KiwiKawaii. Diecinueve años. Empezó con un canal de vídeos donde daba tips de moda, cantaba con ediciones música de fondo editaba con Apps de segunda mano y su cadena de seguidores se desató cuando hizo un vídeo en vivo donde era secuestrada de modo ficticio. Tuvo en vilo a los visualizadores durante dos semanas hasta que apareció y contó el enorme calvario que le tocó vivir. Una mentira que le valió medio millón de seguidores nuevos en el canal de esta ingeniosa chica.

FatallityUltimate. Diecinueve años. Un muchacho que empezó hace tiempo subiendo vídeos donde se grababa jugando Minecraft. Los seguidores del juego le dieron casi cien mil Follows a su canal. Más tarde empezó a colgar vídeos donde comentaba sobre las peleas de otros influencers en la red hasta que desenmascaró parte por parte la farsa de Kiwi. Ella le respondió. Ambos sumaron seguidores. Él superó los de ella con casi setecientos mil. Los seguidores de Minecraft estuvieron de su parte. Kiwi y Fatallity acordaron una nueva pelea para el próximo mes.

JohnnyPapaVlogs. Veinte años. Hizo la Escuela de Videobloggers en red. Empezó hace poco tiempo: sus vídeos inicialmente eran retos donde se presentaba, se ejercitaba en el gimnasio, hacía bromas pesadas en la calle junto a otros dos amigos de la Escuela de Videobloggers. El número de seguidores se disparó en dos momentos específicos: el primero con un serie de vídeos llamados "Experimento social: la gente reacciona a un hombre sin camiseta y a una chica sin camiseta". Hizo Parte I, Parte II y Parte III. Cinco millones de visualizaciones, tres millones y un millón respectivamente. Su reclamo era que las chicas también tienen el derecho de mostrarse desnudas de torso si así lo quieren. Tuvo el apoyo de un importante caudal de público. El segundo momento que disparó sus seguidores fue cuando se mostró en un vídeo bailando la canción brasilera Vai Malandra en bóxers y alcanzó las doce millones de visualizaciones. Supo sacar provecho de haberse ganado una enorme audiencia femenina gracias a su defensa feminista. Hoy acumula siete millones de followers.

Kiwi, Fatallity y Johnny son los primeros en lanzar sus propios vídeos. El plan es que esto desencadene otros vídeos inmediatos de respuesta. Si los videobloggers se interesan por lo que otros de su mismo rango dicen, provoca la respuesta de la masiva audiencia que les siguen. Esto a veces anima a que surjan nuevos chicos con sus cámaras.

Si la situación ha tomado estado público, que sea en nuestro beneficio.

Kiwi es la primera en sacar su vídeo. La rapidez con la que ha respondido al contrato que la ha permitido ganar cien mil dólares, es de una eficacia que valoraré de aquí en más. El título del vídeo me llama la atención, quizá para mal, es "ESCÁNDALO PROFESOR-ALUMNA". Me provoca cierto enojo. Pero empieza el vídeo hablando de sus peticiones y discusiones en el anterior donde defendía por qué no usar planchita para el cabello. Hasta que en un momento señala:

—Bueno, vamos a nuestro asunto de hoy.

Y muestra el vídeo difundido donde entro al despacho de Jefferson, él me enfrenta, luego la cámara se apaga y le sigue el audio de los gemidos.

A lo largo de todo el recuadro, está la cara de ella en otro más pequeño esquinado en la pantalla mostrando sus reacciones. Una vez que finaliza, su pequeño rostro redondo y su cabello azul vuelve a ocupar toda la pantalla.

—Qué...carajos...acabo de ver.

Por un instante quiero meterme en la pantalla de la computadora de Nick y aporrearle la cabeza a esta chica. Pero me contengo. Haber aceptado trabajar con estos chicos, es aceptar que hablan con términos que pretenden ser explosivos y muy poco cuidadosos.

