Capítulo treinta y dos: Consecuencias
Alaska.
23 de septiembre, 2016.
—Auch, eso debe doler.
Alzo la vista del libro para encontrar en la puerta de la habitación a Dawson y ya sabes, siento mi labio inferior temblar porque, en este momento, él es un recordatorio de Drake y el hecho de que...
Dawson se adentra a la habitación y acerca lo más que puede su silla a la mía, toma mi mano derecha y me da una sonrisa. Noto sus ojeras y su cabello despeinado.
—Te ves como un vagabundo, Dawson.
—Qué bonito que eso sea lo primero que te escuche decir, Aska —aprieta mi mano—. Tú luces como una muñeca a la que dejaron caer.
—Me quedaré con el halago de que luzco como una muñeca.
Pese a que estamos intentando bromear, es difícil no notar cuán tenso y serio es el ambiente. Él libera mi mano y parece buscar algo en el bolsillo de su jean; saca un marcador y toma mi brazo enyesado para acercarlo a él.
—Voy a dejarte un lindo mensaje —asegura.
Solo lo observo destapar el marcador y luego comenzar a escribir.
—No te dije que quisiera eso. ¡Quería mantener mi yeso en blanco!
—Bah, tonterías, así se verá más divertido.
Finalmente, desde que desperté, suelto una risa corta. Dawson alza la vista y me da el inicio de una sonrisa antes de volver su atención a mi yeso.
—Qué bonito sonido, la risa de Aska.
—Es mi primera risa —susurro.
—Entonces Drake se sentirá celoso cuando se lo diga.
Mi respiración escapa de a poco con su sola declaración, alimenta mi fe.
—¿Tú si me hablarás de él?
—¡Claro! A mí me encanta hablar de mi copia mal hecha.
Noto que muerde su labio inferior porque tiembla. Termina su "arte" en mi yeso y se guarda el marcador. Acerco el yeso para leer: Eres fuerte, Aska. Solo espera, estarán bien. Te quiere, tu cuñado.
—Agarraste mucho espacio para escribir —finjo quejarme.
—Tomé privilegios al ser el primero que escribió.
Le pido que se acerque y dejo un beso sonoro en su mejilla. Apoya su codo de la cama y recarga su mejilla de su mano, suspira.
—Quieres saber verdaderamente cómo está Drake y no voy a mentirte —comienza—. Estás al tanto de por qué fue sometido a una operación de emergencia y que debido a ello sufrió un paro. Todos esperamos que él despierte, pero no sabemos qué daño obtuvo.
»Durante el paro es evidente que hubo poco flujo de sangre en su cerebro, eso pudo tener consecuencias. Él puede tener serios daños en su cerebro —termina en un susurro—. No sé en qué condiciones despertará mi hermano.
—¿Es acaso todo esto un intento de broma? —Doy una risa bastante cuestionable y él me mira confundido—. Primero soy yo, en un coma inducido porque mi estúpido cerebro estaba inflamado gracias a un desgraciado enfermo; ahora es él dormido con un posible daño cerebral.
» ¿Qué es lo que quieren decirme? ¿Qué Drake y yo nunca más nos veremos en condiciones normales? ¿Qué no seremos nosotros de nuevo? ¿Qué no podemos estar ambos despiertos, sanos y felices?
—Oye —Se pone de pie y se inclina abrazándome, humedezco su camisa—. No tengamos esa mentalidad, seamos realistas ante este escenario, pero no seamos pesimistas. Sé que mi hermano estará bien.
—¿Te lo dice tu súper conexión de gemelo?
Lo siento reír y en medio de mis lágrimas, también río.
—No tengo esa súper conexión, pero conozco cuán testarudo es —Deja de abrazarme para volver a sentarse—. De la misma manera en la que sabía que tú eres demasiado testaruda y fuerte como para rendirte, sabía que despertarías y se lo hice saber a él antes de que fuera ingresado.
»Él siempre me llama su copia romanticona, pero mira quién es el romántico. Te ama tanto que lo llevó a un nivel de hospitalizarse para estar contigo —intenta bromear y me sale una sonrisa a medias.
