Consternado

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Al beber un sorbo de agua mineral, Hoseok sintió que la cabeza le dolía más de lo normal, mientras tanto Changkyun le pasó un par de aspirinas y las recibió bebiendo un sorbo aún más grande.

— ¿Qué tanto te dijo el director para que salieras casi muriendo, hombre.? — la pregunta hecha por Jooheon no le venía en gracia, ni siquiera podía sonreír de lo mucho que estaba odiando su trabajo y su vida de repente.

— Nada, no- no ha hecho ni dicho nada. Yo creo- creo que algo que me cayó mal. —Se excuso tan rápido como su cerebro se lo permitió. Estaba tan contrariado, que no podía ni hablar correctamente.

— Es la primera vez que veo a alguien desmayándose en el trabajo, así que lo grabé y lo subí a Tiktok.  Vaya, ya tiene 7.000 reproducciones, mira.

— ¿¡Changkyun, cómo pudiste!? — Hoseok le arrebató de las manos el teléfono y constató si era verdad; pues era incluso peor. Los comentarios no paraban de llegar y las personas dando like caían por montones. — Eres el peor amigo... — Le regresó el elemento de mala gana, la cabeza aún le estaba doliendo un montón pues las aspirinas todavía no surtían su efecto, así que cerró los ojos para relajarse un poco.

Más el recuerdo de HyungWon sentado en esa silla llegó a su mente de inmediato.

Él cambió un montón, y no para mejor, sino para peor. Con aquella personalidad fácilmente podía considerar a HyungWon un desgraciado y un déspota sin control alguno, el chico amable que conoció tiempo atrás se esfumó por completo, aunque su atractivo inigualable se mantuvo intacto a través de los años; fue esa belleza irreal que no era propia de nadie más que él, la que lo hizo flaquear en más de una ocación y esta vez no fue diferente de ese entonces. 

Suspirando apoyó el mentón en la mano mientras pensaba en las razones por las cuales alguien como HyungWon había cambiado de manera tan radical, haciendo recuento no logró comprender, ya que no consideraba que el mismo hubiese cambiado demasiado, simplemente seguía siendo el mismo Hoseok con un montón de problemas y cuentas por pagar, alguien quien ya no le encontraba mucho sentido a salir con nadie por mero compromiso y quien sólo esperaba poder tener un momento de paz absoluta. Igual, sin importar la razón por la cual  ahora el menor le resultaba tan diferente, la conclusión era que no podía seguir ahí de ninguna manera, su presencia era demasiado poderosa, tentadora y enteramente perjudicial para el que se encontraba en un momento tan critico; Hoseok estaba seguro de que el tratar de convivir con HyungWon no le traería nada bueno. 

Soltó un profundo suspiro.

Fue someramente inteligente al aprovechar la situación para obtener un aumento, pero eso no significaba nada, si a cambio del dinero perdería los pocos apoyos que le quedaban para defenderse del sentimiento incomodo que lo hacía ser un tonto frente al menor; aunque se dijera a sí mismo que no sería por mucho tiempo, que no se quedaría más que lo necesario en lo que ahorraría lo suficiente para alejarse de ese lugar, aún así no hizo falta analizarlo a profundidad para entender que no podría manejar nada de lo que se pudiese desencadenar si HyungWon lo llegaba a recordar de repente.

Podría suceder y ni siquiera lo había considerado.

— Voy a renunciar. — Lo comentó rápidamente y sin dudarlo más, eso hizo que Jooheon lo mirara con seriedad, en el rostro del menor se podía notar una fuerte sensación de incertidumbre, ya que no lograba entender las simples palabras con las que Hoseok lo atacó. Quien habló esta vez fue Changkyun.

— ¿¡Estás loco!?— Exclamó con asombro—  ¿Por qué ahora? ¿A caso el director te dijo algo tan serio? — Hoseok negó con la cabeza sin tener idea de cómo explicarlo, le era imposible hablarle a sus amigos sobre lo que le sucedía, pues le resultaba demasiado vergonzoso, estúpido y definitivamente no tenía sentido ni razón de ser si pronto estaría curado de ese mal maldito.

— Tengo que hacerlo — reiteró sin explicar nada aún — debo buscar otro lugar antes de que todo se vuelva demasiado incómodo. Trataré de ahorrar tanto como pueda y buscaré otras empresas, quizá eso funcione.

— O quizá simplemente te quedas y enfrentas al nuevo director. — Reprochó Jooheon insistiendo en su expresión de poca comprensión — Vamos, Hoseok ¿desde cuándo te dejas vencer por un idiota que finge ser un profesional? Ese sujeto no es más que un don nadie que quiere imponernos sus reglas sin sentido. No le prestes atención y céntrate en lo tuyo.

— Jooheon tiene razón, hyung, ese tipo no es más que un fanfarrón ¿vas a dejar que te atormente así? No le des el gusto de irte por tu propia cuenta. — Insistió Changkyun, más sin embargo Hoseok se desesperó porque después de todo sus amigos no conocían la situación, ellos nunca podrían llegar a imaginar lo descabellado que era quedarse luego de darse cuenta de que tendrían a HyungWon como su nuevo director; simplemente una locura.

— No lo hago, no le tengo miedo... — No lo tenía ¿Verdad? — Pero tampoco puedo seguir en esa empresa  si es HyungWon quien permanece como director — Fue definitivo al decirlo, no iba a dejar que de nuevo eso le afectara hasta el punto de hacerlo desfallecer, era ilógico, y para ser sinceros, comenzaba a sentirse cada vez más y más ansioso sobre la posibilidad de que en serio en un azar del destino HyungWon descubriera su verdadera identidad. ¿Qué expresión haría? ¿Se asombraría? — Es imposible, buscaré otra empresa. Quizá encuentre una en la que paguen lo suficiente.

Insistió hasta el final en que debía ser así.

— ¿Y qué tiene que sea él? Sigue siendo un presumido y un tonto. — Changkyun no desistía de su idea tampoco, para él había sido esa su primera impresión del nuevo director e iba siendo casi imposible de diluir; pero aquello no le parecía suficiente como para que Hoseok quisiera renunciar.

¿Qué sentido había en ello?

— Él... No me cae bien. No pienso seguir las ordenes de un imbécil — Casi que evadiendo el tema trató de ocultar las razones reales de la negativa, su mirada se desvió ligeramente y su corazón latió con mayor velocidad y fuerza, una delgada capa de sudor cubrió su frente y de manera compulsiva su pierna se movió sin control. — Lo mejor es que renuncie luego de un tiempo determinado, prefiero eso antes que darle el gusto de molestarme.

— Él debió decirle algo terrible, lo sé. — Changkyun se inclinó sobre la mesa interesado en la manera nerviosa en la que se comportaba su compañero de trabajo y amigo, mientras que Jooheon negó con la cabeza hablando enseguida.

— ¿Estás huyendo por una simple amenaza? Yo mismo hablaré con ese desgraciado. — Hoseok arrugó el entrecejo al escuchar esas palabras. No era que estuviera huyendo, no se trataba de eso, simplemente...

