⁹· romance perfecto
Peter se encontraba fuera del refugio dando algunas indicaciones a los Narnianos que irían a buscar alimento cuando las vio venir, sus dos hermanos y la rubia a la que le había roto el corazón, venían caminado tranquilamente hacia el refugio.
En sus caras una enorme sonrisa se dibujaba, Peter no pudo estar más enojado consigo mismo pues sabía que su relación con la joven Bennett había terminado.
—Peter, Chloe ha visto a Aslan y la ha nombrado protectora de la orden al igual que a Isa —el rubio miro a la joven Bennett y asintió, no sabía que más podría decir. Ni siquiera sabía si mirarla era bueno, ya había probado su puño una vez y vaya que le había dolido.
—Estoy a sus servicios, su majestad —dijo Chloe con seriedad, dándole a entender al rubio que seguía molesta con él, pues la había lastimado inconscientemente.
—Será mejor que descansen, debemos esperar a ver cuál será el siguiente paso de Miraz antes de tomar alguna decisión —las chicas asintieron y se encaminaron hacia dentro del refugio —. Chloe, yo...
—Ahora no, Peter —fue lo último que el rubio escucho, Chloe se adentró en el refugio dejándole ahí para con las palabras en la boca.
"Solo quería decir que lo siento" susurro Peter mientras volvía a lo de antes.
[...]
—Ed —el débil susurro de Isabella llamo la atención del azabache quien rápidamente regreso a su lado.
—Estoy aquí linda, estoy aquí Bella —dijo Edmund mientras tomaba la mano de su amada, comenzando a hacer círculos en su piel.
—Quiero agua —pidió la pelicastaña, el azabache tomo un poco de agua que los Narnianos generosamente le habían dejado a Isabella, con sumo cuidado le dio de beber y cuando Isabella termino de tomos suspiró con pesadez.
—Todo estará bien cariño, aquí estoy, estás con vida, sigues aquí conmigo linda y así será —dijo Edmund mientras abrazaba delicadamente a Isabella, pegándola a su pecho, después de un tiempo así el joven sintió a Isabella se tensara, alejándose bruscamente de él.
—¡Orión! —exclamo y salió corriendo de la pequeña habitación improvisada que le habían hecho, en busca del centauro, el pecoso tardo en reaccionar, pero salió detrás de ella cuando entendió a qué se refería.
—Bella, ¡Espera! Él está bien, al igual que tú necesita descansar —decía Edmund, pero entonces Isabella paro en seco, Orión estaba recostado y le habían tratado las heridas, la pelicastaña se arrodilló a su lado y le acaricio la cabeza ante la mirada de muchos Narnianos que le miraron con cariñoso.
—Oh querido Orión, muchas gracias, sin ti jamás hubiéramos salido del castillo, ahora descansa te lo tienes bien merecido, prometo que a partir de hora vengaré a cada uno de tus hermanos, eso tenlo por seguro —Isabella lo miraba con culpa y cariño, el centauro la escuchaba lejanamente pues estaba sumamente cansado.
—Linda, tú también debes descansar —dijo Edmund cargando a la pelicastaña estilo princesa, sonrojándola mientras que algunos Narnianos los miraban a embelesados ante aquella acción.
—Edmund Pevensie, bájame, que aún puedo caminar —Isabella trataba de liberarse de los brazos del azabache, pero su acción era inútil.
—Lo se linda, pero eres tan terca como Peter que lo más probable es que regreses corriendo, te tropieces y te hagas daño —explico Edmund sonrojando aún más a la pelicastaña.
—Lo siento cariño —Isabella recargo su cabeza en el hombro del azabache.
—Hablaremos de eso después, ahora por favor descansa, estaré aquí cuando despiertes —prometió Edmund cuando dejó a Isabella entre las mantas que servían como cama.
—¿Cómo sigue? —pregunto Chloe entrando y viendo a la joven pareja, no pudo evitar sentir celos, pero sabía que todo llegaría a su tiempo o eso había dicho Aslan.
—Se levantó hace unos segundos, acaba de dormirse, pero está bien, es una terca y una guerrera —confesos Edmund pensando que la pelicastaña no lo había escuchado, el azabache la miro "dormir", decidió salir junto a la rubia para tomar un poco de agua.
—Gracias Edmund, Isabella suele ser demasiado terca de no ser por ti, yo ya la hubiera golpeado, suelo ser muy brusca, pero solo pasa cuando estoy enojada, es como mi hermana, suelo sobre protegerla, pero ella lo hace más por mí que yo por ella —hablo Chloe viendo al azabache que estaba a su lado mientras tomaba un poco de agua, Edmund se sonrojó haciendo que la rubia soltara una risita.
—No me agradezcas mucho, la han lastimado infinidad de veces que a veces siento que no la merezco, he roto tantas promesas que siento que ya no debería confiar en mí —Edmund miro las estrellas una vez que salieron del refugio.