—Debí ser más cautelosa de los mensajes que recibía, simplemente no esperaba que todo esto sucediera.
—Espero y tengas en claro que no es tu culpa. El culpable es ese enfermo que se encuentra en prisión.
—Lo sé, pero eso no quita que debí ser más precavida. Me da paz el hecho de que él no lastimará a más nadie.
—Fuiste increíblemente estúpida al arrojarte de un auto en movimiento.
—¡Oye!
—E increíblemente valiente.
—Estaba tan asustada —me estremezco ante el amargo recuerdo—, pero sabía que no podía dejarlo llevarme. Se vio como la única solución.
»Y llámame estúpida, pero prefiero morir en el intento de escapar a tan siquiera pensar que podía lastimarme de manera inimaginables. ¡Me creía su novia! ¿Qué crees que ese enfermo hubiese querido hacer con su supuesta novia?
—No quiero ni pensarlo. Eres grande, Aska y...
—¿Qué?
—Jocker te comentó que Drake tuvo que dar ciertos datos sobre ti y...Ehm...Tu cuenta.
Siento mis mejillas sonrojarse mientras asiento. Él fingió una tos para ocultar su risa y luego aclara su garganta.
—Harper, chúpame la polla —Dice alterando su voz, jadeo—. Grandes palabras, Aska.
—Oh, Jesús avergonzado. ¡Cállate!
Él ríe y sacude su cabeza. Quisiera tomar la sabana y cubrirme con ella. Cuando Jocker me dijo que había obtenido mi cuenta para tomar evidencia, me pareció lo más lógico y estuve agradecida de que Drake la diera, pero ahora quiero despertarlo para sacudirlo porque caigo en cuenta de cuán vergonzoso es esto.
—No he leído tus historias completas, básicamente leí el inicio de todas. Creo que es genial lo que haces y que las personas te apoyen tanto —me sonríe—. Parece que tienes una mente llena de pensamientos impuros.
»Ahora entiendo que tal vez mi hermano es el inocente de la relación.
—¡No es cierto! Él tiene pensamientos e ideas muy sucias. ¡Esto es vergonzoso!
—¿Por qué? Tendrías que sentirte orgullosa, tienes mucho éxito y parece que te quieren mucho, serás una gran escritora si te lo propones.
—¿Mis...Mis padres lo leyeron?
—No lo creo. Ellos estaban en una postura de querer respetar tu privacidad. Creo que tus hermanos si leyeron algo, además, esa "Caída Apasionada" es tu historia más famosa, es lógico que sea la primera que te lean.
»Por cierto, tienes buena redacción y ortografía.
—¿Gracias? Ahora que sé que Jack y Jock leyeron no sé cómo verlos a la cara.
—No seas tonta. Son hombres adultos que practican sexo —rueda sus ojos—. Si se escandalizaron por unas escenas y narración gráfica, entonces es que claramente tienen sexo aburrido y soso.
»Actúa normal, haz como si no te importara y solo déjalo pasar. Estoy seguro de que ninguno de ellos sacará el tema y si no funciona, finge que todavía te sientes moribunda.
—Gracias por tus consejos, Dawson —no puedo evitar sonreírle.
—Te quiero, niña. Y me alegra ver que estás bien. Estaba tan preocupado por ambos. Les creí los nuevos Romeo y Julieta.
»Me hace feliz verte despierta, loca como siempre y que incluso has sonreído. ¡Ánimo, Aska! Hay que ser positivos.
—¿Sabes? No me importa si hay algún daño en él, seguiría amándolo.
—No lo sé, Aska, decirlo es fácil, pero es en la práctica donde te darías cuenta de cuánta verdad podría tener tal declaración.
Quiero insistir en mi postura, pero por un momento horrible noto la verdad de sus palabras. Todos siempre estamos diciendo "soy capaz de lo que sea por ti" "no me importa en qué condiciones estás", pero luego la situación puede superarte. No lo sabes hasta vivirlo, y aunque firmemente quiero creer que estaré con Drake sin importar el qué, la verdad del futuro inmediato es incierto.
Justo en este momento, no puedo evitar sentir miedo.
***
24 de septiembre, 2016.
—Sigues siendo tan bonita.