— No es así, Simplemente no quiero estar bajo las ordenes de alguien a quien no le interesa hacer bien su trabajo, eso es todo. —Hoseok trató de excusarse por cuenta nueva, cada palabra parecía no surtir efecto en sus amigos, quienes cada vez se motivaban más a enfrentar al alto rubio de extraordinaria belleza.

— Entonces ¿de verdad dejarás tu puesto libre? — Changkyun lo preguntó genuinamente preocupado y Jooheon lo miró también con vetas de interés — ¿Por qué no lo piensas mejor, Hoseok hyung? Quizá sea como Jooheon dijo, tal vez es cuestión de tiempo para que ese tipo se largue y todo vuelva a ser como antes.

Por alguna razón Hoseok dudó de ello, ya que era demasiado confuso e inquietante, podía fácilmente creer en la palabras de sus amigos, más no era tan sencillo. No sabía a que se debía ese extraño sentimiento indescriptible y pensó que quizá por ello mismo debía desistir de desear un futuro en la empresa junto a sus amigos; y eso que HyungWon ni siquiera lo recordaba. 

Por esa última parte una opresión en el pecho lo atormentó sin ninguna explicación.

— Ya lo pensé, Changkyun, alejarme antes de que todo sea peor es la única solución.

◇◇◇

— ¿Está seguro que se encuentra bien? — la pregunta hecha por la mujer castaña lo hizo detenerse en su intento por abrir la carpeta que debía leer antes del término de la jornada, vio la hora en su reloj de muñeca y luego esbozó una cortés sonrisa.

— Lo estoy. No debe preocuparse por nada, señorita Kim.

— Es normal preocuparse luego de ver la manera en que decayó. Por favor no se esfuerce demasiado y descanse si lo necesita. — Hoseok asintió y vio a la mujer salir en dirección a su puesto de trabajo; varios segundos después volvió al proyecto que debía revisar. Era un acuerdo, la condición era que se encargaría de leer y dar un informe detallado sobre el tema, algo que al parecer HyungWon no podía hacer por algún motivo.

Al menos ganaría algo de dinero extra.

Hoseok pensó en que debía aún discutir la cantidad de dinero que podría pedir por un trabajo como ese, mientras leía cada punto se preguntó también el por qué HyungWon debía depender de otra persona para algo tan sencillo y esencial como leer un proyecto, en su memoria aún rondaba la imagen del chico delgado, alto y diligente que siempre era elogiado por su dedicación, así que no le extrañaba que actualmente fuera director — no del todo — pero quizá sí seguía siendo decepcionante que se hubiese convertido en un arrogante, pedante y un grandísimo imbécil que no veía a los demás sino como ganado a manejar.

Total...

Luego de pensar una y otra vez sobre lo mismo tuvo que aceptar —casi que a la fuerza— que todos cambian, incluso el corazón cambiaba con el tiempo, así que teniendo en cuenta ese hecho supuestamente contundente se preguntó entonces ¿Qué era lo que sucedía y por qué razón no podía salir de ese cajón oscuro en el que se sumergió en el pasado? HyungWon jugó sucio y ese sentimiento de impotencia fue cobrando fuerza con el pasar de los tiempos, incluso en ese momento mientras resaltaba los puntos más importantes del informe y sacaba deducciones, sentía que podía gritar y llorar de la frustración por la enorme injusticia de haber sido condenado a vivir una vida de martirio, mientras que el culpable de todo vivía una vida de lujos y plena tranquilidad.

¿Por qué?

No podría jamás explicarlo, pero le parecía tremendamente injusto y de muy mal gusto.

Muy abrumado se detuvo de trabajar en el informe ajeno, levantó la vista notando como todos estaban sumergidos en sus cosas, los teléfonos repicando y los diferentes sonidos de oficina haciendo boom en su cabeza, con la percepción del espacio-tiempo distorsionado, miró hacia el pasillo que conducía a la oficina de HyungWon y la respiración casi se le detuvo; lo que lo hacía sentir así no era el hecho de que no hubiese obtenido el puesto de director como hubiera querido o pensado que pasaría, lo que sucedía es que la mera imagen de ese sujeto lo hacía sentir sofocado y tenerlo a tan sólo metros de distancia ya era motivo suficiente para enloquecer o incluso peor.

Comenzaba a sentirse mareado y confuso.

— ¿Te encuentras bien? — Abriendo los ojos más de la cuenta miró hacia su lado derecho donde se encontraba Jooheon y asintió volviendo a los papeles sin siquiera quejarse o decir nada más; si bien necesitaba el dinero no iba a ser así por mucho tiempo, al menos por el tiempo en que reuniría lo suficiente debía ser fuerte y resistir.

Seguramente con la ayuda del doctor Minhyuk alguna solución encontraría por el momento.

◇◇◇

— Iremos a beber algunas cervezas ¿vienes?

Hoseok miró a Jooheon que tomaba su saco del respaldo se la silla y volvió a la pantalla sin falta.  — Debo terminar esto antes — comentó y presionó teclas al azar — Los llamaré si logro adelantar lo suficiente.

— Claro. Cuídate y descansa.

— Cuídate, Hoseok. No te esfuerces demasiado. — El mayor asistió y se despidió de sus dos compañeros, ambos hombres salieron en medio de una típica charla, esperaron por el ascensor y se desvanecieron una vez las puertas del mismo se cerraron; rápidamente Hoseok acomodó su agenda junto a las carpetas y apagó el monitor, no sin antes tomar una bocanada de aire, decidido se levantó de su puesto de trabajo llevando consigo todo lo que necesitaba y fue directo por el pasillo hacia la oficina del director.

 De HyungWon.

Se preparó mentalmente por varias horas, así que estaba casi seguro de que podría hacerlo sin necesidad de recaer o verse envuelto en nada más que tuviera que ver con HyungWon; él era su director, sí, pero eso no significaba nada más que eso. Con firmeza tocó la puerta y enseguida vio como la puerta se abría, HyungWon se apoyó en el umbral de la misma y lo miró desde su posición directamente a los ojos robándole todo el aire, borrando a su paso cada una de las palabras de fuerza que se dio a sí mismo...

— Pensé que no se dignaría a venir y que me reportaría con recursos humanos, pero en realidad es alguien bastante inteligente. — La energía y voluntad con la que enfrentaría a HyungWon se vio quebrantada en segundos, con fuerza apretó contra su cuerpo el par de carpetas y la agenda, mientras que su mirada fue a dar al suelo, aclarando la garganta cobró fuerza y levantó la vista otra vez; HyungWon seguía mirándolo fijamente, como si no lo hubiese dejado de ver desde el primer momento.

Su corazón latió con mayor fuerza.

— Ya está todo listo, director. — Hoseok usó una voz templada y distante para ello, ni siquiera pudo sostenerle la mirada, sino que desvío la vista y volvió a aclarar la garganta mientras comenzaba a sentir un calor insoportable subir por su rostro.

— Claro, porque si no lo estuviera usted no estaría aquí ¿o no? — Respondió confiado y aún de pie bloqueando la entrada a la oficina — Venga, acérquese.

No lo podía creer.

— ¿Ah?

