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Aslan miro a Susan y Peter cuando Reepicheep se ofreció a mandar diez de sus ratones para que todos confiaran en lo que el león decía.

-Es hora -dijo Peter mientras tomaba la mano de Isabella.

-¿Es hora? -pregunto Edmund.

-Se acabó -le respondió Peter mirando a sus hermanos -. Nos vamos -se acercó a Caspian y le entrego sus espadas -. Después de todo, aquí ya no nos necesitan.

-La cuídate hasta tu regreso -le dijo Caspian al rubio.

-Ese es el problema, ya no vamos a regresar -dijo Isabella un poco triste.

-Vámonos -les dijo Peter a sus hermanos, Chloe y así su nuevamente novia Isabella.

Tanto como los Pevensie, Chloe e Isabella se despidieron de todos con una que otra lágrima que caía por sus mejillas.

-Vas a ser un buen rey -le dijo Chloe a Caspian-. Y creo que ya resolviste tus dudas.

-Yo también lo creo y tu igual -le respondió Caspian mirando a Susan.

Los dos se abrazaron y luego Isabella fue a abrazar a Aslan junto con Lucy, mientras Susan fue junto a Caspian.

-Me alegra haber venido -dijo la mayor de las Pevensie.

-No fue suficiente el tiempo juntos -contesto Caspian.

-Lo nuestro no hubiera funcionado -dijo Susan mientras dejaba salir una lágrima.

-¿Por qué no? -pregunto el nuevo rey con cierto tono triste.

-Porque soy 1300 años mayor que tú -le dijo Susan mientras reía y limpiaba aquella las lágrimas.

Susan se giró hacia sus hermanos con un poco de duda, pero luego se dio la vuelta y le dio un beso a Caspian.

-Supongo que lo voy a entender cuando sea mayor -dijo Lucy que estaba al lado de Isabella.

-Yo soy mayor y no lo entiendo -dijo Edmund mientras reía.

Al terminar el beso de los otros dos, Susan se giró y se puso de lado de Isabella y Chloe para tomar sus manos.

Era el momento de irse, los seis empezaron a caminar hacia el árbol, pero antes de entrar Lucy miro hacia Aslan y sonrió tristemente, después de eso volvió a su mundo.

Estaban en la estación de tren, como si nada hubiera pasado, el tren se paró en frente de los Pevensie abriendo las puestas. Un chico se subió al tren, era el mismo joven que había hablado con Susan en el puesto de revistas.

-¿No vienes Philips? -le pregunto el joven a Susan.

-¿No hay algún modo de volver?-pregunto el azabache mientras buscaba en su mochila.

-¿Ya echas de menos Narnia? -pregunto Lucy con burla a su hermano.

-No es eso, es que deje mi linterna allí -dijo Edmund cuadrando la risa de todos.

Las puestas del tren se cerraron y todos volvieron a sus aburridas vidas.

[...]

-Chicas ¿por qué tardaron tanto? -pregunto un joven rubio mientras pasaba su brazo por el hombro de Isabella.

-Pues estábamos pensando si te comprábamos algo, pero aún no nos decidamos por qué comprarte -contesto Chloe cuando vio que Isabella se había puesto nerviosa.

-¿Estás bien Bel? Te noto algo rara -pregunto olvides mientras tomaba delicadamente la cara de Isabella.

-Estoy bien Oli, solo que estoy un poco cansada, creo que me iré a casa, Chloe discúlpame con tu mamá iré a visitarla mañana -antes de irse abrazo a la joven rubia que le regaló una sonrisa.

-¿Quieres que te acompañe a casa? -pregunto Oliver mientras acomodaba su mochila.

-No es necesario, aparte tengo que dejar una carta en el buzón, ¿no querrás que Chloe se vaya sola o si? -pregunto la pelicastaña, haciéndole señas a su mejor amiga para que se fuera con su hermano.

-Mira Oliver, ya viene el tren si llegamos tarde mamá no va a regañar -la joven Bennett tomo el brazo de su hermano para que comenzar a caminar, despidiéndose de Isabella con un moviendo de sus manos.