Sonrío mientras Romina cepilla mi cabello, me hace muy feliz que haya venido a visitarme. Su locura le hace bien a mi cordura.
—Mi pierna tendrá una cicatriz —comento—. Es algo larga, no sé qué tan bueno sea el cicatrizado, pero alguna marca debe quedar —suspiro—. Nunca tuve un daño tan grande en mi piel y se siente raro. Porque sé que lo más importante es que estoy viva y mi pierna no sufrió ningún daño mortal, pero ¿Está mal que por ahora una parte de mí se sienta incómoda ante la idea de tener una marca?
»No quiero verme superficial, pero...No sé, es raro.
—Eso no te hace superficial. Las cicatrices por norma general son el resultado de heridas, lo que quiere decir que las personas no van en busca de ellas.
»Sí, hay que aceptarlas y hacer de ellas algo positivo, pero también tienes derecho a lamentarlo mientras te adaptas. Es decir, ¡Hola! Nos quejamos hasta de cuando nos sale un grano en el rostro, ¿Por qué no podemos quejarnos de obtener cicatrices?
—No la odio, solo es raro. Supongo que me adaptaré a ella.
—Y tal vez ni siquiera quede tan grande. Seguro se verá sexi en tu muslo —Me dice y río.
—La haré el fetiche de Drake.
—Oh, perverso. Me gusta eso —dice—. ¿Extrañándolo mucho?
—Demasiado y todavía no me dejan verlo —suspiro—. Dawson vino a verme hace un rato, dice que él abrió sus ojos y volvió a dormirse, es todo lo que me dijo, no ha venido a actualizarme de cómo está todo y estoy muy asustada. ¿Y si hay algún daño grave en su lindo cerebro?
—¿Cómo en una novela? —Me pregunta dejando de cepillar mi cabello—. Si ese es el caso, podemos ver muchas películas con las cuales guiarnos sobre cómo lidiar con ello.
—Estás loca, Romi.
—Pero te hago sonreír —Se pone frente a mí y con sus dedos estira las comisuras de mis labios—. Ah, mira, qué bonita sonrisa.
Quito sus dedos de mi rostro y le pido que siga cepillando mi cabello porque se siente bien, me relaja.
—¿Qué tal todo con tu futbolista?
—Puse en pausa mi romance mientras lloraba horriblemente porque mis padres adoptivos estaban muriendo.
Me toma unos segundos entender que se refiere a Drake y a mí. Con mi mano libre, golpeo su brazo y ella se rio.
—Pero es en serio, le dije que estaba fuera de mí por unos días mientras me preocupaba por ustedes —adquiere un semblante serio—. Estaba muy asustada, Alas. Cuando supe lo que te había sucedido, me sentí tan mal y luego cuando Drake, sentí que los perdía y me dolió mucho.
—Lo siento.
—No fue culpa de ustedes, solo sucedió y me alegra saber que dejaremos todo esto atrás como un mal recuerdo.
» ¿Cuándo serás dada de alta? Siento que te aburrirás aquí.
—Escuché que podría ser en dos días, pero no lo sé. Todavía siento algunos dolores —Bostezo sintiéndome soñolienta—. La policía vino a tomar mi declaración y fue terrorífico decir en voz alta que fui atacada.
—Ese maldito cabrón arrastrado. Tengo palabras latinas coloridas para insultarlo, ¿Quieres escucharlas?
—Estoy segura de que a mí me encantaría —dice una voz que reconozco.
Miro cómo Adelaide, mi cuñada, entra a la habitación. Ella le da una sonrisa a Romina antes de acercarse, arrimarse un poco para hacer espacio en la cama y sentarse. Ladea su cabeza evaluando mi rostro.
—Tus morados están de un color asquerosamente verde amarillento, pero eso quiere decir que falta poco para que se vayan —comenta—. Pareces una actriz de alguna serie adolescente a la que le tocó grabar una escena de puñetazos.
—Muchas gracias, Ade, agradezco tus palabras.
Ella ríe y saca un marcador para escribir en mi yeso, cuando termina veo que solo escribió una palabra: lindo.
—Te veo más animada hoy —Me dice—, eso es bueno.
