— ¿Por qué quieres ayudarlos? — preguntó la madre de Jimin.

— Porque es lo mínimo que puedo hacer después de todo el caos que provocaste el año pasado. — respondió Jimin.

Park Sohee sonrió.

— Es curioso que esa sea tu respuesta. — dijo y bebió un poco de su taza de café—. Pensé que dirías que quieres ayudarles porque son tus amigos, pero parece que en realidad lo haces para redimirte por lo qué pasó.

— Son amigos. — dijo Jimin con tono firme—. No cambies el significado de mis palabras.

— No lo hice, tú dijiste "porque es lo mínimo que puedo hacer..." — Park Sohee se acomodó en su asiento.

— Porque es cierto, los lastimé por tú culpa. — dijo Jimin molesto—. Y estoy aquí por ellos.

Park Sohee sonrió.

— ¿Aún quieres que te perdonen? — preguntó curiosa.

Jimin cerró los ojos con fuerza y negó.

— No estoy aquí para hablar de eso. — dijo abriendo sus ojos—. Solo haz lo que te digo, mamá, vendrá un abogado para hablar contigo. Tienes que declarar lo que me dijiste, que esa periodista te contacto para que tú usaras esa información y fotos.

— Pensé que hice lo suficiente al llamarte, no es mi culpa que tú no atendieras a tiempo, cariño. ¿Por qué tengo que exponerme de nuevo?

— Porque todo esto empezó contigo. — dijo Jimin sintiéndose frustrado—. Se los debes, traicionaste a tu mejor amigo y ni siquiera te importa.

La sonrisa de Park Sohee tembló un poco.

— ¿Has visto a Soo? — preguntó curiosa—. ¿Cómo está?

— Furioso. — respondió Jimin aunque aún no tenía la oportunidad de reunirse con los padres de Taehyung—. De nuevo su hijo está en medio de un caos mediático que tú tuviste la oportunidad de evitar y no lo hiciste.

— Te llame, lo intente. — se defendió Park Sohee.

— Debiste tratar de contactarlos a ellos. — dijo Jimin.

— Ambos sabemos que ninguno de ellos me habría escuchado, incluso si lo hubieran hecho habrían pensado que yo lo organicé. — Park Sohee se encogió de hombros—. Ya me humille demasiado en ese tribunal el año pasado.

— Mamá, declarar a favor de ellos será...

— Cariño, sinceramente no veo porque les gusta crear un drama más grande, después de todo todo es cierto, ese cachorro existe, ninguna foto fue editada, claro, tal vez exageraron un poco en sus notas, pero... — Park Sohee se encogió de hombros—. Son sitios de chismes, no puedes esperar mucha información verídica de ellos.

— Se trata de la privacidad del cachorro. — dijo Jimin frustrado—. Lo acosaron en su escuela de arte, mamá. Tiene solo tres años.

— ¿Kibum quedó en cinta justo cuándo Yoongi tomó el cargo de CEO? — preguntó Park Sohee curiosa—. Ahora suena a toda una historia de amor trágica, él oculto el embarazo por el bien de Yoongi y decidió cuidar del cachorro porque fue el resultado del amor de ambos. — sonrió—. No sé porque nadie pensó en eso. Esa historia vendería más que Taehyung siendo el tercero en discordia.

— ¡Mamá! — Jimin se puso de pie furioso—. ¿No estás escuchándome? — preguntó molesto

— Por supuesto que sí, cariño. — respondió Park Sohee con tono suave—. Toma asiento y no vuelvas a gritarme.

Jimin se sentó de nuevo.

— Escúchame, solo diles que vas a declarar, eso es todo.

Park respiro profundo y suspiró para después beber un poco de café y morder una galleta.

— Bebé tu café o va a enfriarse.

Jimin miró su taza humeante y la tomó con cuidado para beber un pequeño trago.

— ¿Lo harás? — preguntó Jimin sintiéndose ansioso.