— Venga le digo. Acérquese, vamos — Hoseok no pudo reaccionar, pues en menos de lo que se dio cuenta ya tenía a Hyungwon muy cerca de su rostro, él lo sostenía de los brazos con firmeza y sus enormes ojos lo fijaron con fervor. — ¿Cree usted que soy atractivo? Mireme bien ¿a caso piensa que puedo ligar con alguien si me veo así?

Las preguntas hechas por Hyungwon eran exactamente del tipo de pregunta que encierran y no liberan, Hoseok en cuestión de segundos se vio estando atrapado en una especie de embrujo exorbitante que no le permitió hacer un buen uso de sus sentidos, al contrario, los mismos se vieron afectados y totalmente nublado se dedicó a ver con gran detalle el rostro del rubio.

Debía estar mal, muy mal, mucho peor de lo que podía haber pensado podría llegar a estar, de inmediato su corazón latió con desenfreno, los ojos se movían sin control rememorando cada detalle del rostro contrario y un incesante anhelo por acercarse más de lo normal lo fueron invadiendo, al punto de que sus manos temblaron por la manera en que la ola de sentimientos lo abordó.

¿Y cómo no? Si Hyungwon era excelsamente atractivo.

Los recuerdos que quedaron grabados en su memoria eran absolutamente nada comparado con lo que tenía justo en frente, a tan solo centímetros de el; Hoseok tragó con dificultad, la fuerza con la que quería cerrar la brecha aumentó considerablemente y en un momento dado cerró todos sus sentidos sumergiéndose.

— Vaya, pareces muy dedicado ¿realmente te parezco tan atractivo? — Una risa burlesca lo obligó a abrir los ojos, Hoseok se dio cuenta de inmediato de lo que había estado sucediendo con él y el miedo fue creciendo a medida que el rubio lo veía con una expresión de suficiencia y burla impregnado en todo su rostro. — Señor Lee, debió habermelo dicho antes y quizá así lo pensaría con detenimiento — HyungWon rio — Ya sabe, sobre tener sexo.

— Q- ¿¡Que!? — El color de piel de Hoseok paso a ser el de un fantasma y totalmente perplejo dejó caer las carpetas y agenda que llevaba entre las manos — ¿Cómo es que... — Una gran impotencia lo dominó y algo igual a un profundo desprecio impregnó todas sus acciones, Hoseok alejó al rubio alto de un empujón y con un resentimiento válido — desde su perspectiva — se dedicó a recoger las carpetas con las manos temblorosas, intentando no pensar en la descuidadas palabras del otro hombre que apenas y se quejó ante la agresividad con la que fue apartado — ¡No soy un asqueroso gay! ¿Con quién crees que estás hablando?

Un extraño sonido hecho desde su garganta y una abrupta risa explotó de repente, Hoseok no se interesó por nada más que intentar recoger todo y marcharse, más una vez levantó el rostro se encontró estando de nuevo frente a frente al rubio; este lo agarró del cabello con tanta fuerza como para hacerlo quejar del dolor, su rostro lo expresó muy bien y creyó que fácilmente podría quitárselo de encima a la fuerza pero la misma impotencia le impidió hacer nada más.

— ¿Qué tratas de decir? ¿Lo que dices es que me equivoco? — Su aliento caliente chocó contra su rostro, pero no era para nada comprometedor o agradable, el mayor simplemente temblaba sintiendo en el pecho una opresión y un tremendo rencor que no paraba de crecer — Puedo reconocer a un gay a kilómetros de distancia, señor Lee, pero al parecer aún le falta mucho para darse cuenta. Igualmente no importa, no podría estar interesado en alguien quien todavía no se acepta tal como es... Muy aburrido y tonto. — Hyungwon lo soltó luego de decirle esas palabras que fueron tan crueles como sus acciones del pasado, como lo que tuvo que vivir después de ello y tan cruel como le fue posible para un momento en que se sintió demasiado vulnerado — Gracias por su interés, pero no me interesan los hombres como usted ¿entiende? Solamente dije que lo pensaba y nunca dije que realmente quisiera acostarme con usted, no se preocupe, no estoy interesado. Verá, tengo una cita en.... — Hyungwon miró el reloj en su muñeca y soltó un suspiro. — vienen por mi en menos de cinco minutos. He perdido demasiado tiempo aquí ¿por qué vino? Hace que me duela la cabeza.

— ¿Por qué a mi? — La pregunta llegó mientras Hyungwon vestía su saco, la camiseta verde que llevaba le daba un toque extraño y extravagante, pero todavía jovial. Hyungwon frunció los labios y siguió sin responderle realmente, simplemente soltó un serio bufido ye hizo una expresión de aburrimiento — ¿Por qué siempre estás arruinando todo? ¿Por qué siempre a mi?

— ¿De qué hablas?

— ¡Por culpa tuya toda mi vida se arruinó! ¿y sólo vienes y dices esas palabras sin siquiera tener en cuenta por todo lo que he pasado? ¿Sexo? ¡Jamás desearía dormir con otro tipo, y menos con un imbecil bueno para nada que ni siquiera puede recordar un puto acuerdo que hizo hace apenas unas horas! — Los ojos de Hyungwon se abrieron en su máxima expresión de desconcierto, mientras que el pecho de Hoseok era un mar de sentimientos que se entremezclaban hasta volver todo amargo.

— ¿¡Qué sabes tú acerca de mi!? ¡Te quejas por algo tan simple y evidente! ¡No tengo la culpa de todo, no elegí nacer así, no elegí ser así y si no puedo recodar lo que hice hace un maldito minuto no es de tu maldita incumbencia! — HyungWon maldijo fuerte y claro — Pasa lo mismo contigo, pero eres tan malditamente ignorante y estúpido que no puedes darte cuenta. — cualquier rastro de burla se esfumó del rostro del rubio que tomó su maleta en un arrebato, mirando a Hoseok caminó a paso firme hasta la puerta y pretendía salir dando por zanjada la inútil discusión. — aarrggg esto es fastidioso....

— ¿A-a dónde vas? Estoy hablándote ¿por qué viniste aquí? — Hoseok se sintió aún más frustrado por la manera en que el otro se comportaba; por un instante deseó intensamente que recordara todo, absolutamente todo.

Sin dudarlo lo tomó del brazo.

— Estoy yendo tarde, Hyunwoo viene por mi y es mi oportunidad de oro. Si todo sale bien tendré alguien con quien pasar el día de San Valentín, señor "no me acuesto con hombres"— Comentó y soltó un nuevo bufido. — ahora sueltame. — La acción de Hoseok fue muy contraria a lo que le había pedido el alto rubio, HyungWon frunció el ceño e intentó safarse sin éxito alguno. — ¿qué haces? Sueltame ya.

— ¿Qué tiene de bueno San Valentín que todos pierden la cabeza al instante? ¿vas a actuar igual de desconsiderado e iras a arruinar más vidas? ¡No te dejaré!

Se negó totalmente a soltarlo.

— A- ¿Qué? ¡No he hecho nada! Suel-ta-me — HyungWon volvió a forzar el brazo, pero el otro hombre insistía en mantenerlo preso; fuera de sí soltó la maleta que llevaba en la mano y empujó a Hoseok contra el umbral de la puerta haciendo que se quejara de dolor, pero a HyungWon no le importó tanto como para meditar si estaba haciendo lo correcto, simplemente tomó su rostro entre su enorme mano y lo apretó sin ninguna consideración — ¿Estás buscando problemas? ¿Qué demonios quieres? ¿Por qué hablas como si me conocieras? ¡Deja ya de joder!

