Sábado, 10:37 a.m, 2007

—¿a que hora llegaran?—

Pregunto Wally molesto e impaciente

—a las dos—

Respondiste en voz baja mirándolo algo confundida

—saldré un rato, regresaré por la noche—

Suspiro molesto y tomó su suéter sin almenos mirarte

—si claro ve con... — no terminaste hablar el ya había salido de la casa dejando te sola —cuidado...— murmuraste aún que claramente el ya no te escuchaba

—ya me arrepentí de invitarlos—

Murmuraste sentandote en el sofá, mordias suavemente tu uña del dedo gordo con algo de ansiedad

3:00 p.m

Tus pensamientos fueron interrumpidos tras escuchar el timbre sonar, te pusiste de pie caminando a la entrada

Abríste la puerta con una sonrisa

—Hola Yoel—

Hablaste tranquila

—¡hola! ¿Arail aún no llega?—

Parecía muy emocionado y entusiasmado

—no, pero pasa y lo esperamos—

Respondiste haciéndote a un lado para dejarlo entrar, el entró con una sonrisa

—bueno, ¿que tal si empezamos con el trabajo?—

Preguntaste mientras ambos se sentaban en el suelo sobre la alfombra frente a la mesa de centro, Yoel aceptó con una sonrisa

—Arail ya se a tardado mucho—

Dijiste con algo de preocupación

—¿Por que no lo llamas?—

Dijo acercándose un poco más a ti, tomaste tu teléfono para llamarlo pero jamás contesto, siempre respondía un "el número que usted marco no existe"

Miraste tu teléfono algo confundida, suspiraste y le enviaste un mensaje, dejaste tu teléfono sobre la mesa, el rose de la mano de Yoel en la tuya te saco de tus pensamientos

—oh, lo siento—

Dijo con una sonrisa, frunciste el ceño y quitaste tu mano cruzando los brazos sobre la mesa

—no importa—

Volviste tu mirada al trabajo, pero la mirada de Yoel estaba sobre de ti haciéndote sentir incómoda

—eres muy linda sabes—

Susurro cerca de ti deslizando sus dedos por tu hombro

—ah, ¿gracias?—

Respondiste alejando te un poco de el

—¿te lo han dicho antes?—

Pregunto con una sonrisa coqueta

—si, hay alguien que me lo recuerda cada mañana—

Respondiste con una sonrisa mirándolo con desagrado

— a pero ¿tienes novio?—

Arrastró las palabras y fruncio el ceño claramente molesto

—tal vez—

Respondiste con fastidio

—eso es un si, ¿podria saber quién es?—

Era insistente, su mano se poso en tu hombro

—¿por que tanto interés?—

Preguntaste fruncienso el ceño y rodando los ojos

—curiosidad—

Susurro, el ambiente se llenó de tensión, tus ganas de golpearlo solo aumentaban cada vez más

Finalmente la tensión se rompió con el sonido del timbre

Lo empuja ste y te pusiste de pie para abrir la puerta

—¡al fin llegue! Ahh, ya me había perdido, había unos vagos en la esquina de hace dos cuadras y crei que me acuchillarian—

Hablo rápido y agitado, estaba sudando por haber corrido, resiste suavemente

—ya pasa—

El suspiro y entró, cerras te la puerta detrás de el

—¿como es que te perdiste?—

Preguntaste con curiosidad y algo de burla

—a sí, te decía, había unos vagos en una esquina y uno me pregunto la hora y sali corriendo a otra calle, corrí, corrí, vi mi vida pasar por mis ojos, al final termine en sabrá Dios donde, intente ver la ubicación pero no había red así que pedí indicaciones y bueno, ¡al fin llegue!—

Respondió entre risas, ambos se sentaron para continuar el trabajo

Cada vez que Yoel se insinuaba, Arail interrumpía con algún chiste o incluso sentándose en medio de ambos

6:00 de la tarde

El sonido del teléfono de Yoel interrumpió el trabajo, el se puso de pie para responder la llamada

—debo retirarme—

Dijo con fastidio guardando su teléfono en su bolsillo, se despidió y al fin se fue

—es un fastidio—

Hablo Yoel haciendo una mueca de disgusto

—si, es realmente odioso—

Respondiste de la misma forma, ambos rieron, continuaron con el trabajo mientras pláticaban y reían más tranquilos y animados

8:15 p.m

—¡al fin terminamos!—

Exclamó Arail con eentusiasm, estiraste los brazos ya que los tenias algo entumidos, ambos se pusieron de pie, Arail se despidió de ti y se retiró, suspiraste con más tranquilidad y cuando al fin estaba sola, te sentiste en el sofá algo agotada, cerraste los ojos y te acostaste en el sofá

—me pregunto... ¿Donde estará Wally?—

Murmuraste mientras escuchabas las manecillas del reloj avanzar

9:00 p.m

Te asomabas por la ventana algo preocupada, al darte cuenta de que Wally aún no regresaba a casa, suspiraste con pesar, tomaste un suéter y saliste para buscarlo

Tocaba su insistentemente el timbre de la casa de Barnaby, pero nadie abrió fuiste a casa de Eddie y Frank pero ellos no sabían nada, terminaste en casa de Julie

