Apartamento de Yunji-Seúl/ 09:00 am

—¿Café?— le alcancé una taza con el liquido caliente bien cargado. JungKook estaba en el sillón aún algo dormido.

—Gracias— sonrió y se acomodó para recibirlo —¿De verdad que no quieres que te acompañe?—.

—¿Y alborotar a medio instituto porque un BTS esta en el campus?, no gracias— terminé de guardar mis cosas en el bolso y me miré en el reflejo del espejo de la sala.

—Luces muy bien— le dio un sorbo a su café.—Me quedaré aquí todo el día— rozó con sus dedos el apoya brazos del sillón.

—Comunícate con el edificio para saber sobre tu apartamento— me ajusté mi reloj de pulsera —No, lo haré yo, yo soy la asistente— suspiré.

—Lo hago yo, no te preocupes, es mi apartamento— Jk se levantó a dejar la taza de café ya vacía al lavadero pasando por mi lado mientras yo seguía batallando con la pulsera del reloj.

—Déjame ayudarte— cogió mi muñeca me colocó el reloj. Miró el colgante que tenia en el mesón de la cocina junto a mis celular .—¿También te colocarás esto?— preguntó mostrando el colgante en sus manos.

Asentí apenas mirándolo ya que en mi mente repasaba todo lo que tenia que presentar para la matricula en el instituto de artes visuales y tecnología. Estaba nerviosa por el paso que daría pero tenia una sensación en el estomago desde que indicé la mañana que no me dejaba pensar.

Jk se colocó tras de mi y colocó mi cabello hacia un lado para colocarme el colgante. Al ver mi cuello despejado dejó un beso que me trajo de vuelta al presente haciendo que mi piel se erizara. Su aliento chocando contra mi oído con un leve toque a café y sus manos acariciando mi cintura abrazándome cálidamente me llevó a cerrar los ojos para atesorarlo más.

Verlo dormir esta mañana junto a mi me dio un vuelco al corazón, estaba ahí como aquella vez en la que me visitó y se quedó, justo lo que tanto me había prohibido y me sentí terrible toda esa semana porque le había abierto mi cama, siendo que eso no iba a pasar.

—Tengo que irme— acaricié el dorso de sus manos que aflojaron el agarre en cuando hablé.

—Te espero acá para celebrar—sonrió pero sus ojos decían otra cosa.

El que yo ingresara al instituto significaba nuestra despedida.

—No hagas tanto ruido, no quiero que la Sra. Choi me corra por violar las leyes que impuso para el arriendo—.

—Seré como un ninja—se acercó a mis labios y dejó un beso fugaz.—¿Ves ? un ninja— sonrió.

Le sonreí de vuelta y salí del apartamento rumbo al instituto.

Apartamento de Yunji Seúl/ 12:00 pm 

Estaba muy aburrido así que me propuse limpiar y ordenar hasta que encontré un problema con el lavamanos, el agua se estancaba un poco y por mucho que haya querido dejarlo así no podía dejar de pensarlo. Luego de almorzar estuve investigando las razones por las cuales podía pasar eso y como arreglarlo. Sabia que Yunji tendría que contratar a alguien para que lo arreglara y si yo podía hacerlo por ella me sentiría muy feliz.

Mis intentos fueron exitosos y lo solucioné luego de una hora más o menos. Me tendí en la cama de un salto pero del rebote se cayó mi teléfono al piso. Me arrodillé para buscarlo y junto a el encontré una especie de estuche grande, como del porte de mi antebrazo, bajo la cama y lo arrastré para sacarlo.

Encontré en el un croquis y un estuche de lápices grafito de diversos grosores, comencé a hojear las paginas y vi unos dibujos increíbles, retratos de su madre, bocetos libres, dibujos abstractos y me detuve en uno en particular.

Un chico. Tenia el dibujo de un chico mirando al costado, tenia tantos detalles que sentía que miraba una foto de él.

"Seojun, el chico que me robó el corazón" (2017/08/03)

Habían muchos dibujos de él junto algunos boletos de cine con corazones , flores secas en las paginas, envoltorios de dulces pegados en las hojas. Yunji estaba enamorada de alguien más hace años y yo no lo sabia.

Cuando me levanté del piso de el cuadernillo cayó un papel doblado, dejé todo sobre la cama y me senté a ver que era.

 Una carta.

Yunji Woo, la chica de mis ojos. He escrito esta carta como 5 veces y aún siento que no será la definitiva. Te diré todo esto en persona pero te dejaré este humilde papel para que no lo olvides nunca.

Seo significa "buena suerte", Jun "talentoso", Yun es la "primera "y Ji  "sabiduría", creo que he tenido buena suerte y debo tener bastante talento como para que una mujer tan sabia como tu me considere como su pareja por 3 años. Quiero tener la certeza de que serán muchos más, ¿me dejas quedarme contigo toda una vida? ¿te casarías conmigo?  se que ahora no tengo nada para ofrecerte pero cuando logre conseguir un buen empleo en Seúl te llevaré conmigo y viviremos felices te lo prometo con el corazón. 