La frustración de Hoseok que ya era lo suficientemente enorme le hizo doler el pecho, la forma en que su rostro era sostenido por el más alto lo abrumó, y aunque lo único que debía hacer para que todo acabara ahí era soltarlo, en su lugar hizo más y más fuerte el agarre; simplemente no podía, no podía dejarlo ir, el sentimiento era tan grande que no era ni siquiera consciente completamente de ello. Cuando por fin HyungWon liberó su rostro creyó que sería suficiente, hasta el momento en que lo vio cerrar la mano en un puño y elevar el mismo, aún sin atreverse a dejarlo ir cerró los ojos y se quedó completamente inmóvil intuyendo lo que sucedería.

Varios segundos pasaron antes de darse cuenta de que nada sucedía, lentamente abrió los ojos y halló en los de Hyungwon el completo horror, él mismo estaba aterrado de verlo así. Los labios del rubio comenzaron a temblar de manera muy evidente, el puño creado con tanta ira se aflojó y lo soltó permitiendo que retrocediera abrumado.

— No-no puede ser... — Hyungwon cayó al suelo de la sola impresión, negaba con la cabeza a algo en su mente y Hoseok frunció el ceño al no comprender. — No puede ser  ¿Wo-Wo-Wonho hyung?

Wonho...

Hace un largo tiempo que no escuchaba ese apodo...

☽☽☽

Hyunwoo llevaba esperando al mayor por varios minutos, estaba fuera del edificio y mientras esperaba se dispuso a escuchar música de una vieja estación de radio; distraído miró a su lado izquierdo pasar varios autos y se llevó el susto de la vida en el instante en que escuchó a alguien estrellarse contra el auto y luego golpearlo con desesperación.

— ¡Abre la puerta!

— ¿Hyungwon? — El menor no entendía nada.

— ¡Abre ya, maldita sea!

— ¡HyungWon, tenemos que hablar! — Al escuchar la tercera voz que iba tras su amigo, Hyunwoo comprendió rápidamente y abrió la puerta permitiendo que el alto rubio entrara de manera disparatada, ni siquiera comprendía, pero en cuanto él gritó que arrancara eso hizo, piso el acelerador a profundidad y corrió lejos de ahí tan pronto cuánto pudo. Después de recorrer varios kilómetros a una velocidad absurda, por fin Hyunwoo miró el retrovisor dándose cuenta de que nadie los seguía, no había nadie de quién huir, así que disminuyó la velocidad hasta detenerse y aparcar a un lado de la carretera; estando seguro se tiró contra el asiento, desabrochó el cinturón de seguridad y respiró por primera vez en varios largos minutos.

— ¿Qué diablos fue eso? — El moreno se quejó soltando una enorme bocanada de aire, cerró los ojos normalizando su respiración y volvió a ver al delgado hombre que temblaba sin parar. — ¿HyungWon? ¿Qué fue lo que pasó allá atrás?

— No quiero hablar de eso. Sólo- sólo llévame a casa.

— ¿Alguien trató de hacerte daño? — lo preguntó curioso, pero el rubio no decía mayor cosa — Tienes que decirme, Hyungwon ¿qué sucede?

— ¡Quiero ir a casa, Hyunwoo, por favor! — La voz llena de desespero del mayor lo hizo reaccionar, asintió inseguro de si debía seguir así sin más, pero suponía que no quedaba otra cosa por hacer. Tomando aire de nuevo encendió el auto y se dirigió a casa de Hyungwon en absoluto silencio, preguntándose por lo que sucedía y que tenía a su amigo en ese estado tan extraño.

◇◇◇

— Se niega en absoluto a ir al trabajo, no logro convencerlo con nada. — Hyunwoo vio a Minhyuk saliendo del pasillo, se veía agotado y muy molesto por quizá estar luchando con HyungWon para que saliera del cuarto y fuera a trabajar.

— Han pasado dos días desde que salió del edificio totalmente asustado ¿no crees que deberíamos ir y averiguar lo que sucedió, Minhyuk hyung? — el ceño fruncido de Hyunwoo tuvo impacto en el mayor de cabello castaño, este tomó asiento y soltó el aire una vez lo hizo; pensando en ello no creía que fuera algo demasiado serio, porque conocía a Hyungwon y seguramente él habría actuado diferente.

— No te preocupes, yo me encargaré de hablar en la empresa en nombre de Hyungwon. Diré que  tiene un resfriado y de paso averiguaré lo que pudo haber sucedido ahí dentro ¿te parece?

— Espero no sea tan serio como dices, nunca lo había visto así.

A decir verdad estaba muy asombrado con todo.

— Yo tampoco — confesó el mayor — Sólo una vez estuvo en un leve estado de depresión, pero fue porque su primer amor le rompió el corazón.

— ¿Su primer amor? ¿Hablas en serio? — Hyunwoo parecía incrédulo, pero al mismo tiempo curioso de lo que decía Minhyuk; él asintió.

— HyungWon estuvo muy enamorado de un chico durante la universidad, desde el primer día no paró de hablar sobre él y lo genial que era. Le gustaba mucho.

— ¿Y supiste quién era? — Minhyuk soltó un suspiro.

— Sólo sé que HyungWon solía llamarlo Wonho. — Sonrió al recordar algo — Desde que se levantaba lo hacía hablando de él, mantenía muy animado y sin lugar a dudas se esforzaba en todo lo que hacía.

— ¿HyungWon?

— Sí, él. — Respondió y suspiró por cuenta nueva. — Fue un 14 de febrero, HyungWon estaba feliz porque logró comprar un lindo regalo para el chico que le gustaba y sinceramente creí que sería correspondido por la manera en que contaba se comportaba él, pero....

— ¿Qué sucedió, hyung? ¿Fue algo demasiado malo?

— Hyungwon dice que fue terrible. — Hyunwoo estaba asombrado por lo que escuchaba, esperó con zozobra a que Minhyuk continuara y se acomodó mejor en el sillón — Wonho lo besó dándole esperanzas y luego lo abandonó sin ninguna explicación. Todo en pleno día de San Valentín.

— Te refieres a que- ¿Estuvieron saliendo y luego cortaron?

— Más bien fue algo como que quería probar qué se sentía salir con un hombre y luego simplemente se esfumó como un cobarde.

— Vaya, nunca me lo hubiese imaginado. No creí que HyungWon tuviera una historia como esa, pensé que había sido un raro toda su vida.

— Lo ha sido siempre, pero mientras estuvo enamorado de Wonho su manera de ser era mucho más dócil, mucho más obediente. Se detenía a pensar mejor las cosas e incluso asistía a las psicoterapias porque él creía fervientemente que podría curarse algún día.

— Pero...

— Lo sé — Mencionó con pesar Minhyuk — su amor por ese sujeto Wonho lo hacía pensar eso, él creía que podría hacerlo incluso si era imposible. Y no estaba tan mal... No del todo.

