Escritor: JaquiiAleWorld
Au/temática: Playa o piscina.

Debo admitir que esté capítulo me salió mucho más largo de lo que yo mismo había pronosticado. Al principio no tenía mucha inspiración de como podría ser, pero al final se logró buenas resultados y les traje esto(◍•ᴗ•◍)❤

I

Cuando hace tanto calor, ¿Qué mejor que salir con tus amigos a la mejor playa de la ciudad? Es perfecta para la ocasión, hasta puedes conquistar a tu interés amoroso entre la arena y el agua fresca de la playa. Con comida deliciosa en los restaurantes al aire libre cerca de la costa, y más diversión por supuesto. O al menos, esto pasaba por la mente de Jian Yi y He Tian quienes ambos se habían puesto de acuerdo en la salida con la que se pusieron de acuerdo de manera "estratégica". Uno dando la idea con total inocencia y el otro motivando la y planificando la mejor para lograr ambos su propio objetivo.

Pero el importante factor que debe estar presente para que sus invitados quieran ir, es el calor. Cosa que estando en época de verano y la capa de ozono más delgada que nunca —tema muy preocupante por cierto—, convence de alguna manera a las otras partes de asistir en grupo.

Aunque al más complicado de convencer siempre ha sido Mo Guan Shan, está vez no fue la excepción. Quién aunque realmente se moría del calor, no sabía si era tan buena idea ir ya que le queda muy lejos y su presupuesto no alcanza para su proporción de comida y pasaje.

Los chicos —Jian Yi y He Tian— le explicaron cómo estaría el asunto y que no debía preocuparse en nada relacionado a los gastos. Que él es un invitado y debe disfrutar del viaje a la playa, además de hacer recordatorio de llevar un traje baño y ropa extra o un cambio de ropa, por cualquier cosa que pase.

Otra cosa que terminó de convencer al pelirrojo fue su madre. Quién ella le insistía en que está bien pasar unos días con sus amigos en la playa, y más con esa oleada de calor que se presenta en el mes que realmente es insoportable y ellos no tiene para costear un aire acondicionado (clima).

Los cuatro chicos se instalaron en el único hotel más cercano a la zona playera para dejar varias de sus cosas ahí y solo llevarse las que necesiten para la aventura en la arena y agua. Cómo toallas, sombrillas de playa, bloqueador solar, ropa para cambiarse, sus celulares, y por supuesto, mucho dinero de por medio.

Los chicos se instalaron ni tan cerca ni tan lejos de la costa del agua. Disfrutan del fresco, la arena entre sus pies y el olor a agua salada muy cerca de ellos.

La atención de He Tian es captada por algunos pares de segundos por sus amigos, al ver cómo el tranquilo y serio Zheng Xi le pone bloqueador solar en la espalda de Jian Yi con cierta calma y paciencia, mientras que el otro parece disfrutar demasiado del contacto debido a sus pequeños gestos, lo cuál le da por hacer lo mismo con su colorado.

—Pequeño Mo, ¿Quieres que te ponga bloqueador solar también?— pregunta con emoción oculta, y un brillo a su alrededor lleno de determinación, esperanza y confianza. En su cabeza pasa el siguiente pensamiento:

"¿Quién se negaría a recibir tal ayuda de mi noble parte?"

De tan sólo imaginar untar aquella crema cero grasosa en la piel ajena del pelirrojo, le da escalofríos, unos muy satisfactorios y sus ojos parecen casi dilatarse.

—¿Por qué no te vas al carajo? Yo puedo hacerlo solo, no necesito de ti. — le responde a la defensiva y claramente indignado porque el He crea que necesita de su ayuda. Con aquel característico ceño fruncido en su entrecejo, se niega de primera a que el mayor se acerque a él.

—Oh vamos, no seas tímido. No haré nada sucio. Además no alcanzas hasta ahí.— sigue insistiendo Tian, claramente no piensa rendirse tan fácilmente.

—No quiero que un hombre me ponga bloqueador solar con esa mirada de pervertido. — añade mientras arquea su espalda al sentir un escalofrío.

