y tomó producto entre sus manos para untarlo en mi.
Sus manos recorrieron mi espalda, brazos y por mis costados pasaron al frente apegándose más a mi cuerpo, rozando mi abdomen hasta masajear mis pechos. Su erección era evidente y estaba clavada en mi espalda baja.
—Deberíamos pausar la ducha y terminar esto primero ¿o no?— mordió mi oreja.
—Sí— suspiré, sus dedos estaban estimulándome —Por favor—gemí
El sonido de nuestros cuerpos húmedos en este espacio reducido era lo único que teníamos, mi espalda me dolía de lo arqueada que estaba para que pudiera entrar en mi y buscaba sujetarme de la pared de azulejos para no caer. Para él, sentir como me tensaba era la señal perfecta para aumentar el ritmo, me entendía tan bien y mi cuerpo lo agradecía.
Salí de la ducha una vez lista dejándolo a él continuar en soledad. Mi bata cubría mi cuerpo y una toalla para quitar la humedad en mi cabello. Jk salió de la ducha y se cambió en mi cuarto, mientras eso pasaba mi teléfono sonó.
Mi rostro se fue a blanco cuando vi que el numero correspondía a Hybe.
—Buen día— respondí lo más calmada posible.
—Buen día Srta. Woo, llamaba para preguntar por si sabia del paradero de Jeon JungKook—.
¡Demonios, este es mi final, me iré despedida y con una demanda!
Jk me miró con los ojos más grandes que he visto en un coreano haciéndome señas para que hablara.
—No, de hecho debo ir a recogerlo para ir a la reunión de hoy y la grabación pendiente— dije fingiendo estabilidad emocional.
—No contesta las llamadas y no está en su apartamento, llamamos al condominio y dijeron que salió a eso de las 20:50 y no ha llegado— la persona tras el teléfono sonaba preocupada — Si llega a comunicarse con él por favor haga en traerlo, la reunión comienza a las 10:00—.
—Sí, por supuesto —.
Jk se colocó los pantalones y observó su teléfono al cual le entró una llamada de Nam.
—Hola Hyung— se asomó a la ventana.
—¿Dónde estas?— Nam no se escuchaba muy feliz.— ¿Qué acordamos de las salidas y de contestarnos el teléfono?—.
—Namjoon Hyung, lo siento me quedé con poca batería pero estoy bien— Jk se veía preocupado.
—¿Contigo nunca hay ultimas veces cierto?— suspiró.— Pides que te tratemos como un adulto pero sigues siendo igual de inmaduro—.
—Estoy bien, basta del sermón— suspiró molesto.
—Ve a la empresa, tienes reunión a las 10:00 am, hablamos— Namjoon cortó la llamada bastante molesto.
Nos miramos incomodos por el momento y fuimos a la cocina por el desayuno. Ambos ya listos para irnos al trabajo fuimos interrumpidos por el timbre.
Del susto anterior creí que habían enviado a alguien de la empresa espiarme pero cuando me asomé no era mas que la Sra. Choi que venia por el pago de la renta.
—Vengo por el sobre— sonrió.
—Si claro— Jk me entregó el sobre con sumo silenció tal y como se lo pedí con una seña.
—Gracias— tomó el sobre y me miró —Te ves diferente, ¿Estas tomando algo?— preguntó mostrado sus mejillas rebosantes.
—Colágeno— dije aguantando la risa.
—Creo que debería hacerlo también— dijo tocandose el rostro y siguió su camino por el pasillo.
Una vez en la cocina Jk no pudo aguantar la risa y eso nos ayudó bastante para bajar las tensiones antes de ir al trabajo.
—Supongo que yo soy el colágeno— Jk rió mostrando sus dientes de conejito.
JungKook- estudio de grabación-Hybe 11:00 am
—Listo JungKook, ahora haremos unas tomas mientras estas grabando en la cabina y terminamos por hoy— el director me explicaba los pasos a seguir con mucha naturalidad mientras que por dentro me moría de nervios.
Cuando sacaron las cámaras me hicieron pasar a la cabina para escuchar la canción y sentí que esto era algo para lo que no estaba preparado.
—Es muy alta la nota— dije quitándome los audifonos.