— ¿Crees que la razón por la que se niega a seguir con el tratamiento sea porque... Quizá él, no sé ¿Sigue enamorado de ese Wonho? — Era una pregunta genuina que nació de la curiosidad por esa parte desconocida sobre el rubio, Hyunwoo lo conocía desde hace un buen tiempo, pero era la primera vez que escuchaba algo igual.

— Quién sabe, pero lo último que dijo al respecto era que lo mataría si lo llegaba a ver de nuevo. Quizá sea cierto e intente molerlo a golpes.

— Pobre, compadezco a ese pobre hombre desde ya. — El moreno negó con la cabeza al imaginarse tal barbarie.

— HyungWon seguramente hallará alguien, alguien que lo comprenda y lo acepte tal como es ¿No lo crees? — Minhyuk lo preguntó algo preocupado, porque aunque creía de manera ciega en la apariencia excepcional de su hermano menor, a veces dudaba mucho de su singular personalidad.

— Me siento algo ofendido. — comentó Hyunwoo nada más pudo hacerlo, llamando así la atención del mayor. — Por lo visto HyungWon era una mejor persona con ese tal Wonho, pero a mi solamente me persigue como la desgracia a un pobre diablo ¿Crees en serio que me ama? Yo estoy seguro que lo hace sólo porque le es divertido molestarme. — Minhyuk soltó a reírse.

— ¿Celoso?

— Nah, sólo curioso sobre la persona que hizo tal hazaña de dominar a la bestia.

— Es cierto, me pregunto también qué clase de persona es...

◇◇◇

— Lamento mucho que el director Chae esté en ese estado, la verdad es que no pensamos que fuera tan grave.

— Sí, es una pena que esté aquí hablando por mi hermano, pero  si no lo hacía seguramente malinterpretarian su ausencia. — Minhyuk acomodó sus lentes un tanto inquieto por estar mintiendo, pero en ese momento nada más se le ocurría.

— Por favor, no tenía por qué molestarse, una simple llamada habría bastado para nosotros. El director Chae nos ha impresionado con su gran habilidad para diseñar planos y eso es algo que valoramos mucho. — Un destello de orgullo brilló en los ojos del castaño.

— Lo sé, pero mi razón para estar aquí es porque estoy también curioso sobre algo. — El hombre de aspecto cansado abrió los ojos y se interesó por lo que Minhyuk decía — Verá, mi hermano estuvo aquí hace dos días adelantando algún tipo de trabajo ¿Sabe usted si alguien se encontraba con él?

— ¿Alguien? Bueno, a veces suelen quedarse algunos analistas y arquitectos en las oficinas, pero ¿sucede algo? — Minhyuk negó con la cabeza y dio su sonrisa más profesional.

— No, sólo quería saber. Muchas gracias por recibirme y siento que mi hermano tenga que ausentarse, prometo que una vez esté curado regresará con todas sus energías puestas en crear más y mejores planos. — Se levantó aún sonriendo.

— Es usted muy educado, por favor enviele mis saludos al señor Chae. Pronto estaremos enviando un pequeño detalle por parte de la empresa para animarlo a que siga cuidando de su salud.

— Gracias, pienso que estará muy feliz de recibir algo tan especial. — Haciendo una reverencia Minhyuk dejó la oficina, cerró la puerta tras de sí y soltó un suspiro profundo. Era una enorme ventaja que en la oficina de HyungWon creyeran que se encontraba enfermo por un resfriado y no que había sido imposible sacarlo de la habitación en la que se había encerrado, Minhyuk caminó por los pasillos pensativo sobre las razones a esa extraña nueva actitud y se preguntó si quizá su hermano lo estaba engañando para no asistir.

— Eso podría ser... — Torpemente tropezó con alguien a quien no reconoció en el primer intento, los lentes que llevaba puestos se desacomodaron y tuvo que ajustarlas antes de tan siquiera disculparse. — Lo siento, no fue mi intención.

— Descuide ¿Se encuentra- ¿¡Doctor Minhyuk!? ¿Cómo es que está usted aquí? — La voz familiar lo hizo detenerse a entender y se asombró de encontrarse con un rostro bastante conocido para el.

— ¿Señor Lee? ¡Pero que sorpresa! ¿Cómo se encuentra usted hoy? — hacer la simple pregunta fue suficiente para que el rostro del otro hombre se pusiera como de cuento de terror, sus expresiones eran de total angustia y eso fue una alerta para el castaño que se acercó aún más — ¿Le sucede algo?

— No- no quisiera hablar aquí sobre eso... — La voz del hombre de cuerpo evidentemente trabajado se hizo suave, baja y discreta evitando que cualquier otro escuchara la conversión que ahí tenían, así que Minhyuk lo comprendió enseguida.

— Claro ¿qué le parece si vamos a un lugar más tranquilo? Lo sigo.

Fueron varios minutos en los que viajaron en el ascensor hacia la azotea, en el trayecto hablaron sobre cosas convencionales como el ambiente y los días que se estaban volviendo ajetreados debido a la proximidad latente del San Valentín; tema que sintió era bastante amargo para Hoseok, así que cambió el sentido de la conversación rápidamente.

Una vez arriba, con un par de bebidas en las manos se acercó donde se encontraba sentado el fornido hombre y le brindó una.

— ¿Se siente mejor?

— En realidad no — Confesó — Pero me sorprendió mucho encontrarlo aquí ¿Vino por alguna razón?

— ¿Yo? Bueno, sí. Mi hermano menor trabaja aquí y necesitaba arreglar algunas cosas sobre eso. — Lo comentó con una leve sonrisa y bebió el café caliente de su lata.

— ¿En serio? Es increíble, el mundo es demasiado pequeño.

— Lo es siempre y sólo nosotros mismos nos podemos dar un lugar en él. — el castaño sonrió con amabilidad y bebió otro pequeño sorbo de la lata mientras veía al rededor de la linda azotea.

— Sé que no es el lugar y tampoco es tiempo para una consulta. — Lo escuchó reír y Minhyuk asintió — Pero, la verdad es que he estado viviendo un infierno estos últimos dos días. — Al escucharlo suspirar, Minhyuk levantó las cejas aún curioso sobre lo que sucedía y no tuvo que esperar demasiado para seguir escuchándolo. — ¿Usted cree que me pueda curar, doctor? — Preguntó Hoseok y en sus palabras se podía notar ese desespero especial, incluso se sintió incómodo y casi impotente. — No puedo seguir pensando de esta manera ¿qué será de mi vida si- si sigo...

Minhyuk al verlo casi romperse lo reconfortó apretado su hombro, era muy complicado el caso que llevaba porque debía usar las palabras adecuadas para explicarle lo que sucedía y de qué iría su tratamiento, si no lo hacía de nada serviría.

— Entiendo que esté pasando por un muy mal momento justo ahora, Señor Lee y lo comprendo perfectamente, pero creo que usted mismo debe hallar la respuesta a ello. Si le soy sincero, lo más preocupante para mi como profesional es su ansiedad que le impide tener una vida completamente sana, y por supuesto cosas como la buena alimentación y buenos hábitos a la hora de dormir ayudarían a conseguir un adecuado proceso.

