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— ¡Salud!

Hoseok levantó la copa totalmente ebrio, por otro lado Jooheon parpadeó varias veces mirando a Changkyun, quién simplemente se encogió de hombros antes de levantar la copa en su mano.

Ninguno de los dos menores tenía idea de lo que sucedía ahora con Hoseok.

— ¡Salud!

— ¡Salud!

Los tres hombres celebraron alegremente bebiendo licor hasta que sus gargantas dolieron, además la mesa se encontraba llena de botellas vacías, indicando así el tiempo que llevaban ahí disfrutando de su tiempo libre después de la oficina. Una vez el licor paso por garganta tan áspero y fuerte, el rostro de Hoseok se arrugó y terminó estrellando la copa contra la mesa de madera, desde su garganta un ruido de satisfacción se escuchó, mientras que Changkyun insistía en pedir más carne.

— Pronto será fin de semana, eso quiere decir que tendremos nuestro merecido descanso, así que podremos hacer algo en casa. — Hoseok comió un acompañamiento para pasar el amargo trago y sonrió sin pensar en nada más.

— O salir y buscar algunas chicas que quieran divertirse. — Remató Changkyun tomando la copa de Hoseok para llenarla de nuevo. — ¿Se han dado cuenta que San Valentín está a la vuelta de la esquina y nosotros aún no tenemos nadie con quien pasar ese día? Es lamentable, chicos. Tenemos que hacer algo al respecto pronto.

— Pero Jooheon todavía tiene a su novia. — Hoseok estaba ebrio, pero no lo suficiente como para olvidar ese gran detalle.

— ¿No lo sabes? Ella le terminó ¡A dos semanas de San Valentín! —La manera en que Changkyun hablaba era muy cercana a la burla, la ironía la llevaba clavada en la lengua y Jooheon lo supo descifrar muy bien; sin dudarlo bufó sirviéndose otro trago por su cuenta.

— Ella no me corto ¿ok? —Quiso excusarse para no quedar como un tonto, tal y como quería hacerlo ver Changkyun, pero tampoco tenía una forma de explicar lo que había sucedido con su ultima relación.— Sólo- decidí que ella lo dijera primero.— Aquella ultima parte fue dicha con el tono más bajo posible, no fue capaz siquiera de darle la cara a sus amigos y simplemente los evadió; sólo siguió ignorando a Changkyun que contenía su risa sin éxito alguno.

Por su parte, Hoseok frunció el ceño para entender qué diablos significaba eso que acababa de decir Jooheon, bebió el trago servido por Changkyun y negó con la cabeza aún intentando comprender. — ¿Y qué es tan importante con el día de San Valentín? ¿¡Qué!? — Gritándolo buscó la respuesta y Changkyun soltó a reírse supuestamente emocionado.

— ¡Claro que es importante! Es la fecha donde gastas más dinero de lo normal, te preocupas por reservar los mejores restaurantes y hoteles, además obtienes una jugosa recompensa ¿no es una fecha divertida? —Su respuesta fue tan básica, que Hoseok no dudó en maldecir por lo bajo.

— Navidad también lo es. — Comentó Jooheon y Changkyun frunció el ceño disgustado porque de repente su perfecta imagen mental había sido destruida por un simple comentario y un extraño bramido.

— Navidad es Navidad y 14 de febrero es 14 de febrero, tontos insolentes. —¿Cómo era que se había involucrado con dos seres tan amargados? No había nada de malo con San Valentín, simplemente sucedía que sus amigos tenían la sensibilidad de una piedra y les era imposible conciliar dentro de una relación, esa era la razón principal por la que sus relaciones no duraban nada, además de que eran unos tontos que se dejaban guiar siempre por sus sentimientos; al menos en Hoseok era así. Lo conocía muy bien. 

— ¿Qué demonios tienen de diferente? — Hoseok seguía sin comprender, estaba tan molesto por todo y nada, que podría llamar en ese mismo insistente a la persona directamente relacionada, sólo para preguntarle las razones; pero no podía. Tampoco era como si tuviera su número.

Que impotente se sentía.

— Navidad es una fiesta familiar y 14 de febrero por supuesto es más íntima... —Changkyun intentó por cuenta nueva, sus manos le ayudaban como soporte para acentuar cada palabra dicha y su rostro expresó la obviedad de su punto ¿Cómo no sería importante después de todo?— Se trata de sexo, Hoseok ¡Sexo! — El mayor mordió el interior de su mejilla muy fuerte por el mero coraje de saber que sería así.

Su pecho era un huracán de sentimientos extraños.

Por un lado estaba la enorme molestia que sentía hacia la idea de celebrar el San Valentín de la manera en la que lo proponía Changkyun, y por otro estaba la enorme pesadilla de lo que aún no lograba confirmar, eso que HyungWon le dijo en la oficina y que venía bastante ligado a la misma fecha. Por años odió San Valentín por culpa de ese chico descarado que se atrevió a hacer lo más bajo posible, pero recuerdos confusos de el mismo atrapando el rostro de HyungWon y luego HyungWon atrapando su rostro lo tenían agotado y muy desorientado, verdaderamente confundido; ahora resultaba que ya no sabía cuál era la verdad, no supo quién lo inicio todo y lo peor es que no podía ignorar el hecho porque el problema persistía y no tenía ni idea de cómo darle solución, de verdad se negaba rotundamente a averiguar nada al respecto a lo sucedido con HyungWon para el final darse cuenta de algo que no quería.

Lo único que debía hacer era resistir un poco más. Sólo resistir....

— Hombre, pero ¿Y ahora por qué? — Jooheon se sorprendió muchísimo de ver cómo Hoseok había arrancado a llorar de la nada, sin perder el tempo dio golpes de aliento a su espalda para que se tranquilizara, pero ni eso lo detuvo de hacerlo.

— Debe de extrañar a su novia... —Comentó Changkyun sirviendo de nuevo las copas. — La dejó incluso antes de poder darse cuenta que pasaría San Valentín solo. — La risotada de Changkyun hizo que, sin previo aviso, Hoseok soltara un sollozo. Se preguntaba en medio del llanto ¿Cómo demonios? ¿Por qué? ¿Por qué de todas las opciones que existían en el mundo ese hombre escogía torturarlo diciéndole que iría en una cita con alguien más durante San Valentín? ¿A caso su vida se había basado solamente en eso? ¿En sexo? ¿Nunca le importó en lo más mínimo?

Una botella más llegó a la mesa, su corazón era un completo desastre y lo único que deseaba era callarlo de una vez.

◇◇◇

— Bienvenido de vuelta, Señor Lee. Creí que no volvería a verlo por aquí. — La enfermera em serio estaba asombrada de verlo ahí de nuevo, pues la última vez que llamó para cancelar todas sus citas sonaba muy molesto.

— Sólo - quizá me equivoqué un poco con el doctor Chae. — La mujer miró curiosa al hombre alto de cuerpo fornido y sin querer ahondar más en el tema le dio vía para que entrara por el pasillo.

Hoseok estaba muy avergonzado por lo que le había dicho al doctor Minhyuk sin pensar, solamente que estaba tan impactado en aquel momento, que no tuvo manera de discernir de una mejor forma lo que él le decía con tanta paciencia, después de pensarlo con detenimiento fue que se dio cuenta de ello ¿Cómo en los cielos podría alguien como el doctor Minhyuk confabular en su contra? El hecho de que HyungWon fuera su hermano menor definitivamente debía de ser algo demasiado desafortunado — tan desafortunado — pero eso no le impediría para nada seguir buscando la manera de curarse, aunque el doctor dijera que no era posible de curar su mal, aún así quería tratar cualquier método, pero por supuesto junto a Minhyuk que resultaba ser el único doctor que había sabido escucharlo y entenderlo mejor que nadie.

Tocó un par de veces antes de escuchar el llamado a seguir, abrió la puerta acomodando su bufanda y Minhyuk lo miró asombrado una vez asomó su cabeza por la pequeña abertura.

