42. THE GHOSTS OF FRIED CHICKEN
🌙 CAPÍTULO 42: LOS FANTASMAS
DEL POLLO FRITO
Son las nueve de la noche en Corea, el edificio JYP estaba siendo abandonado por los idols que habían acabado su día de trabajo. Lo cual Bang Chan no hacía. Él se había acostumbrado a estar a altas horas de la madrugada en el edificio, se hacían las tres y cuatro de la mañana y él seguía ahí. Produciendo y grabando canciones.
Esta vez, Min-seong se quedó con él luego de un largo día ayudando a Hyuna con su vestido de bodas. Le encantó acompañarla y le hacía mucha ilusión el día en que escogería el de ella. También decidió acompañarlo para pedirle opiniones sobre las letras que escribe para su nuevo álbum y de paso cenar juntos.
— ¿Por qué no le quisiste decir a Jung-woo que nos vamos a casar? — cuestionó Chan mirándola abrir los recipientes de comida, sentada a su lado en el escritorio.
— Mmm... No creo que debamos anunciarlo a la gente todavía. Apenas nos decidimos anoche ¿no es muy apresurado? — él hace una expresión pensando — además, debemos averiguar varios detalles antes: el anillo, el vestido, la fiesta...
—Sabes que tengo mucho dinero para hacerte la boda que quieras —sonríe presumido.
— No me refiero a ese aspecto ¿y si no es lo que esperamos y nos arrepentimos después? Sería muy feo ilusionar a nuestros fans con eso— acerca la cuchara con verduras dándole comida — de verdad, estoy muy emocionada por esto pero quiero que hagamos las cosas bien.
— Tienes razón, babe. Lo tomaremos con calma — ella le sonríe levemente y empiezan a comer en silencio hasta que Chan decide romperlo — ¿de qué color debería llevar el cabello el día de la boda? ¿Qué traje debería usar? ¡OHHHHH! ¿y si nos casamos en Australia?
Min ríe y se acerca tomándolo de las mejillas.
— Christopher, lo que tú quieras, está bien. Si eres feliz casándonos en Alaska, lo podemos hacer o si te gustaría que hubieran perritos para tomarse fotos también.
—¿PERRITOS? ¿no será ilegal?
—Si lo es, entonces... Podemos buscar perritos de la calle y después hacer una fundación de perritos para que otras personas los adopten.
— ¿En serio? Acepto tu propuesta — chocan los cinco cerrando el trato. Chan toma su cuaderno chismoseando qué ha escrito — Mmm... Esta canción que escribiste suena a un duetoooo.
— ¿En serio?
— Deberíamos hacerlo ¿no? ¿Por qué nunca lo hemos hecho antes? Se escucharía estupendo y a todos les encantaría la canción ¿y si rompemos récords y ganamos premios juntos? — Chan toma sus manos con emoción.
— Suena muy bien— sonríe.
— Trabajaré en la melodía. Tú puedes encargarte del resto de las canciones... Faltan dos días para que JYP las vea y diga si vas a sacar el álbum o no ¿cuántas llevas?
— Unas cinco o siete, aún me falta mucho por escribir. Quiero que sea un álbum muy variado, que cada canción transmita algo diferente— él escuchándola con atención — Gracias, Chris, por ayudarme en esto. Si te soy sincera, tú también eres la fuente de mi inspiración.
— Eres tan bonita y tierna, darling. Ven aquí — la toma de la cintura atrayéndola hacia él con una sonrisa. Min-seong se sentó en sus piernas rodeando su cuello con sus brazos — ¿Quién es la novia y futura esposa más hermosa del mundo? Tú lo eres, Minmin.
Rió cuando le hizo cosquillas levemente.
— Ahora que nos conocemos totalmente el uno del otro, no habrá problema en que duerma en tu apartamento ¿verdad? Podemos hacer pijamadas, darnos besitos, comer pizza, darnos besitos otra vez...
— ¿Besitos así? — lo besa lentamente acariciando su cabello rizado— ¿o así? — deja besos en su mandíbula.
— Los de la segunda opción me gustan más, Minmin — ríe apenado ocultando sus ojos en dos líneas. A Min-seong le encantaba ese detalle de él. Se veía absolutamente adorable.
De pronto, se vieron en la oscuridad cuando se fue la luz. Min se puso de pie buscando su celular para poner el flash.
— ¡Minmin! ¿donde estás? — Chan extendió los brazos buscándola.
— Aquí estoy — ilumina con la linterna— ¿no se perdió nada en la laptop?
— No, por suerte, hago una copia de seguridad de lo que hago cada cinco minutos... A veces se desconecta solo ¿vamos a ver qué pasó?
La castaña asiente. Chan toma su mano para salir y no perderse. Caminan por el pasillo solitario, donde un extraño viento soplaba y el sonido de la noche era lo único que se oía.
— Vamos a ver... Ilumina aquí, mi amor — se agacha abriendo el conducto de luz para revisar. Bajó y subió el interruptor, sin embargo, no volvía la luz — no soy electricista pero creo que algo pasó en el sótano donde están los cables principales.