— ¿Qué quiere decir? — Minhyuk suspiró

— Podríamos hacer una terapia adecuada para controlar su ansiedad, señor Lee, pero respecto a lo que usted me pide es imposible para mi. He contactado a una sexologa de la universidad de Seúl, es muy experimentada y sé que si usted nos da la oportunidad de seguir su caso, podremos ayudarlo a aclarar muchas cosas.

— Lo que usted está queriendo decir es que-que.... ¿Qué quiere decir? ¿Que estaré así por el resto de mi vida? — Hoseok se levantó de donde estaba y considerando que su tono de voz se elevó más de lo normal, supo que lo que le había dicho no le había sentado bien.

— No es eso, lo que quiero que usted comprenda es que no hay absolutamente nada malo con usted, más que la ansiedad que es generada al parecer por algún tipo de suceso o la misma negativa a aceptar su orientación sexual, y por supuesto esto es importante tanto para nosotros como para usted, señor Lee, ya que si accede a ver a nuestra sexologa ella podrá orientarlo de tal manera que lo ayudará a entender lo que usted desea. Sólo le pido que nos dé la oportunidad de ayudarlo, de guiarlo de manera adecuada y así regresar la paz que usted desea.

— ¡Pero doctor, esto es un martirio! Yo- no.... Yo no me siento bien desde que me encontré con ese sujeto. — Hoseok se había levantando exasperado, su pecho subía y bajaba co esfuerzo, mientras que su cuerpo se encontraba rígido.

— ¿De qué habla? — Vio al hombre de fuerte musculatura caer sentado de nuevo y cubrir su rostro.

— Me siento- siento que estoy perdiendo la cabeza, doctor, no puedo dejar de pensar en él, todos los días desde ese momento han sido sobre rememorar y desear cosas que no debería; cada que estoy con una chica imagino que es él y cuando despierto de ese trance me siento asqueado y como una basura. Quiero dejar de pensar en él, quiero mi vida de regreso. No quiero pensar más en Chae Hyungwon.

Minhyuk estaba bebiendo y asintiendo, mientras escuchaba de manera atenta, y una vez escuchó ese nombre no hizo más que abrir los ojos ahogándose con lo que bebía. Comenzó a toser de manera descontrolada, así que al verlo en ese estado, Hoseok no hizo más que verlo sorprendido y hasta asustado.

— ¿Se encuentra bien? — Hoseok lo sostuvo del hombro mientras el castaño intentaba recuperar el aire, sus pulmones estaban faltos de aire y aún la garganta la sentía incomoda, pero como pudo se recompuso sólo porque necesitaba hacer la pregunta más importante de todas.

— ¿Cómo y de dónde conoce usted a mi hermano?

Justo al instante de preguntarlo Hoseok detuvo toda acción, su expresión fue clara a la hora de rememorar y abrió los ojos de igual manera en el momento justo en que logró discernir algo importante.

— ¿¡Su hermano!?

◇◇◇

— Sal ya de debajo de las cobijas, HyungWon.

— No lo haré. — La voz templada, baja y profunda del rubio hizo que Hyunwoo dejara de insistir; al menos por un momento.

— Pero es decepcionante. — Respondió el moreno tirándose en el suelo, chocando la espalda contra el closet, mientras veía a Hyungwon levantarse hasta quedar sentado sobre la suave cama. Hyunwoo sabía que era extraño, no es que como si no supiera que Hyungwon solía tener actitudes fuera de lo normal, pero sentía que era diferente esta vez y estaba seguro que se relacionaba con algo que había sucedido ese día del que curiosamente HyungWon no hablaba ni porque se lo rogara. Soltando el aire se quejó por lo complicado que estaba resultando resolver el problema y optó seguir expresando lo que pensaba — Minhyuk hyung ha estado trabajando muy duro y no creo que sea justo para él, siempre está preocupado porque quiere lo mejor para ti, pero tú sólo vienes y dices que no harás algo... Como si la vida fuera tan sencilla de llevar.

— ¿Qué sabes tú de lo que es duro y lo que no, mocoso? Siempre has tenido lo que has querido, eres normal. — HyungWon bufo ante las palabras del menor y no dudó en defenderse.

— No trates de evadir todo con palabras tan simples, HyungWon ¿Por qué seguir viviendo así si no te agrada? Depender de Minhyuk es algo que odias, pero al mismo tiempo haces todo esto y es tan incomprensible... — Hyunwoo lo vio caer de espalda contra la cama, tenía los brazos abiertos y veía fijamente al techo; creyó que quizá trataría de golpearlo o quejarse, pero por algún motivo él parecía ido, bastante fuera del planeta. — ¿Qué pasó esa noche? Estabas huyendo de alguien, pero no has dicho nada sobre eso ¿Estaba ese sujeto molestándote?

— No... Quizá. — El ceño del moreno se arrugó al escuchar la vaga respuesta por parte de su amigo y optó por sentarse de manera adecuada para verlo mejor.

— ¿Qué quieres decir? — la pregunta salió de manera natural y escuchó un profundo suspiro por parte del delgado.

— Es algo que siempre he querido olvidar, pero el corazón es complicado. — HyungWon frunció el ceño muy extrañado de lo que sentía, creía haberlo superado, sin embargo no dudó ni un minuto en un huir de su cercanía, pues su presencia pasó de ser una desconocida a una abrumadora.

¿Qué debía hacer de ahora en adelante?

— Hablas... ¿De qué hablas, HyungWon? No entiendo nada ¿Por qué estás comportandote tan extraño diciendo todas esas cosas? — un suspiro pesado se extendió por toda la habitación.

— Sólo es la verdad. — Otro suspiro más corto salió de sus labios como una especie de lamento, justo antes antes de cambiar de tema. — ¿Dónde está Minhyuk hyung? — Preguntó sin mirar al menor.

— Él fue a salvarte el trasero. En estos momentos debe estar hablando por ti y así hacer que mantengas tu trabajo.

— No debió hacer eso. — Lo dijo de manera aburrida, pero en el fondo comprendía la insistencia de su hermano.

— Te lo dije, él se preocupa y sólo intenta ayudarte. — Hyunwoo comenzaba a perder la paciencia, más se mantuvo sereno para evitar que todo se pusiera peor.

— He pensado en si lo mejor sería renunciar y simplemente... No sé, aceptar la propuesta de Minhyuk. — Hyunwoo comenzaba a preguntarse demasiadas cosas, todas sin ninguna respuesta clara por parte de un HyungWon que sonaba más melancólico de lo habitual, ni siquiera comprendía qué era lo que lo tenía así si siempre solía ser alguien demasiado enérgico; además, se suponía que él odiaba la idea misma de recibir algún tipo de tratamiento por parte de su hermano mayor, Minhyuk ¿Qué sucedía ahora? Levantándose el rubio miró a Hyunwoo y levantó las cejas aún hablando — ¿qué piensas?

— Pienso que estás más raro de lo normal.

— No te preocupes, estaré bien. — Por fin una risa se escuchó por parte de HyungWon, pero lo único que pudo sentir Hyunwoo fue frustración, una que se dibujó muy claramente en su rostro.

Vaya risa tan falsa.

