(EXTRA) ¿Y si nos casamos ahora?

Brooklyn, Nueva York. Días después.

Crystal se encontraba haciendo labores domésticas en el hogar siendo ayudada por el ex soldado, que tenía día libre. Al acabar, ambos entraron al cuarto de la castaña cuando era niña y miró la chica el lugar con nostalgia.

-¿Crees que... Deberíamos guardar todo esto en el sótano?- pregunta la castaña al hombre señalando las cosas que alguna vez pertenecieron a la mujer.

-Lo que tu decidas amor, lo haremos- responde el hombre tomando su mano y besando el dorso de esta.

-Tengo tantos recuerdos de este lugar, estas paredes han sido testigos de tantas cosas... Este lugar aparte de mi padre ha sido mi refugio, pero también me recuerda a la etapa más triste de mi vida, una que aún me cuesta superar. Christina dice que debo de enfrentar esa situación para poderlo superar finalmente- se sientan en la pequeña cama y acaricia la mano de su prometido- Pero no sé que hacer con todo esto- lo mira- Esto es tan difícil- Bucky la mira preocupado y en eso se le ocurre una idea.

-Mi amor, ¿Qué te parece si nos quedamos aquí a pasar la noche y vemos que sucede? Si te sientes incómoda mañana guardamos todo esto en el sótano y dejamos el cuarto bajo llave y si te sientes bien pues, quitamos lo que no sirva y podríamos usarlo para el cuarto de Luna en el futuro. Es una sugerencia- opina el hombre.

-Es una buena idea pero...- mira la cama- la cama es demasiado pequeña. ¿Cómo vamos a caber?- pregunta.

-Fácil, te abrazo más a mi y ya. Todo cabe en un jarrito si se sabe acomodar mi amor- contesta el hombre mientras Crystal sonríe.

-No pudiste haberlo dicho mejor príncipe. Probemos tu teoría y quedémonos aqui. Pero ahora mismo me gustaría una cosa- lo mira y el hombre la mira.

-¿Qué desea mi hermosa princesa?- pregunta el pelinegro acercando su rostro al suyo.

-Te deseo a ti- acorta la poca distancia que tenía la chica para besarlo apasionadamente- Bucky, hazme el amor, por favor- pide la chica entre besos.

-Como quieras, mi amor- el hombre la besa y ambos bajan de la cama para quedar en el suelo. Bucky toma algunos cojines y una manta con su brazo libre de la cama para lanzarla al suelo.

-Lo siento bebé- se disculpa- Pero necesito que me hagas el amor donde sea, ahora- añade la castaña entre besos y el la recuesta en el suelo.

-No te disculpes, princesa. Sé que nunca tienes suficiente de mi como yo tampoco lo tengo de ti- besa su cuello y le quita la blusa- Como me gusta esta imagen- la castaña le quita la remera y besa la unión de su torso con su brazo de metal. La chica toma la mano metálica y lo lleva hasta en medio de sus senos-donde estaba su corazón inhumano-aun cubiertos por el sostén.

-¿Sientes mi corazón, Bucky?- pregunta la chica y el la mira sonriendo para luego besar su frente.

-Claro que si, preciosa- acaricia su mejilla dulcemente.

-Sólo tu sabes hacer latir mi corazón Buck, solo tú pudiste repararlo y hacer que volviera a amar mi amor, solo tú- junta su frente con la suya- Te amo- Bucky la besa y la deposita en el suelo.

-Yo también te amo, encanto. Ahora solo relájate linda, yo me encargo de lo demás- vuelve a besarla y ambos terminan de quitarse la ropa para el soldado empezar a hacerle el amor a la castaña.

Luego de un buen rato, Bucky embistió por ultima vez a Crystal y junto con ella entre jadeos y gemidos descontrolados llegó a la cima del placer. El hombre salió de su interior y la chica como pudo se acercó a él para recostarse en su pecho. La respiración de ambos era un lío aún.

Pasaron toda la tarde y parte de la noche haciendo el amor en aquel cuarto sobre el suelo, pues la chica temía romper la pequeña cama con el plus del suero del supersoldado que su cuerpo poseía al igual que la de su hombre. Al amanecer, Crystal despierta y se aferra más al cuerpo de su prometido, que seguía dormido.

