El moreno al salir de la casa de su hermano fue directo a su casa, necesitaba una ducha muy larga.

Sabía que Mo trabajaba por la tarde así que no le vería tan rápido como él quisiera, pero definitivamente ese día le iba a ver.

Llegó a su apartamento se desprendió de las ropas para tirarlas a la basura y olvidar el mes que había estado cautivo.

Fue a la ducha disfrutando del agua caliente, salió de esta, se puso algo cómodo y se hizo unos malditos fideos instantáneos maldiciendo por no poder comer el estofado de Mo.

Fue al cuarto para dormir, en su cautiverio no lo había hecho mucho, ya tumbado puso una alarma y de durmió.

Pasaron las horas y sonó esa alarma, se desperto ansioso porque hoy por fin volvería a ver a su novio, se levanto rápido se vistió y salió de su casa a buscarle.

Iba caminando tranquilamente, según se fue acercando a donde trabajaba Mo, se fue sintiendo más feliz, cuando vio una farmacia entró a comprar una cosa.

Con el objeto en su bolsillo fue a buscar a su chico aún más feliz que antes, tanto que se puso a tararear una cancioncilla.

Entonces llegó a donde trabajaba el menor, sin saber porqué se puso nervioso, de repente se abrió la puerta y le vio... una gran sonrisa inundó su cara.

Cuando vio que se apoyaba en la barandilla, no pudo más y se acerco a él.

Tian - delante suyo - hola Momo...

Mo - mirándole como si viese una alucinación - ¡Tian! - asombrado - ¿cuando has vuelto?

Tian - apoyándose al lado suyo - hoy - dándole la caja - toma, para ti.

Mo cogio el objeto y lo abrió al ver lo que era un enorme sonrojo cubrió su rostro, empezó a soltar incoherencias mientras el moreno solo le miraba feliz, como había echado de menos eso.

Cuando el trabajo del menor termino, Tian pasó el brazo por los hombros de Mo que lejos de gruñir solo desvío la mirada sonrojado, él también había echado de menos esto.

Entonces recibió una llamada.

Mo - atendiendo - ma, ¿que pasa?

Sara - suspirando - tengo que quedarme más tiempo aquí, si no estuvieses solo...

Mo - bufando - ma, que no soy un puto niño... me puedo quedar solo.

Al oír eso el moreno robo el teléfono al menor que intentaba en vano quitárselo.

Tian - sonriendo al ver así al menor - hola Tía, soy Tian.

Sara - sonriendo - ¡oh! has vuelto - seria - me tengo que quedar aquí, ¿te harás cargo de Guan?

Tian - sonriendo a Mo - si, no se preocupe se quedará conmigo.

Sara - feliz - gracias, tengo que colgar me llaman.

Tian le dio el teléfono al menor que le miraba algo enfadado por lo que había pasado, al darse cuenta que su madre había colgado miro al mayor más enfadado aún.

Mo - con el ceño fruncido - ¿que te ha dicho, cabeza polla?

Tian - apretando su agarre - que me encargue de ti.

El peli rojo iba a decir algo, pero solo pudo balbucear incoherencias tremendamente sonrojado, ambos fueron a la casa del mayor.

Por el camino cogieron algo de comida rápida para no tener que cocinar, llegaron a la casa del mayor donde la comieron y recogieron las cosas.

Una vez recogido todo, Tian cogió de la mano a Mo que se sonrojo hasta las orejas, le atrajo hasta su cuerpo y le rodeo con sus manos por la cintura.

Tian - apoyándose en su hombro - Momo... duerme conmigo...

Mo - más sonrojado - ¿que dices... cabeza polla?

Tian - sonriendo - quiero hacerte el amor...

Mo se quedo de piedra asimilando lo dicho por el moreno, en este tiempo sin verle las ganas de avanzar más habían rondado por su cabeza, incluso había buscado como se hacía entre chicos.

Que el otro se lo soltarse así de golpe... solo hizo que ese deseo de más... volviese a él.

Mo - nervioso - eso... me asusta... - sonrojado - pero... si...

Tian se separo del hombro del menor, mirándole sorprendido sin creer que le hubiese dicho que sí, al no obtener respuesta Mo miro al moreno.

Sus miradas conectaron ambos vieron en el contrario ese mismo deseo, Mo le dedico una sonrisa seguro de sus palabras, ante eso un tono rojizo cubrió las mejillas de Tian.

Mo - asombrado - vaya...

