XVII
Yo también aparté la vista y perdí mis ojos nuevamente en el exterior de la cueva. Estaba impaciente, y mi corazón dolía, mis hombros estaban marcados y trataba de encogerme como si fuera una tortuga que quería esconder la cabeza en su caparazón. No me sentía del todo cómodo al lado del rubio oro después de que este me intentara morder después de perseguirme por el bosque. Escuché pasos en la distancia, pero el rubio oro los escuchó antes, pues él había movido su cabeza hacia las profundidades de la cueva. El pelirrojo regresó con una botella de cristal llena de agua teñida en un tono amarillento muy sutil, con un intenso olor que me hizo arrugar la expresión y un trapo en su otra mano. Kyle y Kenny tuvieron una mirada tensa compartida, los miré extrañado.
- Límpiate la boca con esto y haz gárgaras con el agua; después escúpela.- obedecí sin rechistar, sus ojos eran tan intimidantes a pesar de tener un tono verde pacífico, pero no tenía ni punto de comparación con los bellos ojos verde cactus de Craig.
- B-Bien...- asentí con la cabeza inmediatamente.
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Cuando Craig apareció me sentía tan alarmado que no pude contener la desesperación de interrogarlo sobre su bienestar, y él sonrió de lado, ciertamente enternecido. Aseguró que estaba perfectamente y que los lobos eran meros cobardes que no podían hacer nada contra él y que no se atrevieron a siquiera acercarse a la frontera para exigir mi regreso o pedir las condiciones para devolverte. Pero lo que yo no entendía era el motivo por el cual me habían llevado con ellos.
Y Craig tampoco parecía del todo dispuesto a explicarme los motivos. Solo sé que con el pasar de algunos días, la sensación abrumadora de sentirme en un territorio ajeno se había disipado y me sentía gratamente seguro al lado del moreno. Este no se separaba ni un solo centímetro de mí, y se pasaba casi todo el día con un brazo alrededor de mis hombros, era una postura cómoda, no podía negarlo, pero igualmente se me hacía extraño que estuviera todo el día, incluso de noche hasta el momento de estar dormido pasando todo el día con esa protección implícita sobre mí, puede que únicamente asegurándose de impregnarme con su olor, cuando era evidente que no había más lobos allí además de su padre, su hermana menor y su amigo de perpetuos ojos rojos, Damien Thorne... Pero ninguno de los tres mencionados se acercaba a mí, ni siquiera para curiosear sobre el motivo por el que estaba allí "retenido", de hecho, su padre y su hermana ni siquiera sabían que estaba allí, y no parecía ser algo que Craig fuese a decirles... De hecho, muchas veces me preocupaba que pasara tanto tiempo conmigo y estuviera tan lejos de su familia... No sabía si era porque mantenía distancia con ellos para que no reconocieran mi olor, o porque realmente prefería estar única y exclusivamente conmigo...
Si le hacía sentir mejor... No iba a escaparme, simplemente porque no sabría ni como mirar a mis padres a la cara, mucho menos a Heidi. Y tampoco podría quitarme el olor de Craig antes de regresar, estaba demasiado marcado en mí por tanto abrazo, y no era malo, al contrario, era genuinamente reconfortante, pero sí tengo que decir que no era algo que pudiera esperarme, sobre todo porque en la manada no había visto aquel tipo de casos... Quiero decir... Stanley y Wendy siempre habían estado juntos... Nichole y Tolkien siempre habían estado juntos... Realmente los únicos que siempre habíamos estado solos, ya fuera porque estábamos comprometidos, porque esperaban que nos volviéramos adultos, porque estábamos tachados de la manada o porque estaban demasiado entretenidos peleando, éramos Cartman, David, Christophe, Jason y yo... Porque incluso Kevin y Scott tenían sus matrimonios preparados con hermosas chicas, no sabía qué había sido de Kevin, pero con Scott, él tenía una bella relación con Sophie Gray.
No sabía que sería de Heidi. Pero seguramente se concertaría un matrimonio ya fuera con Cartman o David, porque estaba seguro que con Christophe o Jason no sería una relación viable. Christophe siempre estaba ausente y muchas veces, cuando asistía, solo era para darse de golpes con todos y después volvía a desaparecer otros tantos días... Sacudí la cabeza para sacarme aquellas cosas de la cabeza y abrí los ojos lentamente después de aquella siesta y aquellos pensamientos tan abrumadores que no me dejaban poder descansar y relajar la mente.
Encontrándome con aquellos espectaculares ojos verdes cactus cuando me desperecé de aquella siesta... Y tuve una sensación estremecedora de déjà vu a cuando tuve aquel sueño en el que me resultaba imposible estar en medio del bosque y con él encima de mi cuerpo, pero aquello estaba pasando, y no pude contener mi corazón acelerado, ni el jadeo sorprendido, y tampoco la sonrisa en mis labios que apareció de forma inconsciente; Craig estaba con los brazos a los lados de mi rostro, los codos también estaban apoyados, se encontraba en una postura sumamente cómoda y parte de su peso sobre mi cuerpo, observándome desde arriba y con una sonrisa llena de cariño en sus labios. No pude evitar ruborizarme un poco.
- ¿Dormiste bien?- vacilé un poco a la hora de responder, me puse cómodo, pasando los brazos por detrás de la cabeza y la sonrisa que había surgido en mis labios se ensanchó, no podía evitar sentirme tan cómodo y reconfortado cuando estaba a solas con él.
- Sí... Eres muy cálido...- sonreí con tranquilidad acomodando las piernas, su cuerpo estaba recostado sobre el mío, su abdomen desnudo estaba pegado al mío y su pecho, con su vello corporal se pegó al mío cuando se acercó al inclinarse contra mí.
- Me alegra...- ronroneó frotando su cabeza contra la mía su frente y su nariz rozaron las mías y ronroneé un poco por ese gesto de cariño.- Te besaría ahora mismo...- murmuró tomando una mínima distancia.
- Hazlo.- en aquel momento no supe porqué acepté aquello, pero en los momentos en los que me encontraba, sabía perfectamente lo que Craig me hacía sentir, sabía perfectamente quién era Craig, sabía perfectamente lo mucho que este me cuidaba ya fuera protegiéndome del resto de gente que no estaban cómodos con mi presencia, o mimándome sin descanso alguno con besos en el cabello o caricias.
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Tremendo déjà vú ewe
Estamos llegando al último cuarto de la historia, tendría que haberlo avisado antes XD
Aquí las opiniones del capítulo -------------->
Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo
Bye~
By Silvia Line
[1102 Palabras]
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