17 | De nuevo juntos

Luna no sabía que hacer, había entrado en un estado de trancé por lo que sus ojos acaban de presenciar.

— Mami vamos afuera — repetía Sol, preocupada por el gesto de su madré.

Sol como toda niña, no sabia que pasaba, nisiquiera imaginaría que ese tipo era su abuelo.

Luna con la vista fija siguio a Sol.

— ¿Señorita? ¿Señorita? — repetia el doctor afuera, pero en un segundo Luna volvio a poner los pies en la tierra.

— ¿Sí? — fue lo unico que se le ocurrio decír.

— ¿Conocen al señor Bernie? — pregúnto el doctor.

— ¿Ústed sabe el apellido de ese doctor? — pregúnto Luna, jugando el cabello de Sol.

— No tengo la minima idea señorita, nunca responde nada, ¿Usted sabe de que familia es? — el doctor parecía intrigado, muerto de la curiosidad.

— Es Bernie Bensón... — Luna suspiró — El esposo de Lili Bensón — a Luna se le cristalizarón los ojos — Mi padré.

El doctoe abrío los ojos como platos.

— ¿Nunca lo buscarón?

— Toda la vida pensamos que estaba muerto, no tenia idea que estaba en New York, en este lugar — Luna cambío su aspecto — En fin, ¿Lo puedo llevar?

— Mamá — gruño Sol — lo dices como si fuera un par de zapatos.

Ambos rierón, luego Lili salío.

— Necesitas hablar con el — dijó saliendo de el cuarto.

Luna temerosa entró, camino hasta el sofa, se sento frente a el, y no pudo evitar abrazarlo.

— Pensé que la pequeñita era mi hija Sol — dijó Bernie con los ojos poco inchados — Pero es mi nieta, ¡mi nieta! Soy abuelo y nisiquiera lo sabía, es tan igual a tí.

— No tengo palabras para expresarte todo lo que siento en este preciso momento, todos pensamos que estabas... Muerto.

— Hací pensé de ustedes, pensé que las habia perdido, pense que habia perdido a mi Sol, y ahora tengo mi Sol y mi Luna.

— Devemos regresar a casa, tienes que estar de nuevo con tu familia — dijó Luna entusiasmada.

— ¿a Buenos Aires? — pregúnto Bernie.

— Antes iremos a la mansión de Cancún, en Mexico — Luna sonrio.

— ¿Mexico? ¿Mansión? ¿Cancún? — pregúnto Bernie.

— Una mansión que compro Sharón, hace casi ocho años.

— Sharón — dijó Bernie con asco, — Sharón Bensón.

— Te has perdidó de muchas cosas papá, demasiadas, y solo las sabras si aceptas irte con nosotros.

Berníe lo penso, dudó, pero al final asintío.

Luna bajó dondé estaban todos, Lili ya había informado lo que acababa de ocurrir, ahora solo esperaban a Bernie.

— Lo escucho y no lo creeó, ¡Tu padré vivo! — repetía Matteo.

— Sigo sin creerlo también — dijó Luna siguiendo a Matteo.


(...)


— ¿Que pasó con Sol?,—  pregúnto Luna sentada en la cama de Matteo.

— Nisiquiera yo sé, desperto ardiendo en calentura, llorando, decía que el cuerpo le dolía, no sabía que hacer, me desesperé — dijó Matteo sentado en el sillón de enfrente — y tú, ¿como sabias que pasaría esto que llegastes... A tiempo?.

— Me llamarón, de tu celular — Luna trago saliba— Anna.

— ¿Qué? — Matteo se paró de golpé — ¡Anna sabía esto!

—Sí, ella me marcó de tu celular.

Matteo aceleró el paso y bajó al primer piso, Luna le gritaba que se detubiera pero era inutil.

— ¡Anna! — gritó Matteo buscandola por la casa.

— Matteo calmaté — repetía Luna, pero sus palabras nadamas eran bateadas.

— ¿Que pasá? — pregúnto Anna entrando de el jardin con Sol en la mano.

— ¡Tu sabias que algo le pasaría a Sol! Y no me dijistes nada.

Anna quedó estatica, Sol vío a Anna y no entendía nada.

— Yo... — Anna no sabía que hacer.