A comparación de Tian, Xi y Yi, Guan Shan es el único que tiene puesto encima una camisa de manga corta y de botones. Fresca y cómoda, pero no permite ver de su cintura para arriba. Los otros tres no llevan nada puesto encima más que unos shorts playeros que les llegan hasta una pulgada arriba de la rodilla y en los pies unas sandalias que cada tanto rato se quitan y vuelve a poner.

—Oh, ¿Y si fuera una mujer, si me dejarías?— dice persuasivo y sin dejar de sonreír con picardía.

—Deja de molestar. — dice fastidiado, no tiene muchas ganas de huir de él así que por esta vez, es misericordioso y al estar de buen humor, lo deja pasar.—Haz lo que quieras. — añade con un tono ligeramente molesto mientras se quita la camisa que trae puesta y se recuesta en la toalla donde estaba sentado hace poco, boca abajo dejando ver su tersa espalda.

La espalda de Mo es tan blanca, más no llega a ser pálida y eso le encanta, que tenga color y calidez. Puede observar pequeñas pecas en la zona de la espalda alta. Ancho de hombros pero delgado de cintura y las caderas no tan desiguales a los hombros. Sin duda le gustaría ver mejor la circunferencia de sus asentaderas, pero no debe tentar a su suerte, ya suficiente asombrado está que Mo le permita echarle protector solar sin darle más discusión.

—¿Por qué tardas tanto?— la voz de Mo lo trajo de vuelta a la realidad, se había quedado más tiempo del debido embobado con los hombros y espalda del pelirrojo. Con su piel calida y suave.

—Enseguida lo hago~

Siente como alguna clase de dejá vu al sentir la piel tersa del pelirrojo sobre la palma de sus manos. Untando una buena proporción del bloqueador solar sobre su cuello, hombros, espalda alta y baja, incluso siente como Mo se estremece ante sus caricias disimuladas, aunque obviamente nunca lo admitirá. El tacto en sí es demasiado placentero, e incluso podría llegar a ser erótico si no hubiera nadie más alrededor, solo ellos dos en un ambiente más romántico y caliente donde Guan Shan cayera ante sus encantos naturales.

Mo reprime cualquier jadeo que delate lo bien que se siente  las grandes manos de He Tian aplicando el bloqueador solar encima suyo, y cuando considera que ya está a nada de terminar, la energética pero algo molesta voz de alguien se hace presente en medio de ambos.

—Oigan tortolitos, nos toca a nosotros.

La llegada de Jian Yi hace que Mo se pare de inmediato de su lugar y lo mire fulminante por como se dirigió a ellos.

—¿Tocar? ¿Qué nos toca?— dice confundido el He, parándose de igual manera. — Pequeño Mo, ¿No quieres echarme bloqueador solar a mí también~?— dice persuasivo como detrás de él. Mo hace un gesto raro e intenta ignorarlo.

Aunque ese pequeño rubor en sus mejillas no pasa de desapercibido. Claro que se imagina echarle bloqueador solar a He Tian en su espalda, pero tampoco es algo que él iniciará o hará de verdad.

—Jugar contra ellas a voleibol. — responde Jian Yi tranquilamente, encogido de hombros mientras se estira. 

¿Cómo fue que en menos de diez minutos Jian Yi consiguió ponerse de acuerdo para jugar un pequeño partido de voleibol contra otro grupo de desconocidos? Pensó que lo primero que quería hacer es echarse al agua. De eso habló en todo el viaje con ilustra emoción.

—Yo no soy bueno en ese deporte.— se cruza de brazos Guan Shan sin ánimos de participar. —Y nunca acepte-

—El equipo que gane será invitado por el otro a ese famoso restaurante de mariscos. — le interrumpe Jian Yi sin pena alguna, señalando el dichoso lugar del que habla.— Podemos pedir lo que queramos y será gratis. — sonríe entusiasta. En su mente pasa comer langostas y pulpo de la mejor clase, ser atendido como si fuese un ricachón.

—Parece interesante.— admite He Tian para darle más ánimos a su amigo rubio. Más el hecho de jugar para divertirse con los demás y pasar tiempo con Mo, que comer gratis en realidad.

—¿Y si perdemos? Yo no pienso pagar la comida de otros. — les baja de su burbuja, aunque tampoco lo suficiente. Mo ni siquiera trajo mucho dinero para él.