Bang PD la escuchó completa y habló con Nicole mientras leía la letra que era toda en ingles.
—Quiero lanzarme de un puente—le dije a Nicole apoyándome en su hombro.
—Lo único que lanzarás es este hit— acarició mi espalda.—No necesito al nervioso de JungKook hoy, necesito a Jk, el que se come el mundo—levantó mi gorro y me miró a los ojos— la letra esta con la pronunciación, hay productores extranjeros ayudando con la grabación así que deslúmbralos— apuntó la cabina de grabación.
Fueron horas y a veces siento que necesito más que eso porque quiero que sea perfecto pero al parecer no entienden lo que quiero decir con que deseo grabar todo como 5 veces solo para sentirme seguro.
—Listo, cuando terminemos la producción la enviaremos para que estés seguro— el productor me habló personalmente .— Eres un gran artista—.
—Gracias, estaré atento— me despedí y me lancé al sillón de la sala cogiendo mi estomago con ambas manos.
Yunji llegó a la sala y se acercó a mi con mi comida. Estábamos solos luego de que los productores y Nicole se retiraran.
—Quieres almorzar aquí o en otro lugar— dijo colocando el pocillo hermético y la botella de agua en la mesa frente al sillón.
—No quiero comer— me quejé sin moverme de mi sitio.
—Tienes que hacerlo— repitió quitándome el gorro — Vamos, ¡arriba!—.
Me senté y la miré mientras preparaba todo frente a mi.
—Estoy muy nervioso— suspiré — Cada vez que pienso en la presentación me dan nauseas—.
—¿Siempre es así?—me entregó el agua — En Busan no te vi tan nervioso—.
—En Busan estaba con los chicos, acá estoy solo— bebí agua a sorbos.
—Estas conmigo— tomó asiento junto a mi.
—Hola chicos— Nicole entró a la habitación, Yunji se levantó y se alejó.
Yunji no comprende que sus actitudes hacen que todo sea mas sospechoso, pero no discutir con ella eso ya que por mucho que de mi opinión ella terminará convenciéndome.
—Yunji, saldremos a comer esta noche antes del viaje a Qatar, ¿vienes?— Nicole tomó su bolso el cual estaba en una de las sillas de la sala .— Baek estará ahí— sonrió y giñó su ojo hacia ella.
—Veré si me ánimo— respondió, era evidente su incomodidad.
—Nos vemos entonces, te envio la dirección por chat— se despidió de un abrazo, se acercó a mi para un abrazo.— Nos vemos JungKook, comete todo eso— apuntó al envase con verduras hervidas y arroz.
Una vez solos, Yunji tomó asiento en los sillones más lejanos y se mantuvo en su celular mientras la miraba de reojo y ella evitaba mi contacto.
—¿Es Hwan Baek o Choi Baek?— dije rompiendo silencio.
Yunji me miró y no respondió.
Volvieron a entrar sin tocar a la habitación y esta vez no era Nicole sino que el asistente de audiovisual Hwan Baek. Nunca me había fijado en él, es alto bien parecido, uso excesivo de gel, tatuaje en el cuello y hombros anchos. Miré a Yunji quien no levantó su rostro en ningún momento.
—¿Han visto un cable azul por acá?—preguntó hacia Yunji.
—No, lo siento— Yunji se levantó de su asiento y fue a revisar su bolso.
—Nos juntaremos a comer esta noche—dijo el baboso —¿Irás? será divertido y podemos seguir hablando de ese tema que me preguntaste—.
Me levanté si caminé hacia la cabina de grabación donde había visto el famoso cable azul que buscaba y se lo pasé. Él me miró y se despidió de Yunji para salir de la sala.
—Con que Hwan Baek— dejé clara mi molestia.
—¿No puedo tener vida social en mi trabajo?—Yunji se levantó y se acercó.
—Veo que tienes una bastante buena, porque al parecer toda la empresa sabe que tu y Baek se traen algo— el sarcasmo era mi fuerte.
—¿Te molesta no ser el único hombre en este planeta?— Yunji estaba provocándome y no entendía por qué.
—Hombres muchos pero ninguno que te haga llegar como yo lo hago— me acerqué— ¿o me vas a decir que piensas en él cuando estoy dentro de ti?— me acercó lo suficiente como para acomodar su pelo.
