Niñera

- Madre, ¿Hoy llegarás tarde?

- Si cariño, Lincoln estará a cargo cuando llegue, así que por el momento tú estarás a cargo por lo que cuida a tus hermanos menores.

- ¿Y si llega otro espécimen cronológicamente superior antes que el individuo falto de pigmentación capilar?

- Mira, tú eres la genio aquí, resuélvelo tú misma, nos vemos.

Y en menos de 10 segundos la matriarca ya estaba en la van, alejándose a toda velocidad de la casa.

- Cuanta responsabilidad.

Leroy se acerco a su lado, mirándola fijamente, algo que Lisa respondió de la misma forma, pero con una sonrisa típica de ella la cual logro intimidar al niño quien comenzó a retroceder.

- Bueno, si yo mando por ahora debo aprovechar el limitado tiempo, - Su sonrisa se ensancho mientras tronaba sus manos. - Leroy... ven con tú hermana mayor, le vas a ser de mucha ayuda en cierto experimento.


Minutos después

- En serio, ¿Cómo pudiste perder las entradas?

- Ya cállate Lana.

- No, no, señorita perfección siempre se queja de mis errores, ahora te callas y me escuchas.

- Uhg, en serio que eres molesta.

Pese a que las gemelas estaban enfrascadas en su discusión mientras llegaban a su hogar, antes de que Lola pudiese abrir la puerta pudieron escuchar un fuerte grito provenir del interior.

- ¿Qué?

El grito fue suficiente para espantar ligeramente a Lola y hacerla retroceder, Lana, en cambio, se apresuro a quitar a su hermana y abrir la puerta preocupada.

- ¡¿Qué está pasando?!

Lana observo el interior de la casa, pero tanto en el comedor como la sala de estar no había nadie, aunque varías cosas estaban tiradas en el piso, como si hubiese habido una persecución.

- (Asustada) Qué desastre.

- Ni cuando entro el alce causo tanto desastre. - Lana se agacho para recoger un trozo de florero roto cerca de la entrada. - No se ve que fuese de animal, no hay aroma ni pelo, esto fue obra humana.

- ¿Dices que alguno de nosotros hizo esto?

- Todos salimos hoy, todos menos... Lisa, Lily y Leroy.

- ¿Les habrá pasado algo?

- Esperemos que no, iré al segundo piso a investigar, tú ve a la cocina.

- (Aterrada) ¿Y si me encuentro a un ladrón o algo así?

- Grita, yo me encargo del resto.

Lana sin titubear comenzó a subir por la escalera dejando a una muy preocupada Lola en la entrada quien tomo un paraguas a modo de arma y comenzó a encaminarse a la cocina, avanzando a paso lento mientras parecía que el nivel de destrucción aumentaba conforme se acercaba a dicha habitación, y en el momento que supero el comedor y pudo observar el lugar su cuerpo se paralizo, cayendo de espaldas al piso incrédula.

- ¡L..L..Lana! ¡Lana! ¡Lana!

No pasaron muchos segundos hasta que su gemela apareció, armada con una llave inglesa, deteniéndose justo detrás de Lola.

- ¡¿Qué ocurr...?!

Pero la chica no alcanzó a terminar de preguntar antes de observar la cocina, una que estaba totalmente hecha un desastre y, lo peor, eran las diversas marcas rojas que manchaban parte de los muebles y el piso.

Lana sintió como algo comenzó a subir desde el estomago a su garganta pero logro contenerlo, tragando con dificultad.

- Las... las niñas, ellas... ellas...

- L..Lola, c..calmate, ellas deben... estar bien.

- V..Voy a llamar a la policía.

- No hay tiempo, ¿Escuchaste el grito no? Tardaran demasiado, sea lo que sea que causo esto, si alguien sigue con vida lo tenemos que ayudar ahora, no hay tiempo que perder.

Aterrada, Lola no sabía como reaccionar, pero en ese momento se pudo escuchar un segundo grito tan desgarrador como el anterior, pero esta vez pudieron localizarlo, había venido del sótano de la casa.