— ¿Señor Lee? ¡pero que grata sorpresa verlo aquí de regreso! — La sonrisa del hombre de cabello castaño fue bastante gratificante y muy sanadora, en serio que cada que iba a ese consultorio se sentía muchísimo mejor y más calmado. — Venga, por favor, siéntese.

— ¡Lo siento mucho, lo que hice estuvo mal! — Primero que nada hizo una profunda reverencia para disculparse con sinceridad por su comportamiento tan poco comprensivo y esperó escuchar algo por parte de Minhyuk, pero sólo una risa cálida y comprensiva provino de él.

— Tranquilo, hemos tenido que manejar casos más complicados que este. Déjelo cómo gajes del oficio.

Hoseok casi llora ante tal magnitud de comprensión y paciencia.

— Doctor Chae, de verdad ¿Cómo puede ser usted hermano de semejante mocoso tan arrogante? — Minhyuk se asombró de que ni siquiera hubiese esperado a que definieran si seguirían con las terapias, Hoseok lo primero que hizo fue lanzarse sobre el largo sofá y soltar una queja a cerca de su hermano menor. — ¿Sabe usted que saldrá en San Valentín con alguien llamado Hyunwoo? Suena como a un patán.

Minhyuk casi desfallece al escuchar ese nombre. Tosió pretendiendo que no sabía de lo que Hoseok hablaba, simplemente miró a todos lados dentro de su oficina y acomodó de manera compulsiva su bata blanca ¿Qué demonios creía HyungWon que hacía? se suponía que debía arreglar las cosas, no empeorarlas. Tremendo idiota — Oh, entiendo...Aaamm ¿Y eso cómo lo hace sentir, señor Lee?

— Totalmente frustrado ¿Por qué lo hace si recién volvimos a encontrarnos? ¿Sale con ese tal Hyunwoo? ¿Qué hace ese tipo para ganarse la vida? Doctor, quisiera conocerlo, al menos para saber por qué él está tan desesperado de pasar San Valentín con ese otro tipo.— Soltó todo eso de repente y cuando fue tiempo de caer en cuenta de lo que había dicho se sonrojó y se levantó tan rápido que a Minhyuk le asombró el arrebato. — Eso no quiere decir que me importe ¿Está bien? es solamente que me irrita que la gente le de tanta importancia al día de San Valentín.

— Claro, es un día bastante agitado para muchos. No todos lo disfrutan de igual manera.— El castaño se puso manos a la obra a preparar un té para su paciente que se encontraba algo alterado, en la intimidad del pequeño mesón soltó un suspiro y juró que pondría a HyungWon en su lugar una vez lo viera. No sabía cuantas veces le había rogado que dejara esa estúpida obsesión por Hyunwoo, ahora resultaba que el pobre estaba enredado en un asunto sin precedentes...Aunque lo que decía Hoseok era a lo sumo extraño.

¿Odiaba o no a su hermano? pero más importante ¿Había ido ahí solamente para averiguar sobre Hyunwoo? 

Vaya escenario...

— ¡Exactamente! No es importante ¿Sabe, doctor? A veces hay personas a las que nos importa más estar sanos y felices. No me importa qué hagan los demás, yo sólo buscaré mi propia diversión. ÉL puede hacer lo que quiera, puede comunicárselo si quiere.

— Claro...—Minhyuk por supuesto no lo creía así, pero no dijo nada al respecto y simplemente le ofreció la taza de té; cuando hubo recibido la bebida, el castaño continuó— Imagino que usted tendrá muchas formas ya planeadas ¿No es así? — Hoseok sintió que esas palabras le caían en la cabeza como pesados ladrillos. ¡Claro que no tenía ni idea de cómo diablos iba a divertirse! Seguro habían muchas cosas para hacer por sí solo, pero en realidad no había pensado en ninguna. — Todavía piensa que debe curarse ¿Cierto?— La expresión en el rostro de Hoseok fue de ruego, en serio lo necesitaba porque todo en su vida comenzaba a ser envuelto por ese sujeto del cual no quería decir ni nombre, le causaba una fuerte molestia tener que pensar en él de la manera en la que lo hacia, y empeoraba cuando imaginaba tonterías sin sentido, como lo que haría con ese tal Hyunwoo durante el día de San Valentín. 

¡Estúpida cita con ese grandísimo idiota que ni conocía!

— Yo sé que lo lograré — comentó orgulloso intentando ocultar el tremendo coraje que cargaba y Minhyuk soltó un suspiro.

— Primero, ¿le gustaría hablarme a cerca de 'ese' día? — Hoseok se sintió nervioso y titubeó antes de siquiera decir algo con sentido.

— Verá- yo- mmmm bueno, creo que respecto a eso hay algo que... Aún estoy confundido y cuando intento pensar en ello lo único que logro es enfermarme, me mareo y siento que el suelo me absorbe. Es realmente molesto.

— Ya veo... — Minhyuk frotó su barbilla y sonrió con amabilidad. — Entonces vamos despacio, hablemos desde el principio y nos detendremos cuando se torne difícil. — Hoseok asintió, dejó su taza de té a un lado en la mesa y se recostó por completo en el sillón, tomando aire pensó por donde debía comenzar y supuso que debía ser desde ese día en especial.

— Era el primer día de inducción, estaba designado como instructor de los chicos  de primer año y fue entonces cuando lo vi por primera vez...

◇◇◇

La oficina estaba mucho más ruidosa ese día en especial, Hoseok por su parte optó por intentar actuar con "naturalidad", pero lo único que logró fue acercarse a la señorita Kim cada que veía que HyungWon pasaba por algún lado de la oficina, se sentía avergonzado de usarla de escudo humano, pero es que no encontraba una mejor forma de mostrarle al hombre alto y extravagante que merodeaba por ahí y por allá, que no le importaba su existencia o su maldita cita con ese Hyunwoo.

Sacando unas copias se quedó pensando si realmente el hombre de cabello rubio renunciaría pronto o ¿Qué diablos estaba esperando? Se sentía bastante apresurado porque tomara una decisión, ya que así quizá no tendría que buscar un nuevo empleo. Distraído siguió sacando copias sin ser consciente y un click lo trajo de nuevo a la realidad.

— ¿Señor Lee?

— ¡Señorita Kim! — Hoseok hizo una reverencia y miró el desastre de copias.

— ¿Se encuentra bien? — La voz femenina y dulce le pareció agradable, estaba apenas siendo consciente de lo que sucedía, así que decidió recibir su ayuda para recoger los papeles que estaban por el suelo y hasta en un momento dado sus manos se tocaron cuando intentaron recoger la misma hoja.

— Las relaciones personales en el trabajo están prohibidas.— La voz potente y arrogante espantó a la pareja que estaba mirándose entre sí, Hoseok se levantó tan rápido que se mareo y sin dudar negó todo de manera eufórica

— No- no es lo que piensa, Yo-

— ¿Y qué es lo que pienso?

Hoseok se frustró por la estúpida insistencia del rubio que permanecía de pie frente a ellos, iba a discutir en ese mismo momento, antes de que la voz de la mujer lo detuviera de cualquier acción.

— Lo lamento mucho director, tendré en cuenta eso en el futuro. — Ella hizo una elegante reverencia y salió dejándolos solos, cuando todo estuvo en silencio y vio la mirada penetrante de HyungWon fue cuando se dio cuenta que la señorita Kim no había negado absolutamente nada en realidad, al contrario, había actuado como si realmente tuvieran algo.

— "No es lo que pienso" ¿eh?

Hoseok se molestó por el tono de reclamo que no venía al caso.