-Hay veces en las que pienso que todo esto es un sueño. Estás aquí, a mi lado, como hace tiempo- dice susurrando- Recordé algunas cosas de nosotros pero no sé si decírtelo. No quiero guardarte ningún secreto y tampoco deseo perturbar tu paz. Nuestro pasado aún duele- la chica lagrimea un poco y el hombre despierta para luego abrazarla.

-No pude evitar escucharte amor, no te sientas mal, lo entiendo. Tienes un corazón de oro preciosa, sé que quieres protegerme- limpia sus lágrimas- Ya no llores- besa sus ojos- Cuando sea el momento hablaremos de ello con calma, porque tampoco deseo perturbar tu paz- toma su mano.

-Creí que te molestarías-el hombre la mira- yo...- él la calla con un beso.

-No digas nada mi amor- sonríe- vamos por una ducha y luego desayunar. Pasamos una buena noche aqui, creo que el cuarto pasó la prueba- se levanta y la chica se cubre con la sábana y el pelinegro se coloca el bóxer para luego ayudarla a levantarse del suelo.

-Tienes razón, además debo de alimentarme bien para entrenar mis dones, pasamos una noche genial y muero de hambre- se frota el estómago mientras el hombre se acerca y besa su frente para abrazarla.

-No has parado desde que supiste de tus nuevas habilidades. Estoy orgulloso de ti, encanto- sonríe levemente y le da un pequeño beso.

-Hay algunos dones y emociones que aún no comprendo como Guardiana, pero de eso se trata, de aprender. Además, el diario de mi mamá me está ayudando un poco- sonríe al separarse.

-Serás la mejor Guardiana que el mundo haya visto- besa su frente- Vamos a ducharnos amor- el hombre la toma en brazos y la chica iba a decir algo- Juntos- Crystal sonríe.

-Está bien, estoy muy sucia y quiero que me bañes- el pelinegro ríe.

-Eres insaciable, y así te amo- el hombre la lleva en brazos hasta el cuarto del baño.

-Yo también te amo- lo besa tiernamente y ambos entran bajo la ducha a amarse nuevamente.
...

-Aaaaaghh! No puede ser!- la castaña se frustra dejando caer el diario de su madre al suelo y se dirige muy molesta hacia la piscina. Al rato, Bucky llegó a la casa y se topó con dicho diario en el suelo. Decidió buscar a su amada y la encontró sentada a orillas de la piscina hundiendo ambos pies en el agua visiblemente molesta mirando a la nada aún sin percatarse de su presencia, el hombre lentamente se quita los zapatos y se remanga el pantalón.

-¿Y esa cara, amor?- el hombre se acerca a ella.

-No puedo controlar del todo el fuego...- responde mirándolo mientras el se sienta a su lado mientras la atrae a él con su brazo de vibranio que la rodea con sus hombros.

-¿Quieres contarme lo que sucedió? Encontré el diario de Ambur en el suelo- pregunta.

-Si, necesito desahogarme- hace una pausa- ¿Recuerdas cuando volví del limbo y estaba cubierta completamente de fuego? Intenté expandir mi poder con ese elemento como aquella vez por todo mi cuerpo y es inútil, lo intenté mil veces y no pude, solo de mis manos puedo sacarlo- responde triste.

-Mi vida- el hombre deja un beso en su frente- ¿No crees que tienes que tener paciencia? Me refiero a que deberías tomarte una pausa. Puede ser por el estrés el que no puedas desarrollar ese don, has estado entrenando sin parar- la mira.

-Es que no es tan sencillo, quiero hacer las cosas bien, y al no poder hacerlo hoy, me frustra demasiado. Quiero ser una buena guardiana, es mi deber- baja la cabeza.

-Yo lo sé cariño, pero no has parado ni un día y no quiero verte mal otra vez- Crystal lo mira.

-Tienes razón, no me he puesto a pensar en que me estoy sobrecargando con los entrenamientos, pero no quiero fallar a nadie- Bucky la abraza.