— Matteo, ¡calmate! Sol esta bién, y eso es lo que importa — dijó Luna.

— ¿Que sabias que llamastes a Luna?— pregúnto Matteo molesto— ¿acaso tu hicistes que Sol se enfermara?

— ¡Claró que no! — gritó Anna— ¡Jamas haría eso! No fui yo.

— ¡Entonces la enfermedad fue ocasiaonada! ¿Quién fue? — dijó Matteo molesto.

— Su noviesita, Julyanna.

— ¿Que? — gritó Matteo, Luna no reacciono de otra manera pues Anna ya le había dicho.

— Lleva a Sol lejos de acá, al parque, no sé — dijó Luna para seguir a Matteo que subia a su recamara totalmente enojado, queria matar a July.

— ¡Matteo porfavor calmate! — griró Luna subiendo las escaleras, Matteo se quito la playera que llevaba y la avento.

—¡Luna, porfavor, vete de acá! — repetía Matteo mientras se recargo en una mesa con ambas manos e intentaba calmarce.

Luna seguía insistiendo, Matteo seguía histericó.

No sabía que hacer para que Matteo se tranquilizara, no quería que hiciera un gran problema contra su "novia" según July.

Luna sabía que podía calmarló, pero tenia miedo que despues ni ella misma pudiera controlarce, sabia que caería como loca.

Pero el que no arriesga no gana, intentaria controlarce en cuanto Matteo se serenara.

Camino hacia atras y disimuladamente puso llave a la puerta, suspiro y mientras Matteo hablaba lo tomo por sorpresa, se puso de palillas, enredo sus manos en su cuello y le dió un beso tremendamente apasionadó.

Al principio Matteo no sabia que pasaba, pero en cuanto vío que su chica lo besó, no dudo en seguirlé, con ambas manos rodeo su cadera, y quería comercela.

Luna no pudo resistircé, muchi menos cuando sus manos empezarón a bajar por la espalda desnuda de Matteo, Luna se estremecia cada vez mas.

Caminarón sin parar de besarcé hasta la cama, donde Matteo avento a Luna para luego recargar sus manos en la cama y seguir besando a su chica.

Luna ahora no tenia el contro de sus sentidos, no sabia como actuar, estaba muy exitada sin nisiquiera tener roses.

Matteo un poco temeroso metio sus manos bajo la espalda de Luna, sin dejar de besarla, busco el cierre de su vestido y cuidadosamente lo bajaba, esperando que Luna no lo frenara.

Tenia miedo de que Luna reaccionara mal.

Pero no fue hací.

Luna alzo su espalda un poco dandolé mas facilidad a Matteo de desprender su vestido.

Y hací lo hizó.

Luna solamente estaba en ropa interior, y ahora era el turno de ella.

Dejó de besar a Matteo, y el pensó que se tomaria su vestido y se iría, pero no era hací, empujo a Matteo hasta dejarló paradó, ella se sento en la cama, vío a Matteo y luego quito el cinturón de su jeans, luego desabrocho el pantalón de Matteo, y el se encargo de el restó.

Ambos siguerón besandosé ya con poca ropa.

Pero llegaría el momentó.

Matteo bajó sus besos al cuello de Luna, y busco el broche de su sosten, y cuando lo encontro se deshiso de ellos, luego bajo sus besos hasta los senos de Luna, haciendo que esta estremeciera demasiadó.

Tanta era la tentación que Luna empujo nuevamente a Matteo, poso sus dedos alrededor de su cadera y bajó la ultima prenda que le quedaba a Matteo, dejando ver a su amigo erecto y listo para ella.

Luna no pudo evitar tocarlo, para luego subir a los labios de Matteo.

Matteo en el momento que pudo, bajo las bragas de Luna, la acosto en la cama si dejar de besarla, con ambas manos entreabrio las piernas de Luna, y se acomodaba para lo que ambos deseaban.






No se lo esperaban verdad jaja.
No soy buena escribiendo estas cosas, no se burlen jaja.

No se olviden votar, y dejar sus comentarios de alguna opinion de algo que quieren que suceda.

Sigo sin creer que escribi eso jajaja

Pero bue.

No leemos luego. Chau.

VOTEEEEN💕

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