◇◇◇

Una vez estuvo frente al edificio se quedó apretando la maleta de cuero contra su pecho, mientras veía atentamente hacia afuera del auto a las personas que entraban apurados; tragó con dificultad. Esa mañana se levantó muy temprano, tomó un largo baño — aunque odiara el agua tanto como la misma idea de salir de casa en esa situación. — peinó su cabello y escogió un traje azul oscuro que sentía le asentaba bien. Al final no sabía cómo, pero consiguió la fuerza necesaria para salir de casa, quizá habían sido las palabras de Hyunwoo o su mucha terquedad y estupidez, pero lo que si sabía es que estaba ahí a pocos pasos y que una vez entrara al edificio muy seguramente lo vería.

Su ceño se frunció de tan siquiera imaginarlo.

— ¿No bajarás del auto? — La voz de Minhyuk lo hizo regresar al mundo real, soltando un suspiro miró a su hermano mayor y mostró en su rostro lo preocupado e inseguro que se encontraba.

— Bueno, sobre eso...

— Vamos, prometiste que esta vez todo estaría bien, HyungWon.

— arrrgghhh — Minhyuk se puso firme ante él.

— Quieto, no huiras. Vas a dejar de ocultarte y tomarás la responsabilidad de tu trabajo.

— Lo-lo haré. Y no estoy pensando en huir, son alucinaciones tuyas. — HyungWon no lo miró a los ojos.

— Ajá — Minhyuk lo vio al rostro con los ojos inyectados de obviedad e incluso su voz describía el perfecto equilibrio entre el sarcasmo y la ironía. — Mira, Hyungwon, entiendo el por qué no quieres entrar ahí, pero eso no puede impedirte hacer tu trabajo ni seguir tu vida como una persona normal.

— No soy normal, además ¿Cómo sabes por qué no puedo entrar? Tonterías, son sólo tonterías tuyas. — Evadió el tema como lo había estado haciendo los último días, más Minhyuk no lo permitió, no esta vez.

— Lo sé todo. — Minhyuk lo dijo, mientras que Hyungwon frunció el ceño no entiendo a qué se refería con esas palabras. — Sé que aquí trabaja Wonho, el sujeto del que estuviste enamorado durante la universidad.

— Qué- ¿¡Cómo es que sabes eso!?

— Es una historia complicada, a decir verdad. Él día que vine para excusarte encontré con que uno de mis pacientes trabajaba aquí y resultó ser ese Wonho. — la voz de Minhyuk sonó cansada y curiosa al mismo tiempo — Él estuvo tan sorprendido de darse cuenta que era tu hermano, que no dudó ni un segundo en cancelar todas sus citas e incluso me acusó de algún tipo estafa. No lo sé, fue complicado, ya te lo dije.

— ¿Estás diciendo que Wonho estuvo hablando contigo? ¿Por qué? — HyungWon no podía creerlo.

— No puedo decirte mucho, salvo que es curioso que diga que has arruinado su vida. Siempre creí que había sido al contrario.

El bufido por parte del rubio fue contundente, tanto que Minhyuk le vio curioso sobre lo que diría. — Te juro que no sé a lo que se refería, él me rompió el corazón ¿Cómo se atreve?

— No lo sé, pero va siendo hora de que lo aclares o sino no podrán continuar ninguno de los dos. — Minhyuk sonó entre serio y afectuoso, le acomodó la corbata negra y miró hacia afuera. — Ve y trata de no causar problemas.

— No me crees ¿verdad? — Preguntó HyungWon al ver en el rostro de Minhyuk una leve sonrisa socavona — ¡Él me besó! Él se acercó de repente, agarró mi rostro y se fue contra mi ¿Cómo podría mentir sobre eso?

— Bueno, pues si es así entonces debe haber algo que lo hace pensar lo contrario. Ahora baja.

— Esto- — El rubio no podía ni creer que su hermano estuviera dudando de su versión de la historia — Esto es estúpido

HyungWon bajó refunfuñando, cerró la puerta con mayor fuerza de la debida y vio el auto alejarse a una velocidad nornal. Volteando a ver al edificio tras suyo soltó un suspiro lleno de lamentamentaciones y comenzó a entrar sin dejar de pensar que aquello no era más que una terrible idea, al subir al ascensor casi que rezó para no encontrarse de frente con él y cuando contó los pisos desde el Lobby hasta el piso en el que trabajaba, lo hizo para poder prepararse mentalmente y no perder la poca cordura que le quedaba. Al salir del angosto espacio pretendió hacerlo sin tener que detenerse hasta haber llegado a su oficina, más sin embargo, quienes lo veían después de varios días de ausencia pretendieron acercarse para saber más sobre su condición y recuperación, pero estaba tan desesperado y asustado que no respondió a nada, sino que se abrió camino hacia el pasillo sin siquiera atreverse a mirar hacia dónde se suponía debía estar sentado su mayor tormento.

El corazón le latió de manera furiosa.

Corrió por el pasillo sólo escuchando los murmullos de las personas que había dejado atrás, corrió casi deseando desaparecer, y una vez estuvo dentro de la oficina cerró la puerta tan fuerte que  casi retumbó por todo el piso del edificio. No era ese el plan inicial, se suponía debía actuar de manera natural, como si nada sucediera y continuar hasta tener la oportunidad adecuada de renunciar sin más, así de sencillo; pero en ese preciso momento, teniendo la espalda contra la puerta y el corazón a punto de salirsele del pecho, pensó en que sería imposible.

Se arrepintió por completo de su decisión de volver a la oficina.

Totalmente débil se arrodilló en el suelo golpeándose la cabeza, castigandose por todo y sin querer el recuerdo de Wonho aquél día llegó a su memoria; sus ojos, sus labios y la mano fuerte que lo sostenía del brazo sin dejarle escapatoria.

¿Cómo no lo había reconocido?

Aceptaba que lo recordaba de algo pero jamás se imaginó que Wonho cambiaría de esa manera, su cuerpo que estaba mucho más grande era una prueba de ello; podía decir que había crecido una o dos tallas más. Wonho estaba diferente, sí, y por esa misma razón Hyungwon sentía que él se había aprovechado para ocultar quién era en realidad, luego todo eso sobre no ser gay cuando podía jurar que ese mismo día, temprano, lo había atrapado viéndolo más de la cuenta, y sin contar su reacción luego de que le hizo esa simple pregunta.

¿Cómo no sería él gay?

Lo confirmó incluso después de saber que era Wonho, porque definitivamente él había sido el primero en besarlo sin ningún previo aviso, era él quien lo ilusionaba jugando con su cabello y abrazándolo mientras lo felicitaba por cualquier actividad bien hecha; para HyungWon, Wonho fue el interruptor que ocasionó todo el desastre y si él ahora se comportaba de esa manera, era porque en realidad él siempre fue ese tipo de persona...

Un inconsciente y un maldito.

— aarrrgggg — Quería golpear el escritorio con la cabeza. Se levantó del suelo dispuesto a comenzar a hacer lo que sea que tuviera que hacer, pero tirándose en la silla tomó un profundo respiro y miró al techo moviéndose de un lado al otro sin hacer nada en realidad. — Wonho, Wonho, Wonho....

