🧬 RIDE OR DIE !
seventy—four; hogar dulce hogar

Desde que llegó Hershel, Max ni él se han despegado ni un minuto, ambos niños iban juntos a todos lados y Maxi era quién le enseñaba algunos lugares de Alexandria.

Ver a ambos niños me trajo muchos recuerdos... Recuerdos muy lindos con Glenn, han pasado diez años desde que él y papá se han ido, y parece que fue ayer cuando estábamos en aquella formación esperando que uno de nosotros muriese. No solo fue uno, Negan se llevó a los dos.

Meneé ligeramente mi cabeza para dejar de pensar en eso y poner atención a Maggie y mamá que cargaban a la pequeña. —¿Ya tiene nombre? —preguntó mi madre, mirándome con curiosidad.

Negué, tomando asiento a un lado de ellas. —Decidir el nombre de Max nos tomó un par de semanas, no creo que sea diferente esta vez.

—¿Crees que Max tome bien esto? Ahora tiene otra hermana —el tono de voz de preocupación en Maggie me hizo dudar un poco.

¿Max se negaría a tener otra hermana? La verdad, no lo creo, no reaccionó mal cuando se enteró que iba a tener un hermanito, pero las circunstancias son diferentes.

—Espero que se lo tome bien —musité, no tan segura.

Hubo en pequeño silencio que fue interrumpido por las risas de las niños que se correteaban por toda la calle, Judy y Hershel perseguían a los demás haciendo que sus risas se incrementaran cuando Max cayó encima de Hershel quedando los dos riendo en el césped.

Maggie y yo nos mirámos con una sonrisa al ver a nuestros hijos divertirse juntos. —Desde pequeña Max se parecía a Carl, pero ahora que ha crecido es su viva imagen, te juro que parece que estoy viendo al pequeño Carl que alimentaba pollitos en mi granja —habló Maggie, con una sonrisa nostálgica en su rostro.

Reí al imaginar a Carl de granjero. —Me ofende que se parezca más al padre cuando creció dentro de mí.

—Los genes Grimes son fuertes.

—Déjame ver si entendí... Dicen que ella —Max señaló a la bebé que cargaba Carl —va a hacer mi nueva ¿hermana? ¿Es en serio?

Mi ojiazul y yo nos mirámos con preocupación, ¿se lo tomó mal?

—¿Estás molesta, cielo? —preguntó mi esposo con preocupación.

El suspiro de Max nos hizo preocuparnos, ella cerró sus ojitos mientras fruncía los labios buscando que decir. —Está bien. No tengo problema, es linda.

—Entendemos que es algo difícil aceptar esto pero... Espera ¿dijiste que está bien? —mi esposo interrumpió su discurso emotivo cuando se dio cuenta que Max no tenía ningún problema con la bebé.

Nuestra hija asintió, levantándose del sofá. —Entiendo un poco las cosas... Ella no tenía unos padres cuando la encontraron y ahora ya tiene al mejor papá y a la mejor mamá del mundo, y claro, a los hermanos más geniales.

Carl y yo nos miramos para sonreírle a nuestra hija con ternura. Jalé un poco la manita de mi pelirroja para atraerla hacia mí, abrazándola con fuerza. Al separarnos Maxi se acercó a su padre para ver de cerca a la bebé y con curiosidad acariciar la mejilla de la pequeña con suavidad.

Aviso, moriré de ternura.

Mi niña ya está creciendo.

—Tú padre y yo solíamos estar aquí la mayoría del tiempo —murmuré, abrazando los hombros de Hershel. Ambos nos encontrábamos sentados en el porche de la casa que solía ser de los Rhee.

El pequeño me miró con un brillo en los ojos y una sonrisita en sus labios. —Tía Nyd... ¿Puedes hablarme más de mi papá? Por favor...

Lo miré con ternura, sonriendo al recordar a Glenn. —Tu padre era una de las personas más increíbles de este mundo... Tenía un corazón tan puro y siempre ayudaba a las personas que lo necesitaran. Era alguien que quise con todo mi corazón, era como un hermano para mí...

De reojo pude ver como Hershel bajaba la mirada con una pequeña sonrisita en sus labios. Mi corazón se rompió al ver la ilusión que él tenía cada vez que hablaba de su padre.

—Desearía que mi papá estuviera aquí —musitó con la mirada perdida, abrazando sus rodillas apoyando su mentón sobre ellas.