— Deja ya de molestarme. —Se lo dijo buscando que se detuviera de pretender tonterías, realmente no le parecía discutir por algo tan estúpido ¿Qué sabía él como para juzgarlo de la manera en la que lo hacía? hasta el momento lo único de lo que era consciente, era de que saldría en San Valentín con un tipo extraño y nada más, entonces ¿Por qué no podría hacer lo mismo? Con eso en mente puso la frente en alto y respondió sin titubear.— Si salgo con ella es algo que no te importa, haré lo que me plazca ¿Entendido? — Se encontraba completamente molesto, apretó los puños para darse fuerzas e intentó salir prácticamente corriendo, pero el más alto era insistente y molesto; él lo tomó del brazo con firmeza y se pegó a su oído.

— Oppa, estoy tan caliente. Quiero que me cojas sobre la fotocopiadora, por favor. — La voz de HyungWon fue tan obscena y sumisa, que Hoseok sintió una especie de corrientazo que le puso todos los pelos de punta, su corazón se aceleró y la sangre comenzó a hervirle sin ningún motivo, incluso el cosquilleo en el oído persistió aunque se hubiese alejado totalmente abrumado.

— ¿¡Qué diablos fue eso, maldito enfermo!? — Un calor infernal lo poseyó en cuestión de segundos, sus sentidos le jugaron un mala pasada y como si fuera un chico de secundaria tuvo una erección como si nada.

¡Por la santa madre! 

HyungWon se quedó mirando su parte baja totalmente anonadado, como si no lo hubiese esperado jamás, y luego levantó la vista pretendiendo que no había visto que su erección se sobreponía claramente entre su pantalón de traje gris. — Vaya, estás cachondo —Comentó casual— Incluso te cogerías a una anciana si ella te lo pidiera. Eewww pervertido.

Hoseok ni siquiera atinó a cubrir su muy evidente erección , sino que abrió muy grandes los ojos sintiéndose netamente asombrado por todo el descaro de aquel mocoso malcriado.— ¡No soy yo el que está agudizando su voz y pidiendo cosas enfermas, loco! — Con fuerza se frotó el oído y HyungWon soltó a reírse mientras lo veía acomodarse los pantalones.  

Ya ni siquiera imaginaba si podría caer aún más bajo. Era terrible.

— ¿Entonces? ¿Lo harás o no?

Hoseok acomodó su corbata estirándola de manera exagerada. — No soy gay, no me importa cuántas veces insistas con tus juegos de enfermos. —Se sintió hasta orgulloso de su respuesta, más un pesado suspiro proveniente de HyungWon lo descolocó totalmente.

— Totalmente aburrido... — La molesta voz de HyungWon lo detuvo de intentar irse, sólo necesitaba terminar de salir y sería libre por el momento, pero no pudo ignorarlo ni mucho menos dejarlo pasar por alto. — Estoy seguro que si tuviera una polla como la tuya no tendría que buscar a nadie más para el San Valentín, viviría todo el día sobre ella e incluso le haría un altar. Pero lastima, no eres gay ¿Qué se le puede hacer? — HyungWon lo miró de reojo, Hoseok estaba de espalda y no decía nada, pero poco a poco sus hombros fueron poniéndose rígidos, hasta que estalló totalmente sonrojado.

— ¡Púdrete, mocoso!

Y acto seguido, salió prácticamente corriendo de ahí.

HyungWon solamente quería molestarlo, eso era definitivo, estaba seguro que no sería la primera vez que haría algo igual y el que fuera así lo molestaba demasiado. Se tiró en su silla con brusquedad asustando de paso a Jooheon quien se encontraba concentrado y Changkyun también se separó de la computadora para ver lo que sucedía.

— ¿Y a ti qué te pasó? — Hoseok cruzó las piernas incomodo todavía, cerró los ojos muy fuerte y evitó lanzar un berrido lleno de frustración.

— En serio necesito renunciar.— Apretó los dientes molesto porque la sensación de tenerlo cerca no le estaba ayudando en nada.

— Vaya hombre ¿de nuevo con eso? ¿Pero que es lo que ha sucedido ahora para que estés así otra vez? — Hoseok insistía en que no era algo que pudiera decir fácilmente ¿Qué maldito loco andaba hablando a los cuatro vientos de que viviría sobre su polla? Estaba perdido, no podía contra nada como eso y tampoco podía decirlo sin que fuera completamente malinterpretado; Aunque Changkyun quisiera saber el motivo, jamás se lo diría.

¡Nunca!

— Señores y soñaras, tengo un anuncio importante que hacer. — El pintoresco hombre de cabello rubio se puso frente a los pequeños cubículos y Hoseok palideció. ¿Qué diablos pretendía hacer ese hombre en ese momento?— Hoy quiero invitarlos a una cena de trabajo, así que espero terminen temprano. Va por cuenta de la empresa, por lo que sería perfecto si todos pudieran asistir ¿Entendido? — El silencio se extendió por unos segundos después del dichoso anuncio y los aplausos no se hicieron esperar en el momento en que todos comprendieron que el alto rubio de belleza extrema estaba hablando más que en serio; murmullos iban y venían, y fue Jooheon el primero de los tres en reaccionar a tal sorpresa.

— Vaya, ese sujeto no es tan malo como parece. —Asintió a gusto, más Changkyun se negó a creer que algo bueno obtendrían de aquella actitud extraña del nuevo director.

— Que no te engañe — comentó Changkyun — Seguramente quiere hacer esto para pescarnos y luego de que estemos felices nos doblará las horas de trabajo y nos pagarán lo mismo. Lo sé, todos son iguales.

— Wow, que sombrío, hombre... — Jooheon no quiso ser tan negativo ante ello y lo tomó mejor como una especie broma. — El director ha cambiado un poco —Lo defendió y procedió a explicar sus razones — Es cierto que sigue siendo un raro, pero las mujeres últimamente comienzan a comentar lo muy atractivo que es, Incluso se rumora que está saliendo con la directora de la sección de contabilidad

— ¿Cómo dices? — Hoseok se interesó por lo que decía de repente, la platica que sonaba en segundo plano cobró importancia justo con la última parte.

— Sí, lo escuché hace poco de una de las secretarias de contabilidad. Los vieron juntos en un bar cercano hablando y parecían muy íntimos, así que todos pensamos que quizá sí está saliendo con ella ¿Por qué no? Ella es realmente preciosa. ¡Vaya suerte la del director Chae! — Hoseok volteó a ver al perro que tenía por jefe, sus ojos inyectados en ira lo fijaron como mira a objetivo localizado, más la sonrisa arrogante que le lanzó lo hizo molestar aún más.

¿De qué carajos se reía? ¿Le parecía muy gracioso andar coqueteando con cuanta persona se le ponía en frente?

—Bueno, bueno, lo importante es saber si irán. — Changkyun intervino y Jooheon estiró sus brazos.

— Por supuesto que iré ¿Crees que me perdería la oportunidad de comer comida gratis? Es la más deliciosa, hombre.

— ¿Y tú Hoseok?

— Yo definitivamente iré — Hizo especial énfasis en cada una de las palabras que pronunció y regresó a su trabajo de oprimir teclas, salvo que esta vez lo hacía con tal fuerza. que sus amigos creyeron rompería el teclado en cualquier momento.

◇◇◇

— ¡Salud! — Las risas y voces alegres llenaron el lugar, la comida era exquisita y todos, incluidos Jooheon y Changkyun, estaban totalmente absortos con la brillante imagen que reflejaba HyungWon esa noche; él definitivamente debía de tener algún tipo de plan macabro donde se hacia de todos para ganar poder o algo, porque se veía muy alegre compartiendo con los demás e incluso sonreía pareciendo amable.

¡Como si de verdad lo fuera!

Hoseok estaba a punto de regresar toda la comida de sólo ver ese bello rostro siendo iluminado con una sonrisa que no le quedaba bien para nada, sentado tomó un trago con moderación y sintió a alguien sentarse a su lado; era la señorita Kim.

— Señorita, Kim. — Se asombró y de inmediato recordó lo que había sucedido esa misma tarde — Lamento lo que pasó, no quería que lo mal interpretaran. Le prometo que no volverá a suceder.

