—No soy el indicado, sabes—dijo él—. Para decirte esto, pero enserio si Matías y Dust pueden soportar estar así con vos, yo no.

Baje la mirada.

—Ellos tienen sus razones—dije—. También vos...

—No Sol—dijo.

Yo subí la mirada.

Cada vez que veía sus ojos claros me daba rabia, rabia sin saber el porqué exactamente; tal vez porque quería que esos ojos me vieran de la manera que ven a Emma.

¡Oh maldita Sol!

—Tal vez sí, pues no soporto a ese estúpido—dijo—. Enserio odio verlo cerca de ti y aagh.

No dijo más.

—Pero yo no puedo pedirte que dejes a alguien porque no lo tolero, cuando yo estoy con alguien que tampoco te simpatiza.

¿Estaba dejándome en claro que no piensa dejar a Emma?

No respondí.

—Tampoco estoy diciendo que me agradará verte con Demian, solo no seré distante contigo; cómo ahora Matt y Dust.

—¿Sabes lo que me ha costado hacer que Dustin no le parta la cara?

—Lo sé.

Nació un silencio incómodo, ni siquiera podíamos vernos a la cara. ¿En que momento pasó esto? No sé, solo quiero que termine.

—Conmigo todo está bien, Sol—dijo.

—Me alegra no tenerte en mi contra—dije.

—Me alegra que entiendas esto—dijo y me abrazó.

Reposé mi mentón en su hombro y cerré los ojos, se sentía tan bien, tanto que no quería salir de ahí. Su olor, era delicioso. ¿Por qué tenías que ser vos Alexis?

—Te quiero hermanita—dijo.

—Y yo a vos.

—Es mejor que bajemos a comer antes qué el abuelo empiece a gritar—dijo Alex.

—Ahora te alcanzo, tengo que hacer algo.

Tome mi celular en cuanto se fue y lo primero que hice fue llamar a Zoe.

—Hola.

—Necesito verte—dije.

—¿Estás bien?

—Creo que sí.

—No me digas que se gritaron vos y Alex otra vez.

—No—dije en un hilo de voz.

—¿Matt y vos?

—No Zoe, es algo de... Alex.

—No quiero imaginarme, Emma ¿cierto?

—Sí.

—¿Llego a tu casa?

—Yo voy a la tuya.

—Me parece, nos vemos.

—¡Zoe!

—¡Dime!

—Te odio.

—Yo también te amo.

Colgué y deje caer el celular.

Zoe, Zoe, Zoe.

¿Por qué me metiste esto en la cabeza, Zoe?

Y Zoe diría; No me culpes de algo que sí o sí tenía que pasar.

Baje y el ambiente estaba menos tenso que otros días, parece nada pero tener a Alexis conmigo y no ignorándome es bastante.

Me duele por Matías, pero ¡Vamos! No toda la vida haré lo que el diga solamente porqué es cinco minutos mayor que yo.

—Nadie de ustedes se quitó el uniforme—mencionó Theo.

—No hubo tiempo, chiquitin—respondió Dustin.

—Se ven raros—dijo Andy—. Nosotros si nos vemos guapos con el uni del colegio.

Solté una risita.

Tenía que ser hijo de Ámbar.

—André baja de tu nube—dice Alex a su hermanito.

—Alex no seas sentido, a ti se te ve un poco bien el uni.

¿Un poco? Dios, esa camisa lo hace ver más rico que la comid...

¡Sol!

—Mi hermana si se ve muy bonita–dijo Andy.

—¡Vean que lindo!—dijo tía Ámbar.

—Coincido con vos, Andy—soltó Alex.

Ví a Alex y le sonreí, el hizo lo mismo.

¿Y así quería que esto acabara?

Estás mal Sol.

Horas después fui a casa de Zoe, hablamos un montón y luego volví a casa, mañana; Viernes, último día de la semana, últimas horas para escapar e ir a esa fiesta.

Al siguiente día en la mañana solamente estuve martirizándome al ver a Alex con Emma. Antes podía soportarlo, pero llegó el momento dónde ya no.

Ya no me podía segur diciendo "Sol, esto no puede estarte pasando" cuando si me estaba pasando, no podía repetirme "Tienes que detenerte, es tu hermano" cuando ya no podía detener esto que definitivamente si era algo más que solo cariño de hermanos.

Algo totalmente diferente.

Nuevos sentimientos.

A pesar de qué posiblemente claro estaba lo que sentía por Alex, no me sentía lista para aceptarlo.

Solo sabía que no podía seguir con Demian, aunque nada pasará entre Alex y yo por muchas cosas que lo impedirían, no podía estar con alguien que definitivamente ya no. Me pongo en el lugar de Demian, no me gustaría que estuviese conmigo si en realidad le gustaste otra.

Solo tenía un problema.

Cómo le terminaría.

—¡Mi amor! ¿Si vas hoy?—Demian apareció.

—Hola—dije—. Sí, supongo. Iré con Zoe igual.

—¡Perfecto, cariño! Esto va a estar que no lo vas a creer.

—Iré un rato nada más, mis padres no estarán, y quedaré con mis hermanos. Ya los conoces.

—¿No te escaparas cierto?—me preguntó.

—¡Qué! Claro que no.

CLARO QUE SÍ.

Seguramente quedar bajo el cuidado de los tres que posiblemente más odian a Demiam, me traería el permiso para ir a una fiesta de él.

O me escapaba, o no iba.

Y tenía que ir.

No sólo tenía eso, más bien iría a tratar de hablar con él y decirle que ya no más, no era un buen momento tal vez pero no podría seguir así.

Zoe tendría que ayudarme a salir de la casa, algo se me ocurriría.

Y me saldría perfecto.

O al menos eso creo.

.

.

.
¿Que pasará? ¿Quién descubrirá a Sol? ¿Habrá problemas? ¿Terminará mal?

Notas:

Bien, muchas de ustedes me han preguntado mucho sobre ¿Y LOS ITALIANOS QUÉ? Esa fue una historia que se me ocurrio de momento y en realidad no sabía que escribir exactamente, no sabía que trama dar y bueno se nos fue (cómo Iron man )

Pero desde hace tiempo tenía una historia en mente, pero había ciertos detalles que no concordaban. Pero esta aquí;

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