Gulf se queda viendo con horror. Él mira sus manos ensangrentadas. Estas tiemblan. Se exalta. Respirando en demasía. Dejo la bolsa con sus compras caer.

-Amor.- Mew llama desde la ventana antes de alejarse del borde de esta. Corriendo. Iba a vestirse de nuevo al parecer.

Gulf sólo retrocede unos pasos antes de darle la espalda al edificio y se lleva la bicicleta con él. Manchando los manillares de sangre. Se está retirando todo tembloroso cuando el pelinegro sale de las puertas con los pantalones sin cerrar, su camisa blanca puesta, descalzo y su chaqueta formal en una de sus manos.

-Winnie-Poo.- Él llama con histeria en su voz.

El moreno sigue caminando.

-Winnie-Poo.- Mew lo sigue con trotadas para alcanzarlo y al llegar a él, le da la vuelta. Gulf se congela en su lugar. Sus hombros tensos. La mirada baja incluso si tenía gafas de sol.

-No me llames así.- Gulf pide como puede. Temblando. De pies a cabeza.

El pelinegro lo mira con preocupación. Sus ojos cristalizados. -Bebé, no fue mi intención que vieras eso--- Va contando el pelinegro después de haber bufado una risa, pero Gulf lo mira a los ojos. Completamente indignado.

-¿Y si no lo hubiera visto hubieras estado mejor?- El moreno se quita la mano del pelinegro de encima. El pelinegro lo mira con preocupación.

-¿Por qué me defraudas así? Te sigo amando y tú sólo... Me alejas.- Gulf le dice tomándolo de la camisa en el pecho. Con ambos puños.

-Lo menos que quiero hacer es alejarte.- Mew hablaba alzando sus manos para tocarle los cachetes pero Gulf las retira antes de que el pelinegro pueda.

-Si vas a ser un asesino no seré tu cómplice.- Gulf le dice. Quitándose el anillo. -Al menos toma lo que te compre... Es mejor que no nos veamos.- Gulf trata de sonar fuerte. Verse fuerte. Pero esta corrompido. Comienza a sollozar. Le otorga su anillo devuelta entre sollozos.

-Al menos,- Mew toma sus muñecas y ambos se miran. -dejáme tenerte una vez más.

Los ojos de Gulf hacen un lento parpadeo para mirarlo al rostro sin nada qué decir. No sabe qué decir.

-Mew,...

-O le haré daño al portero.- Mew amenaza entre lloriqueos. No quiere herir a su esposo. Y siente que lo está haciendo.

-No te atrevas a tocar a mi amigo.- Gulf amenaza en un fuerte tono aunque suena adolorido.

-Lo sé. Lo siento. Es sólo que... No quiero perderte. No quiero dejarte.- Mew llora. Sus lágrimas humedecen enteramente sus cachetes. Él desesperadamente se balancea de enfrente hacia atrás sujetando las muñecas de su esposo quién cierra sus ojos. Su mentón temblando. Las lágrimas dejando sus ojos. Haciendo su camino a través de toda esa sangre que mancha su rostro. Él voltea hacia su esposo pelinegro.

-Te dejaré tenerme... Una sola vez más. Pero, hasta que no dejes de ser un asesino, no me veas.

«Dios. Soy tan débil. En serio soy tan débil ante él. ¿Por qué? ¿Es porque lo amo tanto?»

-¿En serio?- Mew pregunta todo adolorido. Con lágrimas. Viendo a su esposo moreno con esperanzas. El moreno vuelve a estar cabizbajo. -No te muevas, por favor.

El psicópata pide antes de ir corriendo casi a la escena del crimen para tomar el bolso que su esposo compró y volver hacia él. Corriendo.

🦢

Pasó una hora de ducharse para cuando estaban en la cama. Mew sentado en la cama con Gulf sentado en su regazo. Sus rodillas alzadas a las caderas del pelinegro.

Gulf está temblando. Sus gafas de sol al lado de ellos. Encima de la gaveta.