— No se preocupe, Lee. La verdad es que  no me molesta. —Ella sonrió con delicadeza y Hoseok frunció el ceño ante el leve disgusto de verla ahí con esa mirada llena de esperanza. Sin más miró a otro lado que no fuera ella y aclaró la garganta buscando las palaras adecuadas.

— Bueno, pero de igual manera no debe preocuparse, él seguramente dijo eso simplemente para molestar. —Lo mejor es que ella lo creyera así.

— El director HyungWon es bastante severo durante el horario laboral, aunque ahora parece un poco... — Ella volteó a ver hacia dónde se encontraba el director y Hoseok hizo lo mismo, descubriendo al instante que HyungWon bebía y reía rodeado de los empleados; Changkyun, quien dijo en un principio que no debían ser confiados, tenía la corbata floja y le servía más licor al rubio. 

Ese pequeño traidor

— Él parece otro, quizá es así por la presión de ser nuevo.— Era evidente que la castaña no tenía ningún tipo de problema con el nuevo director, por su parte Hoseok no se dejó vislumbrar por nada que de ese mocoso proviniera; al menos no en el sentido en que lo mencionaba la señorita Kim. —Debe ser difícil entrar nuevo en una empresa donde nadie te conoce y ocupar un cargo tan importante ¿No lo cree?

—ah, sí...claro.— Más bien porque es un idiota —Dijo en su mente y volvió a servirse algo más de Soju.

— Verá...—Ella actuó más tímida que nunca, se remojó los labios con el pasar de su lengua y peinó un poco su cabello castaño — ¿ha pensando en lo que dije la otra vez? — Hoseok bebió y miró de soslayo a la mujer que estaba sonrojada — Sabe, no me molesta que los demás piensen que salgo con usted, cuando en realidad es lo que más deseo. Usted de verdad me gusta, Lee...

Hoseok miró al frente sabiendo exactamente lo que debía decir ante esa incomoda confesión, luego a HyungWon que bebía junto a una mujer de cabello negro bien estilizado, ambos hacían el brindis matrimonial y reían fuerte; De la nada el mayor obtuvo una fuerte molestia por sólo verlo estar con otra persona que no era el y volvió la vista a la mujer que se encontraba a su lado, ella lo veía expectante y sin pensarlo dos veces se acercó besándola. No era lo que quería hacer exactamente, solamente lo hizo y movió sus labios acunando su rostro y jugando con su cabello, no pensó en nada, simplemente cerró su mente hasta que un recuerdo insensato de el mismo caminando totalmente molesto hacia HyungWon lo abordó.

De la nada se encontró siendo alejado de su pareja de esa noche.

— Arrggghh ¿¡Qué crees que haces justo ahora!? — HyungWon había tomado del brazo a la señorita Kim, ese tipo de reclamo bastante serio vino de un rubio muy molesto, y ella, quien no comprendía nada, puso un rostro de aterrada porque no sabía cómo reaccionar 

De verdad que no.

Hoseok no fue diferente, aunque todos murmuraban que era una pelea entre dos hombres por una mujer, lo único que vio fue las claras intenciones del alto delgado por desaparecer a la señorita Kim, fue tan fuerte el sentimiento que sintió escalofrío.

— Este mocoso en serio está loco...

◇◇◇

— Awww! Linda cosita. Go, go. — Changkyun rodó por el suelo jugando con Borum en lo que  Hoseok sacaba la pizza de la caja, cuando salió con los platos en las manos encontró a Jooheon jugando todavía. — ¿Por qué siento que nuestros planes de San Valentín serán ver jugar al perdedor de Jooheon toda la noche? —Changkyun no le perdonaba ni una a su compañero y amigo de casi toda la vida.

— Sólo tienes envidia porque no lograste ganarme en PES.— El comentario desganado de Jooheon provocó que Changkyun se levantara del suelo, estirando el cuerpo se lanzó de manera perezosa en el largo sillón y bostezó mostrando que las palabras de Jooheon no le habían afectado en lo más mínimo.

— Sigues siendo pésimo con victoria o no — le refutó — ganaste sólo porque logré desconcentrarme.

— Ambos viven discutiendo día y noche sobre cuál de los dos es mejor ¿Podrían detenerse ya? — Hoseok entregó la pizza y soltó un suspiro antes de rendirse, pues Changkyun soltó a reírse repentinamente. — ¿Qué es tan gracioso, mocoso insolente?

El menor aclaró la garganta pretendiendo ignorancia.

— Solamente me parece irónico que señales que solemos discutir por quién es mejor, cuando tú fuiste tan osado de robarle la novia al jefe.

Hoseok por poco le rompe la cara de un puño.

— ¡No me robe a nadie! Ella se confesó primero y yo sólo le correspondí ¡ese psicópata desquiciado fue quien... No importa ya. — Recordarlo le causaba una enorme cantidad de estrés, no le gustaba ni siquiera mencionar el tema, pero tanto Changkyun como Jooheon, y todo el resto del personal tomaron la maldita costumbre de recordárselo una y otra vez sin descanso.

Ese horrible día tuvo el infortunio de ser confrontado por HyungWon. Luego de caer en cuenta de que no se encontraban solos, Hoseok se levantó rápidamente llamando a la conciencia al idiota de su jefe que aún sostenía con fuerza el brazo de la señorita Kim, por supuesto no le tomó mucho tiempo hacer que la soltara, estaba tan furioso también y el rostro desfigurado de HyungWon le decía que era lo mismo para él; lo sacó de ahí a rastras, con cada paso que daba mayor era la ira y la incertidumbre, ni siquiera se dio cuenta del momento en que salieron por completo a la calle pero el aire que recibió hizo que viera un poco más claro, y cuando se giró a ver al hombre alto que debía estar justo detrás suyo, se encontró con que este ya iba caminando de regreso al interior del restaurante.

—Yak! Maldito loco ¿¡Dónde crees que vas!?

—"Aarggggg"

Domar a una bestia, así lo sintió por el tiempo en que luchó para llevarlo a la parte aislada del pequeño estacionamiento que quedaba justo atrás del establecimiento, ahí se aseguró de que no se moviera, y aunque pataleaba y murmuraba cosas incomprensibles, soportar eso era mil veces mejor que dejar que cometiera alguna locura.

— Gosh...Vaya mierda más absurda. — Se escuchó una maldición aún más fuerte por todo el estacionamiento y alborotó su cabello desesperado.— ¿¡Por qué te entrometiste!? ¡No tenías por qué arruinarlo! — Hoseok estaba furioso, pero nada tenía que ver con lo que hizo HyungWon al apartarlo de la señorita Kim, sino que el pensamiento se centró en lo que vio mucho antes de tan siquiera hacer lo que hizo.

"Él jefe está saliendo con la directora de la sección de contabilidad"

Eso escuchó por parte de Jooheon, y, a su parecer, lo confirmó una vez lo vio estando tan cerca de esa mujer de cabello negro que brillaba. HyungWon por supuesto era un hipócrita mentiroso, un perro jugador que seguramente le gustaba utilizar a las personas, destruir sus vidas y luego pretender que nada sucedía; para Hoseok esa era la percepción que tenía del menor, y según él, nada podría cambiar eso.

— Eres peor de lo que podría haber imaginado. Pretendes ser una cosa, pero lo único que te interesa es arruinar la vida de cualquiera sin importarte qué ¿¡Por qué no desapareces de una maldita vez!? —Las palabras salieron desde lo más profundo de su pecho, estaba tenso y no pensaba en nada más que librarse de una buena vez de eso que comenzaba a hacer sentir pesado su corazón, la frustración se convirtió en repentina ira, y esta última en desconcierto cuando HyungWon se abalanzó sobre él atrapándole los labios entre los suyos; de inmediato Hoseok lo empujó retrocediendo con el primer impulso, chocando así contra la pared.

— ¡Aléjate de mi! Qué... ¿Qué demonios....

— ¡Estoy tan celoso de ella!—HyungWon pataleo sin pena alguna, su forma de expresar su sentir era natural y sincera, pero eso no ayudaba mucho a que Hoseok comprendiera.—¿Por qué demonios tengo que sentir esto por un estúpido insensato?