— ¿Por qué debería hacerlo? Ellos piensan que soy una terrible persona, debería no hacerlo para darles la razón. — Park Sooje mordió una vez más su galleta y limpió las migajas que cayeron en su vestido.

— Mamá. — dijo Jimin frustrado—. Acepta declarar, por favor, tal vez no por ellos, pero mi. — pidió.

— ¿Por ti? — preguntó Park Sohee.

Jimin asintió.

— Le hiciste daño a mis amigos. — murmuró—. Si declaras a su favor...

— ¿Vivirás conmigo de nuevo? — preguntó Park Sohee interrumpiendo a su hijo y sonrió.

🌷

Taehyung y Jungkook estaban estacionados frente a la casa de Park Sohee, ambos estaban ansiosos porque Jimin no respondía sus mensajes y tampoco sus llamadas.

— ¿Deberíamos bajar y golpear la puerta? — preguntó Taehyung.

— ¿Cuánto tiempo pasó? — preguntó Jungkook.

Taehyung observó la hora en su celular y suspiró.

— No lo sé ¿30 minutos? — murmuró.

Ambos se miraron en silencio durante unos segundos y abriendo las puertas de la camioneta para bajar y avanzar de prisa hacia la puerta.

— Tae, no te vayas a meter en problemas o HyeJin me va a enviar de regreso a Londres. — dijo Jungkook mientras caminaban.

Taehyung soltó una suave risa.

— Si Minnie está bien, no haré nada, pero si veo una sola lágrima... — murmuró, se miraron de reojo y comenzaron a correr.

Subieron los escalones y se detuvieron frente a la puerta, ambos estaban a punto de golpear la puerta, pero se abrió.

Ambos se quedaron con la mano en el aire.

Jimin fue quien abrió la puerta y frunció el ceño al verlos.

— ¿Qué hacen? — murmuró.

— Estábamos preocupados. — murmuró Taehyung.

Jimin les sonrió un poco.

— Todo...

— Qué sorpresa, Kim Taehyung y Jeon Jungkook. — dijo Park Sohee apareciendo detrás de Jimin—. Lo de sorpresa... no lo es exactamente, donde está uno de ustedes, siempre está el otro. Un placer verlos.

— No opino igual. — respondió Taehyung.

Park Sohee sonrió un poco.

— Notó un poco de rencor en tu mirada. — comentó ligeramente divertida.

Jungkook tomó del abrigo a Taehyung porque había dado un paso hacia adelante.

Park Sohee los miró a ambos con curiosidad y sonrió.

— Ustedes simplemente se niegan a ver lo que todos vemos, espero que cuándo se den cuenta, no sea demasiado tarde.

— ¿Nos vamos, Jimin? — preguntó Jungkook ignorando a la señora Park.

Jimin asintió.

— Aún eres un maleducado, Jungkook. — dijo Park Sohee—. Sé que los Kim te dan todo, pero eso no te convierte en uno, así que.. se más cuidadoso con tus modales.

— ¡Mamá! — dijo Jimin furioso.

— Cuidado con lo que dice. — dijo Taehyung empuñando sus manos.

— No creo que estes en una posición en la que puedas darme advertencias. — Park Sohee miró a Taehyung.

— Solo vámonos. — dijo Jungkook jalando suavemente hacia atrás a Taehyung.

Jimin también se paró frente a Taehyung para empujarlo suavemente hacia atrás.

— Ya vámonos, Taehyungie. — murmuró Jimin.

Park Sohee sonrió.

— Saluda a tu padre de mi parte, dile que nos veremos pronto.

Taehyung gruñó y mostró sus pequeños colmillos.

Park Sohee dio un disimulado paso hacia atrás, pero sin borrar su sonrisa.

— Nos vemos, hijo. — dijo mirando la nuca de su hijo.

Jimin no respondió.

Jungkook y Jimin obligaron a Taehyung a que se diera la vuelta para caminar hacia la camioneta.

A sus espaldas escucharon la puerta cerrarse.