—¿Sabes? De verdad no quería que rayaran mi yeso, pero por culpa de Dawson parece que en automático todos ustedes lo hacen.
—Vive con ello. ¿Qué tal te va, Romina?
—Bastante bien, estoy a poco de retomar mi romance.
—¿Retomar? —Adelaide parece desconcertada.
—Estaba en pausa mientras me preocupaba por mis amigos, pero ahora que estás aquí, saldré un momento a llamarlo y hacerle saber que reactivamos nuestro romance.
—De acuerdo —responde mientras la ve salir con teléfono en mano—. Creo que ella es un poco más loca que tú, Alaska.
—Lo sé —le sonrío—. Hablando de locas, ¿En dónde está Alexa?
—En un enredo que no me cuenta —Se encoge de hombros—. Está misteriosa, estoy esperando que no lo soporte más y me lo cuente, parece que está conteniendo mucha emoción yeso está enloqueciéndola.
—Ahora estoy curiosa sobre ello.
Permanecemos en silencio y ella toma mi cepillo para peinar su propio cabello, es bueno que no tenga piojos que pegarme.
—Hay una razón particular por la que estoy aquí en este momento — dice—. Jocker me dijo que viniera primero mientras él se encuentra conversando con los padres de Drake.
—Oh.
De alguna manera comienzo a sentir frío en mi interior mientras en mi mente imploro que todo esté bien con Drake.
—Vamos a llevarte a verlo.
Mi boca se abre de una manera que pensé solo sucedía en los dibujos animados. Estoy demasiado emotiva y sensible porque tengo muchas ganas de llorar en este preciso momento ante la buena noticia.
—Gracias, gracias, gracias. Muchas gracias. —Finalmente lo veré.
Ella rasca su ceja con su pulgar, deja de cepillar su cabello y baja de la cama. La miro a la expectativa sabiendo que hay más que quiere decirme.
—¿Qué sucede?
—Él despertó hace unas horas y volvió a quedar inconsciente, pero hace una hora ha vuelto a despertar y...
—¿Qué?
—No está hablando —termina por decir.
—¿Qué quieres decir? —murmuro.
—No ha dicho ninguna palabra, solo está en silencio. Están realizándole exámenes para saber si hay algún daño.
Todo lo que hago es observarla, intentando entender lo que me ha dicho. Sacudo mi cabeza, decido que puedo procesarlo después.
—¿Cuándo voy a verlo?
—Cuando terminen de hacerle sus exámenes y revisarle los médicos. Podría ser en horas o mañana.
—Esperaré, puedo esperar por Drake.
***
25 de septiembre, 2016.
Un día fue lo que tuve que esperar. Un día angustiante y lleno de ansiedad.
Jocker está hablándome mientras dirige mi silla de ruedas, pero no lo escucho, solo puedo pensar que estoy a nada de ver a Drake. Sé que él solo intenta calmarme, pero no me importa en este momento nada más que ver a mi novio.
Agarro con fuerza mi bata de hospital en un puño cuando visualizo a Irina Harris junto a su hija Hayley a la distancia. Cuando nos acercamos lo suficiente, ellas acortan la distancia y de una en una, se agachan para darme un abrazo. Irina besa mi frente y me sonríe.
—Es bueno ver que estás bien, Alaska.
—Gracias —No sé muy qué responder ni en dónde se encuentra mi voz. Creo que estoy asustada sobre este momento.
—Iré a decirle a Holden y Dawson que salgan para que puedas entrar a verlo —me dice Irina, asiento.
Alzo mi mano y tiro de la de Jocker en un llamado silencioso, él rodea la silla de ruedas para estar frente a mí, se agacha.
—¿Qué sucede, Aska? Luces pálida.
—Estoy asustada, ¿Él está bien? En verdad... ¿Él no habla? —pregunto en voz muy baja.
Jocker suspira y pasa una mano por su cabello, toma mi mano entre las suyas
—Todavía no determinan el daño que él sufrió y las consecuencias, pero su falta de habla parece no estar relacionada como resultado del poco flujo de sangre que hubo en su cerebro.
