Vestido

Lucy observaba en silencio a su hermana mientras esta posaba frente al espejo, algo que le parecía bastante curioso ya que Lynn nunca había sido de hacer dichas cosas, de hecho, prácticamente solo usaba el espejo cuando quería ver si sus músculos habían crecido como si fuese una fisicoculturista, pero ahora posaba como lo haría Lori o Leni, lo cual era simplemente extraño.

- Lynn, llevas 10 minutos posando frente al espejo, y créeme cuando te digo que no importa la pose que hagas, no vas a aumentar el tamaño de tu pecho, es el funesto destino que estas destinada a compartir con Luna.

- C..Cállate.

Esa era otra señal rara para Lucy, sentir algo de vergüenza en la voz de su hermana y que esta no la hubiera silenciado de una forma más agresiva, pero ese no era el caso.

- Mmm... ¿Es por un chico?

- ¡¿Qué?!

La expresión de la muchacha se volvió de un color carmesí similar a la camiseta que esta llevaba encima.

- N..N..No digas tonterías.

- ¿Entonces es eso? Vaya, no me lo esperaba de ti.

- N..No se de que hablas.

- Te comportas igual que Luan antes de decir que tenia novio.

- (Susurrando) No tengo novio.

- ¿Dijiste algo?

- N..No tengo... (Molesta) ¡No te pongas presumida!

- ¿Entonces novia?

- ¡Que no!

Lynn resoplaba con fuerza y un rostro tan enrojecido como la mayoría de los ropajes de la deportista, algo que Lucy observaba con calma sin moverse desde su cama antes de dejar su libro a un lado y acercarse a su hermana, mirándola a pocos centímetros de distancia.

- Asuntos mundanos como este no deberían ser de mi incumbencia, pero ver tu rostro de preocupación al momento de ver tu reflejo comienza a preocuparme, ¿Hay algo que te atormente?

- Es una tontería, no te preocupes y vuelve a tus poemas.

La pequeña solo miraba fijamente a su hermana sin siquiera pestañear, algo que al principio Lynn ignoro y volvió a su tarea, pero al cabo de unos pocos minutos no pudo seguir soportando aquella inquisidora mirada y termino sentándose en el suelo derrotada.

- Si le dices a alguien sobre esto te mato.

- La muerte es un consuelo para un alma marchita como la mía, así que no temas.

- Sigh, Lucy... tú... ¿Crees que soy femenina?

- No.

- ¿Lo ves?

- Nunca te has esforzado mucho en parecer femenina si me lo preguntas.

- Bueno, eso es verdad... 

- ¿Entonces?

- Yo... 

Nuevamente la muchacha tiño su rostro en un color carmesí mientras jugaba torpemente con sus dedos en un acto que comenzaba a molestar a la pequeña pelinegra, pero Lynn comenzó a incorporarse hasta llegar a su bolso deportivo y de allí sacar una bolsa de una tienda de ropa, de una de las tiendas favoritas de Lori y Leni desde el cual saco un vestido de una pieza color rojo.

- Bueno... vi esto en el centro comercial y me pareció bonito... ya sabes, es elegante y todo... pero... sigh, creo que realmente no se me vería bien, digo, es bonito y elegante, en alguien más refinada se vería mucho mejor y pensé que quizás podía serlo... pero entre más me veo en el espejo - La mirada de Lynn se había lentamente enfocado en su reflejo mientras llevaba una de sus manos hasta tocar el espejo - Más siento que es algo que no soy yo.

Lynn solo miraba su reflejo con calma mientras su mirada pasaba a dejar la vergüenza de lado y se volvía una triste, añorando algo que en el fondo de su mente pensaba que no era ella al enfocarse en su camiseta deportiva, gastada por todo su movimiento y que ocultaba sus invisibles atributos, carentes de todo el encanto femenino que aquel antojo suyo requería.

- Es una tontería, ¿No lo crees Lus?

En ese momento el vestido fue sobrepuesto sobre Lynn, siendo sujetado por Lucy desde el costado mientras mantenía su expresión estoica.

- Creo que es un poco colorido para mis estándares, pero tienes un cuello delgado, eso es algo que no todas tienen, Leni siempre dice que muchas matarían por tener un cuello como el tuyo.

- E..Es solo el cuello.

- Sinceramente creo que puede funcionar, ¿Por qué no te lo pruebas?

- N..No creo... digo... fue un capricho.

- Y sería una lastima si no te lo pruebas al menos.

- E..En eso tienes razón.

Con algo de duda, Lynn termino por sacarse su ropa habitual y ponerse aquel vestido mientras se miraba al espejo, debido a como lo había transportado estaba arrugado y le quedaba ligeramente grande, además que su cabello había quedado revuelto al ponerse tan rápidamente aquella tela, algo que Lucy pudo notar, pues esta estaba segura que Lynn no se veía bien.

- Bueno... te ves...

- Me veo bien.

Lucy pudo notarlo, aquel brillo en los ojos de su hermana mientras contemplaba su reflejo.

- Definitivamente Lynn, te ves muy bien.

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