Consejo I

No te desanimes, coca cola del desierto.

Okay. Yo he estado ahí, es más, aún estoy ahí: en esa etapa donde uno se piensa el mejor escritor del mundo.

¿Pero saben, qué? No lo somos, al menos aún no.

Bueno, lo que quiero decir es que en el desierto hay más coca, con más cola que uno.

Dicen que para ser un experto en algo debes tener diez mil horas haciéndolo. Eso aplica para casi todo en la vida. Yo haciendo cálculos aleatorios vi que apenas llevaba +2,000 horas, en cuatro años. Quiere decir que seré una experta like Gabo, o Mistral, si le dedico 8,000 horas más a mí escritura.

Y créanme, que durante este viaje de las diez mil horas he aprendido demasiado, he tenido muchos altos y bajos, pero sigo dedicándole mi tiempo, no porque estoy apurada por llegar a las 10k horas, sino porque me gusta escribir, ¿vale?

Pero sigamos con el tema, el orgullo de un escritor que apenas lleva doscientas horas escribiendo es muy frágil (se ofende de nada), muy orgulloso (le jura a Dios que su escrito es el mejor) y muy rencoroso (odia a quien dice lo contrario), y celoso (dice que su escrito es mejor que el del mengano, solo porque sí, ni siquiera lo ha leído, solo porque sí).

Estas actitudes son muy dañinas para cuando apenas eres un novato. Lo mejor es poner los pies en la tierra, y lo más importante:

NO PARAR DE ESCRIBIR.

Escribe de todo, empieza historias y experimenta. No te encariñes con una vaina solo porque sí: es mi primera obra, es la mejor, nunca haré nada mejor.

NO TE PAUTES. ¡La primera no siempre es la mejor! ¡Lo puedes hacer way better!

Puedes crear e innovar, mientras más tiempo le dediques mejor se hace tu trabajo. Una historia supera a la otra, aprendes más de la vida, de ortografía y de construcción de una obra.

Y sobre todo, en tu viaje, no te fijes en las demás coca colas, no te puedes querer comparar con alguien que lleva cinco años de su vida escribiendo, contigo, una persona que apenas lleva tres meses. No es así como funciona cuando no era superdotado o virtuoso.

En conclusión: escriban y no se desanimen por comparaciones con otros. Ustedes no saben su camino aún, hay un poema que dice: "Caminante no hay camino, se hace camino al andar."

Y si realmente les gusta escribir, y quieren ser los mejores, escriban mucho. Suban sus creaciones, una novela, una saga, un esto, un lo otro...

Miren, yo les voy a decir una cosa: recuerdo que mi escritura era pésima. Mi primera historia carecía de acentos, puntos, comas, nada, simplemente plasmaba mis pensamientos sin fijarme en nada. Hubo críticas feas, etc, quise llorar de la rabia, mi orgullo me decía que era la mejor vaina y que ellos estaban ciegos.

No me detuve, seguí escribiendo, escribiendo, y escribiendo. Aun no soy tan buena como quisiera ser, me falta 3,000 horas para ser intermedia, y otras cinco mil para ser una experta, pero acá estoy, y no paro.

Ustedes tampoco deberían parar. Si una historia no está teniendo la respuesta deseada. Sigan creando e innovando, en algún momento crearan una obra maestra y por fin llegaran el reconocimiento que esperan.

Esto es, claro, si os gusta escribir de verdad.

Si es un pasatiempo, bueno, pues. Okay.

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El cálculo para las diez mil horas lo hice muy fácil: 2 horas por día por 4 años que llevo escribiendo:

2 horas *7 días: 14 horas

14 horas a la semana *4 semanas: 56 horas

56 horas al mes * 12 meses: 672 horas por año.

672 horas por año *4 años: 2,688 horas.

Es un aproximado, porque hay días que me tomo cinco horas y días que me tomo cinco minutos. Pero hice un aproximado. Pueden usar la misma fórmula, solo si escriben todos los días, como hago yo, sino, la cambian a su antojo. ¿Cuánto tiempo les falta para ser el próximo Gabriel García Márquez?