-Tienes miedo--- Mew dice con preocupación. Acariciándole los brazos.

-No hables. Por favor. Sólo... Dame uso.

Gulf dice fríamente. Agarrándose de sus hombros. Temblando. Aunque trate de lucir serio pero su boca se entreabre cada tanto. Se mira el cuerpo con inseguridad.

-Te daré uso entonces.- Mew le dice. Él toma las gafas de sol y se las coloca al tembloroso Gulf que se ayuda así mismo a acomodarlas. Con miedo.

-Te ves... Guapo.- Mew le dice. Ladeando su cabeza un poco. Quiere lucir indiferente pero su mirada es de preocupación.

El moreno carraspea su garganta. Tímidamente fingiendo indiferencia con la mirada cabizbaja.

-Está bien si no quieres mirarme,- Mew dice en un gruñido tomándolo fuertemente de una de las caderas para adentrar su miembro en Gulf quién respinga por el repentino acto. Agarrándose a sus hombros. -eso no importa.- Mew le dice ahora embistiendolo con mucha velocidad.

-¡Ahhck! ¡Oh! ¡Oh!

Gulf no puede evitar sus continuos gemidos ante la fuerte y rápida penetración del pelinegro. Sus cuerpos se mueven con extrema velocidad pero más el de Gulf que brinca por el movimiento de caderas del contrario. Gulf se abraza a su cuello sin dejar de gemir. Sus rodillas moviéndose a los lados del cuerpo contrario.

Mew sigue con una mirada de preocupación a pesar de que gruñe entre a veces y el moreno se corre con un chillido. Ambos abrazándose con las respiraciones alteradas.

-Aún no es suficiente.- Mew le dice, agarrándolo fuertemente de los glúteos en un apretón salvaje. El moreno retrocede para mirarlo. -Falto yo.

Él los voltea a ambos. Quedando arriba de Gulf. Lo mira por unos segundos antes de voltearlo y alza sus caderas.

Mew lo agarra de estas y comienza a embestirlo salvajemente. Gulf gruñe durante todas las embestidas. Llevando una mano a tocar el abdomen de Mew aunque este está embistiendo su trasero con muchas fueras.

-¡Ah! ¡Ah!- Gulf gime entre las embestidas. Mew toma su mano contra su propio abdomen sin dejar de embestirlo hasta que se corre dentro del moreno y el moreno se corre por segunda vez con un chillido.

Todo acaba ahí. Fríamente. Mew sale de su trasero como si nada. Sentándose a su lado mientras que Gulf trata de relajarse. Bajando su trasero para quedar enteramente acostado. Apoya dos manos a los lados de su cabeza para nerviosamente sentarse. Al sentarse mira con nervios a Mew.

-Fue... Bueno.- Mew le dice. Asintiendo la cabeza repetidas veces. Cabizbajo. Adolorido.

Gulf parpadea varias veces y se quita las gafas de sol. Ambos sentados frente al uno al otro. Desnudos. El moreno toma una de sus manos. -Sólo quiero que, te sientas cómodo con quién sea que seas. Pero, ¿ser un asesino? No te llevará a nada. ¿Quitar vidas? Yo no puedo aceptarlo.- Gulf dice con mucho dolor apuntándose al pecho con la mano que sostenía las gafas de sol. Mew asiente la cabeza varias veces con sollozos.

-Eres una buena persona. Es obvio que no podrías aceptarlo.- Mew le dice con una triste sonrisa. Sus lágrimas bajando de sus ojos.

-Es porque te amo que, quiero que tengas una vida mejor.- Gulf llora. Trata de contener sus lágrimas al ponerse cabizbajo cubriéndose la nariz como si de cierta forma eso lo evitara de sollozar. Le duelen los ojos. Baja su brazo de nuevo. Para mirar a su esposo con los ojos rojos. -Espero decidas lo correcto y no olvides que te amo. Por favor, no lo olvides. Lo que sea que necesites, estaré ahí.- Gulf le confiesa su lealtad agarrando fuertemente su mano y cubriéndola con la mano que sostiene las gafas de sol. Se miran a los ojos con tristes sonrisas.