El mayor se molestó aún más.

— ¡El único insensato aquí eres tú! ¿Por qué no me dejas en paz? ¿¡Por qué sigues haciéndome esto!? ¡Ya es suficie-

— Porque te amo. — Los ojos de Hoseok se abrieron de par en par; la sorpresa que sentía era mayor que nunca. — He estado enamorado desde el primer momento en que te vi, hyung y-y cuando te vi cerca de esa mujer me di cuenta que mi corazón aún te pertenece, que no puedo ignorarte y dejar que todo esto siga como si nunca hubiera sucedido...Yo... Sólo te amo ¿Qué puedo hacer?— La manera en que se expresaba lo desubicó lo suficiente, era extraño ¿Quién diría esas palabras sin ningún tipo de vergüenza? Ni siquiera con sus ex novias se había atrevido a mostrar tal lado; Hoseok se quedó mirándolo, la seriedad con la que hablaba no era para pasar desapercibida, así que su corazón latió con mayor frecuencia cada vez, las manos le sudaron y cerró los ojos al ver que de nuevo se acercaba. — Es un completo fiasco mi intento por alejarme de ti, quise maldecirte y dejar todo atrás, pero con cada intento mayor es mi deseo por estar contigo, hyung. — Recibió otro beso de su parte, la forma en que se abrumó de nuevo fue aterradora, apretó los ojos sintiendo esos labios gruesos sobre los suyos, su lengua entró húmeda surcando cada rincón y sus propias manos intentaron apartarlo haciendo esfuerzos que parecían no dar ningún resultado. Un jadeo y un suspiro de su parte, el movimiento desmedido de su boca que cada vez se sentía más caliente y vertiginosa; Hoseok realmente no comprendía lo que estaba sucediendo.

Sólo sabía que era agridulce

Y en medio de eso llegó a su cabeza la imagen de el mismo caminando por el patio trasero de la facultad de arquitectura, el sentimiento de molestia lo recordó también y el rostro sorprendido de la persona que lo veía sin entender; Hoseok lo recordó, recordó lo que hizo en pleno día de San Valentín y cuando se redibujó tan claramente la forma en que acunó el rostro de HyungWon y lo besó, fue cuando el beso actual terminó; HyungWon simplemente se separó respirando aún sobre sus labios, mirándolo  seguramente y haciendo que la piel se le pusiera de gallina.

Lentamente abrió los ojos

— Hyung, llévame a casa. Dejaré que hagas conmigo lo que quieras... — Mirándolo intensamente Hoseok se quedó completamente estaqueado, sus ojos tiritaban y apretó el agarre sobre el saco del menor; así, lentamente, fue frunciendo el ceño.

— ¡Ni en sueños, loco! — Lo empujó lejos y limpió sus labios con el dorso de la mano, frotó fuerte porque sentía un cosquilleo "desagradable" — Ve a buscar arruinarle la vida a alguien más ¡no vuelvas a acercarte a mi! ¡Maldito psicópata!

Salió corriendo por todo el estacionamiento preguntándose cómo diablos podía HyungWon pasar de ser un arrogante y estirado director de proyectos, a eso que había acabado de presenciar; la voz baja, sumisa y apasionada retumbó en su mente con tal vivídez, que sintió cómo la piel se le erizaba por cuenta nueva, y cuando llegó a la calle principal se apoyo en la pared de una pequeña tienda cercana al restaurante en el que se encontraban para así tomar aire, la voz de HyungWon llamándolo se escuchó tras suyo y el rostro completo se le desfiguró por el profundo terror.

Sin pensarlo dos veces se puso erguido, llamó a un taxi rápidamente, se subió y se marchó del lugar viendo cómo el delgado y alto hombre salía del estacionamiento buscándolo.

◇◇◇

Cada que recordaba, en serio, en serio obtenía un montón de estrés, su cabeza dolía y sin contar que ahora recordaba perfectamente que fue el responsable de su misma desgracia años atrás durante la universidad; sus dientes chirriaron del mero disgusto.

— Hoseok, cerveza. — Volteó a ver a su amigo Changkyun de mala manera y este levantó las manos estand a la defensiva. — Ok, ¿se puede saber por qué estás tan de mal humor de repente? — Hoseok bufó.

— No estoy molesto.

— ¿Ah, no? — Jooheon detuvo el juego y comenzó a comer de su pizza, mirándolo levantó la ceja, mientras que Hoseok se tendió en el sillón intentando respirar. — ¿Tanto te gusta la señorita Kim?

— ¿Qué? —Levantando la cabeza intentó comprender las palabras del menor, creía que era suficiente del tema.

— Seguramente está así porque al final la señorita Kim lo cambió por el director HyungWon. — El pelinegro negó con la cabeza antes de continuar — Hombre, es un caso bastante desalentador.

Un tic se formó en su ojo al recordar ese detalle; no siendo suficiente con todo lo correspondiente a HyungWon, ahora resultaba que la señorita Kim ya no lo veía con los mismos ojos, eso le anunció cuando al día siguiente la fue a buscar para disculparse, y ella, muy sonrojada le dijo que no se preocupara, que estaba bien y que comprendía, pero que su corazón había dado un vuelco y ahora sólo podía ver al director HyungWon. Al parecer la había deslumbrado su masculinidad o algo así logró escuchar luego de haber quedado en completo shock.

Se levantó decidido a tomar aire, no soportaba más.

— ¿A dónde vas? —Jooheon lo siguió con la mirada.

— A tomar algo de aire

— ¿Y mi cerveza? — Hoseok volteó a ver a Changkyun, y este, totalmente sorprendido volvió la vista a la televisión. — Bien, bien hombre, ve a tomar aire. Tal malgenio...

Hoseok salió de la casa dando pisotones, en el camino arregló su hoodie y soltó el aire ruidosamente al tocar la calle; tenía todo el rostro sonrojado porque no podía evitar reproducir una y otra vez el momento en que HyungWon lo beso en aquel solitario estacionamiento, así que se cubrió el rostro avergonzado ¿En serio qué estaba pensando al perder las luces y dejar que lo besara? Debió darle un puñetazo, quizá dos y así por fin ese chico loco volvería a sus sentidos.

"Dejaré que hagas conmigo lo que quieras"

¿A qué diablos se refería exactamente?

Negó de manera efusiva con la cabeza porque no quería saberlo, no quería confirmar nada, de saberlo seguramente tendría que llamar al doctor Minhyuk o quizá peor; quería estar tranquilo, pero en realidad era casi imposible. Soltó un profundo suspiro debido a que ahora que hacía trabajos extra para él le resultaba bastante incómodo, odiaba tener que ir a su oficina y verlo directamente al rostro y ni hablar del temor incalculable que le producía el quedarse completamente solo junto a él, ya que no sabía de lo que HyungWon sería capaz; para lograr evitarlo tomó la costumbre de grabar todo lo que leía y se lo dejaba en el escritorio mucho antes de que llegara.

Se detuvo en medio de la pequeña calle, miró al cielo oscuro y soltó un suspiro.

¿Qué diablos estaba haciendo?

No quería tener nada que ver con ese psicópata de quinta, pero tampoco se animaba a dejar su trabajo, y ya sabía que él no lo dejaría por alguna cosa relacionada a estar enamorado...

¿Enamorado?

Sus manos se apretaron y el corazón lo sintió diferente, era algo cálido y el sonrojo se extendió a sus orejas; enseguida volvió a negar con más efusividad.

— Eso no significa nada. No tiene nada que ver contigo, Hoseok.

Pronto estaría curado, tenía fe en que una vez terminara con sus terapias ya no tendría nada más que ver con el hombre alto de cabello rubio, seguramente ya no se sentiría así, tan... Soltó un suspiro y continuó caminando por la angosta calle con la mente llena de un montón de cosas volubles, un montón de momentos que lo ponían inmensamente incómodo, pero que también lo hacían sentir cosas que no debía y tampoco quería sentir. Soltando un bufido cruzó a la siguiente calle y al llegar al otro lado miró de manera natural al minimarket del barrio, las puertas se habían abierto y una pareja salía conversando muy animada; una pareja de hombres.

