Cigarrillo

— Los cigarrillos me recuerdan a ella – Dijo con aire de nostalgia en su voz

— ¿Por qué?

— Porque le prometí que no fumaria – Respondió consternado

— ¿Entonces por qué lo haces?

Con lágrimas en sus ojos añadió:

— Ella prometió que no me dejaría

***

Le miré,
como si de un ángel se tratase;
su alma,
también su envase
poseían una belleza inusual,
un atractivo natural
que solo a manos de Dios podría crearse,
todo lo que mi ser desease estaba allí,
en un cuerpo casual.

Su sonrisa de invierno volvía todo primavera,
era la bandera que quería para mi nación.

Con determinación me acerque con la cautela de una fiera,
cual cazador furtivo, fue la primera en dispararme al corazón.

Era a prueba de balas,
pero no a prueba de sonrisas.

Como "La monalisa"
era una invaluable obra de arte.

Mi primera reacción fue contemplarle,
luego a toda prisa se volvió pitonisa,
incluso el alma me robó.

Me pareció una espectacular idea
disfrazarnos de novios para Halloween.

No importaba si tenía que volverme su arlequín,
su protector,
su paladín,
o si tenía que hacerle gracias
y maromas como un Delfín.

Que hermosa historia de amor la que nos ocurría,
me daba energía su manantial de agua clara.
Nada generaba en nosotros apatía.

Pero hasta la luna tiene doble cara.

Me dijo: "Eres mi vida",
pero tenías más vidas que un gato

Bajo las suelas de sus zapatos era donde me quería.

Según dictaba su ideología yo era tan solo un novato,
por ello eligió pasar el rato haciendo fechorías.

“El futuro no será una fiesta,
amaras a quien no te ama,
por no amar quien te amo"
Eso fue lo que la vida gritó.

Me dejó frente a una inmensa cuesta;
para su argumento no tuve respuesta,
la avalancha me sepultó.

Llore para desahogarme,
pero terminé ahogado.

Me encontraba tocando más fondo que Kalimba.

De un gran peñasco estaba colgado;
se me arrojó al precipicio,
tal cual como Scar a Simba.

Me extendió su cordial invitación a desalojar su corazón.
En mi armazón sentí hundirse su espada.

Esta construcción
sufriría una demolición,
todo era ficción.

Fantasía sobrevalorada.

Nunca había rogado en mi vida,
pero en el fondo suplicaba que no me echara.

Me abandonó en un laberinto sin salida,
y yo pensé que éramos como yema y clara.

Me inyecte más fantasía para no morir de realidad,
pero la realidad arrolló al transeúnte.

Confundí el amor con la necesidad,
pero ya no me necesitaba.

Mis piezas concluyeron en completo desajuste.

No era que mentía muy bien,
era que yo tenía muchas ganas de creerle.

Aunque duela,
es más sano decir adiós.

Hoy le pido a Dios que me ayude a ser fuerte
cuando el dolor inminente muestre su lado feroz.

Lo peor no fue sentirme solo,
si no ser olvidado por alguien que no pude olvidar.

Creo que es natural si ante la pena me desmorono,
mi ser parecía de plomo, pero era de cristal.

Le invoque con tanta melancolía,
pero me entregó solo un punto y final;
el sentimiento fue mortal,
con mi plexo hizo carnicería,
pero yo aún definía su herejía como un hecho accidental.

Difícil no fue el adiós,
difícil fue no volver.

Me deje la piel y la plagó de cicatrices.

Soy un árbol sin raíces.

Esta noche la luna es de hiel.

Jugó a más no poder frente a mis propias narices.

Con el cariño y afecto de un cactus se acercó,
mi seguridad flanqueó,
me burló a su antojo.

No queda más que un despojo de lo que al piso tiró,
pero no estoy llorando,
solo me entro un recuerdo al ojo.

Ya basta de sentimientos señor corazón,
su trabajo es bombear sangre,
¿Acaso no ves la catástrofe cual bomba de Hiroshima?
¿Acaso no ves el clima color negro que se expande?
y aun así quiere seguir al enjambre de la bestia asesina.

No sé qué es más cruel,
¿Estar roto o romper a alguien más?

No se encontrar la paz luego de tanta desgracia.

¿Existirá en la farmacia algo que ayude quizás?
Ya que no  quiero llevar detrás el peso de su arrogancia.

Dicen que el primer amor jamás se olvida,
como olvidarlo si es el primero en romperte en pedazos.

Hoy día solo diviso el ocaso,
debido a que mi sol ya no ilumina.

Tan solo quedan ruinas en recuerdo de un fracaso.

¿Para escribir de amor debes estar enamorado o con el corazón roto?

Al final ya no importa ser poeta o ser basura.

Solo una cosa es segura,
me manejaban a control remoto,
y yo creía ser el piloto de esta vida de amarguras.

Una palabra no puede decir lo que una lagrima expresa.

Siento mi cabeza fundirse de dolor.

He pagado caro el error,
no todas las doncellas son princesas.

Las relaciones no se empiezan
con una eyaculación precoz de amor.

El supuesto amor eterno me duro un par segundos.

Como el Titanic me hundo,
aunque lo intenté prolongar.

Mi querer hacia usted era al mayor y detal,
eso le ofrecí a su mundo.

Ahora soy un moribundo en la cama de un hospital.

¿En dónde le reinicio?
porque usted no eras así.

O tal vez sí.

De igual manera
no logré percatarme del martillo
que me golpeo contundente,
por ello tan solo caí,
mientras te desvanecías en el viento,
como el humo de este cigarrillo.

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