—No perderemos pelirrojo. Ten fé.— le toma de los hombros Jian Yi, mirándolo con determinación, como todo un líder.—Además nuestra arma secreta es He Tian, él es muy bueno en todos los deportes.— le murmura convencido. Para que nadie más que ellos dos lo escuchen, como si fuera algo muy confidencial y de suma importancia.

—Siento que todo será una mierda. — expresa sin ninguna esperanza en los chicos. No duda que Tian sea bueno en el deporte, pero no está muy seguro ni de él mismo ni del rubio.

—Casi no juego tanto voleibol como básquetbol, pero seguro tendremos la victoria. — comenta el azabache con aires de confianza y seguridad en sus palabras. Además también busca divertirse, aunque realmente creyó que primero sería en el agua y no todavía en la arena.

Jian Yi los encamina hasta donde está la red de voleibol, no lejos de donde ya estaban recostados. Obviamente Mo es obligado a ir sin muchas opciones de no participar. Se supone que es una salida de "amigos" y deben divertirse los cuatro. Entre más arena pero más espacio entre la costa y algún local de comida, ahí mismo está Xixi esperándolos, del otro lado de la red cuatro mujeres con diferente volumen de cuerpo y altura, así como rasgos físicos. Una tiene el cabello oscuro y corto, de hecho la más alta de todas, otras dos castaño pero largo en peinado de trenza, y una que no es ni tan baja ni tan alta, tiene el cabello de un tono gris con orbes miel.

Es fácil diferenciar entre mujeres y chicas. A pesar de que se ven jóvenes, no parecen adolescentes. Es probable que ya sean mayores de edad pero no estén para nada cerca de los treinta. Aún así, las cuatro están guapas y más con sus trajes de baño.

—Cuatro chicos contra cuatro chicas. Me parece justo.— comenta Jian Yi, viendo de reojo toda la zona. Aunque se pone un poco nervioso al percatarse de que tienen "público" a los alrededores. Quizás a varios les parezca muy entretenido ese medio improvisado partido de voleibol.

—Además ellas son más livianas a la hora de saltar. Pero nosotros somos muy altos, así que digo que estamos emparejados. — dice Xixi para concordar un poco con su amigo.

—Dejen de hablar y vamos. — dice Mo entre dientes, a su vez suspira resignado. Quiere empezar de una vez para terminar rápido.

No se siente intimidado por el grupo de cuatro mujeres. Pero tampoco cree que ellos sean tan buenos como para hacerles frente tan siquiera. Puede que en apariencia lo aparenten. Actuar es fácil, pero al final, todo se dejará en claro en la "cancha".

II

Llegaron al acuerdo que fueran tres de cinco. Quién llegará a tres victorias de cinco jugadas, sería el equipo ganador. Ellos mismos contarían su puntaje y además, tenían de testigos a su público. Ya sea desde chicos u hombres locos por ver a las mujeres jugar, hasta su otra parte, señoritas y mujeres adultas admirando al grupo de los chicos jugar. Ambos equipos tenían casi el mismo público que más que mirar el juego en sí, miraban a los individuos como tal. Pero tampoco significa que es algo realmente malo.

La primera partida la ganaron ellos al igual que la segunda, y cuando creían tener muy buena racha, ellas los humilla ganando las siguientes dos lo cuál los lleva a un inesperado empate. Dos y dos, y un último partido más sería el decisivo. De hecho, esta última fue la que Mo se puso más serio y atento, puesto realmente no quería perder cuando los chicos se veían tan emocionados, determinados y entusiasmados. Hasta Xixi parecía sonreír, eso ya es mucho pedir. El pelirrojo no quiere cagarla y viéndolas a ellas jugar de cerca, ya aprendió rápido como se puede jugar y ganar.

Tal inesperado fue, pero a su vez tan largo, el equipo de ellos ganó para sorpresa de varios ahí. Ya que y después de todo, el equipo femenino hubo momentos en qué se veía más ágil e igual de decididas a ganar. Muchos ahí murmuran que la suerte realmente estuvo de su lado.

Claramente, el que menos creía que iban a ganar es Guan Shan. No es por ser mala vibra, pero ellas realmente parecían unas total expertas en el juego y lo único que tal vez le sacan de ventaja a las mujeres es la altura. Pero aún así ellas parecen saltar de manera increíble.