— Ya deben estar arreglándolo ¿no? Si no, nos hubiesen avisado que no habría luz hasta mañana — Chan siguió revisando a ver qué podía ser. Min-seong se distrajo al ver una sombra de reojo pero no le prestó atención la primera vez. En cambio, la segunda, notó claramente a alguien caminar — Chris... Creo que hay alguien ahí.
— Debe ser uno de los chicos, babe. No te preocupes— se mantuvo ocupado.
Un jarrón se rompe cerca de ellos por lo que ambos gritan del susto echándose para atrás.
— Aquí no hay jarrones ¿o sí? — Chan frunció su ceño. Lleva más de diez años en la empresa ¿Cómo no va a saberlo? Decidieron avanzar para encontrar a alguien y en vez de eso, una luz se encendió al final del pasillo, viendo a una muñeca — okey... Esto ya se está poniendo raro.
—Creo que deberíamos volver a tu oficina.
La luz se apaga de nuevo y se escuchan risas malévolas. Se miran entre sí y gritan corriendo para refugiarse. Se encierran en una de las salas de práctica más cercanas, la cual habían velas alrededor.
— ¡Oh my gosh!
— ¿Llamamos a los chicos?
— ¡Probablemente ni siquiera crean que hay un demonio malévolo que nos persigue, Min!
Se callan al oír una respiración. Iluminan al fondo de la sala encontrando a una mujer con cabello negro cubriendo su cara y un vestido blanco.
— ¡AAHHHHHHHH! — intentan abrir la puerta pero esta no cede.
— ¡NO MAMES, PINCHE MIERDA! ¡ÁBRETE! — Min-seong patea la puerta con fuerza. Personas aparecen de repente con túnicas negras y máscaras
— ¡La secta que se llevó a Hyunjin, VIENEN POR NOSOTROS, NOOOO! — Bang Chan se pone las manos en la cabeza aterrorizado— ¡déjennos ir, por favor, les pagaré! Tengo mucho dinero ¡LES PAGO!
— ¡Lo que quieren es nuestra alma, Christopher!
— ¡Mi alma es muy pura para ustedes, no la querrán, créanme! — Min-seong se cansa y prepara los puños para pegarles en la cara. Todos se acercaron corriendo a ellos — ¡AHHHHH!
Se detuvieron repentinamente echándose a reír mientras volvía la electricidad.
— ¿y la muerte? — se pregunta Chan confundido.
De las túnicas, aparecen los perdidos riéndose a carcajadas. Hyuna se arregló el cabello uniéndose a sus burlas.
— ¿Pero qué... ¿WHAT THE HELL? — Chan frunce su ceño enojado—¿Acaso están locos? ¿No vieron que casi nos morimos de un infarto?
— Sí, no hay que hacerles una broma a los viejitos o los vamos a matar del susto — se burla Changbin tirado en el suelo sin aguantar la risa.
— Menos mal y grabamos todo.
— ¿QUÉ?
— ¡Sí! Lo subiremos al próximo SKZ-CODE, se hará viral en toda Corea. Seguramente nos den un premio por la mejor broma del país — Hyuna les muestra el video.
Min-seong los miraba sin nada de gracia. No sabía ni qué decir. Chan, por su parte, se puso a perseguir a los chicos por toda la sala gritándoles. La luz se apagó nuevamente
— ¿Es otra broma o qué? — dice la castaña molesta.
— Ya acabó nuestra broma... — todos se mantienen callados. Los televisores se encendieron y se juntaron en una esquina con miedo — ¡les juramos que eso no tiene nada que ver con nosotros!
— ¡Llévensela a ella! ¡MERECE UN CASTIGO POR DISTRAER A NUESTRO LÍDER! — Minho jala del brazo a Min-seong ofreciéndola como carnada.
— ¡Oye! — se queja Bang Chan regresando a su novia a su lado.
Sueltan gritos y maldiciones cuando la puerta se abre. La luz vuelve y hacen silencio al ver a JYP mirándolos con confusión y cringe.
— ¿Qué hacen aquí a esta hora, eh? No había luz porque se dañó en la primera planta. Chan, te dije que no te quedaras hasta tarde — regaña.
— ¡Lo lamento! Es que... Estábamos grabando un nuevo episodio de SKZ-CODE y se nos fue el tiempo.
— Vayan a descansar. Es tarde. No quiero ver a ninguno gritando así a esta hora ¿entendido?
— ¡Sí, señor!
El jefe se retira— Tanto grito me dió hambre ¿Quieren pollo frito? No pudimos cenar porque nos la pasamos planeando la broma— ofrece Hyunjin y se acerca dándole unas palmadas a su amigo en el hombro — ¡pagará Chan! Después de todo, nos ofreció dinero
— Otro día, en casa hay pizza, coman eso. Min-seong y yo ya hemos cenado, nos iremos a casa ¡goodbye!
Salen de la sala con los regaños del líder a sus compañeros y Min-seong regañando a Hyuna por esa imprudencia mientras los perdidos se quejaban del hambre.
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