— ¡Kyaaa te amo, Hyunwoo! No puedo creer que hayas aceptado venir a casa en San Valentín. Tengo tantas cosas especiales para mostrarte, cariño; como mi polla, por ejemplo. — El hombre rubio estaba prácticamente enrollado en el brazo de aquel moreno y se movía como una colegiala calenturienta.

— No creo que ver tu polla sea algo especial si ya la he visto más veces que a mi propia verga, HyungWon. Piensa en algo más romántico si tanto quieres conquistar a otra persona. — Aquél hombre alto moreno sonaba muy acostumbrado a estar con el hombre de increíble belleza, eso lo hizo sentir tan furioso.

— Sin embargo te gusta ¿No es así?

— Dios, debo estar pagando algún tipo de traición a la nación.

— ¡HyungWon! — Hoseok gritó su nombre sin ser consciente en realidad, sus labios simplemente se movieron por sí solos, y en el momento en que el rubio fue consciente ya estaba justo en frente de ambos hombres. — Director HyungWon, es- es una sorpresa que esté merodeando por este vecindario ¿Qué cree que hace? — Enfocó la forma en que el menor sostenía el poderoso brazo de aquel moreno y luego miró a su rostro con vetas de reclamo.

—¿Me estás siguiendo o a caso cambiaste de opinión? — Hoseok tuvo un corto circuito en menos de un segundo y un movimiento involuntario en la mitad del rostro lo hizo parecer un desquiciado, sin embargo se obligó a mantener la calma.

— Es coincidencia.

— Mmmm

—Ya dije que es coincidencia — Y apretó muy fuerte la mandíbula conteniendo un fuerte grito.

—Ok... Como digas...

Incómodo

El silencio se extendió por varios segundos y no comprendió cómo había pasado de salir a tomar aire, a ser acusado de ser un enfermo acosador. Soltando un bufido se recompuso decidido a seguir su camino.

— Espera ¿Eso es todo? — La pregunta por parte de HyungWon lo hizo verlo al rostro, su expresión llena de esperanza era algo que no comprendía y enseguida vio al otro hombre que lo acompañaba, otros varios segundos más pasaron antes de que pudiese comprender y recordar que a ese hombre lo había visto hace tiempo ya.

Era el mismo que estaba con ese sujeto bajo del apartamento de enfrente.

Que decepción...

— ¿Por qué? ¿Hay algo más que deba... — Y ahí iba él de nuevo. 

HyungWon lo beso sin ningún tipo de consentimiento, sin importarle dónde estaban y sin siquiera pensar en lo que estuviera pensando o sintiendo; algo dentro le dolió, la imagen de verlo con alguien más forzó ese sentimiento de vacío e inconformismo que yacía en su interior y dejándose llevar profundizó el beso. Un jadeo por parte de HyungWon se escuchó cuando lo acercó más hasta pegarlo a su cuerpo, Hoseok movió sus labios con firmeza sobre los contrarios y chocó su lengua con la suya sintiendo cada detalle del  beso, cada caricia fortuita y soltó un suspiro al final. El mayor no se separó de inmediato, sino que se quedó perplejo en la sensación que le recorría el cuerpo.

— Si tanto me extrañabas debiste haberlo dicho, hyung, yo seguramente habría ido a donde sea que estuvieras. — Su voz profunda en un murmullo verdaderamente íntimo lo hizo poner como un tomate, rojo de la vergüenza, y aumentó en el momento en que escuchó que un tercero aclaraba la garganta; ahí por fin fue consciente de lo que estaba haciendo.

— ¡Tengo que irme! — Lo gritó empujando al menor a un lado, el moreno lo miró con un rostro calmado y en menos de lo que esperó levantó una ceja señalándolo después con el dedo.

— Yo a ti te conozco... El raro del apartamento de enfrente ¿No es así?— Hoseok se alarmó y dio la vuelta para correr y entrar al market de una vez.

— ¿Hoseok? — Al escuchar que el menor lo llamaba, se dio la vuelta realmente fastidiado.

— ¡No te creas demasiado, eso no significa nada! Sólo estás desesperado por llevar a alguien a tu casa el día de San Valentín ¡eres patético! ¡Vete con ese gorila si es que tanto quieres y aléjate de mi, psicópata pervertido! — Se dio la vuelta furibundo y entró dejando atrás al rubio.

Con el rostro sonrojado caminó por el pasillo hasta el final donde se encontraban las cervezas y se detuvo pensando en lo que había sucedido instantes antes, apretó su corazón sobre la ropa cerrando los ojos demasiado avergonzado y aturdido.

¿Por qué diablos estaba con él? ¿Él es la persona con la que sale ahora? ¿Por qué te besó entonces? ¿Qué diablos quiere en realidad?

Quizá sólo es divertido para él jugar contigo y tú estás cayendo como un idiota...

Seguramente.

☽☽☽

HyungWon se aflojó la corbata con un creciente fastidio recorriéndole cuerpo, con el teléfono al oído caminó de la habitación a la cocina soltando un enorme suspiro que llamó la atención de la persona al otro lado de la línea. 

— ¿A qué viene eso? —Preguntó ella muy interesada.

— ¿De qué hablas? — El rubio abrió la nevera tomando un tarro con agua y esperó a que la mujer le explicara a lo que se refería.

— Acabas de dejar el alma en un suspiro mientras te decía sobre cómo manejar la próxima reunión sin problemas ¿No te gusta mi método de presentación? Creí que sería sencillo para ti, HyungWon.

— No, Jaein, no es eso.... — volvió a suspirar — Es mi crush.

— ¿Ah? — La mujer de cabello negro tuvo una clara reacción ante eso y HyungWon se apoyó contra la barra de la cocina mirando un punto fijo en el suelo. Hoseok realmente lo tenía volando con su forma de comportarse y ya prácticamente no tenía fuerzas para ocultar cuánto sentía por él; por más que se había negado a no dejarse llevar, terminó impregnado y negándose a irse de ahí siguió su camino de vuelta a lo que era durante la universidad e incluso peor.

Prácticamente perdió la poca vergüenza que pudiera haber manejado estando frente a él y simplemente le decía lo que sentía porque estaba demasiado celoso de esa mujer que besó mientras estaban en la cena de trabajo ¿Tanto le gustaba ella? No era linda, no era nada atractiva, así que no comprendía qué diablos le veía y por qué estaba tan aferrado a ella; cada vez que lo buscaba con la mirada los veía estando juntos y confirmó sus sospechas el día en que los encontró tomándose de las manos en la habitación de fotocopiado.

¿Por qué Hoseok era así?

Aceptaba que hubiese olvidado lo que hizo con tanto fervor en aquél entonces, lo perdonaba, no importaba ya, pero que lo volviera hacer años después era demasiado bajo de su parte.

— Creí pensar que le gustaba, tenía una pequeña esperanza a la cual me aferraba pero el fin de semana que lo encontré de repente me llamó iluso y un patético; realmente creí que me había extrañado, pero no me ha hablado más desde ese día ¿Cómo es posible? No es como si estuviéramos en una oficina diferente...

— Así que un crush... ¿hablas de la señorita Kim? La mujer por la que Lee y tú estaban peleando? — la mujer soltó a reírse — ¿En serio? Creí que eras gay — HyungWon escuchó el sonido de la música suave en el fondo y entendió que ella estaba afuera todavía.

— Soy gay, claro que sí ¿Por qué pelearía por esa tonta inoportuna? Aaaggghh — La mujer abrió los ojos al comprender.

— ¿Lee? — Casi lo gritó y HyungWon soltó un nuevo suspiro — ¿En serio, HyungWon? Vamos ¿No es Lee hetero a juro? A ese hombre nunca le he visto una movida extraña, más que el de tener a ese par de amigos que son tremendamente molestos.