-A mi no me fallarás jamás encanto. Puede que el suero no te canse físicamente pero mentalmente tiene sus límites.- toma su mano- tienes que descansar princesa- Crystal lo mira.

-Está bien mi amor- lo besa- No te saludé como debía. ¿Cómo estás? ¿Cómo te fue en el trabajo?- pregunta

-Con Joe, me fue bien. Ahora que ya estás mejor, yo también estoy bien- sonríe y la besa- En las buenas y en las malas, en la salud y en la enfermedad...- lo besa ella nuevamente con ternura.

-No veo la hora de convertirme en tu esposa Bucky, eres lo que siempre quise en mi vida mi amor- el pelinegro la mira con un amor tan profundo que a la chica se le ocurrió una idea.

-¿Y si nos casamos por el civil ahora mismo?- pregunta emocionada rompiendo el silencio.

-Amor, ya es tarde y el registro civil está cerrado- la chica lo mira.

-Mañana al mediodía- responden al unísono.

-Tenemos que tener testigos de mi parte y tuyos. Pido a Sam y a Yulissa- levanta la mano el pelinegro.

-Yo a Sarah y a mi papá Rhodey- sonríe- Oh por Dios mañana estaremos casados- murmura nerviosa pero feliz.

-Al fin serás mi mujer con todas las de la ley- la besa tiernamente.

-Falta la boda "religiosa". Medusa me dijo hoy que todos los preparativos en Attilan están viento en popa- murmura preocupada.

-Amor Medusa está feliz, deja todo en sus manos. Todo saldrá bien- toma su mano.

-¿Porque no llamamos a nuestros testigos y les avisamos de la boda civil?. Tambien debemos de avisar a Medusa y a BlackBolt- informa la chica ansiosa.

-Es una gran idea, amor- la besa y saca su teléfono.

Bucky llamó a Sam y a Yulissa para anunciar su matrimonio civil, el moreno pegó tremendo grito fangirl de la emoción que el hombre tuvo que alejar su teléfono de su oído para no quedarse sordo. Crystal llamó a Rhodey y a Sarah para informar lo que había decidido con su novio. El Coronel felicitó a la castaña y le prometió estar ahí para cuando firme el acta y Sarah lloró de la emoción al escuchar lo feliz que estaba la castaña y también prometió estar ahí con ella. La castaña tomó el brazalete y se comunicó con Medusa que estaba en Attilan que también estaba feliz y le informó que mañana a la mañana al llegar a la ciudad irían al Mall por un vestido para la ocasión a pesar de que ella se negara.

-Listo- sonrie- De mi lado estarán todos- informa la chica.

-De mi lado también- sonríe para luego besarla por enésima vez.

-Me duelen los hombros- Suelta una gran bocanada de aire- Creo que me tomaré unos días para descansar mi mente y mi cuerpo para volver a entrenar- informa.

-Me parece muy bien mi amor. Ahora- se acerca y la toma en brazos- Sólo quiero consentir a mi futura esposa para que descanse bien- la chica sonríe complacida mientras el hombre entra a la casa. Fueron al baño, donde ambos mediante besos y caricias lentas fueron despojándose de sus ropas y entraron a la tina juntos. Bucky masajeó con cuidado sus hombros y notó lo tensa que su novia estaba, sin duda debía de descansar y él se encargaría de eso. Al terminar, fueron a la habitación donde nuevamente en la cama Bucky masajeó nuevamente todo el cuerpo desnudo de la chica, que bostezaba y luchaba por seguir despierta de tan relajada que estaba gracias a él.

-Amor, tengo sueño y debo colocarme la pijama- murmura de espaldas adormilada.

-No hace falta mi amor, tú descansa que yo te visto- besa su mejilla y va al armario por unas bragas de la chica y una remera negra suya para vestirla y unos pantalones junto con unos bóxers negros para él. Se vistió y fue con la ropa que eligió hasta la cama para vestir a la chica que estaba ya en el mundo de los sueños. La vistió con cuidado para luego cubrirla con la manta para luego recostarse él y atraerla contra su pecho para abrazarla y protegerla antes de caer dormido feliz porque al día siguiente se casaría con su amada princesa de pantalones ajustados.

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