—lo vi irse con Barnaby pero no se a donde fueron—

Respondió con voz algo adormilada

—bueno, gracias Julie, disculpa por despertarte—

Dijiste algo avergonzada

—¡no te preocupes, siempre es un placer hablar contigo!—

Respondió con una sonrisa, se despidieron, suspiraste y pasaste por la casa de Poppy quien tampoco sabía nada, Honda dijo que Sally les había visto antes, fuiste a casa de Sally

—¡si! Lo vi en la plaza por la tarde, pero no se a donde hiban exactamente—

Dijo con una sonrisa, agradesiste y te retiraste de regreso a tu casa

11:24 pm

El seguía sin aparecer, estabas algo preocupada, permanecías sentada en el sofá grande mientras tratabas de luchar contra el sueño

Las luces estaba apagadas, lo único que iluminaba la sala era la luz del televisior

Cerraste los ojos mientras poco a poco te hundias en el sueño

El sonido de la puerta cerrándose te asustó, te pusiste de pie para verificar si era Wally

—¿Wally?—

Lo miraste extrañada, su ropa estaba algo desaliñada y estaba algo despeinado, incluso parecía que había llorado

—oh, hola presiosa—

Hablo con una sonrisa mientras se tambaleaba

—¿como estas?—

Balbuceo, trataba de mantener el equilibrio, se acercó a ti y te abrazo, el fuerte aroma a licor inundó tu nariz

—que gracioso ha ha ha... todo da vueltas —

Dijo mientras enterraba su rostro en tu cuello, lo ayudaste a mantenerse de pie y lo guíaste hasta el sofá

—tomaste... ¿Por qué?—

Dijiste cruzando los brazos mientras el se acomodaba en el sofá, el miro al suelo

—mal de amores...—

Susurro, suspiraste y antes de que pudiesen alejarte para prender la luz el te sujeto del brazo con cuido, te jalo hacia el suavemente para que no te fueras, le abrazo rodeando tu cintura

—Te amo, te amo tanto—

Repitio en voz baja mientras cerraba los ojos y te abrazaba con fuerza escondiendo su rostro en tu abdomen, lo empujaste tratando de alejarlo

—no, no, no me alejes... por favor princesa... te necesito...—

Susurro suplicante mirándote a los ojos

Estabas algo tensa, el jalo hacia el nuevamente hasta que te tenía en su regazo

—ey! E-espera, sueltame!—

Exclamaste nerviosa, el te abrazaba con fuerza, realmente no quería dejarte ir

—eres... eres princesa, mi querida y adorada linda—

Dijo en voz baja mirándote a los ojos con cariño y una sonrisa

No sólo arrastraba las palabras también las revolvia, lo que te hacia reír, eres como un niño pequeño en busca de atención

—jaja ¿que? Jaja oye espera no hagas eso—

Suspiraste entre pequeñas risas, sintiendo un pequeño escalofrío mientras Wally olía el aroma de tu cabello

Segundos después se separó solo un poco pero lo suficiente como para verte a los ojos

—tu coco huele a cabello...—

Dijo a un con una sonrisa torpe

—pff... ¿Que?—

Comenzaste a reír, el te veía con adoración y un profundo amor

—querrás decir, tu cabello huele a coco—

Dijiste aún entre risas, el ladrón ligeramente la cabeza

—si... eso ha ha—

Respondió algo nervioso, te abrazo con más fuerza  y acerco sus labios a tu oído

—mi amoor...—

Susurro en tu oído con voz ronca

—¿que...? —

Respondiste en voz baja y nerviosa

—ah entonces... ¿Si eres mi amor?—

Dijo con una sonrisa juguetona aún arrastrando las palabras

Te pusiste aún más nerviosa

—¿que? No, no yo no quise decir eso... yo... Ah, calla—

Desvíaste la mirada avergonzada mientras escuchabas su suave risa

—mi amor...—

Lo miraste de reojo, el se acercó más a ti, sus rostros estaban a escasos centímetros de distancia

—como con la mirada—

Susurro y luego retrocedió un poco aún sin dejar de abrazarte

— ¿a sí? ¿Acaso también puedes oler colores?—

Respondiste de forma sarcástica y riendo mientras lo veías a los ojos

—ha ha ha ha... no entendí—

Wally no había comprendidos bien el sarcasmo, resiste de nuevo

—olvidalo—

El te miro aún confundido mientras tu rejas, te abrazo aún más fuerte y te hizo caer en el sofá el quedo encima de ti

—ay, oye, oye, ya basta, quitate, pesas—

Te retorciste ligeramente tratando de huir de sus brazos

— te amo...—

Declaró una vez más, te dio un suave y tierno beso en los labios, se acostó a tu lado, te abrazo con fuerza aferrándose a ti y al fin se quedó dormido

El beso te había dejado sin palabras, sin aliento, con las mejillas coloradas y el corazón casi saliendo de tu pecho

—si no puedes con el enemigo... únete a el...—

Susurraste acurrucandote en sus brazos para finalmente poder dormir

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𝐀𝐭𝐭𝐞: 𝐏𝐚𝐧𝐪𝐮𝐞 𝐝𝐞 𝐙𝐚𝐧𝐚𝐡𝐨𝐫𝐢𝐚ೄྀ