Libro Viejo
Estaba muy sucio
Lleno de polvo, hongos y ácaros.
Mis hojas, con el pasar del tiempo, estaban todas agujeradas llevaba incontables días sin ser abierto
Siempre en la cima del estante más alto
Hasta que...
Me encontraste.
Me miraste con sutileza y
Y me tomaste
Limpiaste cada parte de mi estructura,
Desdoblando mis hojas,
Haciendo ver mejor mi compostura y
Leías y releías cada parte de mi,
cada letra, cada palabra, cada verso; párrafo y texto
Como si no hubiera mejor trama
que la que vivíamos en aquellos instantes
Era reconfortante saber que cada día sabias más de mi y yo veía cada gesto y pensamientos en voz alta sabiendo más de ti.
Hasta que... Llegamos a una etapa en que no me entendías, no captabas el mensaje entre líneas que tenía, y yo
No compendia porque no hablabas para mi, ni hablabas de mi. Y me dejaste.
Un día, una polilla de libro, contó el rumor que entre el polvo y los hongos se escuchaba:
Que habías encontrado a uno mejor que yo.
Uno más predecible,
con mejor portada, y una perfecta sinopsis.
Con palabras menos desconocidas y cero de ideas secundarias.
Uno con hojas nuevas y frases más ordinarias
Uno con una trama sin misterio,
uno feliz, sin muertos ni cementerios.
Me dijeron que eras Feliz con él, incluso más que conmigo.
Me dijeron que lo conociste perfectamente. Tanto que de mi te olvidaste.
Y yo en mi estante
te vi, entrar, te vi mirar, te vi pasar, te vi alejar; te vi con otro, y otro, y otro diferente. Una, y otra, y otra vez.
-Moriré de viejo.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top