—Volvamos un momento a la parte en que la pantalla se apaga—retrocede el vídeo en un recuadro pequeño—. ¿No es obvio que se trata de una edición falsa y vana? Sólo noten la disonancia que hay entre los audios antes y después. —Lo reproduce—. Esos gemidos pueden haberlos sacado de una web porno cualquiera. No está lejos que lo haya podido editar uno de esos populares dirties. Vamos, no puedo creer que les estén jodiendo la vida a estos chicos con ediciones estúpidas. En tal caso, ¿qué problema habría? Son personas adultas, trabajan salvando vidas y en caso de que todo esto tenga algo de verdad, no están haciendo nada ilegal o un daño a otros. No entiendo por qué arman tanto revuelo empecinados en joderle la vida a dos profesionales jóvenes que se rompen la cabeza estudiando y trabajando doce horas por día para salvarle la vida a quien podría ser tu madre, tu padre o un hermano. Abran la cabeza, por favor, no sean tan imbéciles y déjenles vivir su vida.

Una vez que termina toda su crítica en nuestro favor, me siento en parte emocionada. Aunque Malcolm les haya pagado para que opinen de esa manera, se evidencia que esa opinión de su parte es honesta.

—¡Bien!—salta a la última parte luego de un vídeo de siete minutos—. Ha sido mi vídeo semanal, espero les haya gustado y me interesa conocer sus opiniones. Dejen aquí abajo todo lo que opinan y de qué lado están: ¿les parece real esta edición barata para joderles la vida a dos personas respetables? ¿O creen que su amor es verdadero? ¡Quiero leerles! Nos vemos la próxima semana con más de KiwiKawaii. ¡Sayonara, Kiwers!

Luego es el turno de Fatallity. Actualiza apenas una hora después que Kiwi. Lo veo justo antes de llegar al Departamento de Asuntos Internos. Lo reproduzco en mi móvil pinchado por El Virus antes de bajar de la camioneta que conduce Malcolm.

El título del vídeo es "EL DOCTOR LE DA DURO A SU PACIENTE". Me repugna que usen esos términos para referirse a nosotros, aunque ellos buscan exactamente lo mismo que Nick y yo. Captar al público. Supera las veinte mil reproducciones entre que lo empiezo a ver y lo cargo nuevamente al finalizar. Me molesta su intro de personajes de Final fight peleando aunque me provoca un poco de ganas por volver a jugar a ese clásico.

—¡Hola a todos, Fighters! ¿Qué tal pasaron su semana? ¡Al fin es viernes! En la Uni me han destrozado con exámenes pero me alegra volver al canal para poder hablar con ustedes. Y ¿qué mejor manera de hacerlo que dando mi propia opinión acerca de un escándalo que se ha reproducido como las versiones y re-versiones de Sub-Zero? ¡En fin! Les hablo del tremendo escándalo que se ha armado desde el momento que le difundieron un vídeo a una residente de medicina en un hospital de Yorkshire. Lo veamos antes de entrar en detalles.

Adelanto la parte donde muestra exactamente lo mismo que la otra chica, aunque esta vez, el muchacho hace gestos en los que busca a propósito que luego su público lo difunda como memes.