— No la soportó. — dijo Taehyung furioso—. No puedo creer que hasta hace un año la adoraba. — continuó—. Ahora no soportó verla... me causa náuseas y estr...

Jimin y Jungkook vieron a Taehyung correr hacia un arbusto y corrieron detrás de él, al llegar a su lado lo vieron vomitar.

Jungkook acarició la espalda de Taehyung y Jimin se dio prisa para evitar que ensuciara su abrigo y bufanda.

— ¿Estás bien? — preguntó Jungkook mirando a Taehyung con preocupación.

Taehyung bufó molesto y se quitó la bufanda para limpiar su boca.

— No, no estoy bien, guardarme mis emociones me hace sentir mal. — dijo molesto—. Mis insultos hacia ella se convirtieron en vomito. — camino hacia la camioneta furioso.

Jimin y Jungkook intercambiaron una mirada preocupados.

— ¡Era mi bufanda favorita y ahora está arruinada! — dijo Taehyung levantando su bufanda para agitarla.

Jungkook y Jimin soltaron una suave risa.

El alfa dio un vistazo alrededor y besó fugazmente los labios del omega.

— Fuiste muy valiente. — murmuró para después correr detrás de Taehyung y decirle que se niega a subirse a la camioneta si la bufanda también lo hace.

Jimin se sonrojó y corrió detrás de ellos riéndose por lo bajo porque Jungkook y Taehyung ya se estaban peleando por la bufanda.

🌷

Yoongi se estacionó frente al edificio y bajo de inmediato del auto ignorando las llamadas de SeokJin y Hoseok, primero quería saber dónde estaba Kibum, después les explicaría lo qué pasó.

Entró al edificio y Minjae ya estaba esperándolo.

— Min. — dijo Minjae caminando a su lado.

Yoongi no se detuvo y continuó caminando hacia donde los letreros indicaban que estaba la oficina del gerente.

El personal de seguridad los estaba siguiendo porque no podían entrar sin identificarse, pero Minja se disculpaba en nombre de Yoongi mostraba su gafete.

Yoongi no golpeo la puerta de la oficina del gerente, la abrió de golpe.

El gerente se puso de pie con el rostro furioso, pero al reconocer a Yoongi aclaro su garganta.

— Buenas noches. — saludó—. ¿Puedo ayudarle en algo joven Min Yoongi? — preguntó.

— Las cámaras. — dijo Yoongi mirándolo.

— Oh... ya veo, viene con el joven Minjae, cómo le comenté a él...

— ¿No puede dar el permiso? — preguntó Yoongi interrumpiéndolo.

— No porque...

Yoongi salió de la oficina.

— ¿Dónde está la oficina del jefe de seguridad? — preguntó mientras caminaba por el pasillo.

— Por el lobby. — Minjae acelero sus pasos para guiar a Yoongi.

Llegaron a la oficina donde Yoongi repitió la acción, entró sin tocar la puerta, pero no había nadie.

Yoongi salió de la oficina y se dirigió al lobby donde el personal dejó de hablar al verlo.

— ¿Dónde está el jefe de seguridad? — preguntó mirando a la recepcionista.

La recepcionista miró a Minjae y después a Yoongi.

— ¿Es...? ¿Es por el modelo Kim Kibum? — preguntó con nerviosismo.

Yoongi asintió.

— Yo... estaba en recepción cuándo él salió. — murmuró—. Acabo de llegar yo estaba...

— Lo siento, eso no importa ahora. — la interrumpió Yoongi—. ¿Sabes a donde fue? — preguntó impaciente.

— Eh... no exactamente. — dijo la recepcionista—. Un hombre, bueno, dos hombres se acercaron a él cuándo estaba por salir. Uno de ellos... se acercó a saludarme y estaba a punto de decir algo, pero al ver a Kim Kibum se disculpó y se fue. — explicó.

— ¿Cómo era? — preguntó Yoongi.

— Min, el jefe de seguridad... — dijo Minjae llamando la atención de Yoongi.