Una vez que los hermanos Bennett se subieron al tren Isabella se dirigió a la salida para dejar aquella carta dirigida a su mejor amiga.

Después de dejar la carta comenzó a caminar observando aquellas casas, como las personas iban y venían, estaba a punto de cruzar cuando una bocina hizo que se detuviera.

-¡Ten cuidado, pequeña! Esta es la segunda vez que casi atropello a alguien -dijo el señor mientras retomaba su camino, asiendo que la joven Backer frunciera el señor.

Una vez que llegó a casa saludo a su madre que se encontraba en la cocina preparando la comida mientras escuchaba la radio.

-Isa me alegro de que llegarás, ayudame a poner la mesa -indico la señora Backer mientras le pasaba los cubiertos a su hija.

-¿Quién va a venir a comer? -pregunto la pelicastaña mientras ponía dos platos más.

-Estaba en el supermercado y me encontré con la señora Pevensie, hace mucho que no la veía y la invite a cenar -informo la mayor, Isabella trataba de procesar la información.

-¿Solo vendrá ella?

-Claro que no, creo que vendrá Peter o Susan, no lo sé, pero por si las dudas saca otros cubiertos -indico nuevamente las mujeres.

No había pasado ni un día y volvería a ver a los Pevensie, la pelicastaña no sabía como sentirse muchas emociones pasaban por su mente.

Pero lo que era una verdadera batalla era saber que es lo que sentía Isabella por Oliver, lo quería claro que lo hacía él la apoyo demasiado, quizá sentía amor o afecto, quizá solo le gustaba, pero no lo amaba, no lo amaba tanto como amaba a Peter.

Aquella charla que tuvo con Caspian no le había ayudado demasiado, pues la había confundido aún más, prefería pedirle ayuda a alguien más, pero a quien, se preguntaba a sí misma.

-Mamá -hablo Isabella mientras acomodaba los platos.

-Si cariño -dijo la mujer mientras sacaba una jarra de jugo de naranja.

-¿Pueden gustarte dos personas? -pregunto la pelicastaña mientras sacaba los vasos.

-¿Te gustan o estás confundida?

-Creo que estoy confundida.

-¿Qué es lo que sientes por ellos? -pregunto la mujer mientras se sentaba para prestarle atención a su hija.

-Pues no lo sé -confeso la joven mientras tomaba asiento junto a su madre.

-Bueno, ¿Cómo te sientes cuando estás con uno de ellos? -pregunto nuevamente la mujer.

-Cuando estoy con Oliver siempre estoy alegre, me respeta y acepta mis decisiones, nunca me juzga ni me reta o algo parecido, me ayudó en los momentos más difíciles para nosotros y nunca se fue -aclaro Isabella mientras sentía que su madre tomaba de su mano.

-¿Y qué sientes por el otro chico?

-Pues Peter me hace feliz, me reta en todo lo que hago, siempre me da su opinión y de deja ver en dónde estoy equivocada, él no supo por la que pasamos, pero él me hacía sentir libre, me hacía sentir yo misma con Oliver no era así pues tenía miedo que se burlara de mí, pero Peter me hace sentir algo que jamás sentía, me hace sentir segura y completa -confeso la joven Backer, haciendo que su madre sonriera.

-Tienes que aclarar más tus sentimientos, tomate tu tiempo lejos de ellos y si uno te busca o pide una explicación sabrás que uno de ellos es el indicado.

-¿Y si ambos me buscan?

-Las acciones valen más que mil palabras, quien te conozca mejor que sepa que te gusta y que no, es por qué te presta mucha atención -dijo la mujer antes de seguir con lo suyo.

Isabella se quedó pensando, recordando todo lo que había pasado, encontrando ese detalle que le indicara que uno de esos jóvenes era el indicado para estar con ella.

El timbre de la puesta sonó haciendo que la joven Backer saliera de su trance, se dirigió a la puerta para ver a la señora Pevensie acompañada de todos sus hijos, al ver a la pelicastaña todas la abrazaron.

|| 29 · 09 · 2021 ||