XX
Tanto el rubio oro como el azabache de cabellos largos pasaban el día entero ya fuera hablando de sus cosas, leyendo algunos archivos, estudiando planos o cualquier cosa.
Empezando a verse tal vez demasiado cercanos, evidentes y sospechosos ante los ojos de los hermanos y del castaño. Estos decidieron intervenir para preguntar si ellos dos... Osea, se habían encerrado en una habitación y habían pedido no ser molestados, y de eso ya habían pasado tres horas, así que evidentemente podía tratarse de algo más que simplemente una extraña cercanía...
Entraron a la habitación después de picar con los nudillos en la puerta, viendo a los dos recostados en lo que podría ser una cama, pues era un colchón rudimentario tirado en el suelo con algunas mantas por encima. Uno estaba leyendo uno de los libros de Mysterion y el otro recostado y medio dormido encima del cuerpo del azabache, que era quien estaba leyendo tranquilamente, ahora levantando la cabeza y preguntando qué diablos querían.
Definitivamente Kenneth y Stanley eran mucho más cercanos entre ellos que con el resto o hacia el resto de personas del refugio.
- ¿Kenny, a dónde vas?- preguntó el pelinegro de ojos verdes situado al lado del rubio de ojos azules / verdes viendo como los dos se dirigían a la salida del refugio un día cualquiera por la mañana.
- A investigar un rato, me aburro.
- ¿Vais a asaltar una granja, verdad?- la sonrisa sarcástica del rubio oro le dio la respuesta a Tweek, aunque también Stan asintió con la cabeza.- Tengan cuidado...
- No prometo nada.
- ¡Kenny!
- Ah, ya déjame en paz, voy a morir igual.- tomó la cuerda y se marchó cargándola en su hombro.
El azabache de ojos marinos salió tras él.
- ¿Por qué siempre le hablas de lo mismo?
- Es muy pesado, él no va a morir pronto porque no usaron drogas con él, solo lo tenían como un niñito de los recados, y se preocupa por mí cuando no necesito que me cuiden como si fuese un bebé.- bufó pesado mirando al frente.- Sé que voy a morir pronto, por eso me arriesgo por el bien de los demás.
- Entiende que él no quiere que sufras.
- ¿Que no sufra?- dijo con sarcasmo y después bufó pesado.- Prefiero morir devorado antes que una muerte por desangrarme al vomitar.
- De acuerdo, no opinaré nada más.
Kenny soltó una risilla.
- Nos va a tocar correr.
- ¿Uhm?
Señaló a su izquierda. Stan giró la mirada y se estremeció, fue a salir corriendo hacia el refugio cuando el otro lo detuvo y le hizo una señal de silencio con un dedo en los labios, se quedó quieto, escondido usando el cuerpo del rubio, que era más alto que él, como si fuese una especie de escudo. El demonio los miró, el azabache se estremeció y tiró ligeramente del rubio oro para irse de allí.
El demonio se acercó corriendo a ellos con un gran estruendo, el azabache de ojos marinos, viendo que la persecución era inminente porque los había visto, se soltó del agarre del otro y salió corriendo pensando que el rubio venía detrás y que usarían las técnicas de escapismo con ese demonio, escalando y trepando árboles, se giró para comprobarlo cuando saltó para trepar al árbol y vio que se había quedado quieto lanzando una daga de forma certera en uno de los miles de ojos que tenía la bestia repartidos de forma grotesca y bizarra por todo el cuerpo, esta cayó y se arrastró hasta quedar a pocos centímetros del cuerpo del rubio, este solo le arrebató la daga con un chorreón de sangre que salió disparado sin llegar a mancharlo con ninguna gota y lo miró con sarcasmo.
- ¿Tan cobarde te enseñado a que seas, que tengas que salir corriendo de los demonios?- alzó una ceja con sarcasmo, Stan lo miró mal y apartó la mirada.- Una termita puede matar a un elefante, no lo olvides.- dicho eso siguieron caminando.
Cuando el edificio se veía entre los árboles el azabache de ojos marinos se puso algo nervioso al ver a los demonios rondando por allí, miró al rubio oro, este apretó los labios y lo tomó del hombro para empujarlo hacia el conducto de la ventilación, ambos sabían perfectamente donde estaban y a dónde se dirigían. Los dos estuvieron recorriendo los ductos por varios y largos minutos y finalmente el rubio le dio una patada a la rejilla y salió. Stanley, naturalmente, lo siguió y vio un bioma lleno de árboles, arbustos, y, todo era igual que su hogar, su orfanato... Por un momento pensó que habían vuelto a su casa. Miró a Kenneth, este se empezó a mover sigiloso entre los árboles, lo siguió con el mismo sigilo. Hasta que llegaron a la casa en la que había un montón de niños jugando. La madre se encontraba allí presente caminando por el prado, sin jugar con los niños, solo mirándolos y gritándoles cuando se iban hacia el bosque a esconderse. Estuvieron durante unas horas vigilando hasta que uno de los niños se lesionó y la madre se lo llevó dentro, fue ahí cuando los dos empezaron a moverse de forma disimulada hacia la casa.
- ¿Quiénes sois vosotros? ¿Sois nuevos?- preguntó repentinamente una voz a su espalda, los dos se quedaron pálidos.- ¿Cómo habéis entrado?
- Niño, vete y no le digas a nadie que nos has visto, somos fantasmas, si no nos haces caso no te dejaremos dormir en tu vida.- el niño los miró con los ojos abiertos y salió corriendo de allí llorando a mares.
Stanley miró mal a Kenneth.
Este se encogió de hombros indicando que no le importaba como se hubiera puesto el niño, le comentó con sarcasmo que podría tener más tacto o algo, y el otro rodó los ojos; siguieron avanzando, la madre había salido de la casa, ellos se colaron en el bosque sin ser vistos, el niño al que "amenazaron" estaba con la madre y está miraba alrededor con los ojos entrecerrados y después lo calmaba, seguramente diciendo que no era nada.
Se lo llevó dentro de la casa.
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Kenny, me cuesta creer que sea tan buen hermano después de hacer llorar a ese niño de kindergarten xD
Okay, fuera bromas...
Stenny quality time X2 ✨💕
Creo que hay demasiado Stenny en la historia xD
I mean, me centro muy poco en el resto xD
Aquí las opiniones -------->
Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo
Bye~
By Silvia Line / Ecchisforlife
[1087 Palabras]
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