—Parece que el pelirrojo debe tener más confianza en nosotros. — opina Jian Yi para secarse el sudor de su frente y espalda con una toalla.

Los cuatro se ponen a tomar bastante agua fría para recuperar el aliento. Sus labios resecos lo pedir, tardaron alrededor veinte minutos en esas cinco rondas sin mucho descanso.

—De verdad creí que ellas ganarían, se ven más profesionales que un montón de adolescentes como nosotros.— comenta Shan sorprendido, todo aún le parece tan increíble que no sabe exactamente que decir.

¿Deben acercarse a saludar?¿Alardear enfrente de ellas? Seguramente ellas hubieran hecho lo mismo si ellos hubieran perdido.¿O sólo hablar sobre la invitación a comer? No lo sabe, ellas no se ven tan furiosas como creyó, ni tan cansadas como ellos mismos. Quizás deben ser lo más "buena onda" posible.

—Puede ser que sí, sea como sea, al final lo importante es divertirse, incluso si hubiéramos perdido. — continúa hablando Jian Yi para sonreír. Él sabe que solo no pudo haber logrado nada, incluso hasta cree que fue el peor jugado de los cuatro. Pero ahora, está feliz y aquello no lo puede contener.

No por haber ganado, no por la comida gratis ni por la euforia en el pequeño público, sino por haber pasado tal momento con sus amigos. Sobre todo, que Xixi haya confiado en él y nunca le bajará sus ánimos. Pero nunca está demás la comida.

Una hora después; los chicos se encontraban comiendo en la misma mesa que las chicas. Parece que por lo menos, hicieron amistad con ellas. Y tenían razón en algo, ellas son mayores que ellos. Tienen alrededor de veintiún años y van en la Universidad, solo que ahora están en unas pequeñas vacaciones. La mayoría de ellas parecen realmente animada al hablar, y en caso de ellos el más callado es Zhan y Mo.

No comieron langostas como tal, pero si camarones, jaibas, ostiones y pulpo con su debida guarnición. Después de merendar y reposar la comida como una media hora o veinte minutos, tienen pensando ir al agua.

Mo siendo el primero en terminar dando gracias por la comida, antes de retirarse, la chica más alta lo llama para extrañes del mencionado.

—Hey pelirrojo.

—¿Qué?— se gira apenas a verla.¿Querrá la revancha? Porque sin duda él ya no piensa volver a jugar. Además que tampoco es el "líder" como para decidir, para eso está Jian Yi o He Tian.

—Mi amiga quiere hablar contigo, a solas. — dice un poco bajo al estar cerca de él, para que solo Mo lo escuché.

El chico sin comprender muy bien porque, solo asiente y camina a otra dirección en un rincón más solitario y sin tanta gente viendo. Dónde se divisa a otra de las chicas del grupo, las más callada diría. Cabello largo hasta la cintura, amarrado en una cola de caballo, de color gris y ojos bonitos de color miel que combinan con su traje de baño de colores amarillos y blanco. No niega que es bonita, incluso siendo callada sonríe y no le intimida tanto como la de cabello oscuro.

Pero cabe aclarar que Mo no recuerda el nombre de ninguna de ellas.

A unos pares de metros de ellos, sus amigos no pasan por alto esta escena con asombro e incredulidad.

—Parece que alguien se enamoró a primera vista de nuestro pequeño malhumorado.— comenta Jian Yi para que sólo sus amigos lo escuchen, en un tono medio en broma pero medio impactado de que sea verdad.—¿Quién lo diría? Normalmente es He Tian quien se roba toda la atención de las chicas. — suelta bastante asombrado mientras le da un gran trago a su bebida.

Aunque tampoco es como si el encanto del He ya no haga efecto. Después de todo, aunque Mo haya llamado la atención de la otra chica, la más alta del grupo si que se había fijado bastante en el chico del mismo color de pelo que ella. Solo que la universitaria no ha hecho ningún movimiento.

—¿Crees que se le confiese?— pregunta Zhan Zheng, para intriga de ambos. Además que no esperaron que sea el castaño quien suelte ese pregunta

Para He Tian fue una clara daga en el pecho escuchar ello. Sabe de la belleza natural de Mo, aunque a veces asusta a las chicas con su cara de mal humor, su lenguaje o su desinterés a casi todo. Y realmente, quería mantener ese encanto de Mo como solo de él, como algo que solo él conocía y no quería compartir.