— No por hacerme acabar te mereces el cielo, es lo menos que puedes hacer por una mujer cuando la tienes dispuesta a ti—dijo cerca de mi oído.
Salió de la sala dejándome a solas con rabia y el ego pisoteado, pero debía admitir que me encantaba verla desafiante poniéndome en mi lugar porque eso quería decir que yo realmente le importaba.
Yunji- bar en Seúl- 21:00 hrs
Todos parecían divertirse aquella noche. Hace mucho que no tenia una salida con gente mas grande o de mi edad, pero estaba distraída y no sabia por qué.
— Los años de estudios no son difíciles si te gusta lo que haces, hay pocos ingenieros en audiovisión— Baek me hablaba entre el ruido del bar y las otras personas de la mesa.
—Creo que estoy convencida de esa carrera o la de gestión de recursos humanos, cualquiera me interesaría mucho—respondí amable.
—Sí, tendrás buen campo laboral— bebió de su cerveza. —Y dime , ¿sales con alguien?—.
—Mmmh... no se si es salir pero tengo algo con un chico—dije mostrándome interesante.
—Vaya, me gusta— sonrió —¿Llevan mucho tiempo?—.
—No, no mucho— noté que Nicole me miraba desde que había comenzado a hablar de este "chico"
—Es difícil conocer chicos que quieran más que una noche—se atrevió a decir girándose hacia mi.
—Pero yo no estoy en búsqueda de nada, quiero conseguir estudiar y dedicarme a eso—dije certera y alejé la cerveza que estaba bebiendo.
—¿Entonces nos abandonas?— Nicole sacó sus conclusiones
—Bueno, creo seria muy complejo trabajar y tener un trabajo de tiempo completo, así que es probable—suspiré.
—Al menos no tendrás que trabajarle a un joven idol—Baek se burló.
—Anticipa a Jk, creo que será lo más difícil de hacer— Nicole replicó.
Era cierto, sentía que lo más difícil de abandonar este trabajo era dejarlo a él.
Llegué a casa y me lancé a la cama muy agotada pero mi mente se había quedado en esa conversación tediosa con Jk sobre Baek quien no tenia nada que ver y Jk no sabia que había pasado.
Tomé mi teléfono y le marqué a Jk, dentro de mi mareo típico después de beber.
—No tengo nada con Baek— dije ante de que él dijera algo.— Solo conversábamos de temas de estudios, quería saber que debía estudiar para dedicarme a lo que él hacia en la empresa pero terminé en una conversación muy aburrida— suspiré — ¿y sabes en lo que se me venia a la mente para aguantar la conversación aburrida?—.
—No— dijo al otro lado de la linea.
—Tú— miré al techo de mi cuarto tendida en la cama —Pensaba en ti, en tus ojos, tu cabello, tu forma de caminar, de hablar, en que te conozco de pies a cabeza pero no de corazón y no quería esto— me tapé los ojos— yo no quería esto— suspiré con pesar.
—¿Qué no querías?— parecía atento a lo que diría.
—Estoy en problemas, me prometí cosas para no caer en esto y fallé—.
—De que hablas Yunji, ¿estas borracha?— parecía preocupado.
—Solo un poco— aclaré —Jk tengo que decirte algo ahora—.
—Dime— su voz sonaba suave a través de la llamada.
—Creo que me gustas, creo que me esta costando diferenciar nuestros encuentros y esto es exactamente lo que no quería, esto es algo que no debería y terminó pasando porque no sé controlar mis emociones y no puedo controlar las tuyas—me senté en la cama —Quizás debería renunciar ahora antes de que esto sea más fuerte y realmente me cueste seguir adelante, pero no pasa nada si tu no lo sientes por mi, no tienes porqué ser condescendiente conmigo yo lo acepto, pero si llegas a sentir lo mismo... ¿crees que sea buena idea dejar de hacer lo que hacemos o deberíamos seguir ...?—.
Me quedé en silencio esperando una respuesta, me parecía extraño que no dijera nada ante lo que yo le acababa de decir.
—¿Jk?— repetí.
Miré la pantalla de mi teléfono y esta se había ido a negro, el teléfono se había descargado y desconocía si Jk había escuchado todo lo que dije en ese momento...
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