Yoongi se giro para saludar y presentarse con el jefe de seguridad que estaba acompañado del gerente, le pidió ver las cámaras de seguridad y esta vez no pudieron negarse.

Minjae les dio un vistazo molesto porque a Yoongi lo escucharon de inmediato.

Por fin les mostraron la grabación basándose en la hora que mencionó la recepcionista y lograron ver a Kibum.

Yoongi maldijo al ver a su padre, agradeció y salió de la oficina mientras saca su celular para llamar a HyeJin.

— Min Yoongi ¿Qué pasó? — preguntó Minjae caminando detrás de Yoongi—. ¿Sabes quienes son? — preguntó—. ¿Llamó a la policía?

— No, yo me encargo. — dijo Yoongi y salió del edificio.

Yoongi subió al auto de SeokJin y manejo directo a su casa, apretó el volante sintiéndose cansado y harto de la situación.

¿Cuándo se van a terminar las problemas?

Piso el acelerador.

🌷

Yoongi vio frente a su casa tres hombres que caminaron para impedirle el paso, no se detuvo aceleró y esos tres hombres tuvieron que saltar para salir del camino.

Yoongi se estacionó y salió auto para dirigirse a la entrada.

Escuchaba que lo llamaban diciéndole que no podía entrar porque es propiedad privada, pero no los escuchó.

Afortunadamente la contraseña continuaba siendo la misma y su padre tampoco había quitado su huella del sistema.

Al entrar el aroma de Kibum golpeó su nariz y continuó caminando siguiendo el rastro del aroma.

Vio a Kibum sentando en un sillón, una persona detrás de él tenía sus manos apoyadas en sus hombros impidiéndole moverse, mientras que Kibum forcejeaba un poco y le decía algo a su padre que no escuchó.

Sin pensarlo mucho, golpeó con fuerza el rostro del hombre que estaba evitando que Kibum se pusiera de pie y lo empujó apartándolo.

— Vámonos, Kibum.

Kibum se puso de pie de prisa y se colocó a lado de Yoongi.

— ¿Estás bien? — preguntó Yoongi mirándolo y notó la mejilla roja de Kibum.

Yoongi se giró hacia su padre, pero Kibum lo tomó del brazo.

— Solo vámonos. — pidió.

Yoongi respiro profundo y contuvo la respiración durante unos segundos, miró a su padre y soltó el aire.

— Solo quería conocer a mi futur...

Yoongi se dado del agarre de de Kibum y estrelló su puño contra el rostro de su padre, lo tomó del sacó y lo miró.

— Te lo advertí. — dijo mirándolo—. Olvídate de mi.

Lo soltó y el señor Min perdió el equilibrio y terminó cayendo al suelo.

Yoongi vio al guardia de seguridad avanzar hacia él, pero el guardia se detuvo y se acercó al señor Min para ayudarle a ponerse de pie.

A su paso Yoongi tiraba cada figura decorativa y mueble que estaba a su alcance, tomó a Kibum suavemente del brazo para guiarlo a la puerta.

— No importa lo que hagas, Yoongi, sigues siendo mi hijo.

Mientras avanzaban y sobre el ruido provocado por cada cosa que terminaba estrellándose contra el piso escucharon la voz del señor Min.

Salieron de la casa, Yoongi dio un fuerte portazo.

Abrió la puerta del auto para que Kibum subiera, ignoro la voz de su padre que continuaba diciéndole que eran familia y no le impedirían tener relación con su nieto y a los otros guardias que trataban de detenerlo para que escuchara a su padre.

Yoongi simplemente los empujaba y subió al auto de SeokJin, lo encendió y miró al frente.

Su respiración estaba ligeramente agitada por lo furioso que se sentía, pisó la reversa y antes de poder pensar las cosas mejor, piso el acelerador.

— No, no, no. — dijo Kibum tomando el brazo de Yoongi.

En contra de su voluntad, Yoongi frenó dándole solo un golpe a la camioneta de su padre que no fue lo suficientemente cómo para activar las bolsas de aire.