Si, suena bastante egoísta si lo piensa de esa manera. Pero él es así, no es un ser humano perfecto o un ángel. Él a veces puede ser un verdadero demonio, posesivo y celoso, más con la persona que tanto le gusta.

—Woah, romance en la playa. — silba Jian Yi, imaginandose una escena romántica pero cliché.—¿No suena a un dorama de comedia romántica?— menciona, le pica la curiosidad saber si sus sospechan son ciertas. Pero se sorprende cuando el azabache se pone de pie tan de repente de su asiento provocando un sonido tosco y bastante alto.—Hey He Tian, ¿A dónde vas?

—Creo que he perdido el apetito. Ustedes continúen, daré una vuelta. — sonríe algo forzado, pero a la vez dando una señal de que no hace falta que lo acompañen.

Ambos chicos miran su platillo, de todas formas parecía que ya casi terminaba de comer.

—Si, si, una vuelta. Es obvio que va detrás del pelirrojo. — le murmura a su castaño.—Y a mí me dicen chismoso luego. En fin, la hipotenusa.— suspira intentando no perder de vista a su otro amigo.

—Solo come. — le dice Zhan Zheng mientras lo calla al meterle en la boca un camarón con una deliciosa salsa de chile jalapeño. Tan desprevenido lo tomó que lo hizo sonrojar.

—Xixi, no hagas eso que me sonrojo. — dice avergonzado pero recibiendo gustoso el aperitivo.

La tarde aún es joven.

III

Rato después de que Mo terminará de hablar con la chica, lo cuál fue entre medio incómodo y medio inesperado todo, le acaricia su cabeza en un gesto dulce, amable y para que no se sienta tan incómoda o distante su actitud, se aleja de ella lentamente. No quiere volver a dónde están los chicos porque también están las amigas de la chica a quien recién acaba de rechazar, por lo que prefiere mejor alejarse y caminar en la orilla de la playa. Dónde la espuma del agua llega hasta la planta de sus pies, el agua no lo alcanza del todo y la arena se siente bien en sus descalzos pies. Ahora se pregunta dónde diablos quedó sus guaraches/sandalias.

Más se sorprende cuando escucha una voz detrás suyo, además de casi pisarle los talones.

—¿Y de qué hablaron?— pregunta curioso.

—Carajo contigo, no te aparezcas así de la nada. —suspira aliviado. De cierta forma, prefiere que sea él y no las amigas de la chica. —Realmente me asustaste.— confiesa encogido de hombros puesto a su alrededor realmente creía que no había nadie cerca.

Mo creyendo que Tian se burlaría de él por haberlo asustado, sucedió todo lo contrario. El azabache solo se quedó en silencio, mirando su espalda y de reojo sus pies en la arena. El sonido de las olas a lo lejos hacia un fondo espectacular e íntimo entre los dos, además que no había tanta gente alrededor de ellos. La mayoría estaba comiendo o a varios metros de ellos disfrutando del agua. También se escucha el sonido de algunas gaviotas a lo lejos, volando cerca del agua para capturar comida y descansando en algunas piedras cerca de ahí.

—Oye, ¿Por qué viniste hasta aquí?— se atreve a preguntar, no le gusta el raro silencio de He Tian. Normalmente él habla tanto como Jian Yi, es muy expresivo y le gusta tocar por ahí y por allá.

—Solo quiero saber si le dijiste que sí.

Guan Shan lo mira totalmente confundido y extrañado. Tarda bastante en procesar o saber a qué se refiere.

—A la chica que se te confesó. ¿Qué le dijiste?— añade He Tian lo cuál hace más fácil de entender a Mo a qué se refiere, pero a su vez, le pone tan nervioso.

Casi tan nervioso como ella cuando se puso enfrente suyo y le habló dulce, sincera para confesar que le gusta.

—Lo que le diga no debería darte importancia. — responde apretando sus nudillos, sin voltear a verlo.

—¿Pequeño Mo ya tiene novia entonces?