El azabache comenzó a recordar aquellas veces en dónde eran adultos, Isabella y él se escapaban de los deberes para estar tiempo a solas como mejores amigos mientras veían el cielo, otras veces bailaban sin música y en otras leían durante todo el día o mejor dicha Isabella leía mientras que él la veía, suspiro al recordar que ella se había enamorado de su hermano y el de ella.
Por su mente aún corría las palabras que su hermano le había dicho, quizá si era cierto, pero no quería darse cuenta, que tal que Isabella lo dejaría por Peter, sus inseguridades comenzaron a invadir la mente del azabache.
—Mi madre dice que cuando un hombre siente que no te merece, es por qué está incondicionalmente e irrevocablemente enamorado de ti, porque sabe que pase lo que pase siempre será así —confeso la rubia mientras daba otro trago de agua y miraba las estrellas.
—Entonces tu madre es muy inteligente —dijo la voz de Caspian mientras se acercaba a ellos, Edmund y Chloe lo miraron sorprendidos —. Disculpen que haya escuchado, pero venía a ver cómo segura la reina, aún qué si me permiten decir, en el castillo donde vivía, había un libro que contaba las anécdotas de los reyes y reinas de antaño, recuerdo haber leído que nunca se vio en Narnia un amor tan puro como el del Rey Peter y la Reina Isabella —la tención en el ambiente cambio drásticamente ante las palabras de Caspian.
—¿En serio? —pregunto Chloe mirando el vaso con agua que tenía entre manos.
—Si, siempre había soñado con conocer a la mujer perfecta con la que desearía casarme para vivir un romance como el de ellos —volvió a hablar del azabache, la rubia no pudo evitar soltar un suspiro de frustración.
—¿Un romance como el de ellos? ¿Con peleas y discusiones?, Por si no lo sabía ellos peleaban constantemente cuando había guerras, es por eso que Bella jamás se casó con Peter si discutían cuando estaban saliendo no se imaginaba cuando se casaran —confeso el pecoso mientras miraba a Caspian.
—En una relación siempre van a haber altas y bajas, ellos están hechos del uno para el otro, aún que no cueste admitirlo Ed —confeso Chloe mientras tomaba un poco más de agua.
—Y dime ¿Ya la has encontrado?, A tu chica perfecta —pregunto Edmund quería liberar un poco el ambiente, así que prefirió burlase un poco de Caspian sin mirarle, a lo que el joven comprimió una sonrisa.
—Claro que si —confeso Caspian, Edmund lo miro rápidamente y los tres chicos sonrieron.
—¿Y quién es esa chica, Caspian? —pregunto la voz de Peter, Caspian se sonrojó, mirando a Chloe pidiendo auxilio, este acto fue malinterpretado por Peter por se colocó entre la rubia y Caspian —. Te hice una pregunta.
—No tengo por qué responderte —confeso Caspian.
—Peter, vete —hablo Edmund entre dientes ante la acción de su hermano.
—No Ed, Caspian me dirá quién es la famosa chica que le roba el aliento —volvió a exigir el rubio.
—Chicos —hablo Isabella, todos se giraron a verle—. He visto a Aslan, me ha dicho muchas cosas y una de ella es que Chloe es una de las protectoras de la orden, pero Orión y yo vimos como Miraz era proclamado rey, dio la orden de montar un campamento para vigilar nos y así poder derrotarnos —los chicos abrieron sus ojos como platos y se miraron entre sí.
—Tranquila yo te protegeré está vez, lo prometo Isa —Peter tomo delicadamente el rostro de la pelicastaña, los tres chicos se quedaron estáticos ante su acción, una vez que se alejó de la pelicastaña comenzó a hablar —. Estoy intentando salvarte esta vez, tú eres.
—¡Soy una reina! ¡Y no necesito que nadie me salve! ¡No de Miraz! ¡No de la bruja blanca!, ¡Ni de nadie más! —Edmund miro a Isabella con tanto orgullo al igual que Caspian y Chloe —. Soy Isabella Backer, ¡Suma monarca y protectora de Narnia!, No me inclinaré ante nadie y lo sabes perfectamente Peter, cometiste un error, al igual que yo por escucharte, muchas vidas se perdieron, está vez no estaré dispuesta a qué otros mueran por tú no sabes cómo hacer una estrategia —todos los presentes escucharon las palabras de la joven reina, Susan y Lucy no eran la excepción, ambas hermanas sabían de lo la joven Backer era capaz, no le tenía mido, pero la admiraban demasiado.
—Ahí está la Isa que conozco —hablo Susan mientras se acercaba a ella y la abraza al igual que Lucy.
Edmund se acercó a Caspian —Ahí está tu romance perfecto —una vez que dijo eso comenzó a servirse un poco más de agua.
|| 09 • 09 • 2021 ||
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