¿Qué rayos iba mal con él? Hyungwon tenía muchas más preguntas que respuestas.

Durante el tiempo en la universidad siempre siguió a Wonho a donde sea que fuera, le gustaba admirarlo de lejos y apoyarlo en todas sus ideas, de todos los instructores de 3er año era a quien más admiraba y no pensó jamás caer enamorado de alguien de esa manera; como fuera, suponía que eso era justiciable ya que Hoseok siempre fue una persona carismática y dulce, ahora el rastro de esa persona que una vez conoció se encontraba demasiado difuminada, no quedaban rastros del hombre sensible y adorable que le gustaba comer ramen a la hora del almuerzo, ni del valiente hombre que lo animó durante la prueba de valor, aún cuando era tan frágil y gallina. Wonho creyó en el en el pasado y HyungWon valoraba demasiado eso, soñaba con estar junto a él, pero fue un simple sueño que nunca pudo ser., ahora su corazón estaba roto, hecho pedazos, completamente destrozado y no era algo que le resultara sencillo de sobrellevar, lo supo el día en que se dio cuenta que el Lee Hoseok que pretendía molestar se trataba de él, de Wonho.

Sin ser consciente esta vez, suspiró.

Fue un marejada. En primer lugar, haber visto entre líneas esas facciones específicas hicieron que el tiempo se detuviera y cuando algo en su mente le indicó de despertar, todo comenzó a andar tan rápido que la sorpresa misma lo lanzó al suelo, se desplomó sin poder creer lo que veía y empeoró cuando él se acercó tomándolo de los hombros

"¿Ahora resulta que me recuerdas? Ya deja de actuar"

Las palabras de Wonho eran demasiado poco claras definitivamente, pero eso no borraba el hecho de que debía ser el sujeto más poco suertudo del mundo, como para llegar a trabajar en la empresa donde se encontraba su ex crush.

— Tienes que renunciar de inmediato. — Lo haría por su propio bien y porque en serio quería enterrar todo lo referente a Wonho, borrarlo y no saber más de él en su vida. Cubriéndose el rostro con ambas manos esperó para tranquilizarse y así ir a renunciar, no obstante la puerta se abrió de repente sin darle tiempo de nada.

— Tenemos que hablar, Hyungwon.

En el momento en que el más alto bajó los brazos sus ojos se fueron expandiendo de manera graciosa y por poco sale disparado de su propia silla.

— ¿Qué- — las palabras se le atascaron, más rápidamente logró encontrar la manera de evadir cualquier cosa que pudiera hacer el momento más incómodo y difícil de afrontar. — ¿No cree que debería tocar la puerta antes de entrar?

— Eso hice, lo hice por al menos un minuto entero, Hyungwon.

— Bu-bu-bueno, pues, quizá no podía responder rápido ¿No cree? — Su primera impresión de él fue diferente a la actual, ahora simplemente sentía ganas de correr lejos, incluso gritar, pero también había algo más fuerte y poderoso que lo tenía clavado en la silla casi sin respirar. HyungWon miró al rededor de la habitación evitando verlo directamente al rostro — Además, ¿no debería llamarme por mi apellido? No somos cercanos ni nada parecido.

El hombre de cuerpo altamente trabajado se quedó mirándolo en silencio, el rubio pudo sentir su mirada clavada durante todo el tiempo en que sólo ciertos ruidos de afuera lograban traspasar las paredes; de manera involuntaria chocó con su mirada y por alguna razón ambos se quedaron sumergidos, aún sin decir una palabra. — Só-sólo quería-... Señor Chae, sólo quería notificarle que he revisado los últimos detalles de los proyectos que han quedado pendientes debido a su ausencia. Bienvenido de nuevo a la empresa, espero se encuentre mejor. En esta grabadora encontrara la información restante que necesita.

HyungWon lo vio dar la vuelta a la salida, el corazón comenzó a traicionarlo, así que se levantó tan rápido como lo pensó y corrió hasta hacerse frente a Hoseok, ambas manos estaban sobre sus fuertes pectorales haciendo que se impresionara por lo duro de su cuerpo, pero el darse en cuenta de lo cerca que estaban ocasionó que el menor reaccionara de manera torpe y desproporcionada, a tal nivel que lo empujó haciendo que Hoseok casi cayera al suelo.

— ¿Por qué hace eso ahora? — le reclamó el mayor sumamente molesto por la acción tan repentina y fuera de lugar.

— Es- es que- estabas demasiado cerca, hyung...

— Bien, pero no recuerdo haber corrido hacia usted en ningún momento, es más, parece que fue al contrario, Director. — Era evidente que Hoseok se encontraba muy molesto, al punto que acentuó muy bien la última parte, dejando claro el límite entre los dos.

— ¡Todo esto es por tu culpa! — Su bello rostro reflejó un verdadero fastidio e incluso hizo de sus manos puños — ¿Por qué tenías que trabajar aquí?

— ¿Cómo dices? — el rostro de Hoseok prácticamente se deformó — Quién me arrebató el puesto de director fue usted y por si no fuera suficiente tramó todo un plan para meterse en mi vida, porque estoy seguro que lo del doctor Minhyuk fue plan suyo también ¡Usted es quien debería disculparse conmigo! ¡Mi vida se arruinó por su culpa!

HyungWon por poco y deja salir sus ojos de sus cuencas.

— ¿De qué hablas, por Dios? ¿Cómo sabría yo sobre eso? Y no sé a qué diablos te refieres, ¡no recuerdo haberte hecho tal mal como para que maldigas mi nombre! Yo debería estar recibiendo una disculpa y no un reclamo sin sentido.

Al parecer aquello fue de alto impacto para Hoseok, porque este se vio obligado a abrir la boca sin dejar emitir ni un sonido, luego lanzó un bramido que asustó por completo al menor — ¿Un reclamo sin sentido? ¿Le parece poco haberme besado? ¿Có-cómo.... Estoy harto de todo esto... — Hyungwon se quedó de pie mirando a Hoseok, quien se mantenía firme mirándolo a los ojos también; su cuerpo fuerte era como una pared, así que hizo un intento de acercarse, pero lo único que obtuvo fue hacerlo flaquear y retroceder.

— Minhyuk tenía razón...

— ¿Qué?

— Mi hermano tenía razón, tú... Wonho hyung... Hyung no recuerda lo que sucedió ese día ¿No es así?

— ¿De qué hablas? — Hoseok no supo entender.

— Yo nunca te bese... — Las palabras de HyungWon eran sinceras — tu llegaste y me sorprendiste de repente. Pensé que era un milagro, pero luego me rompiste el corazón, hyung... ¿Sabes lo herido que estaba siquiera?

A juzgar por su expresión llena de duda y asombro, no. Hoseok no lo sabía.

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Hola, Hola 👋

Aquí reportandome con una actualización, comunicando que estoy en vacaciones y que se vienen cositas, ahre Jajajajajajaja

Muchas gracias por leer, por sus votos, sus palabras y en general su apoyo, ustedes son increíbles, asi que siempre les deseo lo mejor. Un fuerte abrazo y nos vemos pronto ❤️

Bye bye 👋