— Jooheon y Changkyun son buenos dongsaengs, por favor no los molestes.

— Total ¿Cómo fue que terminaste enamorado de Lee? — la mujer agradeció a alguien antes de continuar — Los rumores decían que lo odiabas.

— Eso- eso era antes de saber que se trataba de Wonho. — HyungWon cerró los ojos frustrado, pensando en que quizá había sido demasiado molestarlo de la manera en que lo hizo al principio, antes de saber que se trataba de él.

— ¿Wonho?

— Era como lo llamábamos durante la universidad. Él siempre... Siempre fue especial ¿sabes? Cuida muy bien de las personas y es tan cariñoso... Creo que caí enamorado porque siempre sonreía; aunque en el pasado rompió mi corazón, ahora no es diferente de ese entonces, lo sigo amando demasiado, Jaein... Él me gusta en serio...

— Mmmm entiendo... — Escuchando como bebía algo, HyungWon abrió la botella con agua y también dio un buen sorbo esperando por la opinión de su amiga de oficina, la primera que había hecho en mucho tiempo — Así que se conocen desde hace mucho tiempo ya.

— Sí, incluso rompió mi corazón. —Insistió en ello una y otra vez.

— Bueno, no me extrañaría, Lee se ve como un hombre jugador. — La vocecita dijo aquello en un cántico y HyungWon bufó antes de prácticamente mostrarse molesto y curioso por averiguar lo que sucedía.

— ¿Lo es? ¿Has visto si sale con alguien?

— Es broma, tonto. Pero, ahora que lo mencionas, Lee estuvo hoy en el piso de contabilidad y se acercó a mi preguntándome algo sobre  la reunión; la verdad fue que no comprendí muy bien porque realmente no estaba para nada relacionado con el tema, básicamente quería saber qué tipo de relación tenía contigo, así que le dije que eras nuestro precioso director del área de proyectos y creo que se molestó porque no lo tomé en serio.

— ¿Hoseok hizo algo como eso?

— Sí, antes no lo sentí demasiado extraño porque creí que tramaba algo para así robarte a Kim como todos lo cometan por los pasillos, pero al parecer tenía otra intención ¿Cuál? No tengo idea ¿pasó algo entre ustedes que deba saber?

— Le pedí que tuviéramos sexo. — La mujer tosió varias veces, seguramente por la impresión.

— Vaya, que directo... — Aclaró la garganta — ¿y él qué te respondió? — HyungWon elevó la vista recordando, mientras que la mujer al otro lado de la línea esperaba escuchar la respuesta.

— La primera vez me maldijo, la segunda vez me maldijo y la tercera vez me maldijo el doble y huyó.

— No me sorprende —Comentó—  no todos los días tu director, quien resulta ser tu antiguo donsaeng, te pide que tengas sexo con él. Por supuesto que ha de estar demasiado impactado.

— ¿¡Ah!? ¿Lo que quieres decir es que lo pongo incómodo? — HyungWon no lo podía creer ¿Qué había de malo con dejar ir sus sentimientos? Mientras lo pensaba escuchó a la mujer hablar

— Pero no te rindas, algo me dice que tal vez es lo que hace falta. — El rubio levantó una ceja y suspiró mirando hacia la pared donde estaba colgado el calendario.

Sólo quedaban unos cuantos días hasta el San Valentín...

◇◇◇

— El proyecto puede llevarse a cabo, ahora que los análisis por parte del área de contabilidad fueron hechos sabemos que el costo podría ser muy bien compensado y no habrá ningún tipo de pérdida si usamos los materiales que les propongo. — Los analistas y demás personas presentes se quedaron pensando y algunos asintieron a la propuesta de HyungWon. La verdad sabía muy bien qué decir debido a que se basó en lo que Hoseok grabó para él, era Wonho quien se tomaba el tiempo de leerle los proyectos y así mismo HyungWon escuchaba atento; más que el contenido de cada larga propuesta, era la voz de aquel hombre la que lo motivaba. Lo miró de manera fugaz, encontrando que leía el documento y, de repente, levantó la mirada chocando con la suya.

Luego nada.

Hoseok volvió al documento tan rápido y fugaz como lo hizo al verlo directamente a los ojos; HyungWon suspiró y miró a su jefe directo.

— Director Chae, creo que haberlo contratado ha sido una de la mejores decisiones — El hombre elegante se levantó y todos los presentes le siguieron — Haremos lo que nos propone, el diseño es mucho mejor de lo que habría previsto y también los materiales que escogieron son perfectos. Por favor manténganme al tanto de los detalles de la obra.

— Sí, señor. — Haciendo una reverencia HyungWon y el resto despidieron al hombre de traje negro, detrás de él iban su secretaria y otros dos analistas más que le acompañaban ese día. Luego de que desapareciera por completo, la primera en acercarse a HyungWon fue Jaein, la directora de contabilidad.

— Estuviste muy bien, HyungWon. — Ella sonreía de manera espléndida, sus facciones atractivas se realzaron y una de sus manos descansó en el pecho del rubio. — Hiciste un esfuerzo increíble y lució muy natural.

— Los soportes de Sailor Moon que compraste fueron de mucha ayuda, creí que me perdería en algún momento, pero los colores jugaron su papel. —El rubio se sintió feliz de haberlo logrado sin mayores problemas, podría acostumbrarse a eso si todas las reuniones serían así.

— Cuando los vi en esa tienda en línea supe que debía conseguirlos. — Ella sonrió y en medio la conversación escuchó la manera en que alguien aclaró la garganta y llamó el nombre del más alto.

— HyungWon... — Lo dijo casi como si no quisiera interrumpir nada importante y el nombrado se detuvo de reír junto a Jaein para ver sobre su hombro a Hoseok, quien sostenía una carpeta en su mano derecha y la otra la guardaba en el bolsillo de su pantalón de traje negro. Por largos segundos el rubio sólo se dedicó a detallarlo, a ver lo increíblemente majestuoso que era ante sus ojos y lo mucho que quería besarlo.

Su compañera lo vio sonriente pensando que era muy lindo verlo así, tan enamorado.

— Bueno, creo que regresaré a mi oficina. — La mujer le arregló la corbata y sonrió por cuenta nueva dándole ánimo, por alguna razón se sintió nervioso y deseó que no se marchara dejándolo solo frente a su hyung, sin embargo ella insistió dando la vuelta para saludar con una pequeña reverencia al hombre de cuerpo fornido que aún esperaba atento a lo que hacían— Lee — Él le respondió con otra reverencia corta y sin perderse ningún detalle la vio darse la vuelta y hacer señales a HyungWon de que la llamara. HyungWon comprendió en seguida lo que su amiga le dijo a través de señas y volvió la vista a Hoseok quien se acercó captando su atención.

— ¡Yak, pequeño jugador! ¿Qué piensas que estás haciendo aquí en la oficina? Creí que no estaban permitidas las relaciones personales en la empresa. — La ceja de Hoseok se levantó en signo de arrogancia y luego soltó un chasquido — Sólo te gusta jugar con las personas ¿no es así?

— Si quieres podemos hablar un poco más sobre eso en mi casa, hoy, después del trabajo ¿Qué dices? — HyungWon se acercó incluso más y Hoseok retrocedió un paso soltando la carpeta para cubrirse la boca, mirando hacia atrás se percató de que nadie estuviera ahí.

— ¿Qué diablos haces, psicópata?

— Sólo estoy mostrando lo mucho que mi cuerpo te desea, hyung ¿Qué está mal con mostrártelo? — HyungWon barrió su  cabello hacia atrás con el pasar de su mano y soltó un suspiro — ¿A caso te irás con esa mujer Kim? ¿Por eso rechazas mi propuesta?