Nunca en su vida se había imaginado ver al mayor en ese estado, Tian no pudo más y se lanzó a los labios de su novio esos que había echado tanto de menos.

Mientas se besaban el moreno fue guiando a Mo hasta su habitación sin dejar de besar esos labios, su manos acariciaba su cintura colándolas por la camiseta para quitársela.

Tian también había echo sus deberes desde que Mo le había dicho que sí a eso de ser novios había estudiado como hacer eso con él y no hacerle daño.

Para su sorpresa noto las manos temblorosas de Mo colándose bajo su camiseta para quitársela, dejo su boca para gemir y mirar con sorpresa a Mo, que le sonrió de lado.

Mo - excitado - vamos... Tian... - levantando su camiseta - yo... también quiero...

Tian se sonrojo por el tono de voz que uso, quito la camiseta a Mo, le dedico una mirada llena de deseo y sonrió la darse cuenta que habían llegado a su cuarto.

[Atención hay Lemon 😏, lee bajo tú responsabilidad]

Abrió la puerta deseoso de que el joven enfrente suyo no cambiase de opinión al respecto, pero entonces para su gran sorpresa Mo empezó a besar su cuello sacándole un gemido.

Las manos del moreno acariciaban el abdomen del colorado, hasta llegar a sus pantalones que empezó a soltar para quitárselos.

Mo ansioso le hizo lo mismo al moreno, se miraron a los ojos ambos en ropa interior, Mo se guiro decidido, fue a la cama del mayor, se quito el bóxer y se tumbo en esta.

Mo - golpeando el colchón a su lado - ven...

Tian imito la acción del menor y rápidamente se subió a la cama desnudo poniéndose casi encima de Mo, besandole de nuevo sus labios, mientras sus manos curiosas exploraban su blanca piel con suavidad consiguiendo que al menor se le erizase la piel.

Mo soltaba gemidos ahogados en la boca del mayor, este dejó esa boca para besar su cuello mordisqueando un poco la zona, fue haciendo un camino de besos a uno de los pezones que estaba erecto lamiéndolo y chupándolo haciendo presión con sus labios.

Mientras una de sus manos iba camino a su intimidad que estaba chorreando, envolviéndolo con su mano empezando el movimiento para torturarle.

Mo - jadeando - Tian...

Tian levanto su vista alegrándose del estado del menor, dejo el pezon y fue directo a ese miembro para meterlo en su boca, mientras empezaba a meter uno de sus dedos en la entrada virgen del menor.

Esa combinación hizo que Mo no se enterase mucho de eso, pero en cambio noto el segundo dedo en su interior.

Mo - apretando el trasero - Tian... espera... sacalos...

Tian - ronco por la excitación - relájate...

Entonces uno de sus dedos toco el punto de placer de Mo que soltó un vergonzoso gemido, esto agrado mucho a Tian que siguió tocando la zona, buscando de nuevo esa reacción en el menor, estuvo un rato más hasta que este se corrió.

Luego metió un tercer dedo para dilatar más al menor, subiendo sus besos por el cuerpo del menor lamiendo y mordiendo en algunas zonas, mientras sacaba y metía sus dedos rápidamente, masturbando de nuevo al menor.

Llegó a su boca para besarle con deseo, sacó los dedos de él, se coloco el condón que había comprado y lentamente se fue introduciendo en él, sin dejar de mirarle.

Mo apretó sus dedos en la espalda del moreno conteniendo sus lágrimas por la invasión, una vez dentro Tian se quedó quieto para que el menor se acostumbrase a él, masturbando más al menor.

Eso consiguió que el menor se relajase lo suficiente para no apretar tanto al moreno, al notar eso se empezó a mover lento y suave, consiguiendo que ambos sintiesen una sensación muy agradable.

Se miraron a los ojos llenos de deseo, ambos empezaron a moverse un poco más rápido y hondo, el moreno deseoso de más subió las piernas del menor abriéndolas para acceder mejor, embistiendo más fuerte y rápido, dando en ese punto que parecía gustar al menor.

Sus movimientos eran cada vez más rápidas y fuertes hasta que se corrieron los dos, primero Mo y luego Tian al sentir como el otro se contraía.

Al acabar Tian salió despacio de Mo, acariciando su mejilla y depositandole un suave beso en los labios.

Tian - quitándose el condón - a sido grandioso... - susurrando - Guan...

Mo - mirándole sonrojado - n-n-no... ha estado tan mal...

Tian se lanzó donde él rodeandole con sus brazos para dormir abrazados.