»Podría tratarse de algún shock que tenga Drake, un trauma, algo por lo que no quiera hablar o le cueste hacerlo. Puede ser incluso un daño del que su cerebro intenta convencerlo, pero en los exámenes no encontraron algún daño que explique el por qué.
No sé si sus palabras son alentadoras o trágicas, no sé cómo registrarlas, pero termino por asentir como si estuviese bien con ello. Los hermanos Harris salen de la habitación y Holden me da un fuerte abrazo acompañado de palabras muy dulces.
—Ya puedes entrar, cariño —me dice Irina.
Jocker empuja mi silla de ruedas mientras Dawson mantiene la puerta abierta para nosotros. Si no fuera por el hecho de que dejar de respirar me mataría, contendría la respiración. Soy capaz de visualizar su cuerpo a medida que Jocker me hace acercarme a la cama.
Sus ojos no están cerrados, parece que están viendo algún punto en la pared. La habitación tiene un olor estéril, está muy fría y el sonido de la máquina registrando que está vivo suena muy fuerte. Sus ojos se mueven hasta detenerse en mí y jadeo.
—¿Aska? —pregunta Jocker asustado, deteniendo la silla justo al lado de la cama.
—¡Jesús descuidado! ¡Él tiene barba! —casi grito—. ¡Drake tiene barba!
Escucho la risa de Jocker mientras llevo una mano a mi boca. Observo al moribundo sexi con mirada soñolienta que me observa. Una profunda respiración escapa de mis labios cuando la comisura de su boca se estira de forma leve en el intento de una sonrisa. Con lentitud sube una de sus manos hacia su barbilla y acaricia todo ese rastro de barba crecido en su rostro siempre liso como el de un bebé.
Ladeo mi cabeza hacia un lado y siento mis labios estirarse en una sonrisa.
—Te ves sexi, un moribundo muy sexi.
—Muy bien, esta será mi señal para esperar afuera —anuncia Jocker—. Son pocos minutos, Aska, trata de que él no se agite —acaricia mi cabello y cuando volteo me doy cuenta de que mira a Drake—. ¿Ves? esta pequeña atolondrada está a salvo, Drake, no tienes de qué preocuparte. Pórtense bien.
—No es como si pudiéramos portarnos mal en nuestro estado —mascullo, pero Jocker finge no escuchar mientras nos deja a solas en la habitación.
Es un momento raro y eufórico en donde nos observamos. Él de verdad está muy pálido, pero de igual manera de verdad estoy locamente enamorada porque me sigue pareciendo sexi. Estiro mi mano para tocarlo y no llego, frunzo el ceño; Jocker no me dejó lo suficiente cerca.
—Bien, dame un segundo, es la primera vez que manejo esta cosa y es muy incómoda —murmuro girando las ruedas y chocando contra su cama.
Maldigo por lo bajo dándome cuenta que estoy haciendo un desastre y girando en lugar de acercarme. Gruño frustrada y alzo la vista para encontrarme con el hecho de que su sonrisa ahora es más notable mientras me mira, a pesar de que es una sonrisa rara, una nueva... Hay una emoción invadiendo mi pecho que me hace devolverle la sonrisa y me impulsa a que, con un tropezón más a su cama, logre llegar a donde quiero estar. Estiro mi mano y toco su brazo, subo hasta su hombro hasta detenerme en su barbilla en donde siento el raspón contra mi palma.
—¡Vaya! —murmuro—. Eso debe sentirse bien en los muslos —sacude su cabeza—. Esto es un poco incómodo, es como tener una conversación unilateral.
»Sería normal si estuvieses inconsciente, pero con tus lindos ojos abiertos y tu sonrisa boba se siente raro que me hagas hablar sola, así que ¿Podrías decirme algo? Tengo la certeza de que no te quedaste mudo.
Él asiente con lentitud y abre su boca, lo observo a la expectativa. Me consta que lo intenta, pero un sonido ronco sale y apenas si alcanzo a escuchar una muy baja entonación. Es horrible.
—¡Oh, Jesús hospitalizado! De verdad estás mudo —estoy alarmada—. Tendremos que aprender a hablar por señas y adaptarnos a que hable por los dos y...
