- ¿Papá?

- Dime Lola.

- Tengo una duda... ¿Por qué nuestra familia es tan grande?

Aquella inocente pregunta esbozo una pequeña sonrisa en el rostro del patriarca de la familia, no iba a negar que no esperaba tener una familia tan grande cuando era más joven, pero había aprendido a vivir en esa familia y realmente no se imaginaba ahora con una familia más pequeña, por lo que dejo el plato que estaba secando sobre el mesón y centro su mirada en su pequeña hija.

- Porque tu mamá y yo nos queremos mucho, y porque amo mucho a mi familia.

Aquello no parecía terminar de convencer a la pequeña quien había comenzado a hacer muecas las cuales le parecían graciosa al hombre con principios de alopecia quien devolvió su atención a los platos que estaba secando.

- ¿Entonces significa que van a haber más bebés?

El plato simplemente cayo de las manos del adulto, quien se paralizo en el acto.

- Uhh... ¿Papá?

- ¿S..S..Si hi..hija?

- (Preocupada) ¿Estás bien?

- C..Claro... tengo... tengo que limpiar esto, por favor retrocede que puedes cortarte.

Algo preocupada la muchacha se alejo de la cocina, dejando al hombre que en silencio comenzó a recoger los fragmentos dispersos del plato mientras pensaba en aquello.

El amaba a su familia, no iba a negarlo, era extensa y le daba muchos dolores de cabeza, el dinero no alcanzaba y sentía muchas veces que no le daba la atención debida a todos sus hijos, incluso ahora que una de sus hijas se había ido de casa para irse a la universidad sentía que no le daba el tiempo suficiente a todos, la sola idea de pensar que Rita pudiese quedarse embarazada otra vez era algo que no había contemplado, se había hecho la idea de que Lily sería la última... pero eso tampoco le daba mucha seguridad... pues desde Luan que había dicho que sería el último hijo.

- Vamos Lynn, no seas así, solo tienes que tener cuidado y ya... Lily será la última... espero...

El resto de la noche no pudo sacarse la idea de la cabeza, tenía aquel debate interno sobre si otro hijo más era posible, o si sería una bendición o una maldición, eran muchas las ideas que se almacenaron en su cabeza en el momento en que se recostó en la cama, algo que Rita pudo notar.

- ¿Todo bien Lynn?

- ...

- ¿Cariño?

- Rita... tenemos suficientes hijos, ¿No?

- Mmm... bueno, la verdad si somos una familia un poco grande, más de lo que esperaba tener sinceramente.

- ¿Tú también lo crees?

- Si, bueno, cargar por 9 meses a un bebé no es algo sencillo, menos cuando son gemelas o cuando se adelantan demasiado.

- Esa Lynn, hasta nacer lo volvió una competencia.

- Aun así, creo que lo peor fue con Lucy, esa niña casi me da un ataque cuando nació.

- ¿No que el peor fue con Lincoln? Digo, nacer en una limusina.

- Y fue el momento en que lo llamaste como uno de los presidentes, sigo pensando que Brandon era mejor.

- Lincoln es un buen nombre, y en todo caso creo que es mejor que Luan.

- Pero si fuiste tu quién se equivoco al escribir y se confundió de hija.

- (Fastidiado) Era nuestra cuarta hija, aún tenia en mente que Luna era una bebé.

- Aun así eso no te da derecho a escribir el nombre de otra hija y peor, escribirlo mal.

- Al menos yo no me equivoque y pensé en un regalo antes que en el nacimiento de otra hija.

- Estaba cansada por el parto, ¿Sabes lo difícil que es tener gemelas? Además me gusta tejer.

- ¿Pero Lana? ¿En serio? ¿Estabas teniendo a una hija o la lista de compras?

- Oh por favor, ni que Lily fuera un nombre muy inteligente señor "significa algo bonito que acabo de revisar en Google".

- ¿Y que tiene de malo buscar el nombre unos minutos antes de que nazca el bebé?

- ¡Te había dicho con MESES de anticipación que te tocaba a ti!

- ¡Son 11 hijos, no soy tan ocurrente!

- ¡¿Entonces por qué tienes tantos hijos?!

- ¡¿Por qué crees que tenemos tantos hijos?! ¡Esto no es un trabajo de una sola persona!

- ¡¿Me estás culpando a mi?!

- ¡Estoy diciendo que eres tan culpable como yo!

- ¡Ah claro, el señor autocontrol hablando de culpa!

- ¡No me vengas con eso cuando he visto tu mirada de esos días!

- ¡¿Entonces si me culpas?!

- ¡Solo digo hechos!

- ¡Hechos mi trasero!

Mientras ambos padres discutían, Luna y Luan ya se encontraban asegurándose que los menores no escucharan lo que estaba por continuar, pues sabían perfectamente que seguía.

No por nada sus padres habían tenido esa misma discusión 9 meses antes de que cada uno de sus hermanos menores llegase.