Tae Hyung mantenía su mirada en Jung Kook quién estaba frente al espejo esa mañana terminando de vestirse para comenzar el día. No había pasado el suficiente tiempo para que el mayor aceptara su realidad sin sentir asco en el proceso, pero parecía haberlo hecho frente a su novio para que este dejara de preocuparse.

-¿Estás bien? -preguntó con una mirada aún preocupada.

-No es necesario que lo preguntes, lo estoy.

-Estoy preocupado por ti... -vio a mayor acercarse a él, sus ojos se encontraron con cariño, podía entender su preocupación-. Papi...

-Estoy bien. Anoche no fue mi mejor momento, no estaba de esa manera por tristeza y sé que lo sabes. Estoy harto de él, todo lo que hace es un mierda, pero estar contigo... tenerte conmigo me ha tranquilizado más de lo que creí -sus manos acunaron las mejillas del menor-, no te preocupes -dejó un pequeño beso en sus labios antes de abandonar el dormitorio.

Tae Hyung que se mantenía desnudo entre las sábanas suspiró antes de caminar al cuarto de baño. Le seguía preocupando lo que pudiera suceder ahora, estaba seguro que, aunque Jung Kook lo negara seguía afectado por la noticia que entre lágrimas de rabia le confesó.

Se había aparecido en el comedor cuando encontró al mayor en una llamada en su celular personal y por su tono de voz sabía que algo malo estaba sucediendo. Tomó asiento junto a él curioso por saber que estaba ocurriendo, pero no hubo mucho tiempo para hablar -Necesito que te vayas a la oficina sin mí... -había dicho cuando colgó la llamada-. Nam Joon está en el hospital... Dae Jung intentó matarlo anoche -sus ojos se abrieron con sorpresa sin creer lo que estaba escuchando, pero Jung Kook no se quedó más tiempo para explicar a detalle.

Necesitaba estar ahí, ahora era parte del plan, al igual, que era informarle a Jackson sobre lo que estaba sucediendo, por supuesto no lo tomó bien. La sala de espera estaba casi vacía, iba a esperar que Hye Jin regresara de hablar con el médico, pero fue inevitable ignorar a Jackson por mucho tiempo. Sus miradas se encontraron, solo eso bastó para que el mayor se lanzara sobre él y lo golpeara sorprendiendo a Jung Kook.

-¡¿Qué carajo estás haciendo?! -gritó al levantarse de la silla para evitar un conflicto mayor.

-¡Qué no soy imbécil! ¡Se lo dijiste!

-¡¿Crees que se lo dije?!, eso es estúpido, te dije que era cuestión de tiempo, además, todos en la fiesta los vieron irse juntos, ¡suma dos, más dos!, nunca le haría daño a Nam Joon, pero estoy seguro que eso a Dong Hae no le importa -Jackson presentía que mentía, pero tenía un buen punto, solo era cuestión de tiempo para que el padre de Nam Joon supiera de su relación con lo poco cautelosos que estaban siendo este último tiempo.

-Mierda Jung Kook -gruñó antes de seguir maldiciendo. Jung Kook podía darse cuenta que su medio hermano no estaba pensando en lo que hacía, y que su actitud no era la misma cuando se trataba de Nam Joon, era la mejor carta que podía jugar a su favor si quería asegurar lo que estaba por venir.

-Siempre te lo he dicho, pero puedes encargarte mientras él está aquí, voy a cuidarlo, tú y yo sabemos cómo arreglar este problema.

Jackson chasqueó la lengua con fuerza -Nam Joon no me lo perdonaría. Aunque tenga motivos y una buena estrategia, lo sabrá... ese hijo de perra levantará una guerra contra mí, eso terminará así, con uno de los dos muertos y no estoy dispuesto a dejarlo solo. Necesito... mierda, necesito que lo cuides mientras no pueda estar aquí -Jung Kook asintió-. Por esto... estoy dispuesto a ayudarte con el jodido Dong Hae, pero necesito que él esté bien.