Su risa me toma por sorpresa porque aunque es débil y parece que le hace doler el abdomen, se escucha a la perfección. Apuesto a que lo estoy viendo con los ojos muy abiertos, ¿Qué está sucediendo?
—Lo-Lo siento —dice en voz baja riendo—. No pu-pu-pude contener...La ri-risa. Estás loc-loca, novia.
Todo lo que hago es observarlo con la boca abierta. Acaso... ¿Él me ha gastado una broma? Pero... Pero todos dijeron ayer que él no estaba hablando. Finalmente él deja de reír mientras me mira.
—Eres un imbécil —golpeo su brazo continuamente—. Eres un idiota, tú grandísimo...
—Me duele, me due-duele —dice intentando alejarse de mí.
Dejo de golpearlo aunque quisiera seguir. este mentiroso moribundo que me ha jugado una broma pesada. Siento mi labio temblar y él también lo nota.
—Estaba preocupada por ti, por tu voz y los daños que podías tener, esto no es gracioso —sorbo mi nariz y paso mi mano por mis ojos porque estoy muy segura de que estoy a nada de llorar—. Me asustaste horrible y no puedo creer que todos hayan estado bromeando sobre esto. ¡No es gracioso!
»Es que si no fueras un moribundo todavía, te golpearía mucho.
—Calma, calma —pide.
Lo miro de mala gana y él suspira, hace una mueca de dolor mientras lleva una mano a su abdomen. Con tartamudeos y voz baja, tarda mucho en explicarme que de hecho en un principio por alguna razón no pudo hablar al despertar y que llegó a pensar que su voz no estaba, pero todo fue una falsa alarma y luego de unas horas poco a poco fue emitiendo su voz con una que otra complicación. Que por ahora parece que algunas palabras no las asocian bien al hablar y puede que sienta que en ocasiones se le enrede un poco la lengua, lo cual noto mientras me explica.
Así que ayer Adelaide no estaba incluida en la broma, era una verdad. Por otra parte, parece que mi hermano hoy decidió sacar a relucir su escaso sentido del humor al seguirle la bromita.
—La terapia del habla te ayudará —garantizo—. ¿Qué otra consecuencia hay?
—El dolor de cabeza...Es constante, no...Se de-detiene.
Soy una novia terrible porque cuando él hace pausas al hablar, me desespero un poco esperando que dirá, pero sé que es algo que le tomará tiempo corregir y mejorar. Puedo ser paciente, siempre estaré dispuesta a esperar por él.
»Es migraña, bueno, ellos dijeron que es...Cefalea tensional...Y tendré que aprender...A ma-manejarlo —Alza su mano derecha, baja todo sus dedos menos el angular y meñique—. No tengo sensibilidad...En ellos. Intento bajarlos y no pue-puedo. Tampoco los siento.
Lleva una mano a su rostro y tantea su mandibula del lado derecho, luego la comisura de su boca. Me da una sonrisa y noto entonces que ese lado de su boca sube menos y que su ojo no se achica tanto como el izquierdo.
—¿Lo ves? Tengo menos sensibilidad de...Este lado.
—¿Qué tan lejos llega? —pregunto procesando todos estos nuevos cambios para él.
—Del tronco hacia... —Hace una pausa tomando una profunda respiración y se mira frustrado—. Hacia...Arr... ¡Joder!
—Calma, tómalo con calma —digo tomando su mano en la mía—. No desesperes, poco a poco irá mejorando y encontrarás bien las palabras. ¿Querías decir hacia arriba?
—Sí. Hacia...Arriba.
—Entonces abajo todo se mueve bien —caigo en cuenta de mis palabras—. No lo dije de esa manera, es decir, solo quise decir que puedes caminar bien y...
De nuevo suelta una sonrisa suave. Acaricio sus nudillos con mis dedos mientras lo miro. Estamos despiertos y agradezco que tuviéramos una nueva oportunidad de vivir. Por supuesto que Drake no deja pasar el hecho de que fui atacada, de lo maldito que es quién me hizo daño y lo aliviado que se encuentra de que todos mis daños físicos desaparecerán con el transcurso de la semana.