Glenn, daría todo para que hubieras conocido a Hershel.

—Los tres ya están dormidos —habló mi esposo entrando a nuestra habitación refiriéndose a nuestros hijos. Él se tumbó a la cama como tronco y una vez acostado me abrazó por la cintura recostando su cabeza sobre mis muslos —. Yo veré esta noche a la bebé y a Glenn, tú descansa.

Fruncí levemente los labios. —¿Seguro?

Él asintió. —Necesitas descansar, amor.

—También tú —murmuré, acariciando su cabello con suavidad.

Carl no dijo nada más, dando a entender que ya andaba desmayándose de sueño y solamente se quedó quieto respirando con pesadez. Vuelvo a repetir, como tronco. —Yo cuido esta noche a los niños —dije en un susurro, dejando un beso sobre la cabeza de mi esposo.

Mi ojiazul hizo un ruido de desaprobación. —No puedo permitir eso, el doctor dijo que tienes que descansar.

—Lo sé, pero... —me interrumpí para tomar aire y buscar las palabras adecuadas para lo que quería decir —Sé que no podré descansar por lo que hicimos. Me he estado convenciendo a mí misma que fue la decisión correcta... Los gritos aún están en mi cabeza, y lo único que no me hace perder la poca cordura que me queda es que lo hicimos por nuestra familia. Ellos mataron a Enid, Tara, Siddiq, a Henry... —mis ojos se llenaron de lágrimas sintiendo el nudo en mi garganta que me impedía decir otra palabra.

Carl se levantó para abrazarme con fuerza, lo único que pude hacer fue aferrarme a su torso con fuerza dejando que las lágrimas cayeran y los sollozos aparecieran.

—También los escucho... Los gritos... Pero yo no me arrepiento, no puedo arrepentirme. Ellos mataron a nuestro hijo, debían pagar por eso... Se lo merecían —la voz de Carl no reflejaba ningún tipo de resentimiento.

—Mamá, debemos ponerle nombre a la bebé, ya me cansé de decirle "La bebé".

Los quejidos de Max hizo que Carl y yo riéramos, dándole la razón. —Tienes razón, rojita. ¿Qué nombre propones? —preguntó mi esposo, alzando en brazos a nuestra hija.

Nuestra hija se quuedó en silencio, pensando un poco. —La ardilla de mi cabeza no procesa nada.

Todos reímos por su comentario.

—Bueno, dile a esa ardilla que cargue más rápido —respondí con diversión, encogiéndome de hombros a lo que ella me sacó la lengua y yo hice lo mismo.

Carl nos miraba con burla a ambas, negando con diversión. —Ustedes son un caso pérdido.

Mi hija y yo volteamos a verlo indignadas, Max se abalanzó hacia su padre haciendo que Carl perdiera el equilibrio y cayera al suelo con nuestra hija encima de su pecho riendo a carcajadas por el rostro que hizo mi ojiazul al caer, me fue inevitable reírme al ver como mi esposo apoyó su cabeza en el piso con rendición y sacaba la lengua derrotado.

—¿Madeline? —preguntó mi hija después del silencio que se había formado.

Carl y yo nos mirámos con confusión para mirar a nuestra hija de la misma manera. —¿Qué? —preguntámos al unísono.

—Madeline, que se llame así la bebé —dijo Max con una sonrisa de oreja a oreja en su rostro —. Suena bonito y la podemos llamar Maddie de cariño.

—Suena bien, ¿qué opina la señora Grimes? —habló mi esposo, mirándome con burla por como me había llamado.

Sonreí, acercándome a mi esposo e hija para tomar las mejillas de mi pelirroja. —Suena perfecto, Max —musité, dejando un ruidoso beso en la mejilla de mi hija.

—¿Y para mí ya no hay beso? —preguntó Carl, cubriendo su rostro con sus manos fingiendo llorar.

Reí con burlas, acercándome a él para quitar sus manos de su rostro y acercarme a besar sus labios con suavidad. —Eres un drámatico —murmuré en sus labios una vez que nos separamos.

—Así me amas.

────── (🪐) AUTOR'S NOTE

memes time ¡!

spoiler del próximo capítulo ¡!

Nyd & Negan memories 🏃🏽‍♀️🏃🏽‍♀️

diivolved ♡