—¡Wao! Eso fue...tan romántico. En verdad lo digo, suponiendo que ese salseo fuere cierto, ¿no es lindo que tu chica te sorprenda en tu despacho luego de un día de trabajo demasiado agotador? —Aplaude en un gesto teatral y a continuación se pone serio—: Vamos a lo que me interesa hablar y defender aquí. Quisiera aclararles que si todo esto les hizo reír, me dan pena, me dan asco, me hacen vomitar el batido de banana y durazno que me preparó la chica de Starbucks hoy por la mañana cuando salí de casa para entregar un trabajo en la Universidad. ¿No se dan cuenta? Hay alguien, que, lamentablemente es uno de nosotros, les está jodiendo la vida a estos señores—me molesta terriblemente que se dirija a mí con ese término ¡sólo soy cuatro años mayor que él!—. Debe haber tenido su motivo para hacerlo, aunque no me importa. Usted saben bastante bien el modo por el cual se le puede joder la vida a una persona con un vídeo que le ridiculice y aún peor si ese vídeo es una pésima edición como se trata de esto. Al menos hubiese incluido un montaje porno algo parecido, ¡pero no! Debe ser alguien que apenas sabe manipular un programa de editar vídeo y para colmo, lo hace mal. Lo más preocupante no es su pésimo trabajo al editar sino que sabe meterse en los usuarios de otros. Pues, así es como ha difundido este vídeo: metiéndose en el Instagram y Facebook de esta chica, además enviándolo por correo a toda su casilla de mail. A ver... ¿Cuán despreciable y miserable tienes que ser para joderle la vida así a una persona que ha dedicado su vida a estudiar para al día de hoy, meterse a un quirófano y salvarte la vida a ti mismo o a tu novia o a tu novio o a lo que sea que tengas? Si estás viendo este vídeo, quiero que sepas algo, basura... Porque no hay otro modo para referirme a ti: BASURA. Esta chica podría salvarte la vida mañana mientras tú sigues averiguando de qué manera hacer jodidos videítos. ¿Saben qué es lo que más asco me da? Haber leído los comentarios. La gente que ha seguido el juego burlándose de estas personas. ¿Por qué habrían de quitarles el título? ¿Acaso no son personas? A ver... Somos HUMANOS y el sexo es NORMAL en cada uno de nosotros. No entiendo por qué tanto alboroto de algo que, para peor, ni siquiera es verdad...

Luego de que finaliza este segundo vídeo que dura unos once minutos, corroboro mi conclusión de que estos chicos, pese a mostrarse cómicos o, a veces, ridiculizarse un poco, son en verdad personas inteligentes que saben de qué manera argumentar algo cuando cierto tema les enoja o les conmueve. Me alegra haberles elegido y haber confiado en ellos. Sólo espero que el resto haya sido así.

—Nat—Nick reposa su mano en mi hombro al notar que me he quedado leyendo los comentarios en apoyo del vídeo de Fatallity y sólo queda el de Johnny quien actualizó hace un minuto—. Nos están esperando. La audiencia empieza en diez minutos y debemos estar ahí antes. Será mejor que salgamos del auto.

Acto seguido el móvil de Malcolm empieza a vibrar y por algún motivo, Nick y yo nos quedamos mirándole. Quizá se deba a que sea el primer indicio de ver algo humano en este hombre más allá de lo que podría implicar verle comportarse como un típico robot.

Abro la puerta y bajo para dejarle hablar tranquilo. Merece su momento de humanidad aunque trabaje las veinticuatro horas del día para nosotros.

—Espero que le des unas vacaciones generosas a la gente que trabaja para ti—le digo a Nick cuando baja también de la camioneta y se incorpora a mi altura.

—La tienen, descuida. A veces, también creo que quizá abuso un poco de las horas o las exigencias de trabajo, pero no avalo nada que ellos no consientan a hacer. Todas las personas que trabajan para mí reciben un trato digno y vacaciones al lugar que gusten dos veces al año con los acompañantes que decidan. Y velo porque nunca les falte nada.

Recuerdo las palabras de Anabel, aunque su voz se esfuma en un instante de mi cabeza al escuchar el llamado de Malcolm quien viene tras nosotros tratando de alcanzarnos.

—¡Señorita Hale! ¡Señor Jefferson!

Nos volteamos y llega más rápido de lo que yo podría en toda mi vida con esos zapatos y esmoquin.

—Malcolm, ¿Qué sucede?—le pregunta Nick.

Trae su móvil en mano y me lo pasa.

—Es para usted. Lo han contactado tal como pidió.

Nick lo mira casi sin comprender, pero son los gajes de una orden suya: que Malcolm obedezca a todo lo que yo le ordene.

Y entiendo de qué está hablando Malcolm, desde el primer momento en que le veo dirigirme el celular.

Trago saliva y me coloco el auricular al oído.

—¿Doctora Hale?—pregunta al otro lado la voz ronca de un hombre.

—Me alegra volver a hablar con usted, y sobre todas las cosas, que no me esté dirigiendo la palabra con mi propia voz, señor Nahej.

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