—Aquí —alzo mi bata enseñándole mi muslo con la venda—. Tengo una herida fea aquí, tiene puntadas y la limpian dos veces al día. Cuando estés bien, ¿Le darás un beso?
—Muchos —responde.
Retira la sábana de su cuerpo y alza su propia bata. Debajo de su bata está desnudo, pero luego noto lo que quiere mostrarme y es la venda que tiene de manera vertical en su abdomen.
—También tendré...Mi propia...Cica-Cicatriz.
—También la besaré. Ahora baja eso, que cualquier pueda entrar y pensar que somos traviesos.
Sonríe de esa manera nueva en la que la comisura izquierda se alza más que la derecha y creo que ya me enamoré de esa sonrisa. Baja su bata y se cubre de nuevo con la sábana. Entrelazo mis dedos con los suyos.
—Estos nuevos cambios que ahora te frustran no te hacen diferente en tu interior, sigues siendo Drake Harris. No te preocupes por ello.
Suspira y su pulgar acaricia el dorso de mi mano, lleva su vista hacia mi yeso y ruedo mis ojos.
—Quería mantenerlo intacto, pero todos vinieron y lo firmaron incluso cuando dije que no.
—Es...Bonito.
—Es un fastidio. No quería que lo rayaran.
La puerta se abre y una enfermera entra, detrás de ella viene Jocker y sé lo que significa. Hago un puchero, pero nadie se compadece.
—Van a limpiar su herida, llevarlo a hacerse una resonancia y luego debe descansar —Me dice Jocker—. Despídete de él.
—Volveré mañana —aprieto sus dedos entre los míos—. Gracias por despertar.
Abre sus labios y por un momento parece que las palabras no salen y noto en su mirada cuánto le moleste ese hecho, sacude su cabeza y lo intenta una vez más.
—Te A...Amo.
—Te amo —le digo mientras Jocker comienza a hacer rodar mi silla.
—Descansa, Drake —le dice.
Le digo adiós con mi mano y sonrío quedándome con esa última imagen de él dándome su nueva sonrisa. Suspiro cuando Jocker cierra la puerta detrás de nosotros.
—Pareces feliz.
Alzo la vista ante las palabras de Dawson y me encuentro con su sonrisa, él también se ve feliz. Toda su familia tiene mejor semblante.
—Estoy feliz —respondo.
—¿Incluso cuando te gastó la broma? —Se burla y entrecierro mis ojos hacia él.
—Estoy muy segura de que esa fue tu idea —lo acuso y él no lo niega—. ¿Qué traes ahí? —señalo a su bolsa.
Holden es quien me responde.
—Vamos a asear a nuestro hermanito. La barba va a irse y estoy seguro de que quiere un poco de agua en su culo de bebé.
—¡Holden! —Irina lo reprende con una mirada y él ríe.
—Él se ve sexi con barba —mascullo.
—Él se ve como un vagabundo —corrige Hayley y le muestro mi lengua de manera infantil.
—Bueno, Aska debe volver a su habitación —anuncia Jocker—. Pasaré por aquí de nuevo antes de irme —Le dice a la familia Harris.
Ellos se despiden de mí y me piden que descanse. No puedo borrar la sonrisa que me acompaña mientras Jocker me lleva hacia mi habitación.
—¿Te sientes mejor?
—Me siento genial. Tengo la sensación de que desde aquí, todo estará bien —respondo con seguridad.
Tarareo una canción y él ríe. Encontramos a nuestros padres en el pasillo y ellos notan mi buen humor. ¿Cómo no estar feliz? Parece que finalmente la oscuridad se ha despejado.
¿Por qué vive Drake? Porque en primer lugar nunca pensé en llevar el drama en esta historia tan lejos haha y nunca quise matarlo, no estaba en mis planes, digamos que tenía a un ángel protegiéndolo.
Larga vida a Drake...
Redes:
Instagram: DarlisStefany.
Facebook: Darlis Stefany.
Twitter: Darlis_Steff
Grupo de facebook: Stefflovers-Darlis Stefany.
YouNow: DarlisStefany (Todos los sabados adelantos, etc, etc en los live).
Espero les guste.
Un beso.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top