No hay nadie más feliz que yo en este mundo con tan solo tu sonrisa y tu calidez, tu humanidad entera es preciosa y quiero pasar cada minuto de lo que reste de mi vida viéndote, porque eres la chica de mis ojos.

Te amo más que a nadie en esta existencia

Siempre tuyo, en esta vida y en las que sigan.

Seojun. (2019/07/15)

Me quedé en silencio con un nudo en el pecho, doblé la carta y la dejé entre las paginas del croquis, lo guardé donde estaba y busqué la forma de seguir mi rutina aunque no pudiera pensar en otra cosa.

Instituto de artes visuales y tecnología- Seúl/12:00 pm

—Srta. Woo— dijo la asistente que me estaba atendiendo.

—¿Si?— respondí volviendo mi vista hacia ella.

— Le comentaba que el asunto de la beca por el que viene tiene un plazo vencido— me entró un documento.— Aquí dice desde el 20 de noviembre hasta el 15 de diciembre, hoy estamos a 20—apuntó.

—Oh, lo siento—dije nerviosa guardando mis cosas en el bolso.

—Aún así puedes postularte en marzo pero para entonces no estarán las facilidades de pago— me entregó un folleto —Puede comunicarse por el correo que aparece ahí o llamarnos en el caso de que quieras ingresar al programa este otro año— sonrió.

—Esta bien— sonreí amablemente y salí de la oficina.

Caminé rápidamente al estacionamiento y me subí al auto. Cuando me vi finalmente sola en el asiento del conductor me liberé con un llanto silencioso presionando los labios  y los ojos aguados por completo.

"Tienes derecho a llorar todo lo que quieras, nadie dijo que seria fácil"  me dije a mi misma calmándome y respirando profundo.

Di unas cuantas vueltas antes de irme al apartamento, necesitaba pensar y esperar que mis ojos volvieran a estar en su estado natural para no alertar a JungKook, JungKook estaba en casa y me espera para celebrar a pesar que un porcentaje de si mismo estaba pidiendo que esto pasara, que no me fuera de su lado.

¿Ahora que haré? tendré que pensar en otro plan.

Llegué al apartamento y me encontré a Jk dormido en el sillón con el televisor a bajo volumen viendo programas de cocina gourmet. Todo parecía muy limpio y ordenado, cuando me fui a lavar las manos me fijé que el lavamanos estaba arreglado, eso me sacó una sonrisa.

Salí a mi cuarto  para dejar mi reloj en el mueble junto a la cama y vi uno de mis lápices de dibujo en el piso. JungKook había estado limpiando y quizás había encontrado mis dibujos, que vergüenza.

Cuando fui a la cocina lo vi sentado con el pelo alborotado en modo zombi algo inconsciente.

—Debe haber sido muy buena tu siesta— sonreí mientras me disponía a beber agua.

—¿Llegaste hace mucho?— preguntó mientras bostezaba.

—Unos cuantos minutos— caminé hacia él —gracias por el lavamanos, espero que no haya sido muy difícil limpiarlo— tomé asiento en el sillón junto a él.

—No, fue un placer ayudarte— se apoyó en mi hombro.

—Se que quieres saber como me fue y te diré que no fue lo que esperaba así que debo tener otro plan— suspiré.

Se apartó para mirarme el rostro y me estrechó en sus brazos, no sabia que necesitaba eso hasta que comenzó a acariciar mi cabello como lo hacia mi papá cuando tenia pena.

—Todo estará bien Yunji, solo confía en que todo saldrá como quieres—Jk dijo luego de dejar un beso en mi coronilla.—Estoy contigo y te ayudaré en lo que sea—.

—¿Te parece si tomamos el auto y vamos a comer unos ramen instantáneos a la playa en Busan?— sonrió luego de dar la idea.

—Son muchas horas para un ramen instantáneo—respondí desmotivada.

—¿Entonces pidamos algo y vemos una pelicula?—.

Me separé de él para mirarlo a los ojos y me respondió con una sonrisa, con su pulgar limpió una cuantas lagrimas que estaban en mis mejillas.

—Se que no debería decir esto pero contigo cualquier panorama me sabe a una cita romántica— sonrió—.

—Quizás debería ser una cita— acaricié su mano.

Jk me miró con esos ojos brillantes y expresivos, luego todo se sintió incomodo como si algo se hubiera apagado.

—Yunji, ¿estás con alguien más?—preguntó de la nada.

—¿A que te refieres?— lo miré fijamente.

—Vi algo que quizás no debía y ahora no puedo quitarme su nombre de la cabeza—se mordió la comisura de sus labios .—Seojun ¿estas con él?—.