-Dios, ¿cómo lo haces?- Mew pregunta. Impresionado. -No importa lo que hago siempre... Me sigues tratando bien... Te defraudo y... Sigues mirando hacia adelante conmigo.- Mew cuenta con más lágrimas.

-No tuviste la culpa de que un monstruo se te acercará a ti. No sé a cuantos has matado a mis espaldas,... No defenderé eso. Ni tampoco ayudaré en algún asesinato que cometas, pero tendrás mi ayuda en cualquier otra cosa.- Gulf le dice. Sutilmente le da un beso en el cachete al afligido Mew quién llora sin control. El moreno retrocede con una triste sonrisa de labios. -Espero que esto no sea un "adiós".- Gulf le cuenta. Llorando.

Él se va de la cama para ponerse su ropa. Mew llora en demasía. Sintiendo su respiración desbordar. Todo de él se quiebra. Él mismo se abraza. Entonces frunce el ceño y se da la media vuelta.

-¿No te quedarás en esta casa? ¿Dónde dormirás?

Él pregunta.

Gulf se está vistiendo. Ya se ha puesto pantalones, ahora se está poniendo un suéter negro de mangas largas con unas tenis. El moreno crea una triste sonrisa.

-Esta es nuestra casa. Puedes quedarte en ella.

-Gulf, no... Es demasiado... ¿Cómo puedo aceptar--?

-Es nuestra casa, Mew. Puedes dormir en ella.-Gulf le dice con amabilidad y sinceridad. -Yo encontraré un lugar para dormir. Mi número ya está en tu nuevo teléfono. Buenas noches.

Gulf le dice antes de retirarse.

-¿Eso fue lo que compró...? ¿Un teléfono?- Mew murmura adolorido.

🦢

Gulf no quería molestar a nadie así que tuvo la loca idea de visitar la casa equivocada. Ya era de noche así que entró a la casa equivocada. Abrazándose así mismo.

Al entrar, todo estaba oscuro. Claramente. Se adentró en la oscuridad de la temible casa. Trato de prender la luz con el interruptor, pero la bombilla explotó. Haciéndolo brincar en su sitio mientras miraba arriba.

Se sostuvo el pecho con una mano al tan sólo ser eso. Siguió caminando hacia adelante, cuando, un hombre sale de la nada frente a él sosteniendo un sartén. Vilmente agredido en el rostro.

-¡Por favor, no!- Gulf súplica cubriéndose el rostro con ambos brazos.

-No eres él...- El hombre murmura.

Gulf baja sus brazos de a poco frente a su rostro para mirarlo con ojos grandes. -¿"No eres él"?- Gulf pregunta.

-El dueño de esta casa.

-¿Lo conoces?

-Me hizo esto en el rostro y me... Me rompió las costillas. Así que ando cojo por el dolor.

-Dios, ¿y si te llevamos al hospital?- Gulf se preocupa por él, queriendo revisarlo pero el hombre coloca el sartén bajo el mentón del moreno. Alzando el mentón de este. Quién borra su faceta de preocupación para mirarlo con una ceja alzada.

-Tú quién eres...

Amenaza el hombre. Gulf agarra el sartén para alejarlo de su rostro.

-Alguien a quién no debes temer.- Gulf le dice con un fuerte tono. Aunque su mirada aún demuestra preocupación.

-¿Para qué viniste aquí?

-Ver si... El dueño de esta casa tenía más cadáveres.

-¿Qué?

-Eso no importa. ¿Seguro no necesitas ayuda?

-Estoy bien. Gracias. Ahora largo de aquí. No confío en nadie.