Aquello sonó tan lejano, He Tian parecía querer ocultar su dolor con un humor fingido y sonrisa tan forzada. Mo no está tan seguro y a veces le confunde las cosas que dice el He.

—¡Claro que no! — niega completamente, molesto de que le insista saber lo que pasó. ¿De verdad He Tian creía que le gustaría una chica como ella? Es bonita sí, atlética y amable. Tiene una voz suave y bonitos ojos, pero no sé ve saliendo con ella o siendo amoroso con alguien. Es tan complicado expresarse o saber que es lo que realmente quiere.— Yo no me enamoró así de fácil o rápido. Es cuestión de tiempo y de conocer a la otra persona. No llevo mucho tiempo de conocerla. — agrega hasta que siente a He Tian reposar su rostro en su espalda alta, su aliento sobre su cuello, caliente que le estremece. Y aún así, no se aparta de él.

Mo piensa que hace demasiado calor como para que anden tan pegados, pero a He Tian parece no importarle mucho en esos momentos.

—¿Entonces le dijiste que te diera tiempo para que se conocieran?

—Le dije otra cosa. — responde intranquilo y más nervioso.

—¿Puedo saber que le dijiste?

—¿Que te importa?

—Me importa mucho porque eres tú. — responde para sorpresa de Mo, que se queda sin palabras por un breve momento.

A veces odia a He Tian por como lo hace sentir. Por sus palabras y acciones que causan un remolino de emociones en todo su ser. ¿Por qué tiene que ser así de sincero con él? ¿Realmente está bien en permitirle ser tan cercano a él? ¿En qué entre a su corazón?

No quiere salir lastimado.

— Le dije que alguien ya me gusta. — responde después de un largo silencio que casi parecía eterno. Sonrojado hasta las orejas y sonando ligeramente tembloroso. Realmente tomó mucha fuerza y valor para decir aquello.

—... Wow, ¿Eso fue una confesión?— dice tan pasmado por lo que acaba de escuchar, que ni siquiera duda en abrazar a Mo pues adivina que esté querrá salir huyendo de ahí, pero no lo logra por los fuertes brazos del He alrededor suyo.

Su trasero presionado la entrepierna de Tian, quién a su vez le besa el cuello causando la ira y vergüenza del pelirrojo, pues siguen en la playa, un lugar público.

—¡YO NUNCA DIJE QUE ERAS TU!— exclama tan nervioso, que su pequeño escándalo llama la atención de varios de por ahí. No puede zafarse de los brazos del azabache, y el trata de no ser tan obvio por sus reacciones.

—Pequeño Mo no te escondas~— le reparte varios besos en su cuello, enternecido por los sonrojos nada sutiles del colorado. — Tú también me gustas~— murmura esto último solo para que él lo escuché claramente.

—¡Cállate!

Guan Shan no sabe si está preparado para recibir y aceptar estos fuertes y reales sentimientos del He hacia su persona. Todavía no lo cree y su corazón parece que se saldrá de su pecho por lo fuerte y acelerado que están sus latidos.

—¿No quieres nadar un poco?

Ni siquiera tuvo que responder porque el He ya lo llevaba a la fresca agua para zambullirse con él. Parece no tener la intención de soltarlo dentro del agua y Mo parece estar bien con ello, aunque todavía sigue confundido con la declaración del azabache.

—¡Idiota! ¡No llevamos mucho que comimos!— le reprende como excusa, siendo ignorado de todas maneras.

Un día en la playa puede ser espectacular, siempre es bueno pasarlo con la familia y amigos. Pero tampoco está demás pasarlo con la persona que tanto te gusta y quizás, solo quizás, surga una verdadera oportunidad para confesar tus sentimientos.

Π Ω μ

Total de Palabras:4,142.
Fecha de publicación: sábado 24 de julio del 2021.
Nota final de escritor:

Se que estos últimos dos días no he estado participando en las temáticas anteriores｡:ﾟ(;´∩';)ﾟ:｡, no es por falta de inspiración o ganas, sino por tiempo y estrés de otras cosas. Pero trataré de actualizar más seguido hasta donde mis dedos puedan.

Advertencia/Spoiler: la siguiente actualización será igual o más extensa que esté cap ( ･ั﹏･ั) prepárense lectores (｡ﾉω＼｡)