-Jackson... estuve pensando en... lo que dijiste anoche -el mayor levantó su mirada hacia su medio hermano-. Me uniré como mi muestra de lealtad, porque cuidar de Nam Joon no es una moneda de cambio, lo haría sin ningún precio -Wang no dijo una sola palabra. Su propuesta había sido muy clara esa noche, la única forma en la que podrían aliarse de alguna manera con su medio hermano era uniéndose a la organización Wang.

Las heridas físicas de Nam Joon estaban mejorando con el tiempo, pero eso no era su mayor problema, Jackson se había ido hace dos semanas rumbo a Italia por trabajo según lo que había dicho, aunque en todo ese tiempo no recibió ni un mensaje suyo.

A pesar de amar a Jung Kook y agradecerle por cuidar de él, lo que más estaba deseando era regresar con Jackson. No sabía nada de su padre afortunadamente, podía dejar volar su imaginación y pensar lo peor. Pero las voces de Jung Kook y Tae Hyung discutir por los pasillos de la casa se había vuelto recurrente en esos días.

-Te di una orden.

-¡He dicho que no!

-No estoy para estas discusiones, harás lo que digo y se acabó, Tae Hyung.

-No es cómo funciona. A mi padre le perdono la paranoia, pero a ti no ¿Por qué quieres tenerme con guardaespaldas otra vez?

-No es paranoia, es por tu seguridad y los tendrás quieras o no. Tu padre y yo hemos quedado en eso, aunque respetamos tu opinión del tema, justo ahora no es cuestión de respetarla, es por tu seguridad y nuestra tranquilidad.

-Quiero un motivo.

-No lo tendrás, entre más alejado estés de todo el asunto es más conveniente.

-Has estado actuando extraño últimamente... ni siquiera quieres decirme por qué no te vas a casa conmigo después del trabajo...

-No mezcles los asuntos.

-Entonces admites que tus llegadas tardías y mis guardaespaldas no tienen relación... -Jung Kook le dio una mirada firme-. Responde si me equivoco.

-Y no te equivocas, me quedo trabajando.

-¿Puedo saber en qué?

-No puedes -su boca se entreabrió por un par de segundos.

-Está bien -mencionó tomando rumbo a la habitación. Jung Kook prefirió darle su espacio, no era el mejor momento para hablar de su alianza con Wang y mucho menos con lo que había sucedió cuando Jackson declaró frente a los altos rangos de sus hombres a Jung Kooki como su segundo hombre de confianza. No había resultado bien, además que enterarse de que Dong Hae es su consigliere, esto resolvía algunas de sus dudas.

Habían pasado algunos días sin tener muchas noticias, le escribía a Jackson mientras entraba en su oficina de la casa, pero la presencia de Tae Hyung le hizo guardar el móvil -¿Qué sucede? -cuestionó al cerrar la puerta y acercarse a su novio.

-No lo sé, ¿qué te sucede a ti?, ¿por qué llegaste temprano hoy?

-A veces no se puede saber todo, Tae Hyung.

-No estoy de acuerdo con esa opinión, desde lo de tu papá... tú...

-¿Yo qué? -murmuró al mirar sus ojos tristes-. Dilo -sus manos tomaron su rostro, Tae Hyung suavizó su expresión con su suave tacto, lo necesitaba, pero había estado distanciado por todos los problemas que atravesaban.

-Ocultas muchas cosas.

-Lo hago porque te estoy protegiendo.

-No te creo...

-Necesito que me creas, te lo diré cuando sea el momento. Me lo dijiste una vez.

-Y no sé cómo soportaste... -sus labios se tocaron suavemente entre sí, pero sin profundizar-, porque no lo soporto... -un dulce hormigueo jugó por su espalda baja, cuando la boca del mayor consintió su sensible cuello.

-Hay algo más que quieres decirme, pude verlo en tus ojos.

-Te extraño... ¿y tú... me necesitas todavía?

-Por supuesto lo hago. Te deseo, pero te he dado espacio.

-No quiero más espacio... -gimió al sentir una leve mordedura sobre la piel de su cuello. Se había pegado más a su cuerpo buscando fricción entre sus miembros-. Jung Kook... -el mayor sonrió tomando a su novio de la cintura hasta dejarlo sentado sobre el escritorio.