-D--De acuerdo...- Gulf le dice con preocupación pero aferra su agarre al sartén con preocupación. -Pero lo siento. Sucede que no puedo simplemente dejarte así. Por favor dejáme ayudarte.

Gulf suelta el sartén para retroceder unos pasos y pedir que su ayuda sea requerida con una reverencia. Sus puños a los lados de sus caderas. Su cabeza bien baja.

-Qué milenio más modesto. Si tanto insistes... Me veo obligado a aceptar.- El hombre dice.

-Gracias, señor.- Gulf reajusta su espalda con una muy grande sonrisa. -Trataré de ayudarlo como mejor pueda, abuelo.

-¿A quién llamas abuelo, eh? Además, eres médico.

-No. Pero vuelvo ahora. Déjeme al menos ayudarlo a acostarse para cuando vuelva.

Gulf se mueve hacia él para que el hombre recargue sus brazos sobre los hombros de Gulf quién amablemente lo ayuda a caminar.

🦢

Mew revisa el bolso y ve el teléfono que Gulf le compro junto a los dos llaveros. En la caja del teléfono hay un post-it amarillo.

El pelinegro sonríe con tristeza al leerlo y se imagina cómo fue que el moreno lo escribió:

FLASHBACK (Gulf en la tienda de teléfonos):

El moreno estaba parado frente a la caja. Muy entusiasmado.

-Disculpe, sé que regularmente viene algo de la tienda en el papel amarillo, pero ¿puedo escribir algo como parte del regalo?

Gulf pregunta con una sonrisa tímida.

-Por supuesto. Tome.

La cajera le ofrece su bolígrafo dado a que estaba escribiendo en la nota.

-Muy amable. Gracias.- Gulf agradece y prosigue a escribir.

"Mew, espero disfrutes el regalo. No sabía que teléfono escogerte. El de la otra vez no lucía nada barato. Espero te guste.

Con amor, Winnie-Poo.

P.D: ¿Se escuchó infantil esto? Bah, supongo que me lo harás saber."

FIN DEL FLASHBACK.

Mew deja de leer para seguir llorando. Cubriéndose la boca esta vez. Aún estaba en la cama. Sólo que vestido.

Escucha unos toques a la puerta. Se da la media vuelta y mira la puerta de la habitación como si viese la de la casa.

Está lloviendo afuera. Fuertemente.

Mew baja las escaleras en sus deportivos grises con un suéter azul de mangas largas. Va hacia la puerta de la sala y al abrirla, el portero está ahí. Vistiendo no más que una chaqueta negra de botones con unas sandalias negras y medias negras. Su cabello en ondas lloviendo sobre su frente.

-Gulf no está aquí.- Mew dice.

-Lo sé. Lo vi salir y me parece que has malentenido nuestra relación por completo.

-¿Eso crees?

-Yo te quiero a ti.- El portero se abre los botones de su chaqueta para dejarla caer sin vergüenza alguna. Toda su espalda expuesta. Él ladea su cabeza todo coqueto.

-¿No eres amigo de Gulf?

-Lo vi salir bastante triste, pero,... ¿Los amigos no comparten?

El chico mete su mano dentro de los pantalones de Mew. El pelinegro lo mira con irritación y ojos rojos, pero se deja besar cuando este lo hace. Se besan una y otra vez apasionadamente. El portero Chisik se agarra del cabello de la nuca de Mew mientras se siguen besando y Mew los adentra a la casa.

*N/A: Sólo diré que se viene algo grande y, ¿creen que Mew lo haga con el portero? Diré desde ya que el portero es muy importante en la historia 🙈 No sé pero me gusta la personalidad de Gulf. No acepta el lado asesino de Mew pero, no lo quiere dejar sin ayuda porque sabe que es algo mental y sobre todo, lo ama. Espero les haya gustado😘 Y a la vez sorprendido, ¿creían en algún momento que el portero estaba interesado en Gulf y se sorprendieron cuando, ¡sorpresa! Estuvo detrás de Mew todo este tiempo?🙈🤭💖*