- Esa... esa...

- Es la voz de Lily.

Lana estaba por apresurarse, pero su mano fue tomada por Lola.

- Ten cuidado, por favor.

- Volveré con nuestros hermanos, lo prometo.

Apresurándose todo cuanto podía sin correr la niña fue directo al sótano, pensaba en como atrapaba a las bestias, tenía que ser sigilosa y atacar por la espalda, no podía arriesgarse a ser una victima más si quería salvar a su familia, por lo que comenzó a descender y noto que la luz del sótano estaba encendida, pero apagándose por fracciones de segundo, cuando puso su primer pie en un peldaño de la escalera rogo porque la madera no sonase, sentía el ominoso ambiente cargado de un potente hedor que no lograba recordar, cuando bajo el segundo peldaño, pudo escuchar algunos sonidos, era el movimiento de algunas cosas sobre una mesa de trabajo, estaba segura, podía reconocer el sonido, bajo otros escalones hasta que finalmente tuvo vista de lo que ocurría allí, y pudo notarlo.

Lily se hallaba tirada el piso, solo parecía desmayada, pero cuando levanto más la vista, pudo verla.

Era Lisa, quien tenía puestos unos guantes quirúrgicos que estaban principalmente manchados con tonalidades rojas, algo que compartía en parte su bata y algunas gotas habían salpicado su cabello, y frente a ella, recostado sobre la mesa, se hallaba Leroy con los ojos cerrados.

- L..Lisa...

En ese momento la chica volteó, mostrando mejor el frente de su bata manchada en rojo y algunos colores morados mientras en su mano sostenía un cuchillo al cual aquella sustancia roja caía gota a gota.

- Oh, Lana, llegaste, supongo que ahora todo esto será tú culpa, genial.

Mientras se dibujaba una sonrisa en Lisa, Lana solo sentía náuseas y furia, apretando con fuerza la llave inglesa en su mano.

- ¿Cómo... pudiste... hacer esto?

- Mmm, porque podía, supongo, además a Leroy no le molesto.

- M.. ¡¡¡Maldita!!!

Y en el momento que Lana grito con sus fuerzas antes de cargar contra Lisa, el niño se levantó asustado por el grito de la mesa.

- ¡Ahhh!

En el momento que el niño grito y elevo su torso, varios trozos de pan salieron disparados frente a él, haciendo que Lana se detuviese en el momento.

- ¿Eh?

- ¡Mala, me asustaste, Lana mala!

- ¿Ehhhhh? ¿Pero? ¿Ehh?

El niño se levantó, limpiando las migajas sobre su cuerpo.

- ¿Me pueden explicar que carajos están haciendo?

- Bueno, - Tomo la palabra Lisa. - Es difícil de explicar.

- ¡Lisa me iba a convertir en un sándwich humano!

- ¿Un qué?

- Solo iba a ponerle algo de mermelada y pan sobre él para reírnos un poco, ¿Ok? - Dijo avergonzada Lisa.

- ¿Y el desastre de arriba?

- No... soy buena cocinera.

- ¡Prácticamente destruiste la cocina y la sala!

- ¡Soy muy mala cocinera! ¡¿Ok?!

- ¿Y los gritos?

- Lily se entero que Lynn viene a cenar esta noche.

- Oh.

Los tres quedaron en silencio por un momento, tiempo que Leroy para acercarse a Lana.

- ¿Qué ibas a hacer con la cosa en tu mano hermana?

- (Nerviosa) Ah yo... pues... mejor subamos a limpiar, ¿Les parece?

- ¡Okis!

Todos (menos Lily) comenzaron a subir, liderados por Lisa quien se disculpaba con Lana por el desastre, y en el momento en que llegaron al piso franco.

- ¡Salve a Lana oficial!

- ¡Entendido!

Un policía salto sobre Lisa.

Les tomo el resto de la tarde explicar lo ocurrido a la policía.

No alcanzaron a limpiar antes que llegaran los demás.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top