-¿Qué sucede cariño? -vaciló antes de tomar sus labios en un suave beso-. ¿Quieres mi polla? -sus ojos chispeantes confirmaron su deseo. Una leve caricia por su mentón que dio pasó a tomar el cuello del menor en su mano-. Quiero escuchar una respuesta, Tae Hyung.

-Sí...

-¿Sí qué? -cuestionó bajando los pantaloncillos de seda que usaba el rubio.

-Sí papi... -había jadeado al dejarse caer hacia atrás del escritorio, tocando la fría madera con su espalda vestida, sus piernas ahora desnudas y abiertas esperando lo que necesitaba.

El mayor besó de sus muslos, tomándose tiempo para apreciarlo y siendo consciente que él había roto varias partes del contrato al mantenerse alejado, pero esas semanas estaba en realidad ocupado con el tema de Jackson, la repentina desaparición de su hermano Tae Min otra vez y del hecho de ahora enterarse que en realidad es su primo y no su hermano, además del plan que estaba proyectando con Yoon Gi sin que Tae Hyung lo supiera.

Su lujuriosa boca llenó el sentimiento de falta en Tae Hyung. Apretó el borde del escritorio intentando no correrse por el sexo oral que estaba comenzando, apenas segundos y sentía el peso de las semanas desvanecerse. Escucharlo gemir de alguna forma lo había tranquilizado, le había recordado que todavía estaban juntos. Succionó su miembro con fuerza mientras sus dedos lo preparaban, podía sentir las piernas débiles con cada segundo, era lento en sus acciones y pensó, «¿me castiga por retarlo?», acarició los cabellos del mayor.

-¿Tortura sexual de castigo? -jadeó. Levantó su mirada dejando salir el miembro de su boca que goteaba con su néctar.

-¿Crees que es un castigo?, solo disfruto lo que más me gusta -su caliente aliento acarició su polla que seguía a centímetros de su boca.

-Creí que tendrías prisa... -comentó escuchando el móvil del mayor timbrar por segunda vez.

-No ahora y lo siento por todo -Tae Hyung gimió arqueando su espalda al sentir el calor y humedad de regreso, mucho más fuerte de lo que esperaba, sentía que jugaba con su mente. Terminó corriéndose en su garganta para después probarse en un dulce beso-. Espérame en la habitación cariño, quiero hallarte solo con tu collar puesto y tu anillo, ¿sí, hermoso?

-No quiero -retó lujurioso al mirar sus hermosos ojos verdes.

-No me hagas repetirlo y obedece -se había estremecido por su voz dominante y la jodida nalgada que resonó en la habitación. Le entregó sus pantaloncillos, quien obedientemente se los puso antes de abandonar la oficina-. Habla Jeon -respondió sin esperar demasiado tiempo a estar solo.

-Creí que me equivoqué de número -una leve sonrisa se levantó de la comisura de sus labios al escuchar la voz de Chung Ha detrás de la línea.

-No lo has hecho ¿Ya quieres hablar?

-No entiendo lo que sucedió... un día parecía que tú y Jackson se iban a matar y al otro ya eres parte de la organización, pero ahora que estamos del mismo lado... no puedes dañarme.

-Nunca ha sido mi intención, sabe perfecto lo que quiero de usted y será mejor que no juegue conmigo, no soy de tener paciencia.

-Acepto hablar con usted, pero debe ser bajo mis reglas. Debe ser en un hotel, no en el suyo. Mañana a las veintidós. Tiene que haber testigos si amanezco muerta al día siguiente -Jung Kook sintió para sí mismo.

-Está bien, envíame la dirección y nos veremos ahí. Quiero estar a solas.

-Lo mismo digo.

Jung Kook pudo escuchar pequeñas pisadas alejándose de la puerta. Esperó un par de minutos, sabía que Tae Hyung estaba preocupado por su actitud, ¿cómo no estarlo?, le volvería a mentir mañana por la noche.

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-: ✧ :-゜・．FairyWinB