— ¿No irás tú a una cita en San Valentín con ese tipo? Primero mira hacia a ti y luego juzga a los demás, mocoso. — Hoseok bufó mirando a otro lado y luego lo fijó repentinamente — ¿Por qué estabas tan nervioso durante la presentación? ¿No fueron mis audios suficientes que tenía que venir la directora de contabilidad para apoyarte?

— Yo- — HyungWon rasco su nuca sintiéndose algo avergonzado, pensaba que en serio lo había estado haciendo bien, pero al parecer no lo fue. Soltó un suspiro — Tus audios son increíbles, me encanta tu voz, hyung, pero realmente no puedo recordar mucho luego de escucharlos así que Jaein compró unos soportes de Sailor Moon para así poder acomodar toda la información y que fuera un poco más sencillo recordar lo que expondría. Lo siento, hyung.

— ¿Y las notas que te escribí en la agenda? — Hoseok parecía que perdía la paciencia.

— Yo- bueno... 

— ¿Estás queriendo decir que estoy haciendo un trabajo extra para nada? — Hoseok prácticamente estaba rojo de la ira — ¿Cómo es que no usaste las notas que hice con tanto esfuerzo? No lo puedo creer.

— Sería perfecto si tan sólo me explicaras y no sólo lo dejaras y desaparecieras, hyung, ¿sabes? Necesito un poco más que sólo una nota de voz, si tú me lo explicas estoy seguro de que lo entenderé mejor.

— Sólo quieres chantajearme ¿no? — Cruzándose de brazos negó con la cabeza soltando un nuevo bufido — No caeré en la trampa de un mocoso lujurioso y jugador como tú ¿crees que nací ayer? No, no caeré.

— Vamos, hyung... — HyungWon de nuevo hizo el intento de acercarse y acarició con el dorso del dedo índice su mejilla, haciendo que lo alejara con un golpe de su fuerte mano.

— Debes creer que soy muy fácil de convencer ¿cierto? Sólo eres un niño insensato y un arrogante. ¡Y ya te dije que dejes de hacer eso! No quiero que alguien como tú me toque de esa manera.

— ¿Por qué? — El menor frunció el ceño al no comprender— ¿Por qué te molesta tanto que yo quiera tocarte, si ya te dije que te amo, hyung?

— No me interesa, es asqueroso y no soy gay ¿Cuántas veces tengo que decírtelo para que entiendas?

— ¿Y cómo sabes que no eres algo si no has probado en realidad? Siento que te engañas a ti mismo de manera innecesaria.

— No me estoy engañando, estoy completamente seguro de lo que quiero y lo quiero en este instante es que dejes de buscarme y hacerme la vida imposible, al menos hasta que... No sé, ¡hasta que te largues y me dejes en paz!

Al escucharlo HyungWon soltó un desalentador suspiro y apretó el puente de su nariz intentando no perderse a sí mismo, como si nada un sonoro ruido provino desde su garganta.

— aaagghhh — Sintió la molestia acumularse en la parte de atrás de su cabeza — hyung ¿no es suficiente para ti que esté enamorado de ti? ¿Qué maldita cosa tengo que hacer para que me creas? ¡No estoy jugando, no lo hago!

— Entonces deja de andar merodeando por ahí con ese tal Hyunwoo.

— ¡Bien, lo haré! ¿Qué más quieres? — Hoseok entrecerró los ojos viendo con sospecha al menor.

— ¿En serio lo harás? ¿Así? ¿Tan fácil? — HyungWon asintió de manera casi tierna y completamente seguro de lo que hacía, creía que mientras fuera su hyung podría aceptar cualquier cosa.

— Lo haré porque te amo, hyung. — Respondió firme y seguro, mientras que Hoseok solamente soltó una risita arrogante.

— Vaya, si que sabes como actuar. — Mirándolo al rostro movió la cabeza como echándolo hacia a un lado y continuó. — También dile a la directora de contabilidad que deje de tomarse tantas atribuciones contigo ¿O es que estás saliendo con ella?

— Jaein es mi primera y única amiga en esta empresa, su novia es la mejor amiga de la novia de mi hermano ¿Por qué saldría con ella, hyung?

— ¿quieres decir que ella... — Hoseok se quedó sin palabras y finalmente soltó una maldición — aish, ese mocoso de Jooheon — Murmuró entre dientes y HyungWon inclinó la cabeza para saber qué era lo que trataba de decir.

— ¿Algo más?

— Desde ahora vas a usar mis notas ¿Soportes de Sailor Moon? Te traeré de pocoyo, power Rangers o lo que sea ¡Lo haré mil veces mejor y te explicaré! ¿por qué no? Lo haré

— ¡hyung, eres el mejor!— Los ojos del menor brillaron llenos de esperanza y Hoseok se arregló el traje junto al cabello, listo para dar por terminada la conversación.

— Cómo sea, me iré.

— Espera ¿eso es todo? — Hoseok se detuvo para verlo, notando que HyungWon parecía un cachorro esperando por su recompensa; soltando el aire el hombre de gran musculatura regresó en sus pasos acortando la distancia entre el y el menor. 

Para Hyungwon fue tan sorpresivo, como emocionante.

Sin previo aviso Hoseok comenzó a acomodarle la corbata y el rubio lo fijó con la mirada porque definitivamente no estaba entendiendo lo que hacía o pretendía hacer. Terminado, Hoseok se quedó de pie frente al menor, sus manos cayeron a los lados y finalmente levantó la vista; la tensión sólo fue en aumento.

— ¿Qué esperas? Hazlo rápido.

Al escuchar esas palabras HyungWon se lanzó a devorarle los labios, sus manos que eran enormes acunaron el rostro del mayor y su lengua se abrió paso sin ningún tipo de reparo. La manera en que Hoseok movía sus labios era muy diferente de aquél día en el supermercado, se sentía más cohibido, así que se separó rompiendo el beso de manera inesperada y sin importarle el lugar arrastró al mayor hasta la mesa, se sentó sobre ella y acomodó al otro entre sus piernas, ahí volvió a besarlo sintiendo real satisfacción en ello; era hasta sanador y muy estimulante poder sentir que poco a poco Hoseok iba correspondiendo de una mejor manera a sus caricias y besos.

Estuvo sumergido besando su cuello, hasta que sintió una embestida por parte de Hoseok, sinceramente impresionado HyungWon se sobresaltó y abrió los ojos escuchado un siseo seguido de un sutil gemido que apenas y fue audible para ellos dos que estaban solos en la sala.

— ¿Wonho hyung? — HyungWon fue testigo de cómo Hoseok abrió los ojos de manera dramática y el cómo fue poniéndose completamente rojo, seguramente de la vergüenza. Retrocediendo se limpió la boca con el dorso de la mano luciendo siempre impresionado e incrédulo de lo que había acabado de hacer; HyungWon simplemente parpadeó sin decir nada.

— ¡Cállate, no digas nada! No- ¡No volverá a suceder!

— Pero no he dicho nada, hyung. —El menor negó con ambas manos aún muy asombrado por lo que había experimentado.

— Igualmente, lo que sea que vayas a decir guárdatelo. — Tomando la carpeta del suelo Hoseok huyó corriendo de la sala de reuniones dejándolo completamente solo; ahí, sentado en la mesa elevó la vista al techo y se echó a reír porque realmente estaban pasando un montón de cosas que jamás esperó sucederían. Cubriéndose el rostro sonrojado comenzó a sonreír como un completo loco y movió las piernas de atrás hacia adelante como un borrego enamorado sin remedio alguno; ahí sentado se imagino saliendo con Hoseok y hasta el corazón se le aceleró sin poder detenerlo.

Sólo debía quitar esa timidez y ya lo tendría.

— HyungWon, fighting! — Se dio ánimo a sí mismo y bajó de la mesa regresando a su oficina en medio de silbidos alegres.

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Hola!

De nuevo soy yo con esta historia, espero que les haya gustado el capitulo. Sepan que siempre las tengo presentes y estoy tremendamente agradecida con cada uno de sus comentarios , votos y vistas.

¡Las y los adoro! nos vemos en el próximo cap!